Close

CTS FOCUS

Nuestras tiendas

Nuestras tiendas

Calle Monturiol, 9, 28906 Getafe, Madrid

CTS FOCUS

CTS FOCUS No hay productos en esta categoría

Subcategorías

  • 3º CTS FOCUS - TEMPLUM STUCCO... PARA LAS REPOSICIONES.

    TEMPLUM STUCCO... PARA LAS REPOSICIONES.

    Nicola Salvioli, restaurador florentino especializado en bronces, armas, armaduras, orfebrería y todo lo relacionado con el metal, nos muestra cómo se crearon algunas esculturas digitales utilizando TEMPLUM STUCCO y SILO 111.

    Precisamente TEMPLUM STUCCO ha evolucionado recientemente a TEMPLUMAQUA, un composite epoxi bicomponente reversible, formulado con materiales no ligantes seleccionados, de color blanco, pigmentable y de baja toxicidad.

    En los últimos años, el ámbito de la conservación del Patrimonio Cultural, al igual que el de la producción de obras de arte, se ha ido adaptando paulatinamente a las posibilidades que ofrece el sector industrial o médico, que permiten la realización de artefactos mediante modelos escultóricos digitales o la reproducción a partir de escaneados tridimensionales, evitando el molde directo de los originales, aunque en algunos casos todavía es posible hacerlo con seguridad incluso en obras de arte. 

    Por «reposiciones» entiendo entonces aquellas «réplicas» de obras que no se obtienen por métodos tradicionales (moldeo o pantógrafo), sino que se generan físicamente a partir de un modelo o clon digital y de la edición necesaria para la correspondiente transposición material, según las técnicas de procesamiento sustractivo o aditivo (fresado o impresión). Entre las diversas experiencias adquiridas, primero con moldes de silicona y después precisamente con técnicas digitales, a lo largo de los años hemos realizado pequeñas adiciones útiles para restauraciones o ejecuciones de tamaño medio para sustituciones provisionales o definitivas, principalmente para simular artefactos metálicos, centro de nuestra actividad restauradora. Dos experiencias que podrían calificarse como especiales y significativas tuvieron lugar en la realización de obras cuyos originales eran de material pétreo: el Lamassu de Nimrud y el David de Miguel Ángel.

    El Toro Androcéfalo, conservado entre los restos del palacio real de Nimrud, capital del Imperio Asirio, actualmente una localidad del norte de Irak a pocos kilómetros de Mosul, fue destruido por los grupos yihadistas del ISIS en marzo de 2016. Gracias al compromiso de la Fondazione Incontro di Civiltà(2), hemos realizado precisamente la reposición de la gran escultura desaparecida, la última que se conservaba en su ubicación original. No teníamos a nuestra disposición el modelo tridimensional, pero gracias a una profunda y afortunada investigación fotográfica, fue posible obtener primero la fotogrametría y luego, a través de la escultura digital, el perfeccionamiento del modelo útil para el fresado en poliestireno a escala 1:1 (494 x 94 x 497 cm de altura) de la obra, convenientemente diseñada para su transporte y montaje para sus futuras ubicaciones al aire libre, primero en el Coliseo en otoño de 2016(3), luego en la sede de la UNESCO en París en invierno de 2018/19 y finalmente a partir de la primavera de 2022 en el Museo de Basora en Irak. Los antiguos artesanos fabricaron el toro con mármol de Mosul, nombre derivado de la zona de extracción de este material poco estudiado desde el punto de vista científico. Un alabastro yesoso, no calcáreo, y por tanto correspondiente a una piedra caliza, con grandes cristales amarillentos, incluidos en otros más pequeños grisáceos debido a la presencia de una sustancia orgánica muy fina entre los cristales. Una piedra maleable y fácil de trabajar, resistente a los climas áridos. Considerando las características del original, era casi imposible recrear su efecto abigarrado(4), sobre todo en lo que respecta a su manejo, ligereza y resistencia a la intemperie. Por lo tanto, se decidió preparar una mezcla cromáticamente similar de diferentes tipos de Templum Stucco(5), a aplicar sobre la superficie de poliestireno convenientemente preparada, moldeándola manualmente y con herramientas específicas, centímetro a centímetro, hasta que la degradación del material y los trabajos de los canteros asirios pudieran reproducirse en la superficie. En algunas porciones, había que añadir a la mezcla espolvoreadas de arena de río o pigmentos antes de que se secara para recrear trazos de luz o alteraciones de color en la piedra. Tras completar la colocación y el rejuntado que le sigue, la reposición fue protegida con SILO 111.

    Para el proyecto del David, promovido por el Ministerio de Cultura y Turismo y el Comisionado italiano para la Expo Dubai 2020 (pero realizada en 2021), se llevó a cabo una extraordinaria adquisición 3D de resolución extremadamente alta(6), obteniéndose el gemelo digital real. Todo el mundo sabe que las réplicas del David se producen desde la segunda mitad del siglo XIX, creadas mediante diversas técnicas (en Florencia a partir del moldeo, lo de bronce en Piazzale Michelangelo y a partir del pantógrafo sobre yeso, lo de mármol en Piazza Signoria) y también hay réplicas disponibles en diversos materiales y formatos.

    Pero con el objetivo de promover el savoir-faire italiano, se decidió llevar a cabo esta reposición utilizando métodos distintos de los tradicionales, o más bien, mediante experimentos que desafiaran la técnica, creando así lo que llamamos el modelo Zero, consistente en varios elementos impresos en material acrílico, ensamblados y preparados para su montaje y transporte (por autovía y avión), de Florencia a Dubái.

    No es un clon, no es una réplica, sino una reproducción física revestida y caracterizada como un documento tridimensional a escala 1:1 (714 cm con el basamento) que, gracias a un minucioso trabajo artesanal, muestra con todo detalle sobre la nueva piel de «mármol» de unos 4 mm de espesor, la avanzada degradación del material, los defectos del mármol no noble y las marcas del arte del gran genio.

    Imagen 5.jpg

    La estampa de 14 piezas, antes y durante el montaje, fue recubierta después cuidadosamente con diferentes mezclas de Templum Stucco(7) para los distintos colores del mármol, cuidadosamente trabajadas a mano y con herramientas de madera, metal o plástico, mientras que los añadidos y rejuntados como en el original se realizaron con Templum Ceramica, con todas sus partes protegidas y tratadas con SILO 111 ligeramente pigmentado para poder aportar más matices a la superficie. En el basamento, sin embargo, al igual que con el Lamassu recubierto de poliestireno, gracias al perfeccionamiento de las técnicas de aplicación de Templum y Templum Epo Top, fue posible conseguir efectos especiales de brillo típicos de las placas de mármol pulido. El David para Dubái fue transportado en una sola pieza y trasladado para encajarlo en la gran torre de la memoria meses antes de que se terminara el Pabellón de Italia, soportando el gran calor veraniego de los EAU y el polvo de la obra, para ser admirado de cerca por miles de visitantes durante los seis meses de la EXPO.

    Nicola Salvioli

    Notas 1- N. Salvioli, I. Tosini «Verifiche tecniche di aggiornamento sui materiali da calco sui metalli» en Il Paradiso ritrovato. Il restauro della Porta del Ghiberti, editado por A. Giusti; Mandragora; Florencia; 2015.
    2- Presidida por Francesco Rutelli, anterior Ministro del Patrimonio Cultural y de las Artes.
    3- N. Salvioli; «Lamassu. Mediazioni geometriche. Tra il levare e l’aggiungere» en Rinascere dalle Distruzioni. Ebla, Nimrud, Palmira. Editado por P. Matthiae y F. Rutelli, Roma, 2016, pp. 50-57. También hay un documental del mismo nombre en SKYArte sobre la primera exposición en Roma.
    4- Aunque en Italia se puede encontrar una roca formada por yeso macrocristalino de tipo iraquí, con canteras en los Apeninos boloñeses, para utilizarla habría sido necesario cincelarla o molerla, lo que habría resultado en una mezcla de yeso monocromática completamente diferente del efecto natural y casi desprovista de inclusiones.
    5- Se prepararon diferentes mezclas con piedra arenisca de color gris, pietra forte (piedra fuerte), travertino y mármol de Carrara en dosis definidas, consiguiendo propiedades de reflexión similares y variación tonal en función de la luz.
    6- Organizado por la Universidad de Florencia con la ayuda de algunos patrocinadores técnicos de equipamiento.
    7- Templum Marmo Carrara, Templum Travertino, polvos de piedras varias.

  • 3º CTS FOCUS - 40 AÑOS DE FIABILIDAD EN LOS PRODUCTOS CTS

    40 AÑOS DE FIABILIDAD EN LOS PRODUCTOS CTS

    La historia de la restauración es la historia del CTS. Desde principios de la década de 1980, años en los que se inició el desarrollo de la excelencia en la restauración italiana con destacados estudiosos y exponentes, el CTS ha flanqueado la experimentación, acogiendo e interpretando las exigencias científicas y metodológicas.

    Así es como podemos recorrer las etapas de la historia de CTS a través de los encuentros y los productos de los que ha nacido todo. Un camino que habla de descubrimiento, confianza y fiabilidad.

    Un viaje que comienza en 1984 y 20 productos y llega a 2024 con una lista de más de 7000 referencias dedicadas al sector.

  • 3º CTS FOCUS - El BDG se renueva con un tratamiento de estuco

    El BDG se renueva con un tratamiento de estuco 

    ⊿ Izquierda: efecto de limpieza con BDG 86

    Desde hace casi 35 años, CTS ofrece una línea única de productos ampliamente conocidos por los profesionales de la restauración arqueológica, la línea B.D.G. 86, que puede resolver el problema de las manchas de manganeso que se encuentran con frecuencia en diversos tipos de artefactos arqueológicos.

    Estas manchas son extremadamente desfigurantes y casi imposibles de eliminar mecánicamente, ya que están profundamente adheridas a la porosidad del material y tienen su origen en la oxidación del manganeso natural, que por la acción de diversos microorganismos se transforma en dióxido o en una mezcla de óxidos e hidróxidos de composición variable, de color negro-marrón. 

    Sus creadores, GIOVANNA BANDINI, SILVIO DIANA y GIOLJ GUIDI, realizaron estudios exhaustivos en colaboración con la Superintendencia Arqueológica de Roma, basados en una campaña de diagnóstico mediante DRX, SEM y microanálisis. A finales de los años 80, se desarrolló una serie de productos denominados B.D.G. 86, cuyos principios activos son precisamente dos sustancias reductoras, la hidracina y el cloruro de hidroxilamonio, y cuya eficacia se probó en huesos, cerámica y piedra.


    TapóndepruebaenmasillaconBDG86

    Las dos sustancias tienen cada una un pH ácido (el cloruro de hidroxilamonio) y un pH alcalino (la hidracina), por lo que se mezclan de forma que se obtenga el pH adecuado en función del artefacto que se vaya a realizar. La reacción entre los dos agentes reductores y el dióxido de manganeso produce cloruro de manganeso soluble, que se elimina por lavado:

    Las dos sustancias tienen cada una un pH ácido (el cloruro de hidroxilamonio) y un pH alcalino (la hidracina), por lo que se mezclan de forma que se obtenga el pH adecuado en función del artefacto que se vaya a realizar. La reacción entre los dos agentes reductores y el dióxido de manganeso produce cloruro de manganeso soluble, que se elimina por lavado:

    MnO2 + 2H2NOH▪HCl → MnCl2 + N2 + 4 H2O

    Por esta razón, es altamente recomendable seguir el tratamiento lavando los artefactos en agua desionizada o, si hay vidrio iridiscente o huesos degradados, en alcohol etílico.

    Por lo tanto, los factores esenciales para elegir el B.D.G. ideal son la concentración de los reactivos y el pH, que varía desde la neutralidad para los materiales de piedra y cerámica hasta una acidez ligera para los artefactos de vidrio.

    A lo largo de los años, el B.D.G. 86 ha solucionado una multitud de casos de manchas de manganeso desfigurantes, permitiendo incluso el cambio de identificación de un importante artefacto etrusco, y se ha incorporado en la práctica diaria de muchos laboratorios de restauración arqueológica.

    Desde 2016 se han realizado pruebas para eliminar manchas negras en algunas zonas de la decoración de estuco de uno de los subarcos del Vestíbulo de la Basílica Subterránea de Porta Maggiore de Roma.

    El cambio de los parámetros de la formulación resultó en una espectacular recuperación del color original, como se muestra en la foto. Este último desarrollo de la investigación resultó en la formulación más reciente de la línea, denominada BDG GRIGIO, con una concentración ligeramente inferior a la propuesta para la piedra y un pH neutro. 

  • 2º CTS FOCUS - Restauración conservativa en Lesina y Cattaro

    Restauración conservativa en Lesina y Cattaro

    Destacamos una serie de intervenciones importantes no solo por su ubicación geográfica (la costa del Adriático, muy rica en monumentos que datan de la SerenÍssima), sino por el proceso de restauración ejemplar y, por último, pero no menos relevante, por el valor formativo y educativo de las escuelas de oficios. Lesina (Hvar en croata), que no debe confundirse con la Lesina de Apulia, es una isla al sur de Split, mientras que la ciudad de Cattaro (Kotor), registrada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, pertenece a Montenegro: ambas durante siglos dominio veneciano, han acometido la conservación de su patrimonio histórico y lo que vamos a describir es otra pieza que encaja felizmente en este recorrido. 

    Las intervenciones en Lesina fueron posibles gracias a la interacción entre varios protagonistas, desde la Comunidad de Italianos de Lesina y Cattaro, hasta la financiación de la Región del Véneto y del Municipio de Lesina y Cattaro. La empresa L.a.i.r.a s.r.l. de Padova representada por los arquitectos Serena Franceschi y Adelmo Lazzari lideraron, involucraron y crearon una importante sinergia entre las realidades italianas y local. En los análisis participaron el doctor Francesco Rizzi de la empresa CMR s.r.la y la restauradora Barbara D'Incau; los órganos de protección de Croacia, Montenegro y la escuela de Restauración, Engim Veneto Professioni del Restauro. 

      

     

    A lo largo de los años, se han realizado restauraciones en la fachada de la Logia, luego en la fachada de la Torre del Reloj y finalmente en la Porta Badoer, una de las cinco puertas de las murallas defensivas. Muralla medieval, imponente y, aunque insertada en la estratificación de edificios posteriores, todavía visible y parcialmente bien conservada.

    La Logia del siglo XV, renovada en el siglo XVI por el arquitecto militar Sanmicheli, y la adyacente Torre del Reloj, también remodelada varias veces, son los dos elementos característicos del patrimonio arquitectónico de la pequeña ciudad. Los análisis que precedieron a la intervención permitieron identificar dos variedades de material pétreo calcáreo: el primero, de color amarillento, trabajada con martelina, gradina y gubia, presenta también restos de pintura naranja; el segundo, de color blanco amarillento, muy tenaz, trabajado principalmente con abujardado. La torre aún conserva restos de yeso, lo que hace pensar que antiguamente estuvo completamente enlucida. La tipología de los elementos pétreos, incluidos los morteros de revestimiento, de la Porta Badoer es mucho más variada, debido a las numerosas intervenciones que se han producido a lo largo de los siglos. Sin embargo, se trata de piedras calizas, principalmente de color gris y rojizo.

    ⊿  Antes y después de la restauración de Porta Badoer en Lesina y un detalle de la degradación (Hvar), Croacia

    Dado que la causa principal de la degradación parecía ser el ataque de microorganismos, con patologías de alveolización y deterioro causadas por ácidos liquénicos, la primera intervención consistió en la aplicación de BiotinT al 3% de agua, soportada en pulpa de celulosa. Se deja hacer su efecto durante el tiempo necesario para ablandar los microorganismos y permitir su eliminación con cepillos de escoba y limpiadores de baja presión.

    ⊿  Colonización biológica, Loggia y Porta Badoer de Lesina (Hvar), Croacia

    Aplicación de Biotin T mediante pulverización y/o brocha: la aplicación se repetirá varias veces cada pocos días, apoyando en algunas zonas el biocida en una compresa de pulpa de celulosa.

    Los depósitos de partículas atmosféricas y las costras negras se eliminaron mediante compresas a base de bicarbonato y carbonato de amonio. Cuando fue necesario, con la adición de sustancias quelantes (EDTA disódico), soportadas por pulpa de celulosa. En algunas zonas la eliminación se completó mediante compresas con resinas de intercambio iónico aniónico con efecto desulfatante.

    El fenómeno de erosión de casi todas las juntas de mortero del paramento supone un depósito de agua de lluvia y humedad, con una erosión progresiva de las propias juntas. Para consolidar las zonas más deterioradas se aplicó sucesivamente silicato de etilo (Estel 1000), que permite llegar a las zonas más profundas, seguido de nanocal (Nanorestore), que provoca una reagregación de la superficie gracias a la formación de carbonatos de calcio.

    Ambos productos son compatibles con la piedra caliza, que siempre contiene, además de carbonato cálcico, un cierto porcentaje de sílice que permite que el silicato se adhiera.

    Esta elección permitió reducir el uso de resinas sintéticas únicamente al pegado, que se realizó con epoxi líquido (Epo 150) y en pasta (Epo 121).

    El sellado de las microfisuras y huecos se realizó con los morteros clásicos de la línea PLM, aplicados desde hace 40 años en las obras de construcción más importantes de toda Europa.

      Las intervenciones en Cattaro se llevaron a cabo con el mismo enfoque, en las tres puertas que se insertan en los muros de la histórica fortaleza veneciana. Para los estudiantes de la Escuela de Profesiones de Restauración Engim Veneto (https://restauro.engimveneto.org) que participaron en los cursos de Postgrado de Calificación de "Técnico en Restauración del Patrimonio Cultural", financiados por la Región del Véneto, fue una oportunidad para poner en práctica lo aprendido en las lecciones teóricas, sobre objetos de muy alto valor histórico-artístico.

    De particular importancia es la inspección anual, realizada por el Doctor D'Incau, que nos permitió certificar el buen estado de las superficies 11 años después del final de la intervención: ningún ataque microbiológico fue visualmente perceptible, confirmando el buen comportamiento del Biotin incluso después de mucho tiempo.

    Por seguridad, se aplicó mediante pulverización Silo 111 con Biotin R añadido al final de las intervenciones individuales.

    BIBLIOGRAFÍA:

    Edificios públicos y defensivos de origen veneciano en Dalmacia y Montenegro: de las investigaciones a la restauración conservadora , editado por Serena Franceschi, Adelmo M. Lazzari, Barbara D'Incau. Palnsesti Editore, 2020.

  • 2º CTS FOCUS - Restauración in situ: experimento sobre el uso de un producto de siloxano

    Restauración in situ: experimento sobre el uso de un producto de siloxano como aditivo en morteros de restauración

    En julio de 2020, gracias a un acuerdo con la Academia de Bellas Artes de Verona, se estableció la seguridad de los suelos de mosaico y la restauración de algunas partes especialmente necesitadas, pertenecientes a una Villa Romana que data del siglo IV d.C.

    El complejo fue encontrado en la zona de Villa di Negrar, en la provincia de Verona, tras una campaña de excavación que tuvo lugar entre 2019 y 2023.

    Paralelamente a la actividad de restauración se tuvo debidamente en cuenta el microclima, con el deseo de establecer un programa de restauración indirecta destinado a estudiar todos los ambientes del área de la Villa, para prevenir la aparición de nuevas formas de degradación y limitar las acciones de restauración no invasiva, orientando así la elección de tratamientos que respeten el material constitutivo original y sean compatibles con el contexto climático de trabajo. Prestando especial atención al positivo aislamiento microclimático gradual, obtenido bajo las nuevas cubiertas construidas sobre las salas de mosaicos, apoyando así el deseo de conservar los mosaicos in situ.

    1%20CTS%20Focus%20(Tortoli%CC%80)_ESP4.j

    El microclima fue monitoreado gracias a la inserción de dos dataloggers (registradores de datos) de registro continuo en los puntos más representativos del área de intervención. Simultáneamente se estudiaron y exploraron en profundidad las características compositivas del terreno donde se insertaron los mosaicos de la excavación. De las muestras analizadas, el suelo parece estar compuesto principalmente por material arcilloso (confirmando el carácter aluvial del sitio arqueológico), con un pH alcalino y un contenido de agua del 20-30%. La humedad ascendente, controlada con un higrómetro de contacto en los morteros de colocación de los mosaicos restaurados, pone de relieve un aislamiento positivo de los mosaicos. 

    En relación con la información obtenida y la identificación del problema relacionado con el aumento de la humedad proveniente del suelo que rodea los mosaicos, se inició la prueba de un hidrófugo de siloxano a base de agua (SILO 112). Para mantener la continuidad con la restauración ya realizada durante la excavación, se decidió estudiar SILO 112 en combinación con el mortero de restauración en uso, PLM-SM. Este último se utiliza en excavaciones para devolver la unidad estratigráfica y el ajuste a las teselas, donde el grado de desintegración es tal que no permite mantener la cohesión. El estudio de la compatibilidad de los dos productos se realizó sobre seis ejemplares de muestra, que replican fielmente los materiales constitutivos y la disposición de los mosaicos presentes en la excavación, introduciendo en ellos diferentes mezclas y concentraciones de los dos componentes estudiados. La fiel reproducción de los materiales constituyentes de los mosaicos presentes en la excavación garantizó un estudio de compatibilidad con los materiales originales. En las estratigrafías de las muestras se omitió el Estatumen, primera capa dentro del aparato estratigráfico de un mosaico, ya que el PLM-SM al introducirse en el interior de la decoración del mosaico logra alcanzar el Rudus, es decir la segunda capa de máxima profundidad. Además, para comprender mejor la compatibilidad con el posible contexto de aplicación, se probaron en las muestras individuales diferentes situaciones encontradas durante la excavación, es decir, la posible adyacencia de áreas sanas con áreas a consolidar. Por ello la estructuración de las muestras se divide internamente en dos áreas bien diferenciadas.

    Las mezclas utilizadas reflejan las proporciones más utilizadas en excavación de PLM-SM, 1:4 y 1:2, es decir 1 parte de mortero y 2/4 de agua, y tres concentraciones diferentes de SILO 112, es decir puro, 5% y 10% de principio activo en agua desmineralizada.

    Los dos productos se han combinado de forma diferente dentro de los seis mosaicos de la siguiente manera:

     Muestra 1 sin tratamientos;

     - Muestra 2 dividida en dos partes: con PLM-SM en proporciones 1:4 en agua desmineralizada y PLM-SM en proporciones 1:4 mezclado con SILO 112 puro;

     - Muestra 3 dividida en dos partes: con PLM-SM en proporciones 1:2 en agua desmineralizada y PLM-SM en proporciones 1:2 con SILO 112 puro;

     - Muestra 4 dividida por la mitad, una parte blanca y una parte con PLM- SM en proporción 1:2 con SILO 112 al 5% en agua desmineralizada;

     - Muestra 5 dividida por la mitad, una parte blanca y una parte con PLM- SM en proporción 1:2 con SILO 112 al 10% en agua desmineralizada;

     - Muestra 6, con SILO 112 puro filtrado dentro de las microfisuras superficiales creadas después de que la muestra envejeciera durante 55 días.

    Para soportar los mosaicos, se diseñaron y crearon porta muestras a medida, diseñados para evitar interactuar negativamente con las investigaciones planificadas y acomodar los volúmenes de los mosaicos. La estructura estratigráfica de las muestras es auténtica para la muestra 1 no tratada, denominada muestra blanca. La reproducción de la decoración del mosaico se dividió en dos métodos de ejecución: el método directo y el método torneado. Esta distinción fue dictada por razones ligadas a la experimentación (es decir, la incompatibilidad ejecutiva relacionada con los rápidos tiempos de fraguado del PLM-SM y el tiempo necesario para la creación de la decoración del mosaico) y por el deseo de reconstruir situaciones encontradas en las excavaciones. Por lo tanto, se replicó la posible condición de realizar un desprendimiento temporal y reposicionamiento inmediato de un mosaico, el método de volteo, que consiste en fijar temporalmente las teselas de los mosaicos sobre un soporte movible y cuando se completa todo el mosaico se coloca sobre el soporte final. O la posible situación de un mosaico consolidado in situ, realizándose la decoración mediante el método directo, es decir, colocando las teselas sobre una capa de lecho.

    En las muestras 2 y 3, en la fase de fraguado, dado que las dos mezclas introducidas tienen una consistencia casi líquida, se creó una "cizalla" plástica, insertada temporalmente para mantener separados los dos compuestos hasta su casi total endurecimiento, evitando la contaminación en las diferentes zonas. Luego los mosaicos fueron sumergidos y volteados. Por el contrario, en los números 4 y 5 se crearon primero las mitades formadas por la capa de lecho y luego se insertaron las mezclas pertinentes. En este caso, ambas sustancias se introdujeron en la superficie con una jeringa, sin inyección, para tener un mayor control a la hora de introducir el producto, evitando percolaciones o fugas. Una vez que los compuestos insertados comenzaron a endurecerse, se colocó el mosaico correspondiente, asegurándose de que el compuesto aglutinante cubría las teselas al menos 1/3 de su altura, tal como aparecerían en la situación presente en Negrar. Esta medida también se aplicó en las demás muestras. Posteriormente, para mantener la continuidad microclimática y simular de forma acelerada las formas de degradación más extendidas en los mosaicos restaurados, las muestras fueron expuestas a condiciones microclimáticas más cambiantes, las de una excavación al aire libre. Por lo tanto, las muestras fueron sometidas a un secado dentro del área de excavación, durante un período de 55 días. Esta fase fue un punto de partida indispensable para comprender el comportamiento del siloxano en relación con las condiciones composicionales y materiales de los mosaicos originales. Para cumplir con los requerimientos de las investigaciones diagnósticas se crearon áreas de muestra, en este momento también se investigaron las propiedades mecánicas, destacando diferentes respuestas. Mediante diagnósticos (Colorimetría, Ángulo de contacto, Ensayo de absorción a baja presión con esponja de contacto, Ensayo de absorción de agua por capilaridad y tiempo de secado relativo) se puede afirmar que el producto hidrofugante ensayado ha supuesto mejoras en algunas muestras en cuanto al comportamiento del mortero, confirmando compatibilidad con la situación estudiada. Las respuestas adquiridas a partir de las investigaciones diagnósticas fueron evaluadas según una observación crítica con relación al objetivo de la investigación y al tipo de área observada y los materiales constitutivos. Para guiar una evaluación final más informada de las diferentes mezclas, se establecieron tres rangos de juicio para los resultados adquiridos de las investigaciones individuales en las áreas de muestra individuales (No suficiente, suficiente, aceptable). En las muestras que contenían una concentración de SILO 112 igual al 5% y al 10%, ocurrieron diferentes respuestas, en relación a la alteración cromática y la reducción del agua absorbida capilar y superficial.

    A pesar de la mejora de la respuesta, en algunos resultados ambas soluciones se consideraron inválidas en las interpretaciones finales. La muestra que contenía siloxano percolado, es decir la muestra 6, reportó la alteración cromática más controlada, a pesar de esta condición positiva, otras investigaciones han demostrado que el producto utilizado con esta metodología no da una condición ventajosa. Las muestras que reportaron resultados más satisfactorios son las muestras 2 y 3, es decir aquellas que contienen SILO 112 puro combinado con PLM-SM en diferentes concentraciones. Las investigaciones sobre los dos mosaicos dieron excelentes resultados, destacando la posibilidad de mejorar el rendimiento del mortero de restauración gracias a la presencia de un producto de siloxano puro, sin renunciar a las prácticas de restauración ya utilizadas en la excavación. En particular, el estudio de la absorción capilar de agua puso de relieve que en ambos casos la cantidad de agua absorbida se redujo a la mitad.

    La perspectiva es continuar con el seguimiento del microclima como apoyo a la campaña de restauración que se está llevando a cabo en las cercanías de Negrar.

    De hecho, las estrategias de prevención, como el estudio del microclima de conservación, han demostrado ser una excelente herramienta que garantiza la correcta conservación de los artefactos, dentro de un contexto de conservación muy vulnerable, como es el de una excavación al aire libre. Además, se demostró cómo es posible elegir un producto compatible con un contexto abierto y agrícola como el de la excavación de Negrar, sin renunciar a excelentes resultados. En continuidad, dados los buenos resultados obtenidos, se plantea la hipótesis de continuar la investigación relativa al producto SILO 112 combinado con el mortero de restauración PLM-SM, con la voluntad de profundizar en todas las características relativas a la combinación de estos dos productos. El objetivo final es introducir el producto combinado con el mortero de restauración en un contexto de excavación.

    BIBLIOGRAFÍA:

    Restauración in situ : experimentación de morteros de inyección modificados para la Villa de los mosaicos de Negrar", XI Congreso Nacional IGIIC - El Estado del Arte 21 – 19 - 21 de octubre de 2023, Academia de Bellas Artes de Verona, Verona.

  • 2º CTS FOCUS - Jornada de geles y metales

    Jornada de geles y metales 

    Los laboratorios del Louvre fueron el escenario de una jornada de estudio el 20 de marzo de 2024, dedicada a las técnicas de limpieza de metales utilizando geles de todo tipo, desde las soluciones espesadas más simples, con Xantano (Vanzan) o Klucel, hasta geles rígidos de agar y gellano, hasta geles químicos nanoestructurados como los de la línea Nanorestore. Las numerosas intervenciones aportaron a la gran cantidad de participantes, tanto presenciales como online, ideas realmente interesantes que intentaremos resumir brevemente.

    La jornada se abrió con la descripción de algunas intervenciones, que tenían el agar como sistema gelificante; la aplicación se realizó con spray caliente en dos casos muy diferentes: sobre un altar dorado y esmaltado con superficies particularmente modeladas, y sobre el ala extremadamente arruinada y oxidada de un Spitfire de la Segunda Guerra Mundial.

    Naturalmente, el AgarArt y el Nevek estuvieron presentes en diversos estudios presentados a lo largo de la jornada.
    En varios casos se utilizaron diversos quelantes, con preferencia el citrato de triamonio (TAC), utilizado también para el enjuague una vez retirado el gel. Pero no faltó el clásico EDTA, tanto el disódico con un pH de 4,5 como el tetrasódico con un pH de 11,3, pero también su mezcla, que se acerca a la neutralidad.
    El EDTA se comparó con otros quelantes como el DFO (es decir, la deferoxamina, particularmente activa sobre el hierro, como su nombre indica y también utilizada en algunos medicamentos), y el nuevo EDDS (ácido etilendiamina-N,N'-disuccínico), una alternativa biodegradable al EDTA. 

    1%20CTS%20Focus%20(Tortoli%CC%80)_ESP4.j

    Sin duda, este último producto abre perspectivas para una restauración más sostenible, pero tendremos que esperar un poco más antes de utilizarlo de forma extensiva. De hecho, su monstruoso coste (Sigma lo ofrece a 94 euros en solución de 100 ml al 35%) todavía lo hace prohibitivo en nuestro sector, pero como ocurre con otros materiales, el aumento en otros campos seguramente provocará una bajada de su precio.

    La atención prestada a los materiales biodegradables también queda demostrada por el estudio (Proyecto Helix), que incluyó geles de ácido poliláctico (PLA) y polihidroxibutirato (PHB) junto con agar.

    Tampoco faltaron los Nanorestore Geles, que permiten "cargarlos" con varios tipos de disolventes, ni sistemas mixtos gel/solvente/quelantes para obtener la eliminación de oxidación y antiguos agentes protectores en un solo paso.

    CtsFocus_02_c_SPA - Jornada de geles y m

    Estamos realmente agradecidos a los organizadores, Manuel Leroux, Elodie Guilminoty Aymeric Raimon, que durante años se han dedicado a explorar tanto la teoría detrás de los(complejos) fenómenos de la oxidación de los metales como las implicaciones prácticas de la necesaria limpieza y protección de la multitud de obras que los contienen.

  • 1º CTS FOCUS - Los secretos de Beva ® 371

     Los secretos de Beva ® 371 

    Hace unos años (Boletín CTS 50.2 – Beva, ¡qué pasión!) discutimos extensamente el problema de la temperatura a la que se debe llevar el Beva 371 durante las operaciones de revestimiento. Tras numerosas solicitudes de aclaración, pero también nuevos estudios al respecto, surge naturalmente la pregunta: ¿conocemos realmente este producto? 

    Cuando, en 1976, Gustav Berger comenzó a estudiar un adhesivo para revestimiento, su principal preocupación era encontrar un material que combinara la dureza de la clásica cera-resina, una mejor reversibilidad en el tiempo y una menor invasividad en el lienzo original y más aún en la capa pictórica. 

    De hecho, había surgido el principal defecto de la técnica del revestimiento de cera-resina: la alteración cromática debida a la migración de los componentes en las capas de pintura. 

    De forma un tanto simplista, se podría decir que Berger modificó la cera-resina (cera de abejas y resina dammar), sustituyendo la cera de abejas por parafina y el dammar por el copolímero EVA. La realidad es muy diferente. 

    Después de innumerables variaciones y verificaciones mediante pruebas mecánicas, descritas sólo parcialmente en su libro histórico “Conservación de pinturas: investigación e innovación” , Berger logró obtener la mezcla que luego llamaría BEVA® 371, y que hoy está muy extendida en todo el mundo1

    1En 1984 Berger se vio obligado a registrar la marca Beva, a raíz de diversas formulaciones que aparecieron en el mercado, como la de Adam Chemical Company, que utilizó el nombre Beva, pero modificó la formulación publicada en 1970, sin dar información sobre la nueva componentes, ni realizar pruebas de soporte. . La primera publicación data de 1970 [1,2]. 

    Pero, ¿qué tienen exactamente los numerosos componentes de esta extraordinaria mezcla que, después de 50 años, sigue siendo el adhesivo para revestimiento más utilizado (y estudiado)? 

    La mezcla de disolventes , hidrocarburos alifáticos y aromáticos, tiene como objetivo obtener una distribución uniforme y ablandar el adhesivo en la fase de aplicación al vacío, de modo que se distribuya entre las fibras de los dos tejidos. En la siguiente fase, muy delicada, la de la adición de calor, y luego durante el enfriamiento al vacío, el disolvente se extraerá casi por completo, de modo que la mezcla adhesiva sea tenaz y ya no esté sujeta a deslizamiento. Un disolvente que se evapora demasiado lentamente y queda atrapado en el adhesivo provocaría fenómenos de creeping, es decir, deslizamiento por gravedad entre los dos tejidos. 

    Pasemos a la parte más interesante, la sólida: el porcentaje predominante, alrededor del 60%, está formado por dos copolímeros diferentes de EVA (etileno acetato de vinilo): la resina más blanda, Elvax 150, que tiene una temperatura de reblandecimiento de 63°C y un mayor porcentaje de acetato de vinilo (32%). La segunda, AC-400, tiene sólo un 14% de acetato de vinilo y, por lo tanto, es más duro y se funde a 92°C. 

    Es interesante observar que los copolímeros de EVA son semicristalinos, es decir, están formados por áreas cristalinas (donde el polietileno PE se organiza en estructuras ordenadas) y áreas amorfas y más blandas, donde está presente el acetato de polivinilo PVA. 

    Luego tenemos la parafina, que funde a 65°C; el plastificante Cellolyn 21, con un punto de reblandecimiento de 50-59°C, y el llamado adherente que originalmente fue la resina cetónica Laropal K80, que tenía una Tg de 51°C y en los últimos años se ha utilizado la urea-aldehído Laropal A81 , con Tg 57°C. 

    De la comparación entre las distintas temperaturas podemos comprender el profundo cambio que sufre la mezcla sometida a un calentamiento gradual, pasando de 55°C, cuando todos los componentes aún están sólidos, a los 65°C. En 10 grados tenemos, una continua sucesión de cambios: 

    • el ablandamiento de Cellolyn 21 y Laropal A81; 
    • la “fusión” de Elvax 150 (al ser un polímero no es una verdadera fusión, sino un estado amorfo viscoso); 
    • fusión de parafina. 

    Sólo el EVA más duro (AC-400) permanece en un estado plástico que no fluye, y esa es precisamente su función. 

    Por eso hablamos, con un nombre inapropiado, de una temperatura de "activación" de 65°C. Una "activación" sugiere un proceso basado en una modificación química, mientras que aquí se trata sólo de un cambio físico (entre otras cosas reversible), del estado rígido a bajas temperaturas, luego al plástico y finalmente al líquido, para algunos de los componentes. 

    Si se supera con creces el valor de 65°C, lo que desgraciadamente no es raro, quizás por el uso de planchas demasiado calientes, los demás componentes (AC-400 y Laropal) también se licuan y el Beva penetra en las capas de pintura, plastificándolas: ¡Aquí está el gran riesgo que corres sin un control preciso de la temperatura! 

    Este fenómeno es la causa de un "efecto plastificado" que se observaba en algunos cuadros forrados en el pasado y que creó la " leyenda negra " de Beva: los restauradores/aplicadores que no entendían el producto y que estaban acostumbrados a utilizar planchas fijas provocaron daños irreparables a algunas obras, naturalmente culpando luego al producto. 

    Beva 371 ha sido objeto de numerosos estudios a lo largo de los años, que han puesto de relieve su versatilidad, ya que se ha utilizado para unir diversos materiales, como cuero, tejidos de diversa índole, papel y cartón, así como como consolidador de capas de pintura. La variabilidad de las condiciones de funcionamiento conduce a resultados muy diferentes en términos de fuerza adhesiva, penetración en los sustratos, reversibilidad, etc.[3,4]. 

    El extenso trabajo del Instituto Canadiense sobre polímeros ha demostrado que Beva 371, después de varios métodos de envejecimiento, acelerado y natural, mantiene un excelente nivel de flexibilidad y de pH, por lo tanto sin ningún riesgo para el lienzo [ 5]. Su estabilidad se puede aumentar añadiendo Tinuvin 292: al final de las 8 semanas de envejecimiento acelerado, que representan aproximadamente 25 años de envejecimiento natural, las muestras que contenían Tinuvin 292 estaban significativamente menos degradadas en comparación con las muestras que no lo contenían. [6]. 

    Finalmente, es necesario detenerse brevemente en la sustitución de la resina cetónica Keton N/Laropal K80 elegida originalmente por Berger; fue un paso necesario después de su salida del mercado en 2009: desafortunadamente, la única resina cetónica alternativa, que mantenía inalteradas las propiedades adhesivas de la mezcla, ya era de color amarillo desde el principio, lo que dio un color pajizo claro a la mezcla delo nuevo Beva 371, pero que iba a más con el tiempo. En Estados Unidos, a partir de 2009, el nombre se cambió a Beva 371b. 

    Debido a las protestas relacionadas con el amarillamiento del producto, esta resina cetónica fue sustituida -en el caso del Beva 371 producido por CTS a partir de 2017- por la resina de urea-aldehído Laropal A81, perfectamente transparente. Por lo tanto, actualmente Beva 371 vuelve a ser incoloro. Esta sustitución redujo levemente la pegajosidad a bajas temperaturas, con la consecuencia de imposibilitar el trabajo a 55°C, como sucedia con la formulación anterior y reportado en varios artículos [7]. 

    Sin embargo, siempre se deben evitar las altas temperaturas, porque la presencia simultánea de disolvente, presión y calor podría hacer que la capa de pintura se ablande y, por tanto, corra el riesgo de deformarse (aplanarse). 

    Como se subrayó en un reciente taller (Reformifying BEVA ® 371), celebrado en Nueva York y en el JRC La Venaria Reale, organizado por la Universidad de Nueva York con el apoyo de la Fundación Getty, ha llegado el momento de profundizar nuestro conocimiento de este complejo material y si es posible mejorarlo, a la luz de casi 50 años de merecido éxito. 

    Bibliografía 

    1. Berger, G.; Un nuevo adhesivo para la consolidación de pinturas, dibujos y textiles. Instituto Internacional para la Conservación: Boletín del Grupo Americano 1970, 11(1):36–38. 

    2. Berger, G.; Ensayos de adhesivos para la consolidación de pinturas. Estudios de conservación 1972, 17:173–94. 

    3. Lisa Kronthal, Judith Levinson, Carole Dignard, Esther Chao, Jane Down, “BEVA 371 Y SU USO COMO ADHESIVO PARA REPARACIONES DE PIEL Y CUERO: ANTECEDENTES Y UNA REVISIÓN DE TRATAMIENTOS JAIC 2003, Volumen 42, 2, 341-362 

    4. Rebecca Ploeger, Chris W. McGlinchey, René de la Rie; “BEVA ® 371 original y reformulado : Composición y evaluación como consolidante para superficies pintadas” Studies in Conservation, Volumen 60, 2015 - Número 4, 563. 5. Down, JL, MAMacDonald, J. Tretreault y RSWilliams. Pruebas de adhesivos en el Instituto Canadiense de Conservación: una evaluación de adhesivos acrílicos y de poli(acetato de vinilo) seleccionados. Estudios en Conservación. 1996, 41(1):19–44. 

    6. Rebecca Ploeger, René de la Rie, Chris McGlinchey, Oscar Chiantore; “La estabilidad a largo plazo de un popular adhesivo termosellado para la conservación de objetos culturales pintados”; Degradación y estabilidad de polímeros, 2014. 

    7. Giovanna.C.Scicolone, Marco Scoponi, Eleonora Canella, Stefano Rossetti, Martina Scoponi, “Polímeros a base de PVAc”, Kermes n.83, 2011 

  • 1º CTS FOCUS - Érase una vez Solvesso 100

     Érase una vez Solvesso 100 

    Era feo y malvado, un poco como el ogro de los cuentos de hadas y una de las primeras medidas de la recién formada oficina técnica de CTS fue eliminarlo. Fue allá por 2003. 

    Nunca esperábamos volver a verlo bajo la cautivadora forma de Shellsol A, revitalizado por un nombre que parecía ofrecer garantías de baja toxicidad. Pero era él, la infame mezcla aromática C9. 

    Habría sido necesario poco para desenmascararlo, incluso una lectura superficial de su ficha de datos de seguridad; pero, como sabemos, la lectura es algo exigente. 

    Sin embargo, las frases de riesgo eran siempre las mismas: H304 (puede ser letal si se ingiere y penetra en el tracto respiratorio), y las menos preocupantes H335 y H336 (puede provocar irritación respiratoria, puede provocar somnolencia y mareos). 

    Pero ¿qué es exactamente Shellsol A? A significa aromático y Shellsol identifica la línea de fracciones de petróleo comercializadas por Shell (!). Es una mezcla de hidrocarburos aromáticos con 9 átomos de carbono, pero también puede contener xilenos que son los tres isómeros del dimetilbenceno, con los dos metilos en posiciones orto, meta y para; por tanto, con 8 átomos de carbono. 

     Trimetilbenceno _ También en este caso se trata de una familia de isómeros, de los cuales informamos de su presencia en Shellsol A, el 1,2,4 trimetilbenceno asimétrico. El isómero 1,3,5 se llama mesitileno. 

            

     

     Cumeno _ Esta vez los tres átomos de carbono forman un único sustituto (propilo) en una posición del anillo de benceno. 

    1 CTS Focus (Tortolì)_ESP.jpg

    Si luego profundizamos en los valores TLV-TWA, sale algo interesante: TLV-TWA 

    Xileno (mezcla de isómeros) 

    221 mg/m³ 

    50 ppm 

    1,2,4 trimetilbenceno 

    100 mg/m³ 

    20 ppm 

    mesitileno 

    100 mg/m³ 

    20 ppm 

    cumeno 

    245 mg/m³ 

    50 ppm 

    Shellsol A 

    50 mg/m³ 

    Es decir, Shellsol A es mucho más peligroso que el xileno. 

    Entonces, ¿por qué utilizar esta mezcla en lugar de xileno? ¿Masoquismo? 

    La posteridad juzgará. 

    BIBLIOGRAFÍA: 

    • ¡La ficha de datos de seguridad sería suficiente! 
  • 1° CTS FOCUS - El Rosario y las termitas

     El Rosario y las termitas 

    El ataque de las termitas ha sido devastador y no se ha salvado ni siquiera el óleo sobre lienzo de la Virgen del Rosario que se encontraba en el ábside de la iglesia de Sant'Andrea Apostolo en Tortoli. El ataque no solo afectó a la estructura de soporte, sino que la tela de revestimiento y la pasta adhesiva aplicada en una restauración de 1991 resultaron especialmente apetecibles para los voraces insectos, que solo se habían detenido delante del preparado. 

    Detalle de los túneles de termitas en la parte posterior de la pintura  1 CTS Focus (Tortolì)_ESP.jpg

    Larvas de termitas 

    Los elementos del marco, completamente “comidos”.

    El reverso de la pintura después de retirar el material suelto. 
    Nótense los restos de la tela de revestimiento. 

    Por encargo del párroco monseñor Crobeddu y bajo la supervisión de la Doctora Morittu Giovanna de la Superintendencia de Arqueología, Bellas Artes y Paisaje de Sassari y Nuoro, los trabajos de restauración fueron iniciados por Anna Rita Pisu que, dadas las malas condiciones del lienzo, fue extremadamente complejo. 

    Las grandes dimensiones del cuadro (2,05x3,25 m), y las precarias condiciones del color, con levantamientos, caídas y burbujas, dificultaron aún más la reconstrucción de las innumerables lagunas. Retoques alterados de una restauración anterior y un barniz pesado y amarillento cubierto por una gruesa capa de suciedad completaban la difícil situación. 

    Dadas las diferencias de nivel de las distintas zonas, Anna Rita Pisu decidió, de acuerdo con la dirección de las obras, recuperar la planitud de la pintura, interviniendo con Balsite, un material ya probado para este tipo de intervención, pero aún poco conocido. 

    Dadas las diferencias de nivel de las distintas zonas, Anna Rita Pisu decidió, de acuerdo con la dirección de las obras, recuperar la planitud de la pintura, interviniendo con Balsite, un material ya probado para este tipo de intervención, pero aún poco conocido. 

    El Balsite tiene la ventaja, respecto a los estucos tradicionales, de ser muy adhesivo y además flexible, permitiendo algunos movimientos de la lona sin que se desprenda. 

    Además, a pesar de ser un estuco epoxi, también es fácilmente reversible mediante el uso de los disolventes adecuados. 

    Al lado, la aplicación de Balsite. 

    1%20CTS%20Focus%20(Tortoli%CC%80)_ESP4.j

    Una vez recuperada la planitud del lienzo con una intervención puntual, se pudo proceder al revestimiento con tela poliéster Ispra y GB Original Fórmula Beva 371. 

    La capa de pintura, muy desequilibrada según las zonas, se uniformó, antes del retoque, con la aplicación de Berger Isolating Varnish. El mismo barniz que se había utilizado cuando se aplicó el Balsite, para aislar las zonas de contacto y evitar que la resina epoxi migre, provocando oscurecimiento en los bordes de las lagunas del lienzo. 

    A continuación, se procedió a las operaciones de limpieza, enlucido y retoque pictórico, con la aplicación final del barniz: Lefranc & Bourgeois Matt. 

    Un detalle de una parte de la limpieza. La superficie antes de la restauración. 

    Un detalle de una parte de la limpieza

    1%20CTS%20Focus%20(Tortoli%CC%80)_ESP5.j

    La superficie antes de la restauración. 

    1%20CTS%20Focus%20(Tortoli%CC%80)_ESP6.j

    La pintura una vez restaurada. 

    BIBLIOGRAFÍA: 

    De Luca D., Borgioli L., Sabatini L., Viti V.; “Artefactos pintados sobre soporte textil. La reintegración de las brechas: propuesta de materiales alternativos”, Kermes 88, Nardini, octubre-diciembre de 2012; 42-54. 

  • 57.3 RESTAURACIONES PARA RECORDAR: ALBERTO BURRI RELOADED Y MÁS ALLÁ

     Alberto Burri reloaded y más allá

    El proceso de restauración de la obra "Nero con punti" (yute, pintura sintética polimérica, vinavil, tela de fondo con trama fina, 200 x 128 cm), realizada por Burri en 1958 y perteneciente a la serie de "Sacchi", presentaba dificultades debido a la opacidad de la pintura negra, que mostraba levantamientos en algunos puntos debido a roces y golpes accidentales recientes.

    Se observó que en las áreas salientes de yute, que estaban más expuestas, se producía la desaparición de la película pictórica debido a una pérdida de cohesión de las fibras de yute. El hilo torsionado, observado bajo microscopio, mostraba deshilachado, roturas y una reducción de volumen y resistencia, mientras que la película negra rígida parecía no haber perdido masa.

    Se eligió el consolidante "funori", un extracto acuoso de un alga basado en una mezcla de polisacáridos (funorano). Este consolidante, que tiene buena elasticidad y es totalmente no tóxico, no interactúa químicamente con los materiales constituyentes de la obra y se mantiene reversible a lo largo del tiempo.

    Con la concentración utilizada, el producto era lo suficientemente fluido como para penetrar fácilmente en las fracturas del color y reparar las fibras de soporte, al mismo tiempo que proporcionaba cohesión al color fraccionado sin alterar el índice de refracción de la superficie.

    Debido a su opacidad, también se pudo utilizar el funori para retocar el pigmento negro en áreas donde se había perdido el color original.

    Además de sus propiedades consolidantes, el funori también demostró ser un agente limpiador. Durante la fase de eliminación del polvo, se aplicó una solución al 1% con un pincel en los puntos donde la consistencia de las fibras estaba comprometida, fortaleciendo así las fibras y el color, y facilitando la posterior eliminación del polvo con un paño de microfibra, limitando la presión ejercida.

    "Nero con punti" estará expuesto al público hasta el 31 de mayo de 2023 en los espacios de CUBO, el Museo de la empresa del Grupo Unipol, en Porta Europa, Bolonia. La exposición "Alberto Burri Reloaded" fue curada por Ilaria Bignotti, y la compleja restauración fue realizada por Muriel Vervat en colaboración con el Instituto de Ciencias del Patrimonio Cultural y el Instituto de Física Aplicada "Nello Carrara" (CNR de Florencia), y el Centro de Integración de Instrumentación Científica de la Universidad de Pisa.

    Actualmente, se está llevando a cabo la exposición "Alberto Burri. Da Reloaded a Luce sul Nero", también curada por Ilaria Bignotti. www.cubounipol.it/it/mostre/alberto-burri2

    BIBLIOGRAFÍA:

    1. Lalli Carlo Galliano, Kron Morelli Philippe, Brogi Antonella, Baudone Francesco, Tosini Isetta, "Funori: adesivo naturale per pitture murali e materiali cartacei", Line Graphica, 2016, 49-52.
    2. Paola Carnazza, Serena Francone, Nausicaa Sangiorgi, Domenico Poggi "NERO BIANCO NERO di Alberto Burri: studio e progettazione dell’intervento su un’opera d’arte contemporanea polimaterica" XVI Congresso Nazionale IGIIC, Trento, 25-27 ottobre 2018
  • 57.2 MÁS INFORMACIÓN: ¡OH NO, SE HA DESPEGADO EL ÁNFORA!

    ¡Oh no, se ha despegado el ánfora!

    Un interesante artículo en Studies in Conservation describe un fenómeno que también puede haber ocurrido en laboratorios y museos italianos: el desprendimiento de material cerámico proveniente de excavaciones, recompuesto utilizando el adhesivo Paraloid B-72.
    Este fenómeno ya había sido observado ocasionalmente, pero se presentó en toda su intensidad durante una misión del Museo de Arqueología Kelsey (Michigan), que operaba en el área sudanesa de El-Kurru, donde la temperatura alcanza los 40° C a la sombra. En poco más de un año, todas las ánforas pegadas con Paraloid B-72 colapsaron bajo su peso, con el fallo de las juntas que mostraban los filamentos acrílicos. A partir de este problema, se inició un estudio que puso de manifiesto el papel de la temperatura de transición vítrea (Tg) del polímero, demasiado baja para esos climas (40° C). Otros investigadores ya habían sugerido el uso del “primo” Paraloid B-48N, que tiene una Tg de 50° C, pero su uso fue cuestionado debido al temor de su reticulación, ya que está basado en un copolímero de metilmetacrilato y butilacrilato. Como se sabe, otros adhesivos que contienen el grupo butílico han mostrado evidencia de reticulación y, a largo plazo, pérdida de reversibilidad. Por lo tanto, se pensó en trabajar con mezclas de B-72 y B-48N, con la esperanza de combinar la reversibilidad del primero con una menor sensibilidad a las altas temperaturas ambientales del segundo.

    Se midieron las Tg de los dos polímeros y sus mezclas utilizando técnicas sofisticadas, llegando a las siguientes conclusiones importantes:

    • La Tg de Paraloid B-72 es ligeramente más alta de lo declarado en la hoja de datos técnicos (aproximadamente 47° C frente a 40° C), y el fenómeno de transición comienza entre 22 y 29° C.
    • La Tg de Paraloid B-48N, por otro lado, es significativamente más alta de lo declarado en la hoja de datos técnicos (aproximadamente 74° C frente a 50° C).
    • La Tg de la mezcla 1:1 es un promedio de ambos valores (59° C), con un ablandamiento que comienza a los 35° C.

    Según estos resultados, se llevó a cabo una campaña de excavación y restauración utilizando esta última mezcla, considerada estable, ya que nunca se alcanzó la Tg y solo se podía alcanzar una temperatura superior al inicio de la transición en ciertos días, es decir, 35° C. Sin embargo, la experiencia decepcionó estas expectativas: incluso con la mezcla 1:1, algunas ánforas colapsaron, especialmente aquellas con tensiones debidas a deficiencias. Las ánforas completas, que no estaban bajo tensión y eran autosoportantes en cierto sentido, aún se mantenían perfectamente intactas. Como resultado, para evitar el riesgo de desprendimientos, caídas de fragmentos y posibles roturas adicionales, es necesario emplear solo Paraloid B-48N, asumiendo el riesgo de futura reticulación y pérdida consecuente de solubilidad.

    Los laboratorios italianos de restauración arqueológica han estado usando durante décadas la resina vinílica K60 para pegar elementos cerámicos, la cual nunca ha experimentado este fenómeno de desprendimiento debido a su alta temperatura de reblandecimiento (145-165° C), a pesar de tener una Tg baja (30° C). Esto significa que incluso a altas temperaturas ambientales, entre 30 y 40° C, el polímero no es lo suficientemente blando como para ceder bajo la presión del peso mínimo de los propios elementos cerámicos.

    Bibliografía:

    Suzanne L. Davis, Caroline Roberts, Andrea Poli; "Paraloid® B-72/B-48N 1:1 como adhesivo para uso en climas cálidos: revisión de literatura, pruebas de laboratorio y estudio observacional de campo" Studies in Conservation Vol.67, n.6, 357–365 (2022).

  • 57.1 NUEVOS PRODUCTOS: DBE, EL DISOLVENTE MÁS ECOLÓGICO

    DBE, el disolvente más ecológico

     

    Como se mencionó en el número anterior del Boletín CTS (56.2_ Tendente al verde), CTS está renovando su lista de productos, excluyendo algunos solventes tóxicos e introduciendo solventes más eficientes en varios aspectos. Se enfatizó que no existe un solvente "absolutamente verde" y que un solvente será más ecológico que otro si es mejor en términos toxicológicos, de seguridad y de impacto ambiental.

    El 9 de marzo se llevó a cabo un exitoso webinar titulado "Hacia una química verde (?)", con una gran participación (¡más de 330 personas conectadas!). Esto demuestra el gran interés en este tema. Durante el webinar, se volvió a mencionar el excelente carbonato de propileno y se presentó un nuevo solvente similar en muchos aspectos, el DBE.

    DBE es el acrónimo de Di-Basic Esters, una mezcla de sustancias obtenidas mediante la metilación de ácidos producidos por la fermentación de frutas, de las cuales conserva un ligero olor. Por lo tanto, no es un solvente único, sino una familia de solventes con propiedades muy similares, como su lenta evaporación.

    Los valores de "n" en la fórmula indican el tipo de ácido base:

    n=2 ácido succínico

    n=3 ácido glutárico

    n=4 ácido adípico

     

    El DBE tiene un punto de ebullición alto (196-225°C) y una muy baja presión de vapor (0,06 Torr a 20°C), por lo que se evapora lentamente, al igual que el carbonato de propileno. Por lo tanto, no se recomienda su uso como solvente para consolidantes, resinas o pinturas, ya que existe el riesgo de impregnar la pieza con un solvente que tardará demasiado tiempo en evaporarse por completo.

    En cambio, se recomienda utilizar el DBE en forma de gel, debido a su polaridad, para la eliminación de resinas envejecidas, retoques en superficies pictóricas, etc. El DBE es casi insoluble en agua, parcialmente soluble en hidrocarburos y soluble en alcoholes, cetonas y otros ésteres, que pueden ser empleados para su remoción.

    El DBE se diferencia del carbonato de propileno porque se obtiene en un 55% a partir de fuentes renovables (frutas) y, además de ser completamente biodegradable, se ha clasificado como "VOC-free" (VOC es el acrónimo de Compuesto Orgánico Volátil, una categoría de solventes sujetos a restricciones especiales).

    En términos de seguridad, el DBE es un solvente excepcional, ya que no es irritante, la DL50 es superior a 5000 mg/Kg y no es inflamable, por lo que no presenta símbolos de peligro en su etiqueta. Al igual que el carbonato de propileno, el DBE ha sido incluido por la EPA* entre los solventes seguros y recomendados para obtener la etiqueta "Safer Choice", que permite a los consumidores optar por productos más respetuosos con el medio ambiente.

    Esta etiqueta representa una especie de garantía para los consumidores y solo se otorga a aquellas empresas que incorporan en sus formulaciones (principalmente detergentes y productos de limpieza del hogar) ciertas sustancias de baja toxicidad que presentan riesgos mínimos para los usuarios finales.

     

     

    • Environmental Protection Agency, la agencia gubernamental de Estados Unidos encargada de la protección ambiental, que proporciona información útil sobre los materiales considerados seguros para el medio ambiente en general, incluidos los seres humanos.
  • 56.3 RESTAURACIONES PARA RECORDAR: LA DEPOSICIÓN Y LA FAMILIA FLUOLINE

    La Deposición y la Familia Fluoline

    Fluoline HY, un fijador poco conocido, pero que ha demostrado ser muy útil debido a su bajo impacto cromático y facilidad de remoción, ha sido objeto de una investigación reciente en el marco de la tesis de Giulia Nanfa para el Curso de Maestría en Conservación y Restauración de Bienes Culturales, titulada “La restauración de la Deposición de Giovanni Patricolo del Monasterio de Santa Caterina en Palermo".

    Este polímero sintético (copolímero de vinilideno fluoruro - esafluoropropeno), de cadena larga y excepcionalmente estable, fue inicialmente propuesto como un hidrorrepelente y consolidante superficial para piedras, enlucidos y ladrillos muy porosos, pero también resultó ser muy útil como fijador de pinturas mates (como se describe en el Boletín CTS 49.2, " La protección mate de las pinturas murales").

     Al evaluar su uso como fijador, se deben considerar tanto las ventajas como las limitaciones, como su baja temperatura de transición vítrea (Tg) (-21°C): esto permite mantener la elasticidad incluso a las temperaturas más bajas, cuando otros materiales se vuelven rígidos y frágiles, pero su “flexibilidad” también conlleva el riesgo de retener partículas atmosféricas. Por lo tanto, es necesario evitar la acumulación y la formación de películas en la superficie, ya que esto llevaría a un gradual oscurecimiento.

    Otras propiedades que hacen que el Fluoline HY sea extremadamente útil son su reversibilidad y su impacto cromático extremadamente bajo: en soportes absorbentes resulta prácticamente invisible, mientras que en aquellos menos absorbentes puede haber una ligera saturación del tono, pero nunca un efecto brillante.

     

    Intervenciones en temple y arte contemporáneo

    La primera intervención de consolidación con Fluoline HY en una pintura al temple frágil y sensible al agua fue realizada por el Opificio delle Pietre Dure en una pintura de Sironi [1].

    En el artículo anterior del Boletín, también habíamos presentado la intervención ejecutada por Fabrizio Lacopini en un temple sobre lienzo de finales del siglo XIX, el Sipario Storico del Teatro del Popolo en Castelfiorentino [2].

    Posteriormente, se fijaron las capas pictóricas de algunas grandes telas de algodón y sintéticas, de Uiso Alemany y Vicente Peris, hechas en los primeros años '80. Los tests hechos por el Instituto Valenciano de Conservación y Restauración identificaron al Fluoline HY como el consolidante más adecuado para la fijación de la compleja materia pictórica que abarcaba desde resinas vinílicas hasta betún [3].

    Finalmente, debemos mencionar su uso en una obra de Rachel Lachowiz, "One to one", realmente especial debido a la elección del material-color: se trata de un retrato en mosaico donde las teselas son sombras de ojos Revlon de varias tonalidades. Solo el Fluoline HY permitió fijar este material anómalo sin alterar su cromatismo.

     

    El tratamiento de La Deposición en la restauración

    La consolidación del estrato pictórico desprendido.

    Esta obra, realizada en 1825, se caracteriza tanto por su soporte, una muselina de algodón muy delgada pegada sobre un enlucido curvo que crea un efecto de profundidad e incorpora un entablado de madera en la parte inferior, como por su capa pictórica compuesta por un temple magro a base de cola animal, que no contiene aceites secantes ni huevo. Por lo tanto, se trata de un color extremadamente sensible al agua, marcado por numerosas manchas en áreas donde en el pasado se habían producido descuidados "riego" de flores colocadas frente a la pintura.

    Entre los productos probados en muestras que simulaban la tipología de la obra, se seleccionó el Fluoline HY, que luego se aplicó en la pintura y se evaluó mediante un colorímetro. A continuación, se muestran en la tabla las diferencias de los valores colorimétricos (resumidas por simplicidad con solo el ΔE*) obtenidos en varias áreas pintadas.

     

    Área de estudio

    ΔE*

    Carnación de Cristo

    0,632

    Manto azul de la Madonna

    0,730

    Vestido amarillo de María Magdalena

    1,931

    Sábana blanca del Sudario

    1,171

    Vestido rojo de María Magdalena

    0,637

     

     

    Como se puede observar, aparte de algunas diferencias según las áreas pintadas, las variaciones se encuentran todas por debajo de 3, el valor límite de percepción del ojo humano.

    El producto, diluido al 50% en acetona, se aplicó mediante un pincel de cerdas suaves, interponiendo hojas de papel japonés; una vez que el disolvente se evaporó por completo, la superficie se mantuvo ópticamente inalterada. Se realizaron de 2 a 3 aplicaciones adicionales con un intervalo de 24 horas en las áreas más afectadas por el deterioro. De esta manera, se logró una consolidación homogénea.

     

    La adhesión de la tela al soporte

    Después de la consolidación del estrato pictórico, fue necesario volver a adherir algunas áreas de la tela al soporte: en este caso también, la sensibilidad al agua impidió el uso de adhesivos como el alcohol polivinílico, mientras que los acrílicos clásicos (Paraloid) o vinílicos (Beva) resultaban en una saturación excesiva del color.

    Basándose en los resultados positivos obtenidos con el Fluoline HY y en la formulación del adhesivo Fluoline A existente, se probó el Fluoline ST en combinación con una pequeña cantidad de Paraloid B72 (en una proporción de 1:10 de contenido seco entre acrílico y fluoruro), obteniendo una mezcla de elastómero fluorado y resina acrílica. Los resultados fueron completamente satisfactorios tanto en términos de la adhesión lograda como en cuanto al bajo impacto cromático final.

    Finalmente, el mismo Fluoline ST se utilizó en la fase posterior del enmasillado como aglutinante para el yeso de Bolonia, demostrando ser adecuado debido a su falta de interacción con los materiales constituyentes de la pintura.

    Agradecemos a Giulia Nanfa y a todo el equipo que la acompañó durante su trabajo de tesis, incluyendo a las restauradoras Sabrina Sottile y Antonella Tumminello, así como a los profesores responsables del área técnico-científica y de las investigaciones diagnósticas, Delia Chillura Martino y Bartolomeo Megna.

     

    Bibliografía:

    1. E. Buzzegoli et al, Open Studio e intervento di restauro su un’opera di Sironi, en L’attenzione alle superfici pittoriche. Materiali e metodi per il consolidamento e metodi scientifici per valutarne l’efficacia, Congresso Colore e Conservazione, Il prato, 2008.
    2. S. Petrillo (a cura di), Il sipario del Teatro del Popolo di Castelfiorentino, Pacini Editore, 2011.
    3. M.T. Pastor Valls et al, Un tiempo, un espacio, Uiso Alemany/Vicente Peris, 1982–1984 en 14a jornada de Conservación de Arte Contemporáneo, Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, 2013.

    Imágenes del proceso:

    56-3%20foto%201.jpg 56-3%20foto%202.jpg
    Aplicación del consolidante Fluoline HY con pincel y papel japonés intercalado. Remoción del papel japonés de la superficie.
    56-3%20foto%203.jpg 56-3%20foto%204.jpg
    Área de color saturada después de la aplicación del consolidante Fluoline HY en el film pictórico. Área de color tras la evaporación completa del disolvente.
  • 56.2 MÁS INFORMACIÓN: TENDENCIA AL VERDE.

    Tendencia al verde.

     

    En uno de esos raros momentos de amor propio en los que deseamos dedicar unos minutos a revisar nuestro arsenal de disolventes, además de desechar esa botella de butilamina que heredamos de nuestro antiguo mentor, podríamos echar un vistazo rápido al sitio web de la EPA, que proporciona una lista de materiales utilizables de manera segura. La lista de ingredientes químicos más seguros | EPA de EE. UU.

    La EPA (Agencia de Protección Ambiental) es la agencia del gobierno de EE. UU. que se encarga de la protección ambiental, y proporciona información útil sobre los materiales considerados seguros para el medio ambiente en su totalidad, y por ende para nosotros, los seres humanos. Durante años ha apoyado a un grupo de empresas que eligen incluir en sus productos (principalmente detergentes y productos de limpieza del hogar) materiales que, según la EPA, presentan riesgos mínimos para los usuarios finales. La EPA otorga a estos productos la "Safer Choice Label", una etiqueta que permite a los consumidores orientarse hacia estos productos más seguros.

    De manera similar, en el viejo continente, la ECHA (Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas) se ha movido no solo con las restricciones respecto a sustancias conocidas por sus efectos tóxicos y/o cancerígenos, sino también con una serie de documentos de orientación como el de 2018: "Estrategia para promover la sustitución por sustancias más seguras a través de la innovación”. La creciente tendencia hacia una "química verde" ha hecho que muchos productos se hayan promovido con términos como "ecosostenible", "verde" o "bio”, incluso cuando se trataba del mismo material etiquetado de nuevo, o peor aún, de productos que contienen sustancias tóxicas o perjudiciales.

    Consideramos necesario aclarar algunos puntos estrechamente relacionados con el mundo de la restauración y, en particular, con el de los disolventes; tomamos como referencia una primera definición del libro Greener Solvents in Conservation, que, partiendo del concepto de que no existe un disolvente "absolutamente verde"[1], proporciona una definición comparativa: un disolvente será más verde que otro si es mejor en términos de toxicología, seguridad e impacto ambiental. Lo primero a destacar es que no se hace referencia a la procedencia de fuentes renovables, otro parámetro que se ha utilizado al hablar de sostenibilidad.

    Lo segundo es consecuencia del uso mínimo de disolventes en nuestro sector, que nunca se vierten en suelos o cursos de agua y, por lo tanto, tienen un impacto ambiental mínimo.

    Partiendo de este principio podemos decir que, en el mundo de la conservación, se produjo un primer avance "verde" en la década de los 90, cuando los métodos acuosos (enzimas, resinas-soap, etc.) propuestos por Richard Wolbers y en Italia por Paolo Cremonesi se sumaron al uso de solventes orgánicos que eran, hasta entonces, incontestables. La introducción de solventes de baja toxicidad también debía ser considerada desde esta perspectiva y, como veremos, en este frente se están llevando a cabo trabajos en curso. Es fácil comprender cómo el problema es extremadamente complejo, ya que involucra no solo los datos relacionados con la toxicidad de los solventes, sino también su biodegradabilidad, la energía necesaria para su producción, la posible posibilidad de reciclaje e incluso su eficiencia (por ejemplo, en la limpieza, se requerirán mayores cantidades de un solvente menos eficiente en comparación con uno más eficiente). Dado que no podemos hacer más que una breve mención en las páginas del Boletín CTS, nos limitaremos a describir las acciones que ya se han emprendido y que tendrán continuación en los próximos años. Cada acción siempre se basará en el principio primario de la máxima eficiencia, que prevalecerá sobre la sostenibilidad.

     

    Nuevos disolventes. - CTS ha renovado progresivamente su catálogo, excluyendo algunos solventes tóxicos e introduciendo alternativas como el carbonato de propileno, que debido a su baja toxicidad se encuentra entre los componentes de muchos productos cosméticos y presenta la indudable ventaja de ser inodoro. Además, ha sido clasificado como "libre de VOC", es decir, un solvente que debido a su baja actividad fotoquímica, baja toxicidad y alta biodegradabilidad no pertenece a la categoría de compuestos orgánicos volátiles (COV), que está sujeta a restricciones especiales. Sin embargo, sigue siendo un solvente sintético que no proviene de fuentes renovables y, por lo tanto, no puede ser considerado completamente "verde".

    La búsqueda de la Oficina Técnica en esta dirección continúa, y en 2023 se introducirá un nuevo solvente altamente sostenible.

     

    Materiales de fuentes renovables. - El mundo de la restauración siempre ha utilizado materiales orgánicos de fuentes renovables, desde las colas animales hasta las resinas naturales como el damar y el mastic. En los últimos años, hemos centrado nuestra atención en los geles a base de agar, como el Nevek, como alternativa a los geles sintéticos (que siguen siendo insustituibles para algunas operaciones), para la limpieza, mientras que para la consolidación de papel y películas pictóricas, está ganando terreno el funori y su extracto purificado, Funoran Solution, una alternativa válida a las celulosas modificadas como Klucel y Tylose.

     

    Embalaje. - El problema de reducir el impacto ambiental del embalaje se ha abordado decididamente, pero dedicaremos un artículo completo del Boletín CTS a este proceso.

    En conclusión, el proceso de "verdificar" que se inició hace años continúa y está en pleno desarrollo. La perspectiva es mejorar gradualmente la sostenibilidad, analizando no solo las deficiencias de los productos, sino también los procedimientos que pueden afectarla. ¡Mantendremos actualizados a nuestros lectores!

     

     

    BIBLIOGRAFÍA:

    "Greener Solvents in Conservation: An Introductory Guide"; Editado por Gwendoline R Fife, Archetype Books (2021). También está disponible en línea Greener solvents – Hand book - Sustainability in Conservation (siconserve.org)"

    [1]Ni siquiera el agua, ya que su purificación requiere el consumo de energía. A menos que tengas en el laboratorio un recolector de agua de lluvia...

  • 56.1 MÁS INFORMACIÓN: INVISIBLE PERO ÚTIL

    Invisible pero útil

    Una de las herencias dejadas por el profesor Gustav Berger, poco conocida, pero de enorme utilidad, es la GUSTAV BERGER’S ORIGINAL FÓRMULA® ISOLATING PVA SPRAY VARNISH, llamada por los amigos como Barniz de Aislamiento. En el pasado, el nombre generó cierta confusión, ya que puede hacer pensar en un producto en forma de aerosol, mientras que en realidad se trata de un barniz líquido, que Berger recomienda aplicar con un pulverizador, pero que también se puede aplicar sin problemas con un pincel.

    El barniz se creó para resolver una situación específica y recurrente en las pinturas antiguas que han sufrido varias restauraciones, a menudo agresivas. Algunas áreas, a veces campos precisos, resultan abrasadas, a menudo mal restauradas y luego nuevamente, y mal limpiadas otra vez. Estamos frente a una superficie donde las áreas de restauración, incluso si se realizan con habilidad, serán más compactas y se alternarán con áreas más pobres en material, fuertemente absorbentes, donde el barniz “desaparece”. Estas situaciones a menudo se han resuelto con múltiples capas de un barniz, de restauración o final, hasta lograr la homogeneidad.

    Desafortunadamente, este procedimiento a veces conduce a la aplicación de una gran cantidad de material, formando una especie de "losa de plástico" que con el tiempo tiende a ser cada vez más evidente. La nueva generación de barnices (Regal Gloss, Regal Mat, Regal Retouching) no puede resolver esta problemática, ya que están basados en polímeros de bajo peso molecular, Regalrez 1094 y Laropal A-81, que penetran fácilmente en las zonas más porosas sin homogeneizarlas.

    Por otro lado, el Barniz Aislante se basa en una mezcla de resinas de polivinilacetato (PVA) de cadena larga, de excepcional estabilidad.

    Berger comenzó con el AYAB de Union Carbide, de bajo peso molecular, y le asoció un segundo PVA de mayor peso molecular, el AYAF (Mw 113.000); este paso era necesario para obtener una película homogénea y flexible. Los pesos moleculares demasiado bajos no dan este resultado, la película se desmorona.

    Hoy en día, las resinas PVA que componen el Barniz Aislante tienen diferentes pesos moleculares, pero la misma Tg, 34°C, y su estabilidad ante el amarilleamiento y la reticulación se ha demostrado excelente.

    Estas resinas son solubles en solventes polares, lo que impide su aplicación en aceites modernos, así como en acrílicos; sin embargo, rara vez presentan la situación descrita anteriormente, la de alternancia de zonas secas y compactas.

     

    Las resinas de PVA fueron las primeras en ser utilizadas en la restauración, pero fueron abandonadas por una razón muy simple: su suavidad provoca la adhesión de partículas atmosféricas, lo que lleva a un progresivo envejecimiento de la superficie. Se pasó entonces a las resinas acrílicas, que dominaron durante medio siglo, a pesar de las evidencias de su reticulación y la consiguiente reducción de la reversibilidad. La reversibilidad nunca se puso en duda para las resinas vinílicas, que además han demostrado buenas propiedades de baja decoloración. Sin embargo, esta suavidad lleva a una consecuencia muy precisa: el Barniz de Aislamiento no puede ser usado como pintura final, siempre debe ser repintado.

    Sobre el Barniz de Aislamiento, que no es particularmente brillante en sí mismo, se puede aplicar cualquier tipo de pintura, brillante o mate, desde Regal Varnish hasta acrílicos (Lefranc, Lukas), hasta naturales (Regal Dammar, o una clásica masilla).

    Berger sugería la aplicación del Barniz de Aislamiento no solo para uniformar la superficie al final de la limpieza, preparando el terreno para el retoque, sino también para fijar las sutiles veladuras que podrían dañarse si la pintura se aplica con pincel. Al final del día, una ligera pulverización de Barniz de Aislamiento permite retocar sin problemas desde el día siguiente.

    También se puede aplicar sobre una pintura recién barnizada sin causar fenómenos de "spotting" (picaduras) o efectos de "piel de naranja", y se seca en un par de horas. La mezcla de disolventes que la componen es muy volátil, compuesta principalmente de alcohol etílico, con pequeños porcentajes de acetona y tolueno (el porcentaje de este último se ha reducido durante una década, en comparación con la formulación original), por lo que aplicada a spray tiene un efecto mínimo de lavado incluso en aceites no muy envejecidos.

    En conclusión, se trata de un barniz que en algunos casos resulta indispensable, y que recomendamos tener siempre a mano.

    BIBLIOGRAFÍA:

    - Rutherford J. Gettens; “Polymerised Vinyl Acetate and Related Compounds in the Restoration of Objects of Art”, in Technical Studies in the Field of Fine Arts, 1935, pp. 15-27.
    - G.A. Berger and W.H. Russell “Conservation of paintings: Research and Innovations”, Archetype Pubns, 2000.

  • 55.1 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - ENSAYOS MICROQUÍMICOS EN PAPEL

    Ensayos microquímicos en papel

    En los laboratorios del Centro de Conservación y Restauración (CCR) “La Venaria Reale” se ha identificado un protocolo operativo para el diagnóstico de materiales de papel a través de la revelación de algunas características significativas. El conocimiento profundo de los materiales representa un factor clave para la contextualización histórica y productiva de muestras de papel desconocidas que se pueden encontrar en una amplísima variedad de obras [1].

    En el desarrollo de procedimientos para el estudio de obras artísticas, el papel del químico es identificar las investigaciones factibles, evaluar si son significativas para obtener información del material relacionada con los problemas planteados y finalmente optimizar los procedimientos de análisis para las aplicaciones específicas requeridas.

    Los ensayos microquímicos son capaces de discriminar los diferentes materiales de papel en función de la materia prima de la que se han obtenido y del método utilizado para su producción; y por tanto, permite recoger información sin estar necesariamente ligados a los diagnósticos realizados por laboratorios especializados. Así, se han definido procedimientos operativos para la ejecución de test puntuales seleccionadas y optimizadas para que sean fáciles de implementar y aplicar y, con un poco de experiencia y atención, puedan interpretarse sin demasiada dificultad.

    Mirando hacia atrás en la historia de la producción de papel, está claro cómo las técnicas y las materias primas han cambiado con el tiempo para satisfacer diferentes necesidades. Desde su invención hasta el siglo XIX, el papel se obtenía del procesamiento de trapos, blanqueados, desfibrados, afieltrados y pegados para hacerlos aptos para su uso como soporte de escritura. La única producción que desde un principio implicó el empleo de fibras derivadas directamente del procesamiento de las plantas para obtener la celulosa necesaria fue el papel japonés, pero esto no es comparable con el papel que se introducirá a mediados del siglo XIX en Europa, obtenido de las plantas a través de la producción de la llamada pulpa de madera. Según el tratamiento que se le dé a la madera para obtener la pasta fibrosa (pasta mecánica, semiquímica y química), se obtienen distintos tipos de papel. El papel derivado de trapos difiere sustancialmente del obtenido de la pulpa de madera por sus propiedades y técnicas de producción. Conocer el origen de la celulosa o el tipo de encolado que ha sufrido es útil para reconstruir la historia del producto en cuestión. Queda claro, por tanto, que conocer la historia de la producción y de las materias primas es un importante punto de partida para el análisis y contextualización de los objetos que contienen papel en el ámbito de la conservación y restauración del patrimonio cultural.

    La literatura propone diferentes reactivos para el análisis microquímico de mezclas fibrosas [2-5], mediante reacciones que directa o indirectamente determinan una coloración característica de la fibra. Se probaron determinados reactivos para distinguir el tipo y grado de cocción de la madera y la presencia e intensidad del tratamiento de blanqueo.

    Se han definido los ensayos más adecuados para el fin previsto y el contexto de aplicación, considerando que el usuario final será personal no especializado y que la aplicación se limitará a laboratorios de restauración. Por tanto, se han excluido todos aquellos ensayos en los que se vean involucradas sustancias tóxicas o que requieran precauciones y equipos especiales para su uso y manipulación.

     

    Reactivos seleccionados para el test

    Uso

    Reactivo de Herzberg

    Identificación de pasta fibrosa

    Reactivo C de Graff

    Identificación de pasta fibrosa

    Reactivo de Selleger modificado

    Identificación de pasta fibrosa

    Reactivo Lugol

    Detección de la presencia de almidones

    Reactivo de Mӓule

    Identificación de pasta fibrosa

    Fluoroglucina

    Identificación de lignina

    Sudan IV

    Detección de presencia de lípidos

    Test Biuret

    Detección de presencia de proteínas

    Test Raspail

    Detección de presencia de colofonia

     

    Después de la fase de selección de la prueba, se llevaron a cabo algunas pruebas preliminares en modo “macro”, utilizando así muestras de tamaño tal que permitieran evaluar el resultado de la prueba a simple vista. Para esta fase preliminar se usaron muestras de papel de las que se conocía, al menos en parte, la materia prima. De esta forma fue posible verificar la eficacia efectiva de los reactivos probados, seleccionando aquellos que permitieran una fácil interpretación de los resultados y una buena repetitividad de la prueba. Tras las pruebas preliminares realizadas sobre muestras de papel semiconocidas, se procedió a la aplicación, nuevamente a escala macroscópica, de los reactivos sobre muestras de papel desconocidas, encontradas por CTS. Tras las pruebas macroscópicas, se descartaron las pruebas cuya ejecución era más compleja o que no arrojaban resultados fácilmente interpretables. Para las demás pruebas se continuó con el análisis a escala microscópica, considerando a escala macro las fibras de las muestras ya analizadas, llegando a una interpretación más sólida y definitiva aún de las muestras desconocidas. De estas pruebas se desprende que los resultados obtenidos a nivel macro y microscópico son significativamente diferentes y que, en cualquier caso, se prefiere la aplicación de los reactivos sobre las fibras individuales. Además, las pruebas preliminares permitieron seleccionar las pruebas que ofrecen un resultado completo y fácilmente interpretable, arrojando diferentes colores para cada producto dentro de la amplia gama de papeles que se pueden analizar.

    Ejemplo de los resultados del análisis microscópico de muestras desconocidas enviadas por CTS.

    Duralong Double Ocra:lado blanco

    Muestra sin reactivo 20x

    Resultado reactivo C de Graff

    Identificación pasta fibrosa

    Interpretación
    Pasta química de conífera con sulfito
    Resultado obtenido: gris púrpura

     

    CONCLUSIONES

    Al final del trabajo de tesis, se elaboró ​​un manual operativo para los laboratorios del CCR, que describe todos los pasos a realizar para el análisis de muestras de papel: la preparación del reactivo, la preparación de la muestra, la aplicación del responsable y una galería de fotos para orientar la interpretación del resultado.


    Bibliografía

    1.      ll lavoro sperimentale si è svolto nell’ambito della tesi di laurea magistrale in Chimica conseguita presso l’Università di Torino da Eva Luna Ravan.
    2.      G. Poles, (1974). Analisi microscopica delle fibre naturali nella carta. Cuneo: ATICELCA
    3.      Martin A. Hubbe, R.P. (2019). Analytical staining of cellulosic materials: a review. Bioresources, 7387-7464.
    4.      Mayer, D. D. BPG Spot Tests. Tratto da BPG Spot Tests: https://www.conservation-wiki.com/wiki/BPG_Spot_Tests
    5.      Pedemonte, E. (2008). La carta. Storia, produzione, degrado, restauro. Venezia: Marsilio Editori.

    Link al texto completo:

     https://drive.google.com/drive/folders/1Adkmam7jfSQjTppz4Dv_amQtVW-MXJ2S?usp=sharing

  • 55.2 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - CUESTIÓN DE PEELING

    Cuestión de peeling

    La evaluación de la eficacia de los productos consolidantes aplicados a piedras o morteros degradados es uno de los puntos más discutidos y controvertidos entre los científicos conservacionistas que se ocupan de los materiales pétreos.

    Entre los muchos métodos propuestos (velocidad ultrasónica, taladrado, resistencia a la compresión o a la flexión…) ninguno por sí solo proporciona respuestas precisas y definitivas; y la pauta actual es seguir al menos dos.

    Un test apreciado por su sencillez a la hora de realizarlo es el conocido como Scotch Tape Test, o peeling test; la única instrumentación necesaria es una balanza de precisión, presente en todos los laboratorios y, en cualquier caso, adquirible a bajo precio.

    El Scotch Tape Test consiste en pesar tiras de cinta adhesiva, que luego se pegan a las superficies de los materiales tratados, se retiran y se pesan de nuevo. Por una simple diferencia de pesada se obtiene el material retirado, el cual será inversamente proporcional a la consolidación obtenida.

    Inicialmente, se sugirió el método para evaluar la resistencia de pinturas (o de recubrimientos sobre metales), tanto es así que existe un método estándar (ASTM 4214-97 ‘‘Standard Test Methods for Evaluating the Degree of Chalking of Exterior Paint Films’’), que prevé la evaluación a través de una interpolación por imágenes, pero se refiere a la evaluación de la degradación de las pinturas en la construcción civil, y no lo tomaremos en consideración aquí. Además, la evaluación requiere una instrumentación de análisis por imágenes, que no es fácilmente accesible para todos.

    El Scotch Tape Test, realizado mediante pesaje, fue introducido en el ámbito de la restauración por Mora y Torraca [1] ya en 1965, y, sin embargo, tiene límites que deben tenerse evaluarse cuidadosamente.

    Primer punto a subrayar: el test solo proporciona un índice de consolidación superficial, sin posibilidad de obtener información sobre lo que ha ocurrido en el interior del material, si el consolidante ha penetrado y cuánto, si ha cumplido con su función en las capas internas, etc.

    Segundo punto: el test está sujeto a numerosas variables que pueden conducir a errores incluso graves. Por ello, se han propuesto diversos protocolos de análisis encaminados a la reducción de variables externas.

    Entre las muchas variables a tener en cuenta tendremos:

    •       el tipo de cinta adhesiva utilizada y su tamaño
    •       el tipo de material pétreo examinado (con pérdida granular, en escamas, etc.)
    •       la fuerza con la que se aplica la cinta adhesiva, que depende del operador;
    •       la velocidad a la que se retira la cinta adhesiva y la dirección de extracción.

    Todos estos puntos han sido abordados por diversos grupos de investigación y se han planteado diversas propuestas.

    Las medidas deben repetirse varias veces en la misma área, posiblemente elegida, regular y plana. También se han recomendado diferentes enfoques para el procesamiento de datos: desde un promedio simple sobre 6 medidas [3], hasta una interpolación más compleja de una curva tomada sobre 10 medidas [1,2]. Este segundo sistema, más complejo, pretende reducir las diferencias que en ocasiones se pueden encontrar entre las primeras medidas, que desprenden gránulos inconsistentes ligados a la variabilidad de las superficies, y las medidas posteriores, que se realizan sobre la superficie efectivamente consolidada.

     

    El tamaño de la tira de cinta adhesiva debe ser de al menos 3-4 cm2, y a menudo se han utilizado tiras de 2x5 cm.

    La cinta debe aplicarse con la mayor fuerza posible y constante sobre la parte posterior, con las yemas de los dedos o con un objeto liso de plástico blando, como una goma de borrar.

    Una vez aplicada la cinta, debe esperar unos 3 minutos antes de retirarla.

    Las variables introducidas por el operador, como la fuerza con la que se presiona la correa y los métodos usados para su extracción, dificultan la comparación de pruebas efectuadas por diferentes laboratorios; sin embargo, sigue siendo una prueba útil para comprender el comportamiento de los consolidantes aplicados al mismo material y analizados por comparación.

     

    55-2%20Imagen%20.jpg


    Bibliografía

    1. Paolo Mora, Giorgio Torraca; “Fissativi per dipinti murali”. Bollettino dell’Istituto Centrale del Restauro, Roma, 1965, 109–132.
    2. Miloš Drdácký, J. Lesák, Silvia Rescic, Zuzana Slížková, Standardization of peeling tests for assessing the cohesion and consolidation characteristics of historic stone surfaces, Material Struct. 45, 2012, 505–520.
    3. Miloš Drdácký, Zuzana Slížková; In situ peeling tests for assessing the cohesion and consolidation characteristics of historic plaster and render surfaces, Studies in Conservation, 60:2, 2015, 121-130.
    4. Agnieszka Defus, Antonio Sansonetti, Elena Possenti, Cristina Tedeschi, Silvia Vettori, Marco Realini; The effectiveness of di-ammonium hydrogen phosphate (DAP) consolidation treatment on lime-based mortars weathered by freeze-thaw cycles” Journal of Cultural Heritage, 50, 2021, 1-12.
  • 55.3 RESTAURACIONES PARA RECORDAR - CUANDO LOS MAPAS GEOGRÁFICOS TAMBIÉN SON PINTURAS MURALES...

    Cuando los mapas geográficos también son pinturas murales...

     

    Con este artículo inauguramos una nueva sección del Boletín CTS, dedicada a trabajos de restauración de gran importancia, no necesariamente por la importancia de las obras, sino sobre todo por las técnicas y productos empleados.

     

    Visitando hoy en día el museo de los Uffizi, es obligada una parada en el “Terrazzo delle Carte Geografiche”, que representa el sello artístico de la política expansionista de los Medici.

    Oficialmente, el Granducado de Toscana, a partir de 1569, amplía el territorio de Ferdinando I de Medici con las últimas adquisiciones sienenses. Y precisamente para conmemorar esta expansión, el granduque hizo realizar estos monumentales mapas murales del cartógrafo Stefano Bonsignori y del pintor Ludovico Buti, quien eligió la técnica del óleo en lugar del fresco clásico.

    Una pared representa el “antiguo dominio”, es decir, el área de Florencia, que se extendía desde Arezzo hasta la costa de Pisa y Livorno incluidas, y una segunda el “nuevo dominio” con Siena y Grosseto; en una tercera pared se representa la isla de Elba, pero fue ejecutada en épocas posteriores y tras varias dificultades estructurales. El gran ventanal de la cuarta pared permite admirar la ciudad desde lo alto, casi un puente entre la realidad representada y la realidad tangible.

    Estos gigantescos mapas estaban adornados con motivos naturalistas y mitológicos, así como las miríadas de palabras que indicaban las distintas localidades y sitios (los más importantes en oro). Es curioso comparar topónimos antiguos y nuevos, como Capoliri en lugar del actual Capoliveri en Elba; o Asinalongha, hoy Sinalunga.

     

    Y si la mirada se eleva a las partes pintadas del artesonado, aparecen las figuras mitológicas de Jacopo Zucchi, realizadas en Roma cuando Ferdinando era cardenal, y después transportadas a Florencia y reensambladas en los despachos (uffizi) granducales.

     

    Toda la sala, pinturas murales y artesonado, ha sido recientemente restaurada, ya que era necesario por antiguas filtraciones de agua; los restauradores han trabajado durante dos años, coordinados por el “Opificio delle Pietre Dure” y bajo la supervisión de Antonio Godoli (para la parte arquitectónica), Anna Bisceglia (dirección científica de recuperación de pinturas murales y en tablas), Cristiana Todaro (dirección técnica) y Daniela Smalzi (investigación documental y archivo). Ellos también son los responsables de la redacción del volumen monumental “Il Terrazzo delle Carte Geografiche agli Uffizi”, publicado este año por Nomos Edizioni. El texto también recoge otros ensayos que profundizan en algunos aspectos, como la pintura al óleo en pared y las referencias a animales marinos fantásticos y la rica navegación que abarrota el “mare di Toscana”.

    El libro también presenta los diferentes procedimientos adoptados por los restauradores implicados, que fueron Andrea Vigna (Habilis) para los mapas murales de Florencia y Siena, y Anna Medori (Faberestauro) para el de Elba, mientras que los 9 lienzos del artesonado fueron divididos entre Lucia y Andrea Dori, Laura Caria, Miriam Fiocca y Lorenzo Conti, Luisa Landi, Chiara Mignani, Debora Minotti, Daniela Lippi, Sandra Pucc, y Manola Bernini.

     

    Cabe destacar la alternancia de materiales “clásicos” (como el mortero de inyección PLM-A y el Primal B60 para el asentamiento de abultamientos), a los “inusuales” en el ámbito mural, es decir, los geles empleados en las pinturas sobre lienzo y tabla. En este caso estos métodos son perfectamente transferibles, ya que hablamos de técnica al óleo: la limpieza fue realizada por Andrea Vigna y Anna Medori con geles solventes-tensoactivos realizados con Carbopol y Ethomeen, alternados con geles silicónicos de Velvesil.

    Por último, cabe señalar que se eligió como barniz final, tanto para los murales como para los lienzos, el barniz Regal Varnish Retoque de gran estabilidad, a base de resina urea-aldehído Laropal A81, con el fin de obtener un resultado estético homogéneo.

     

     

     

  • 54.1 NUEVOS PRODUCTOS - PROTECCIÓN DEL BRONCEO: CTS WH Y EL CASO REDIPUGLIA

    Protección del bronce: CTS WH y el caso Redipuglia

     

    La cera Reswax WH ha sido el producto de referencia para la protección de bronces desde principios de los años 90, gracias también al estudio realizado en 1991 por Marabelli y Napolitano [1], que destacó la eficacia de las aplicaciones en capas de resina acrílica y cera, con la adición del benzotriazol como inhibidor de la corrosión.

    Con motivo de las celebraciones por el centenario del final de la Gran Guerra, se llevaron a cabo amplias intervenciones de restauración en el santuario de Redipuglia donde, desde su inauguración en 1938, se conservan los restos de 100.187 soldados caídos en varios frentes. Veintidós escalones gigantes albergan miles de placas de bronce, que fueron ejecutadas en la década de 1930 por la “Fonderia Artistica Battaglia” de Milán y Vincenzo Perani de Brescia.

    Con el tiempo, estas placas han sufrido el proceso natural de oxidación y degradación y se ha intentado remediar la alteración cromática aplicando pinturas sintéticas grises. El proyecto de restauración preveía la eliminación de tales pinturas, también degradadas, mediante arenado y el posterior patinado con sulfuro de amonio caliente. En el proyecto se preveía aplicar un producto protector final destinado a proteger el propio revestimiento, pero no se había especificado cuál.

    Presentamos un breve resumen del estudio [2] destinado a identificar el mejor agente protector para placas de bronce, que fue realizado por el CNR y la Universidad de Florencia, y que hizo la selección y finalmente la aplicación del producto CTS WH.

    Las pruebas se ejecutaron tanto en algunas placas originales como en placas creadas especialmente por la “Fonderia Artistica Battaglia”, con una aleación idéntica a la original (Cu=76%, Zn=11%, Sn=5%, Pb=2%).

    Todas han sido preparadas mediante microarenado y barnizado, para que su superficie sea igual a la de todos los demás. Luego se aplicaron tres agentes protectores diferentes, dos de los cuales también en doble capa. Además del producto Soter, tomado como referencia, se ensayó el protector CTS WH, basado en una mezcla de cera microcristalina Reswax WH y benzotriazol, y un 3-mercapto-propil-trimetoxisilano desarrollado durante el proyecto europeo B-Impact.

    Se llevaron a cabo distintos análisis como de los valores colorimétricos, observaciones realizadas por microscopía óptica, medidas por medio de un rugosímetro, mediciones en espectroscopia infrarroja (FTIR) y de tipo electroquímico. A continuación, los ejemplares fueron sometidos a un envejecimiento natural acelerado, con exposición en el medio marino (Génova) y algunos de ellos también fueron rociados dos veces por semana con una solución de NaCl. El envejecimiento se continuó durante 6 meses y las muestras se volvieron a analizar.

    Las medidas electroquímicas que proporcionaron el valor de la impedancia, indicaron que los de los tratamientos de doble capa como los mejores (CTS WH y B-Impact)

    En conclusión, se seleccionó CTS WH como protector final y después se aplicó de la adición de grafito superventilado como pigmento, lo que le dio al acabado el tono ideal.

     

    Bibliografía

     

    Marabelli, M.; Napolitano, G. Nuovi sistemi protettivi applicabili su opere o manufatti in bronzo esposti all’aperto (New Protective Systems Applied to Outdoor Bronze Statuary or Artifacts). Materiali e Strutture Problemi di Conservazione 1991, 1, 51–58.

    Metal2019, Neuchâtel, 2019.Bruni, T.; Mariani, B.; Salvadori, B.; Letardi, P.; “A multi-analytical approach to evaluate surface treatments on copper-alloy artefacts: A case study applied to the restoration of the memorial of Redipuglia.” Metal 2019, Interim Meeting of the ICOM-CC Metals Working Group, Neuchâtel, Switzerland, 2–6 September 2019.

  • 54.2 NUEVOS PRODUCTOS - LAS PURPURINAS DEL FUTURO: LOS PIGMENTOS MICÁCEOS (IRIODIN)

    Las purpurinas del futuro: los pigmentos micáceos (Iriodin)

     

    E gli uomini non arrivano! Sarebbe ora, e da tempo! E me ne sto qui oziosa, tutta imbellettata di biacca e con la tunica bella, cantandomi una canzone e facendo la graziosa, per accalappiare qualcuno che passi…”

    Aristofane, Ecclesiazuse, Año 329 a.C.

    El mercado de la vanidad, es decir, el sector cosmético, está a la vanguardia en la búsqueda de materiales que puedan realzar la belleza porque, ya sabes, ésta no tiene precio y siempre ha sido una fuente de inmensas ganancias. Si hace dos mil años las mujeres estaban dispuestas a untarse el tóxico plomo blanco en el rostro, hoy en día ya no es posible proponer pigmentos puros para que estén en contacto con la piel y embellecerse (o incluso debajo, en el caso de los tatuajes) La iridiscencia natural de los peces estimuló la imaginación de ingeniosos alquimistas, como un tal Jaquin, que en 1650 puso en el mercado la Esencia de Oriente, un pigmento obtenido moliendo escamas de peces pacientemente recolectadas. Tendría que producirse un completo desarrollo de la química para obtener pigmentos nacarados, con sales de mercurio y arsénico, llegados hace exactamente un siglo y que por su naturaleza no eran aptas para el sector cosmético. Había que esperar otro medio siglo para llegar a materiales estables y no tóxicos: los pigmentos micáceos (Iriodin).

    Además de los llamados pigmentos nacarados (creados para replicar el efecto natural de la luz que incide sobre las perlas y el nácar), existen otros que otorgan "efectos especiales", como los iridiscentes o los interferentes. Se trata siempre de productos que, en sentido estricto, no pueden emplear el término "pigmento", ya que se obtienen fijando colorantes sobre un inerte, por lo que se pueden definir como "lacas". Sin embargo, utilizaremos el término "pigmento" porque así se conocen comercialmente.

    Gracias a su estabilidad, los pigmentos micáceos (Iriodin) pueden sustituir a las antiguas purpurinas, que tienen el defecto de oxidarse y cambiar de color con el tiempo. Dado que los pigmentos micáceos (Iriodin) están cubiertos con capas de óxido, no están sujetos a oxidación. Son estables hasta 800 °C y resistentes a ácidos, bases, disolventes y radiación ultravioleta.

    En cuanto a la toxicidad, los micáceos cumplen con la legislación más estricta, ya que en cosmética se exigen los más altos estándares de seguridad a los materiales utilizados.

    Desde la década de los 90 han sido protagonistas de un continuo crecimiento, a pesar de que los complejos métodos de síntesis hacen que el coste de estos pigmentos sea muy elevado.

    La gran familia de los micáceos explota un tipo de minerales laminares, basados ​​en una sucesión de planos de sílice (tetraedros SiO4) alternados con cationes metálicos (Fe o Al), denominados micas. Entre las micas, la más utilizada en este campo es la moscovita, de fórmula H2KAl3(SiO4)3, clasificada como pigmento blanco (PW 20, CI 77019), pero

    convenientemente modificada para aumentar su estabilidad y variar el color, dando lugar a diferentes efectos.

    Para trabajar con ellos se pueden emplear todos los aglutinantes, desde la goma arábiga hasta el acrílico, desde el óleo hasta el temple. El resultado óptico final está influenciado por el tipo de ligante, los métodos de aplicación y el color del material subyacente; y también se ve afectado por el tipo de iluminación y el ángulo de visión. Por eso es recomendable que en el momento de hacer el retoque, el aplicador se coloque siempre que sea posible en la posición en la que estará un observador. Al igual que ocurre con el pan de oro extendido sobre varios bolos de colores, la semitransparencia de los pigmentos micáceos hace que cuando se aplica en una capa fina, el color de fondo influye mucho en el efecto final.

     

    Podemos dividir los micáceos en grupos que se diferencian según los tipos de materiales estratificados y, por tanto, los efectos ópticos que se pueden obtener.

    • Pigmentos nacarados_ Inicialmente, la mica muestra una ligera iridiscencia que, sin embargo, se potencia tras un proceso de micronización y posterior recubrimiento con una doble capa de dióxido de titanio (de ahí el nombre de titanato de mica), que le confiere un color plateado o nacarado, potenciado por su dispersión en acrílicos u otros polímeros.
    • Pigmentos iridiscentes_ También conocidos como colores metálicos, fueron creados para imitar el efecto de las purpurinas (bronzing powders), pero sin sufrir la oxidación típica de estos últimos. Las purpurinas, constituidos por finas partículas de bronce, no pueden ser utilizados en medios acrílicos, ya que la alcalinidad de estas dispersiones acelera su degradación. No solo se fija la capa de dióxido de titanio u óxidos de hierro sobre la mica, sino que también se aplica una segunda capa de colorantes transparentes. Esta capa de colorante determina la tonalidad percibida, que puede variar desde tonos dorados, a cobrizos o a de bronce. Son más opacos que los pigmentos nacarados y se pueden mezclar con otros colores acrílicos transparentes para obtener efectos metálicos, no solo en acrílico, sino también en óleo, acuarela y témpera.
    • Pigmentos interferentes_ El espesor de la capa de titanio depositada sobre la mica se puede regular con extrema precisión mediante el desarrollo de nanotecnologías. Y es tal que se crea un fenómeno de interferencia con la radiación luminosa similar al que se produce en una fina capa de aceite esparcido sobre el agua. Por lo tanto, hay un reflejo diferente y colores diferentes, según el ángulo de observación.

     

    En CTS hemos seleccionado unos colores que se pueden mezclar entre sí y también con otros pigmentos para obtener diversas tonalidades. A mayor cantidad de pigmento tradicional, menor efecto metálico obtenido.

      

    Dado su uso en el arte contemporáneo, fue necesario desarrollar métodos analíticos adecuados para su identificación, como en el caso de las obras de 1965-1967 del portugués De Sousa: contenían la tóxica plumbonacrita Pb5(CO3)3O(OH)2, mientras que los trabajos posteriores a 2000 se basaron en el oxicloruro de bismuto menos tóxico, más metálico y brillante, BiOCl. Este estudio [1] ha mostrado indirectamente la evolución de este sector hacia materiales con menor toxicidad.

     

    Bibliografía

    Eva Mariasole Angelin, Sara Babo, Joana Lia Ferreira, Maria João Melo; “Raman microscopy for the identification of pearlescent pigments in acrylic works of art”, Journal of Raman Spectrometry, 2019; 50:232–241.

  • 54.3 NUEVOS PRODUCTOS - LA MÁS PEQUEÑA DE LAS CELULOSAS

    La más pequeña de las celulosas

     

    Las fibras de celulosa siempre se han utilizado no solo para la creación de compresas de limpieza, sino también como rellenos ligeros para la creación de lechadas y morteros. Hasta ahora hemos tenido disponibles tres tipos diferentes: fibras con una longitud de 700 µm (Arbocel BC 1000), 300 µm (Arbocel BC 200) y 200 µm (Arbocel BWW 40).

    Para ayudar a mejorar el trabajo con las mezclas se identificó un material diferente, que es una celulosa muy fina, con una longitud promedio de las fibrillas de solo 8 µm, denominado Micro C8.

    Por lo tanto, esta última incorporación de celulosa se diferencia claramente de las anteriores debido a sus dimensiones más pequeñas en dos órdenes de magnitud, tanto que se considera una microcelulosa. Al igual que los Arbocel, tenemos una alta pureza con un contenido de cenizas inferior al 0,1% y celulosa superior al 99,5%.

    Para este nuevo material hemos identificado dos métodos principales de uso, pero como siempre no descartamos que se puedan desarrollar muchos otros.

     

    • Realización de enlucidos de las lagunas, de pinturas sobre lienzo y madera; o de estatuas de madera. Puede usarse solo o mezclado con otros rellenos, como el tradicional yeso de Bolonia o el carbonato de calcio micronizado. Los aglutinantes que se pueden utilizar son emulsiones acrílicas (como Plextol B 500 o Acril 33), celulosa modificada (como Tylose MH 300 o Klucel G), colas animales (conejo o esturión), funori o Aquazol.
    • Reconstrucción de huecos en productos de papel, empleados ​​solos o mezclados con otras fibras de celulosa de cadena larga, de la serie Arbocel, o ligados con celulosa modificada (como Tylose MH 300 o Klucel G), o funori.

     

    Las composiciones de algunos estucos están reportadas en la literatura, como la utilizada por el Opificio delle Pietre Dure (Arbocel BWW 40 ligada con Plextol B 500 y Klucel G) [1], o las obtenidas a partir de dos estudios realizados en Venaria Reale (Arbocel BWW 40 ligado con Funori y Klucel G) [2], y Paraloid B 72 en acetato de butilo [3]. Fórmulas empleadas como estucos para la reintegración de lagunas y presentes en el mercado como Balsite y Modostuc, habían sido comparadas en el contexto de una tesis en la Universidad de Urbino [4,5], y finalmente se había desarrollado una formulación de Aquazol 200 al 10% en agua y yeso de Bolonia, como alternativa válida, más elástica y trabajable que el estuco tradicional a base de yeso y cola de conejo.

    Con Micro C8 es posible reformular estas mezclas, insertándolo en lugar de Arbocel BWW 40 o yeso, para obtener una mejora en la trabajabilidad dada la reducida longitud de las fibras.

    Por supuesto, como otras celulosas, Micro C8 tampoco es soluble en agua, pero puede absorberla y el pH de su dispersión es neutro.

    La densidad aparente ronda los 200 g/lt, por lo que encontrarás en los envases clásicos CTS de 1,5 lt una cantidad de Micro C8 de 400 g.

     

     

    Bibliografía

     

    1_ C. Toso, L. Orata, C. Mignani; “Intervento strutturale su un dipinto trasportato”, Lorenzo Monaco - S. Giacomo maggiore in trono” in Angeli, Santi e Demoni otto capolavori restaurati per Santa Croce, Ed. Edifir Firenze, 2006, pp.133-143.

    2_ P. Buscaglia, M. Cardinali, T. Cavaleri et al, “Materiali riempitivi per il risarcimento di lacune di manufatti lignei: sperimentazione di tinture e leganti innovativi per cariche cellulosiche”, in Lo Stato dell’Arte XIII, Atti del Congresso Nazionale IGIIC, Firenze, 2015.

    3_ T. Cavaleri, A. Gatti, I. Marelli, E. Appi, S. Bozzato, F. Gastaldelli, N. Sanna, “L’uso della polpa di cellulosa come riempitivo di profondità per il risarcimento delle mancanze di materia lignea: il caso studio di un’inedita copia da Ribeira della collezione Lodovico Pogliaghi di Varese”; in Lo Stato dell’Arte XV, Atti del Congresso Nazionale IGIIC, Bari, 2017, pp. 435 - 444.

    4_ D. De Luca, L. Borgioli, L. Sabatini, V. Viti; “Manufatti dipinti su supporto tessile. La reintegrazione delle lacune: proposta di materiali alternativi”, Kermes 88, Nardini, Ottobre-Dicembre 2012; 42-54

    5_ D. De Luca, L. Borgioli, S. Burattini, S. Orsini, “Manufatti dipinti su supporto tessile: proposte di materiali alternativi per la stuccatura delle lacune. Comportamento all'invecchiamento”, in «Kermes», 90, Nardini, Gennaio-Marzo 2013.

     

  • 53.1 NUEVOS PRODUCTOS - ESTUDIOS DE EFICIENCIA Y ESTABILIDAD - NANO SILO W

    Estudios de eficiencia y estabilidad - Nano Silo W

    Los últimos avances en el sector de la nanotecnología permiten injertar en la superficie de las nanopartículas de sílice (nanosílice), pedazos de moléculas que modifican las propiedades; hablamos de nanosilicatos funcionalizados, que reaccionan con los grupos hidroxilo presentes en las superficies de las piedras formando enlaces covalentes, muy estables.

    Al injertar cadenas de siloxano, se obtienen propiedades hidrofóbicas.

    Para la elección de una sílice funcionalizada, a principios de 2019 se lanzó un estudio preliminar destinado a evaluar cuatro productos del mercado, comparándolos con el clásico agente protector de polimetilsiloxanos en agua, Silo 112, y los resultados se presentaron en el Boletín CTS n°51 (El nano que protege).

    En el transcurso del año 2020 se han realizado otros estudios sobre diferentes tipos de piedras, con un envejecimiento acelerado con el fin de evaluar la eficacia y la estabilidad en el tiempo del Nano Silo W.

     

    Piedra

    (tipo)

    Tipo de envejecimiento

    Laboratorio

    Referencias Bibliográficas

    Sperone

    (tufacea)

    Solar box (1000 horas)

     

    Università della Tuscia

    ENEA

    Università

    La Sapienza

    “Experimental Tests for Evaluating the Stability of a New Nano-silica Based Protective for Sperone Stone in Comparison to Traditional Products”

    Claudia Pelosi, L. Lanteri, G. Agresti, G. Rubino, F. Persia, G. Bonifazi, S. Serranti, G. Capobianco

    Bateig

    (calcarea)

    18 ciclos de lluvia,

    12 de niebla salina,

    12 ciclos hielo/deshielo

    GEA

    Evaluaciòn de un producto hidròfugo y un producto oleofugo de CTS para determinar su eficacia, idoneidad y durabilidad comparada un una litologìa.

    Luis Valdeón Menéndez

    Panchina

    (arenisca)

     

    Hielo/deshielo

    Shock térmico

    Niebla salina

    IEMEST

    “Sperimentazione comparativa di prodotti protettivi nanotecnologici per materiali lapidei naturali”

    Federica Fernandez, Silvia Germinario, Roberta Basile, Roberta Montagno

     

    Estudio de la Università della Tuscia

     Después de la aplicación del Nano Silo W diluido en proporción 1:1 en agua desmineralizada, se determinaron los valores del ángulo de contacto antes y después del envejecimiento acelerado, y la variación de color ΔE en comparación con la muestra sin tratar.

     

     

    Ángulo de contacto

    Absorción capilar a los 10 minutos

    ΔE

     

    Antes

    Después

    Antes

    Después

     

    No tratada

    n.d.

    n.d.

    400

    400

    -

    Nano Silo W 1:1

    142°

    151°

    6.0

    55

    10

     

    La correlación entre ángulo de contacto y absorción capilar no es directa: después del envejecimiento la absorción capilar empeora, aunque se mantiene en un buen nivel, mientras que incluso se mejora el ángulo de contacto. El valor de ΔE ha variado sensiblemente.

    La piedra Sperone es muy degradada e irregular, y se obtienen valores muy dispersos.

    Los autores concluyen “Analizando los datos relativos a la medida del ángulo de contacto después del proceso de envejecimiento, se observa que los agentes protectores retienen eficazmente la gota, dificultando su penetración en la piedra.”

    Estudio GEA (España) 

    Se realizaron pruebas de cribado en 5 piedras de diferente composición y porosidad, con los productos más utilizados en España. Se ha aplicado tanto el Nano Silo W puro como diluido en proporción 1:1 en agua desmineralizada (y en 2 casos menos diluido, 3 partes de producto y 1 parte de agua), y en esta fase de cribado sólo se determinó el ángulo de contacto.

     

    Piedra

    (tipología)

    Porosidad

    Variación de color

    θ después de 20 días; diluido 1:1

    θ después de 20 días; puro

    Caliza: Marés (grainstone/biopelesparita)

    45%

    perceptible

    126°

    (diluido 3:1)

    123°

    Bateig 

    (calcarenita)

    21%

    ligera

    140°

    142°

    Arenisca: Jodhpur Pink (cuarzoarenita).

    13%

    ligera

    101°

    (diluido 3:1)

    91°

    Granito: Merufe (monzogranito)

    2%

    perceptible

    132°

    132°

    Mármol: Piedra de Alconera (caliza marmórea)

    0,15%

    ligera

    114°

    114°

     Las aplicaciones se llevaron a cabo tanto con brocha como con pulverización. Con este último método se pueden ver resultados ligeramente mejores, pero no sustanciales.

     Conclusiones: buen resultado de color, el ángulo de contacto θ es óptimo (bueno para arenisca), y este resultado no tiene correlación con la porosidad de las distintas tipologías. El valor obtenido para la arenisca no está muy lejos del obtenido para la otra piedra arenisca (piedra serena) descrita anteriormente.

     

    Pruebas de envejecimiento acelerado

    Se realizaron más pruebas sobre la piedra denominada Bateig, una calcarenita porosa, aplicando tanto l Nano Silo W puro como diluido 1:1 en agua desmineralizada.

     

    Muestras no envejecidas

    θ (48 h)

    θ (144 h)

    Variación de color

    Permeabilidad

    (NT=163)

    Nano Silo W puro

    139°

    138°

    Ligero

    143°

    Nano Silo W 1:1

    137°

    138°

    Ligerísimo

    163°

     

    Para las muestras no envejecidas se observan valores casi idénticos de θ, variaciones mínimas de color, excelentes resultados en permeabilidad al vapor de agua, que incluso se mantiene inalterada en el caso de la aplicación del producto diluido.

    Estos datos confirman uno de los puntos fuertes de los nanosilicatos funcionalizados, respecto a los siloxanos tradicionales, es decir, la escasa influencia sobre la permeabilidad.

     

    Se llevaron a cabo tres tipos diferentes de envejecimiento acelerado, ciclos de lluvia, ciclos de niebla salina y ciclos de hielo deshielo, al final de los cuales se midió el ángulo de contacto.

    En cambio, la permeabilidad se determinó en las muestras que se sometieron a los tres tipos de envejecimiento acelerado (18 de lluvia, 12 de niebla salina y 12 ciclos de hielo/deshielo).

      

    Muestras envejecidas

    θ (18 ciclos de lluvia)

    θ (12 ciclos de niebla salina)

    θ (12 ciclos hielo/deshielo)

    Permeabilidad después de 3 ciclos*

    (No tratado=163)

    Nano Silo W puro

    130°

    126°

    122°

    141°

    Nano Silo W 1:1

    130°

    96°

    88°

    173°

     

    Como se puede ver en la tabla, los ciclos de lluvia conducen a una ligera reducción de los ángulos de contacto, que también son modificados por los otros ciclos en el producto puro. Para el producto diluido 1:1 la reducción es más significativa, pero no obstante se alcanza un resultado aceptable al final de los 3 ciclos (θ = 88°).

    Incluso el valor de la permeabilidad al final de los 3 ciclos de envejecimiento para el producto puro sigue siendo excelente. Para el producto diluido es incluso más alto que el inicial, probablemente debido a la solubilidad de algunos componentes de la muestra, en consonancia con la reducción del ángulo de contacto.

     

    Estudio IEMEST

    La piedra elegida para este estudio es una arenisca, denominada piedra Panchina, extremadamente absorbente, tanto que es imposible determinar θ (ángulo de contacto) en las muestras sin tratar.

    También, en este caso, se evaluó la aplicación del Nano Silo W puro y diluido en proporción 1:1, obteniendo un ángulo de contacto de 86° para el puro y 86.6° para el diluido, por lo tanto, obteniendo un resultado prácticamente idéntico.

    En base a estos resultados, los ensayos posteriores se realizaron con la aplicación de Nano Silo W diluido en proporción 1:1 en agua desmineralizada. Se determinaron los valores del ángulo de contacto antes y después del envejecimiento acelerado, las curvas de absorción capilar y la variación de color ΔE encontrada con respecto a la muestra sin tratar.

    Las pruebas de envejecimiento fueron hielo/deshielo, shock térmico y niebla salina.

     

    θ

    Absorción capilar a los 10 minutos

     

    Antes

    Después de hielo/ deshielo

    Después de shock térmico

    Después de niebla salina

    Prima

    Dopo

    No tratado

    n.d.

    n.d

    n.d.

    n.d.

    0,35

     

    Nano Silo W 1:1

    82°

    84°

    78°

    70°

    0,14

     

     

    Como se puede observar, los valores θ no cambian mucho (la caída más significativa es después de la niebla salina, como se podía esperar), y a `pesar de la gran absorción del material, la diferencia entre tratado y no tratado sigue siendo considerable.

     

    Conclusiones

    Todos los estudios indican un buen comportamiento del Nano Silo W en todo tipo de piedras, una alteración del color mínima, escasa influencia sobre la permeabilidad y una excelente resistencia al envejecimiento. Se confirma, por tanto, la validez del producto como hidrofugante.

    PRODUCTO:

    NANO SILO W - HIDROFUGANTE A BASE DE NANOPARTÍCULAS DE SÍLICE FUNCIONALIZADA EN AGUA
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/1247-nano-silo-w-hidrofugante-a-base-de-nanoparticulas-de-silice-funcionalizada-en-agua

  • 53.2 NUEVOS PRODUCTOS - EL PLASMA FRÍO CONTRA LOS VIRUS

    El plasma frío contra los virus

    La situación pandémica ha dado un fuerte impulso al desarrollo de nuevos sistemas para el saneamiento de ambientes. Dentro de la confusión general, se han propuesto algunos de dudosa eficiencia e incluso dañinos para las obras de arte y para las personas que deben trabajar en esos ambientes.

    El virus SARS-Covid 19 tiene un tamaño de alrededor de 0,1 micras y los sistemas normales de filtrado no son capaces de retenerlo. Incluso los filtros HEPA (High Efficiency Particulate Air filter) más eficientes pueden retener partículas de hasta 0,3 micras de diámetro y no las más pequeñas.

    Entonces, para la desinfección del aire se han utilizado sistemas físicos como las radiaciones ultravioletas (UV), o químicos como el peróxido de hidrógeno o el ozono.

    El ozono (O3), es un gas presente en la naturaleza producido por la acción de los rayos UV-C sobre el oxígeno (O2), y cuya eficiencia como desinfectante es ampliamente reconocida [1].

    La acción oxidante del ozono ha hecho que durante un siglo se utiliza como agente bactericida, fungicida e inactivante de virus. Los virus son más resistentes que las bacterias y requieren concentraciones más altas de ozono para el saneamiento, muy por encima del límite de seguridad de 0,05 ppm. El ozono no es incapaz de eliminar los virus, pero los inactiva inhibiendo los receptores virales que se utilizan para crear un vínculo con la pared celular a invadir.

    Su concentración, medida cerca del suelo, está comprendida entre 0.005 y 0.05 ppm, siendo este último el límite máximo aceptable para los seres humanos. Exceder este límite aumenta drásticamente el riesgo de desarrollar cánceres de piel y otras patologías. Por esta razón, la desinfección con ozono debe tener lugar sin personas presentes.

    En lo que respecta al sector del patrimonio cultural, tanto los agentes oxidantes, como la radiación ultravioleta UV, el peróxido de hidrógeno o el ozono, pueden dañar todos los materiales orgánicos que componen las obras artísticas, de aglutinantes a barnices, de papel a tejidos o de tintes a pigmentos.

    Por este motivo, en las Directrices ICR – Medidas de contención de la infección por Coronavirus - Verificación de compatibilidad con las necesidades de protección y conservación del patrimonio cultural (publicadas el 8 de Mayo 2020,  http://www.icr.beniculturali.it/pagina.cfm?usz=1&uid=182&idnew=731),expedido por el Ministerio de Patrimonio Cultural, está expresamente prohibido el uso de tales sistemas en la desinfección de ambientes museísticos (en particular “Debe evitarse el uso de ozono, que a pesar de la comprobada capacidad virucida tiene un fuerte poder oxidante capaz de causar daños a muchos materiales, como corrosión de metales o alteración de macromoléculas biológicas incluyendo aminoácidos y lípidos ”[2]) y de los laboratorios de restauración.

    En las mismas Directrices se señalan a las soluciones hidroalcohólicas con un mínimo del 70% de alcohol e los desinfectantes que contengan sales de amonio cuaternario como soluciones válidas para higienizar superficies, pero no para su vaporización en el ambiente.

    Entonces, ¿cuál es la solución viable para la desinfección del aire en el lugar de trabajo?

    La nueva tecnología de plasma frío viene en nuestra ayuda.

    ¿Qué es el plasma frío?

    Si recordamos lo que nos ha enseñado la ciencia sobre los estados de la materia, nos vendrán a la mente tres términos: sólido, líquido y gaseoso. También podemos recordar que un sólido calentado pasa (a menudo) a un estado líquido y con un suministro adicional de energía térmica, a un estado gaseoso. Ahora debemos agregar a nuestro conocimiento un cuarto estado, raramente descrito a pesar de ser el más abundante cuantitativamente en el universo: el plasma. Desde el punto de vista energético se encuentra a un nivel incluso superior al del gas, porque parte de las partículas que lo componen no son eléctricamente neutras, sino que tienen carga positiva o negativa. En conjunto, las cargas positivas y negativas alcanzan la neutralidad.

     

        SOLIDO           LIQUIDO                GAS                          PLASMA

    El plasma se obtiene ionizando parte de los átomos o de las moléculas que componen el gas de partida. Esto es posible tanto por simple calentamiento (plasma caliente, el que compone, por ejemplo, el sol), como por suministro de electricidad (como el contenido en los tubos de neón). Es este segundo caso (plasma frío) el que nos interesa por sus aplicaciones en saneamiento de ambientes. El hecho de que las partículas estén ionizadas hace que el plasma sea reactivo ya que nos encontramos en presencia de especies inestables, que tenderán a estabilizarse al reaccionar con la materia circundante. En particular, reduciremos la cuestión a la ionización producida por un campo eléctrico a través de los componentes presentes en el aire del ambiente, constituido principalmente por una mezcla de oxígeno y nitrógeno. Parte del oxígeno y del nitrógeno se ionizarán pudiendo inactivar bacterias y virus como se ha demostrado en numerosos estudios desarrollados en los últimos 30 años.

    A diferencia del ozono que tiene una violenta acción oxidante, como hemos visto, que impide su uso en las proximidades tanto de obras de arte como de los seres humanos, el plasma frío no tiene interacciones que limiten su uso, por lo que se propone como el mejor sistema para el saneamiento en el ámbito de la conservación del patrimonio cultural.

    Como prueba de ello, una nueva línea de investigación está dirigida a la aplicación de un flujo de plasma frío concentrado en un “bolígrafo” (también llamado plasma atmosférico), para la limpieza de superficies sensibles que no pueden ser tratadas con láseres pero que tienen la necesidad de ser tratados de forma gradual [3].

     

    Lucha contra las bacterias y virus antes y después del Covid-19

    Como hemos mencionado, el plasma ha sido probado durante más de 30 años como un sistema que inhibe la acción de bacterias y virus [4]. Una rica bibliografía describe los efectos sobre el norovirus, el adenovirus y el virus de la hepatitis [5]. Por supuesto, todavía no hay estudios realizados sobre el Covid-19, y por eso nos estamos orientando en base a los resultados positivos obtenidos en virus respiratorios, como los de la gripe y el SARS.

    Los diversos estudios coinciden en que la inactividad de virus se debe a la formación de iones inestables y de muy corta vida: oxígeno reactivo (reactiveoxygenspecies, ROS) y nitrógeno reactivo (reactivenitrogenspecies, RNS), mientras que los sistemas físicos basados en radiación UV o sobre los efectos térmicos tienen poco o ningún efecto. Con la ionización del aire obtenida a través de campos eléctricos, por lo tanto, con la producción de plasma frío, se forman las especies reactivas antes mencionadas. Éste fenómeno también existe en la naturaleza y conduce a la purificación del aire (percibimos el efecto, por ejemplo, al final de una tormenta).

    Los mecanismos por los que el plasma frío actúa sobre los microorganismos se resumen en la siguiente tabla [6]:

    Constituyente del microorganismo

    Acción del plasma

    Efectos sobre los microorganismos

    Superficie de la célula

    Bombardeo de radicales

    Efecto “incisión”

    Provoca lesiones irreparables en la superficie de los microorganismos.

    Destruye las esporas.

    Membrana de la célula

    Induce la perforación y aumenta la permeabilidad de la membrana.

    Perforación de la membrana celular y otros daños.

    ADN

    Ruptura entre las proteínas de membrana y el ADN

    Aumenta la liberación de ADN.

    Hidrólisis parcial de ADN

    Proteínas

    Oxidación

    Ataque del sistema enzimático

     

    Entonces la acción del plasma se expresa no solo sobre virus sino también sobre bacterias y mohos, otros patógenos que normalmente circulan en el aire.

    En conclusión, los equipos basados en esta tecnología permiten un correcto saneamiento, siempre y cuando también se cancele la emisión de ozono, que siempre se forma en el momento de la formación del plasma. Por esta razón, los equipos Q3 y Q7, comercializados por CTS, están equipados con un sistema que elimina el ozono en la salida y están certificados para una liberación máxima de ozono de 0,05 ppm (de las pruebas de la agencia de certificación TUVRheinland incluso inferiores a 0,01 ppm).

     

    A la hora de elegir el dispositivo más funcional para sus necesidades, es fundamental evaluar el volumen del ambiente a desinfectar y la capacidad del dispositivo. Q3 tiene un caudal de 350 m3/h, lo que significa que para una habitación de 5x5 m y altura 3 m, es decir 75 m3, habrá un cambio completo de aire cada 15 minutos aproximadamente. El Q7 tiene más del doble de caudal (800 m3/h).

    No menos importante para una valoración correcta es el impacto del mantenimiento: algunos equipos requieren un cambio de filtros semestral, lo que tiene un impacto significativo sobre los costos operativos. Los filtros de los Q3/Q7 tienen una vida útil mucho más larga y la celda donde se genera el plasma se puede limpiar con un simple paño, sin costo adicional.

    Resumiendo, los desinfectantes Q3 y Q7 (Link: https://www.ctseurope.com/dettaglio-news.php?id=459#) pueden crear un ambiente saludable al reducir, con una eficacia superior al 99%:

    •                virus, bacterias y mohos;
    •                polvos finos (PM2,5);
    •                sustancias orgánicas volátiles (COV);
    •                formaldehídos.

     

    Referencias

    1)         Prot. n. 24482 del 31 de julio de 1996 del Ministerio de Salud Italiano “protección natural para la esterilización de ambientes contaminados de bacterias, virus, esporas, etc.” y “agentes desinfectantes y control de plagas en el tratamiento de aire y agua” con CNSA del 27 de octubre de 2010.

    2)         Publicado el 29/5/2020 http://www.icr.beniculturali.it/pagina.cfm?usz=1&uid=182&idnew=738

    3)         A customisedatmospheric pressure plasma jet for conservationrequirements, A. Patelli, E. Verga, L. Nodari, S. M. Petrillo, A. Delva, P. Ugo, P. Scopece; 2018 IOP Conf. Ser.: Mater. Sci. Eng. 364.

    4)         Kelly-Wintenberg, K. et al; Use of a oneatmosphereuniformglowdischarge plasma to kill a broadspectrum of microorganisms. J. Vac. Sci. Technol. A 17, (1999) 1539–1544.

    5)         Filipic A. et al.; Cold Plasma, a new hope in the field of virusesinactivation, Trends in Biotechnology, November 2020, Vol.38, n.11, 1278-1291.

    6)         Tratta da Kwong et al.; “Potential Applications of Non-thermal Plasma in AnimalHusbandry to ImproveInfrastructure”, In vivo 33 (2019) 999-1010.

  • 53.3 NUEVOS PRODUCTOS - UNA INYECCIÓN DE ESTABILIDAD

    Una inyección de estabilidad

     

    Después de un largo periodo de evaluación, presentamos los nuevos cartuchos de inyección a base de resina viniléster, el INYECTO VE PRO, que acompaña a las históricas resinas epoxídicas EPO 150 y EPO 121, utilizadas desde los años 80 para la fijación de cualquier material de construcción, desde la piedra al ladrillo, de hormigón a yeso.

    Muchas veces, en las operaciones de restauración, la simple inyección de mortero en las zonas de desprendimiento no da suficiente garantía de enganche en el tiempo. Es necesario recurrir a “clavos” de apoyo, con la inserción de barras de fibra de vidrio y su fijación con resinas bicomponentes, las epoxídicas de la línea EPO y, desde ahora, con INJECTO VE PRO.

    Naturalmente, INJECTO VE PRO se puede utilizar no solo para fijar barras de fibra de vidrio, sino también tacos, conectores, barras de acero liso o corrugado, varillas de refuerzo, anclajes y tirantes, a cualquier material de construcción: ladrillos macizos o huecos, bloques huecos, hormigón y piedra; además, es posible realizar instalaciones eléctricas e hidráulicas, aplicaciones de carpintería metálica, montaje de ventanas, placas y estanterías.

    Para estas operaciones los cartuchos de INYECTO VE PRO presentan una serie de ventajas prácticas.

    •   En primer lugar, la simplicidad de uso: la cánula permite extruir la resina y el catalizador ya mezclados y en la proporción de peso correcta. Su mezcla se realiza fuera del cartucho mediante un mezclador estático en el momento de la extrusión. Gracias a esta mezcla externa es posible la utilización parcial del cartucho incluso en diferentes momentos, simplemente reemplazando la cánula mezcladora. Por lo tanto, no es necesario utilizar balanzas, recipientes para mezclar ni trasferir a jeringas desechables.
    •   Control visual del correcto mezclado: resina y catalizador tienen dos colores diferentes: tras la extrusión de los primeros 10 ml de producto, se obtiene un material de color uniforme que confirma una completa homogeneidad y por tanto un agarre óptimo.
    •   Permite la fijación incluso sobre material húmedo (pero no mojado), lo cual es imposible con resinas poliéster.
    •   INYECTO VE PRO se puede aplicar a bajas temperaturas, ya que la temperatura del producto para su aplicación debe estar entre 5 y 35 °C, mientras que la del sustrato puede incluso estar por debajo de los 0° C. Las resinas epoxídicas, cuando las temperaturas caen por debajo de los 10°C, pueden dar problemas de catálisis.
    •   Rápida ejecución: la velocidad de endurecimiento es similar a la de las resinas poliéster (menos de 10 minutos a temperaturas no muy bajas), mientras las resinas epoxídicas requieren de algunas horas para fraguar. Hay que tener en cuenta que, como ocurre con otras resinas, la reactividad del producto aumenta con la temperatura. Entonces, si la temperatura supera los 20° C, el tiempo de trabajo desciende a 4 minutos.

     

    INYECTO VE PRO, por tanto, permite una sencilla y excelente fijación de las barras de fibra de vidrio lisas, pero se aconseja, si se requiere una alta resistencia a la tracción, el uso de barras corrugadas. Las resistencias mecánicas que pueden obtenerse con los distintos diámetros de barras y las respectivas profundidades de los orificios se describen en la ficha técnica.

    La estabilidad en el tiempo está asegurada no solo en materiales húmedos, sino también en presencia de sustancias químicas inorgánicas (ácidos y bases) y disolventes. 

     

    Una nota final de seguridad: mientras las resinas poliéster expelen vapores de estireno, reconocido como carcinógeno desde 2011, este no está presente en el INYECTO VE PRO. Sin embargo, las resinas viniléster pueden causar irritación, por lo que deben seguirse las precauciones habituales para evitar el contacto con la piel y las salpicaduras en los ojos.

     

     

    PRODUCTO:

    INYECTO VE PRO
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/1256-injecto-ve-pro-anclaje-quimico

  • 52.1 NUEVOS PRODUCTOS - LA GOMA DAMMAR SE INCLUYE EN LA FAMILIA REGAL

    La goma dammar se incluye en la familia Regal

    La innovación más importante en el campo de los barnices en el siglo XIX fue la introducción de una resina proveniente del Lejano Oriente, el dammar, o damar, o de mar, o thamar o, como informan algunos textos italianos, dammara.

    Durante aproximadamente un siglo, hasta la llegada de las resinas sintéticas, la goma dammar ha compartido con la goma mastic el papel de barniz final para pinturas en lienzo y tabla; ambas tenían partidarios y detractores y aún no se ha escrito la última palabra sobre el asunto.

    Ciertamente, la goma mastic tenía su propia historia milenaria y, dado que su origen está en la isla griega de Chios, cuenta con un amplio conocimiento en Europa. La goma dammar tuvo que pagar por su llegada más reciente. De hecho, tenemos que remontarnos al “barniz crystal” de Winsor & Newton de mediados del siglo XIX para encontrarla en el mercado lista para su uso. Tenemos noticias de su llegada a Alemania ya en 1827 [1], y se menciona en algunos manuales publicados después de 1850, como el famoso “Manual del pintor restaurador” de Ulisse Forni, de 1866 [2], donde la goma dammar se introduce con estas palabras: “una resina que salió al mercado hace poco tiempo”.

    Tendremos que esperar hasta el cambio de siglo para alcanzar una amplia difusión en el mercado. 

    Características

    De las incisiones realizadas en los troncos de los árboles de las plantas de la familia Dipterocarpacee, típicas de la zona de Indonesia-Malasia-Siam, exuda la resina, que se cosecha a mano, se seca y se vende en trozos de color ligeramente ámbar.

    Por ello está sujeto, como todos los materiales de origen natural, a ligeras variaciones cualitativas en función de la zona de producción, del método de recolección, de las condiciones climáticas de la recogida, etc. Y por tanto, es normal encontrar restos de madera que se han incorporado al exudado junto con la resina.

    Su composición es variable, pero podemos definir algunos parámetros constantes, como la cantidad de ácidos resínicos, como el ácido dammarólico, que en su conjunto rondan el 23%, de resinas que pueden superar el 50%, y de ceras aproximadamente 15%. Las resinas a su vez se pueden dividir según su solubilidad en alcohol: las alfa-resinas son solubles y los beta-resinas (que contienen triterpenos característicos como el dammaran) no lo son.

    Como demuestra De la Rie [2] se puede estabilizar añadiendo un 3% (sobre el peso de la resina) de Tinuvin 292, lo que disminuirá su amarilleamiento y aumentará su reversibilidad, pero haciéndolo más blando y con más facilidad a la absorción polvo en climas más cálidos. Su estabilización también se puede conseguir mediante la aplicación de una capa final de un barniz más estable, como el de Regal Varnish [3]. El estudio realizado por Verónica Marchiafava para su tesis de maestría, entre 2009 y 2010, en los laboratorios del CNR-IFAC, bajo la supervisión de Marcello Picollo, demostró cómo una aplicación de barniz dammar expuesta a una lámpara de museo (proveniente de Uffizi), sufre una coloración amarillenta desde las primeras semanas, inicialmente detectable solo por un colorímetro y después de un año también a simple vista.

    Este amarilleo no se produce si aplicamos una mano de Regal Varnish Gloss, estabilizado con Tinuvin 292, sobre la capa de dammar, como se puede observar fácilmente en la comparativa del final. Las barras indican la intensidad de la variación de color, por lo que las señales más bajas están asociadas con resinas sintéticas estables. Los colores de las barras se refieren a los diferentes intervalos de envejecimiento.

    Posible identificar tres grupos de barnices a base de dammar (Grupo 1, Dammar Lefranc, Grupo 4, Blanc Mat Lefranc, con una cantidad preponderante de cera de abejas, y Grupo 7, una mezcla de las dos). Destacan las alteraciones de color del primer y séptimo grupo, mientras que el cuarto, donde el pequeño porcentaje de dammar está protegido por la cera, no cambia significativamente. Estos resultados dan fe de la sensibilidad del dammar a la luz, incluso leve.

    Pero el dato más interesante es el efecto protector de Regal Varnish Gloss cuando se aplica sobre una primera capa de dammar: los recubrimientos estratificados, es decir, los grupos 2 y 5, se estabilizan si los comparamos con el dammar solo (grupos 1 y 7), confirmando el efecto de pantalla del Regal.

     

    Regal Dammar Varnish

    Hoy nos complace presentar el nuevo barniz de la línea Regal Varnish, producido con una goma dammar transparente de origen indonesio y de calidad A, la más alta, con una sequedad de alrededor del 40% y como disolvente una mezcla de esencia de petróleo desaromatizada y alcohol isopropilo.

    El componente ceroso contenido de forma natural en el dammar (alrededor del 15%), puede precipitar en frío, debido a la presencia de alcohol, pero se resolubiliza con el calor.

    Al igual que los barnices de goma mastic, el dammar también es sensible a los valores termohigrométricos ambientales, por lo que no se recomienda aplicarlo en días particularmente húmedos.

     

    Cabría preguntarse por qué, después de promocionar barnices basados en las resinas sintéticas Regalrez y Laropal, famosas por su resistencia al amarilleo; CTS decidió producir un barniz a base de una resina natural notoriamente sujeta a un amarilleo lento pero inexorable en el tiempo.

    La respuesta está precisamente en el principio enunciado en el transcurso de decenas de reuniones técnicas y, actualmente, en los webinars: ningún producto debe ser descartado en principio, debemos conocer fortalezas y debilidades para aprovechar al máximo todos los materiales.

    ¿Y cuál es el punto fuerte del dammar? Es un barniz que se conoce desde hace casi dos siglos, se ha analizado a fondo y actualmente conocemos perfectamente su comportamiento en el tiempo, lo que acredita su perfecta reversibilidad en todas las condiciones ambientales posibles.

    En conclusión, si desea usar barnices que permanezcan incoloros con el tiempo, es mejor optar por Regal Varnish Gloss o Mat o Regal Retouching, pero para los fanáticos de los materiales tradicionales pueden usar las precauciones descritas anteriormente (agregar Tinuvin 292 o repintar con un Regal Barniz), para seguir usando el clásico dammar.

     

     

     Variación colorimétrica - Barnices

     

    PRODUCTO:

    REGAL SPRAY VARNISH RETOQUE
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/500-barnices-para-retoque-art-regal-retouching-varnish

    Bibliografía

    1. Lance Mayer, Gay Myers; “A note on the early use of dammar varnish”, Studies in Conservation, 47 (2002) 134-138.
    2. Ulisse Forni, Manuale del pittore restauratore, a cura di Giorgio Bonsanti e Marco Ciatti, Edifir 2004 (ristampa critica dell’originale edizione Le Monnier del 1866).
    3. E.R. De La Rie e C.W. McGlinchey, “The Effect of a Hindered Amine Light Stabilizer on the Aging of Dammar and Mastic Varnish in an Environment Free of Ultraviolet Light”, in Cleaning, Retouching and Coatings, 1990, 160-164.
    4. Veronica Marchiafava, “Caratterizzazione mediante tecniche colorimetriche e spettroscopiche di resine naturali e sintetiche impiegate come vernici di superfici pittoriche”, Tesi di Laurea Specialistica in Scienze per i Beni Culturali, Anno Accademico 2009-2010.
  • 51.1 NUEVOS PRODUCTOS - ¡LLEGA EL NUEVO FILM!

    ¡Llega el nuevo film!

     

    El nuevo adhesivo EVA en film al fin está disponible, estudiado y producido por C.T.S. srl.

    El nuevo EVA FILM 65 es un adhesivo en forma de film seco, de 65 micras de espesor, creado para forraciones de pinturas sobre lienzo, pero que también se puede utilizar en cualquier otro sector donde se debe evitar la presencia de disolventes en las operaciones de adhesión.

    El film está compuesto por una mezcla de resinas etilenvinilacetáticas, urea-aldheídicas y cera microcristalina, materiales que son extremadamente resistentes al amarilleo y a la reticulación. Por estas características, el adhesivo es reversible incluso después de décadas. La reversibilidad se logra mediante disolventes polares o calor.

     Con EVA FILM 65 satisfacemos las demandas de estabilidad y, en particular, el problema de la aparición de amarillamiento encontrados en el pasado. Come se sabe, la salida del mercado de la resina cetónica Laropal K80 había llevado a la modificación de una serie de formulaciones que la usaban, sola o en combinación con otras resinas, como en el caso de la Beva 371. La única resina cetónica alternativa era inicialmente amarilla y tratando de mantener inalteradas las propiedades de adhesión de la mezcla, la Beva 371 se formuló con un ligero color pajizo.

    A partir de 2017 esta resina cetónica se sustituyó por una resina de urea-aldehído perfectamente transparente y, por lo tanto, actualmente la Beva 371 es incoloro nuevamente. El nuevo EVA FILM 65 también se basa en esta resina de urea-aldehído que se agrega a la clásica etilenvinilacetato y a la parafina.

    Por medio de laminadores especiales, la mezcla de adhesivo se extruye sobre un film de soporte (poliéster monosiliconado de 37 micras), que a su vez se acopla a una segunda capa de protección (poliéster monosiliconado de 23 micras). Se obtiene así un sándwich perfectamente transparente que facilita el posicionamiento y la conformación.

     

    Como en el caso de otros clásicos adhesivos en film, es necesario seguir algunas reglas sencillas para obtener una adhesión óptima.

    • Una vez que se ha identificado y cortado con precisión el área necesaria, se debe quitar la lámina de protección de poliéster; la capa de EVA FILM 65 permanece unida al otro film poliéster de soporte (el lado con el adhesivo es suave al tacto y parece ligeramente opaco).
    • Se coloca EVA FILM 65 en la tela de forración (o cualquier otro material elegido), y se aplica calor y presión para transferir el adhesivo, de dos formas:
    1. con una mesa caliente y de baja presión, la temperatura se lleva a aproximadamente 65°C y luego se deja enfriar mientras se ejercen una ligera presión sobre el film, con el vacío o con cualquier otro sistema.
    2. con una plancha, verifique primero que la temperatura de la placa esté en torno a los 65°C, planche e inmediatamente ejerza presión hasta que se enfríe por completo.
    • En este punto, se retira el film poliéster de respaldo. La película de adhesivo permanecerá en la tela de forración, y después puede continuar con el revestimiento.
    • La capa de EVA FILM 65 se puede activar, es decir, se vuelve nuevamente adhesiva, siempre con alguna de estas tres formas: disolventes, calor o con su acción combinada.
    1. Los disolventes que puedes usarse son muchos, desde los polares como la acetona y los acetatos, a los aromáticos, hasta los hidrocarburos como el ciclohexano o white spirit. Se pulverizan o se distribuyen con un pincel sobre la superficie del film, y se verifica manualmente la activación. Los tiempos varían según el disolvente.
    2. El adhesivo se vuelve pegajoso a la temperatura de 65°C, ya que se supera el punto de fusión de la cera y las temperaturas de reblandecimiento de algunos de los componentes poliméricos. Para la reactivación del film solo con calor, no es necesario el uso de disolventes y, por lo tanto, no se generan vapores peligrosos para el restaurador. Además, este procedimiento permite conseguir la adhesión de productos sensibles a disolventes y elimina cualquier riesgo de formación de manchas u otros fenómenos de difusión.
    3. Finalmente, EVA FILM 65 se puede reactivar con una temperatura inferior a 65°C, con la acción combinada de disolventes y calor. Después de transferir la película a la tela de forración elegida, se pulveriza sobre la superficie un disolvente con baja velocidad de evaporación como el White Spirit; pasados unos minutos la película se volverá pegajosa como un adhesivo de contacto y entonces se puede usar a aproximadamente 45°C. Después de enfriar y de la evaporación del disolvente pulverizado, se obtendrá una fuerte unión entre los materiales. En este caso, es necesario trabajar con una aplicación mínima de presión, ya que la presencia simultánea de disolvente y calor podría hacer que la capa pictórica se reblandezca corriendo el riesgo de deformarse (que se aplaste).

     

    ¡Importante! Si la temperatura aplicada es superior a los 70°C, además del posible daño a la capa pictórica, existe el riesgo de que el adhesivo se haga excesivamente líquido haciendo que penetre dentro del lienzo, llegando a la capa pictórica, con la consiguiente alteración del esquema de color original. Por lo tanto se recomienda utilizar un termómetro infrarrojo (tipo Mod.652) si no se dispone de una mesa de calor/baja presión. No es inusual que con las planchas se alcancen los 90°C, causando un “efecto plastificado” que en el pasado se atribuyó al producto y no a la inexperiencia del operario, tal vez más acostumbrado a trabajar con pegamentos de pasta tradicionales…

     

    • En general, con el aumento de la temperatura aumenta la fuerza de adhesión.
    • El enfriamiento (o en el caso de que se trabaje en frío con la reactivación con disolvente, el completo secado), siempre debe realizarse bajo presión. Si se elimina la presión con el adhesivo aún tibio o con presencia de disolvente, las dos telas se pueden despegar o se pueden formar burbujas; en este caso repita la operación correctamente.
    • EVA FILM 65 tiene una altura de 1mt; si fuesen necesarias dimensiones mayores se pueden poner una pieza de EVA FILM 65 al lado de otra, uniéndolas con cinta adhesiva puesta encima del soporte de poliéster. Una vez transferido el film adhesivo al soporte a adherir, éste quedará de forma homogénea, sin discontinuidades entre las uniones.
    • En caso de que quiera hacer una forración transparente, utilice EVA FILM 65 y tela poliéster Origam o Velo de Lyon.
    • Se pueden usar varios disolventes para eliminar restos de EVA FILM 65 delos revestimientos donde se ha usado, desde la acetona hasta aquellos apolares como white spirit, ligroina y ciclohexano. Se recomienda realizar pruebas previas para concretar que disolvente es el más conveniente para no causar daños a la capa pictórica. Los disolventes hinchan el adhesivo haciéndolo fácilmente eliminable sin contaminar ni manchar el material absorbente. Si no se quiere utilizar disolventes, puede proceder a la eliminación calentando a 55-60°C.

    PRODUCTO:

    EVA FILM 65
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/1176-eva-film-65

  • 51.2 NUEVOS PRODUCTOS - EL NANO QUE PROTEGE

    Nos estamos acostumbrando a los materiales nanotecnológicos aplicados a la restauración: el Nanorestore introducido en 2008, el Nano Estel dos años después. Sin embargo éstos son consolidantes que prácticamente no tienen ningún efecto hidrófugo.

    Gracias a los últimos avances en el sector de la nanotecnología, es posible injertar en la superficie del nanosílice fragmentos de moléculas que modifiquen sus propiedades; hablamos de nanosílice funcionalizado. Por ejemplo, al injertar cadenas alquílicas o siloxánicas se obtienen propiedades hidrofóbicas, mientras que con la inserción de cadenas fluoradas el efecto no será solo hidrofóbico, sino también óleo-repelente.

     

    Recordemos que el nanosílice es una partícula de dióxido de silicio (SiO2), de forma esférica y con un diámetro entre 5 y 100 nm. Es importante saber que existen decenas de tipos de nanosílice, con diferentes tamaños y distribución de las partículas, métodos de estabilización y la presencia de varios tipos de aditivos. Pero solo unas pocas de estas partículas han dado resultados apreciables en el sector de la restauración.

    Dependiendo de cómo se produzcan las nanopartículas de sílice, siempre en forma de dispersión acuosa, pueden ser:

    • Monodispersas (con una distribución dimensional de las partículas más estrecha/homogénea).
    • Polidispersas (con una más amplia distribución dimensional).

    Una vez que las partículas de nanosílice han penetrado en los poros de un material, y evaporado el agua, reaccionan tanto con los grupos hidroxilo presentes en las superficies de la piedra como con los que hay en el interior, formando polímeros de sílice, de forma similar a lo que sucede con el consolidante más conocido y más utilizado, el silicato de etilo.

    Después de todo, es precisamente a partir del silicato de etilo que comenzamos a obtener el nanosílice, a través de los clásicos pasos de hidrólisis y policondensación, en un proceso denominado sol-gel.

     

    Para aquellos que deseen profundizar en el tema, recomendamos leer los siguientes artículos del Boletín CTS:

    - Un consolidante atípico: Nano Estel (art. 27.1)

    Nano Estel y sus propiedades aglutinantes (art. 31.3)

    Nano Estel: seguimos investigando  (art. 41.1)

     

    Para la elección de una sílice funcionalizada, se lanzó un estudio preliminar destinado a evaluar cuatro productos presentes en el mercado comparándolos con el clásico siloxano disperso en agua: Silo 112, y se trataron dos tipos diferentes de piedra, una arenisca (piedra serena) y una piedra caliza. Inmediatamente después de la aplicación todos los productos dieron altos ángulos de contacto (>110°) y una absorción de agua reducida (0,15 en el caso de piedra caliza y 0,35 para la arenisca). Las muestras fueron expuestas durante 4 meses a la intemperie, lluvia y radiación solar directa con el fin de evaluar la resistencia. Los resultados obtenidos al final del corto periodo de envejecimiento natural, y resumimos en la tabla 1, muestras para algunos productos una disminución de la eficiencia de la protección, que se ha mantenido sin cambios en otros.

    Al finalizar del envejecimiento, los valores de color de todos los productos entran perfectamente dentro de los límites de aceptabilidad (ΔE <3), con los peores datos colorimétricos relacionados con el siloxano al agua, que sin embargo mantiene excelentes resultados tanto en absorción capilar, como en ángulo di contacto.

     

    Calcáreas

    Areniscas

     

    Wa

    Ángulo de contacto

    ΔE

    Wa

    Ángulo de contacto

    ΔE

    Sin tratar

    0,253

    22°

    -

    0,556

    11°

    -

    Silo 112

    0,152

    136°

    2,66

    0,354

    125°

    2,50

    Producto 1

    0,202

    142°

    0,23

    0,505

    131°

    0,50

    Producto 2

    0,337

    148°

    1,56

    0,556

    40°

    0,97

    Producto 3

    0,152

    58°

    1,15

    0,556

    83°

    1,04

    Producto 4

    0,152

    115°

    1,90

    0,354

    110°

    1,34

    Tabla 1. Medidas de la absorción capilar, del ángulo de contacto y de la variación cromática de las muestras de piedra caliza y areniscas después de 4 meses de exposición a la intemperie.

     

    Es interesante observar que el Producto 1, aplicado en la arenisca ha perdido casi por completo la eficacia según la evaluación por absorción capilar, pero conserva un alto ángulo de contacto (131°). Similares resultados en piedra caliza: los productos 1 y 2 pierden la eficacia según la absorción capilar, que es el parámetro fundamental para la evaluación de un hidrofugante, al tiempo que proporciona los mejores resultados en términos de ángulo de contacto (142° y 148°). Podemos concluir que la evaluación del ángulo di contacto por sí sola, no solo es insuficiente, sino que incluso puede llevar a conclusiones erróneas.

    El producto 4, a pesar de una caída en el valor del ángulo de contacto (fig.2 y fig.4) fue el producto que mantuvo los niveles más bajos de absorción de agua, con variaciones cromáticas imperceptibles a simple vista (ΔE<2), y fue seleccionado como mejor producto, y actualmente es distribuido con el nombre Nano Silo W.

    Actualmente se están realizando pruebas adicionales para evaluar su eficiencia en otras tipologías de piedra y la resistencia a los ciclos de cristalización salina.

    Se está realizando otras pruebas en productos con propiedades oleofóbicas, que podrán ser útiles tanto como antipintadas como recubrimientos protectores a prueba de manchas para pavimentos.

     

     Figura 1_ Ángulo de contacto en calcitas no tratadas

     

    Imagen 2_1.png 

    Figura 2_ Ángulo de contacto en calcitas tratadas con Nano Silo W

     

     

    Figura 3_ Ángulo de contacto en areniscas no tratadas

      

     

    Figura 4_ Ángulo de contacto en areniscas tratadas con Nano Silo W

    PRODUCTO:

    NANO SILO W
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/1247-nano-silo-w

  • 51.3 MÁS INFORMACIÓN - ¿POLÍMEROS PARA EL ARTE CONTEMPORÁNEO?

    ¿Polímeros para el arte contemporáneo?

     El tiempo parece pasar más rápido para las obras de arte creadas en el último siglo. Para respaldar esta tesis, ponemos como ejemplo las restauraciones de obras realizadas unas décadas antes, cosa que demuestra que esto es un hecho. Sin embargo no olvidemos que el propio Leonardo intervino en la restauración de su Última Cena, y sabemos por qué… Podríamos entonces vincular las intervenciones próximas al arte contemporáneo con una palabra: experimentación.

    Experimentación de los artistas, que cada vez más utilizan materiales inusuales, de hecho, hacen de la búsqueda de lo inusual su modalidad expresiva.

    Experimentación de los productores de los productos para la producción artística, que a menudo han puesto en el mercado, materiales “frágiles”, desde pigmentos que sufrieron alteraciones hasta aglomerantes inestables. Y en los materiales poliméricos utilizados como aglutinantes nos detenemos ahora.

    En el imaginario colectivo el uso de los polímeros sintéticos en el arte se remonta a los años 60, y el término “acrílico” ha resumido todas las clases químicas de los aglutinantes sintéticos. La realidad ha sido muy diferente, y es necesario aclarar las fechas.

    Los polímeros vinílicos se extendieron en Alemania a partir de 1925, con la marca Mowilith, y los acrílicos llegaron unos años más tarde, con varias marcas como Rohm y Haas. Por supuesto, inicialmente solo tuvieron un uso industrial y para las primeras líneas de colores para la producción artística debemos esperar hasta 1947 con Magna a base de disolvente y   Liquitex y Politec a base de agua (1955), todos ellos basados en polímeros acrílicos. México y Estados Unidos fueron el epicentro de esta revolución sintética. Por esta razón, en los catálogos y en las tiendas de bellas artes de todo el mundo esta nueva clase se ha identificado desde la década de los 60 como “colores acrílicos”. Cuando aparecieron las líneas basadas en dispersiones vinílicas, como Flashe de Lefranc & Bourgeois (1954), o en Italia Versil de Maimeri (1969), se incluyeron en el capítulo de “colores acrílicos”, e incluso se etiquetaron como tales: el término “acrílico” se ha convertido en sinónimo de “sintético”. Esta confusión semántica es la base de la identificación incorrecta de la técnica de ejecución de muchas obras, especialmente en Europa, donde los colores vinílicos están muy extendidos: las pinturas realizadas con dispersiones vinílicas fueron descritas como “acrílicas” por los propios artistas, quienes fueron engañados por las etiquetas, pero esta inexactitud no puede atribuirse a ellos, si no al enfoque comercial que había originado este malentendido.

    Como se puede ver, las cosas no son para nada sencillas y la confusión ha aumentado con la proliferación de empresas productoras y con su negativa a declarar el tipo de aglutinantes utilizados.

    Otro factor de incertidumbre ha sido la multitud de materiales disponibles: se han utilizado por ejemplo resinas de estireno-butadieno, acro-vinílicas, es decir, copolímeros que contienen monómeros acrílicos y vinílicos, o vinil-recubierto, vinilo plastificado internamente, es decir, suavizado por la presencia de cadenas laterales flexibles.

    Solo unos pocos fabricantes se han orientado a las resinas alquídicas, más similares a los colores al óleo pero de secado más rápido: los ingleses Winsor & Newton, que después de abrir el mercado con los Artists’ Alkyd Colours, los reemplazaron por los Griffin, aparecidos en 1976, seguidos por el italiano Ferrario, con los Alkyd, en 1992, y finalmente, en 2010, la americana Gamblin, con su reciente línea Gamblin FastMatte Alkyd Oil Colors.

     Antes de proceder a una restauración de obras con aglutinantes poliméricos, será necesario comprender cuál es la composición de la obra sobre la que vamos a trabajar, un paso que requiere un estudio mucho más necesario que el enfoque que se hace en las obras al óleo clásicas de los siglos XVII o XVIII, las cuales rara vez presentan anomalías en la técnica ejecutiva.

    La mayoría de los estudios relacionados con el análisis de aglutinantes poliméricos en el campo artístico se han basado en dos técnicas: la más utilizada y económica (aproximadamente 150 euros) es la Espectroscopia Infrarroja por Transformada de Fourier (FTIR), que permite – en su versión µ-FTIR - trabajar incluso sin toma de muestra, es decir, de forma no destructiva.

    Sin embargo, esta técnica sólo permite la identificación de la clase química del polímero (acrílico, vinílico, alquídico…), y no la tipología de los monómeros que lo componen.

    La técnica analítica que permite la identificación exacta no sólo de la clase química, sino también de los diferentes tipos de monómeros presentes en los polímeros (por ejemplo, para acrílicos permite establecer la presencia de metilmetacrilato en lugar de butilmetacrilato, etc.), es la cromatografía de gases asociada a la espectrometría de masas, para los “amigos” GC/MS. Se trata de dos técnicas acopladas. No sólo es mucho más costosa (600-700 euros), sino que también requiere tomar una muestra que se destruye en el proceso analítico.

     La complejidad de los materiales del arte contemporáneo, no sólo está relacionada con los aglutinantes poliméricos sino también a los soportes, a las preparaciones, a los pigmentos, etc. haciendo que la restauración sea un tema intensamente debatido y lejano de alcanzar una metodología para la intervención bien definida.

    Solo podemos mencionar los aspectos más importantes comenzando por el más controvertido pero a la vez más documentado, la limpieza.

    Estas sugerencias deben referirse a las obras realizadas con acrílicos, pero también son referibles a los vinílicos y, en parte, también a los alquidicos, que sin embargo tienen una mayor resistencia.

    Un trabajo con aglutinante polimérico a menudo tiene una superficie borrosa por una pátina con una composición compleja y desconocida. Las partículas atmosféricas u otras sustancias pueden permanecer adheridas por varias razones: adherencia de la superficie, ligadas a la migración de aditivos solubles en agua, baja Tg de polímeros, porosidad de la película... Sin embargo, incluso si la obra se ha mantenido en un entorno protegido de la suciedad, es posible encontrar superficies opacas o incluso blanqueadas por la simple acumulación en la superficie de los aditivos antes mencionados, por lo tanto, por la naturaleza misma de la película de polímero, y no tanto por el historial de una conservación inadecuada. Lo que es seguro es que el enfoque seguido hasta ahora en la limpieza de superficies policromas "clásicas" es completamente inadecuado por varias razones, comenzando por los efectos de la polaridad:

      • Los disolventes polares, tales como alcoholes, cetonas, acetatos, aromáticos y clorados, tienen un fuerte efecto de hinchamiento y de solubilización del polímero y, por lo tanto, deben excluirse absolutamente. Pero también los disolventes con menor polaridad, como los hidrocarburos, tienen cierto efecto, que no le permite trabajar con absoluta seguridad;

    • El agua, ampliamente utilizada para la limpieza, también tiene una fuerte capacidad de hinchamiento de la película, pero no por su acción sobre el polímero, sino sobre los aditivos solubles en agua presentes en abundancia.

     

    Otros estudios han intentado responder una serie de preguntas, que todavía no se han resuelto por completo:

    •    En comparación con una mejora segura de las propiedades ópticas, ¿qué deterioro de las propiedades mecánicas y químico-físicas se induce en la película con la limpieza?
    •    Dado que los tensoactivos también actúan como una interfaz entre el polímero apolar y el pigmento polar, ¿su eliminación también conducirá a una pérdida de pigmento?
    •    ¿El fenómeno de la migración a la superficie es algo dinámico o se limita al período inmediatamente posterior a la formación de la película?
    •    Y si el fenómeno de la migración es dinámico, una vez que los aditivos se eliminen de la superficie, ¿los que están presentes en la masa continuarán migrando a la superficie?

    Por esta razón, en los últimos años se han explorado varias formas menos invasivas, incluido el uso de geles rígidos1, limpieza en seco2 y la aplicación de geles siloxánicos3.

    La solución ideal aún está muy lejos, por lo que actualmente preferimos mantener una actitud de máxima prudencia, sin pretender llegar a una eliminación perfecta de la suciedad.

    Las problemáticas evidenciadas por el agua y los disolventes orgánicos son aún mayores en los procesos de consolidación. Como no hay en el mercado ningún producto específico, se suelen utilizar consolidantes clásicos como la Beva 371, el Plexisol P550, el Aquazol y varias dispersiones acrílicas. Pero la elección del disolvente se convierte aún más en un factor crítico para la protección de la obra.

    Ya que no existe una pintura al agua válida, actualmente es el Regalrez 1094 la resina preferida en la fase de barnizado, dado que el disolvente utilizado (ligroína o esencia de petróleo) es el que menos influye en los aglutinantes poliméricos, aunque, como se mencionó más arriba, no tienen un impacto cero.

    Para aquellos que deseen profundizar en el tema, está disponible en la editorial Nardini el libro “I leganti dell’arte contemporanea”, di Leonardo Borgioli, con contribuciones de Giulia Gheno y Mirella Baldan.

    REFERENCIAS:

    1 Francesca Secchi, Sabrina Sottile; “I colori acrilici in emulsione: problemi connessi ai trattamenti di pulitura acquosi e a solvente e valutazione dei loro effetti”. X Congresso Nazionale IGIIC – Lo Stato dell’Arte – Accademia Nazionale di San Luca, Roma - 22/24 novembre 2012

    Maude Daudin-Schotte, Madeleine Bisschoff, Ineke Joosten, Henk van Keulen, Klaas Jan van den Berg; “Dry Cleaning Approaches for Unvarnished Paint Surfaces”, Atti della conferenza internazionale Cleaning 2010, Valencia, Smithsonian Institution Scholarly Press. Il report del progetto è stato pubblicato nel 2014 da Il Prato nei Quaderni Cesmar7 n°12 “Analisi e applicazione di materiali per la pulitura a secco di superfici dipinte non verniciate” di Maude Daudin-Schotte, Henk van Keulen, Klaas Jan van den Berg.

    Anthony Lagalante, Richard Wolbers; “The Cleaning of Acrylic Paintings: New Particle-based water-in-oil Emulsifiers”, Atti del Convegno “Dall’olio all’acrilico, dall’impressionismo all’arte contemporanea” Politecnico di Milano 13-14 novembre 2015.

  • 50.1 MÁS INFORMACIÓN - PROTECTORES HIDROFUGANTES: ¿CUÁNTO DURAN?

    Protectores hidrofugantes: ¿cuánto duran?

     En efecto, no es una pregunta trivial en absoluto.

    Una respuesta clara sería muy útil para elaborar un protocolo de mantenimiento y poder intervenir antes de que la protección se pierda por completo y, por lo tanto, el monumento esté sujeto nuevamente a todas las patologías relacionadas con la penetración del agua: desarrollo de microorganismos, corrosión de los elementos metálicos presentes en la estructura, disolución de la matriz de carbonato, pero sobre todo el movimiento de las sales y después del secado, su cristalización.

    En un artículo de hace algunos años (35.1 – UN PROTECTOR IRREPRENSIBLE: SILO 111 – Link: https://shop-espana.ctseurope.com/1191-1-mas-informacion-un-protector-irreprensible-silo-111  se examinó el silo 111, un oligómero reactivo de polidimetilsiloxano transportado a base de White Spirit y perteneciente a una familia, la de los siloxanos, que actualmente están presentes en casi todos los repelentes de agua en el mercado.

    Véase el ejemplo del poli-metil-siloxano oligómero reactivo (Imagen 1), correspondiente al Silo 111. Los grupos terminales -OCH2CH3 llamados etoxi, son reactivos y permiten la unión del Silo 111 a la piedra.

    "Imagen 1"

    El silo 111, a diferencia de los polimetilsiloxanos con alto peso molecular, que no pueden penetrar en los poros de la piedra y conferir repelencia al agua después de la simple evaporación del disolvente, desarrolla su acción protectora en dos pasos:

    1.      Evaporación del solvente (componente necesario para hacer penetrar hasta el fondo al producto)
    2.      Reacción de unión de los grupos terminales etoxi a la piedra, con eliminación de pequeñas cantidades de alcohol etílico.

    Este proceso de hidrofugación agua no debe evaluarse pasadas simplemente 24 horas desde la aplicación, es necesario esperar unos días, y aumenta aún más en las siguientes semanas, cuando se completa la reacción. El resultado es una penetración profunda, el producto se fija dentro de los poros y esto conduce a una mayor estabilidad del producto con el envejecimiento a diferencia del llamado "efecto perlado" muy escenográfico pero menos duradero.

    Los siloxanos tienen muchos puntos fuertes (alta repelencia al agua, alteración de la permeabilidad y color aceptable, estabilidad a la radiación y agentes meteorológicos) y algunos límites como la baja durabilidad en presencia de dióxido de azufre presente en ambientes altamente contaminados. Junto con varias investigaciones sobre la estabilidad en el laboratorio de esta clase de agentes protectores, se realizó un estudio sobre casos reales, realizado después de muchos años en las iglesias barrocas de Lecce, cuyas superficies habían sido tratadas con silicatos de etilo como agentes consolidantes y siloxanos como protectores. Se describió la disminución progresiva del efecto repelente al agua. Según informaban los autores: "los hidrofugantes aplicados durante más de diez años todavía son capaces de reducir la absorción de agua por las superficies tratadas".

    Es evidente que la absorción de agua, incluso asumiendo que se pone a cero de inmediato, es un valor que cambia progresivamente en el tiempo y que está sujeto a muchas variables, como:

    •       el tipo de piedra;
    •       la cantidad de producto aplicado;
    •       el tipo de producto aplicado;
    •       parámetros ambientales (fuerza del viento, intensidad de la radiación solar, …);
    •       la presencia de sales (es mayor la degradación encontrada en las áreas de costa que en las áreas de interior)

    Con respecto al último parámetro, es bien conocido el efecto devastador de envejecimiento acelerado producido por la niebla salina.

    Por lo tanto, es imposible determinar con exactitud la tendencia de la pérdida de eficacia: es habitual decir que los protectores de siloxano duran de 3 a 5 años; pero su efecto, en condiciones particulares, puede permanecer en buenos niveles incluso más allá de 10 años.

     

    Dada la falta de monitorización realizada in situ años después de los tratamientos, resulta muy preciada la contribución del Arq. Mila Martelli, quien en su tesis doctoral describió el comportamiento a lo largo del tiempo de dos protectores aplicados en varios tipos de piedra. El complejo monumental de la Catedral de San Zeno y el Baptisterio de Pistoia tiene la ventaja de que las intervenciones de restauración están bien documentadas y van desde 2000 hasta 2018 afectando a tres litotipos diferentes, en particular:

    •       mármol blanco, sobre el que se ha aplicado Silo 111 (2000, 2014, 2017)
    •       areniscas (pietra serena), protegidas con elastómero fluorado[1] en 2000, con Silo 111 en 2002 y finalmente con Fluoline HY en 2014 y en 2017
    •       piedra serpentina, protegida con Fluoline HY (2000 1, 2014, 2017)

    Se realizaron mediciones de la absorción capilar en las superficies tratadas (Norma UNI EN 11432:2011), análisis FTIR e identificación de las pátinas.

    El estudio, aunque deja en claro desde el principio que no quiere expresar "un juicio de mérito sobre los beneficios de un tratamiento en comparación con otro", nos proporciona información interesante que se puede comparar con otros datos recopilados en otros lugares en relación con la durabilidad de los productos protectores.

    En la siguiente tabla se recogen los datos de absorción capilar (mg/cm2 al minuto), medido en 2018, por lo tanto, después de aproximadamente 18 años desde los primeros tratamientos y 1 año después del último.

     

    Año del tratamiento

    Tipología lapídea

    1999-2000

    2014

    2017

    Mármol blanco

    Valores muy diferentes, desde 1,25 a 5,0; con media 4,76

    Media 1,76

    Valores bajos, con media 1,51

    Serpentina

    Valores muy diferente con media 2,69

    Media 2,0

    Media 1,25

    Areniscas

    Solo silicato de etilo, valores muy diferentes, con media 8,1

    Silo 111

    Media 3,6

    Fluoline HY 
    0,67

    En el siguiente gráfico (Imagen 2) se resumen los valores obtenidos:

     

    "Imagen 2"

    La variación en el nivel de protección con el tiempo es evidente. Podemos considerar que se hizo nulo después de 18 años (debe recordarse que para las areniscas el tratamiento de 1999-2000 consistió solo en el silicato de etilo consolidante, sin una aplicación posterior de repelente de agua).

    En cuanto a las piedras serpentinas el valor de absorción es más bajo al inicio, por lo tanto, las variaciones son menos notables, mientras que para los mármoles blancos se puede encontrar un buen sellado del Silo 111 después de 4 años. En mármol, el Fluoline HY se aplicó como antipintadas en 2017 solo en la parte inferior dando resultados comparables a los del Silo 111.

    Para las areniscas, tomando el valor de 2000 (8,1) como el valor de la piedra no tratada, se observa que después de 4 años el efecto protector de Silo 111 sigue siendo alto y que, como se esperaba, después de 1 año Fluoline HY todavía ofrece una protección muy alta.

     

    Conclusiones:

    Estos resultados no pueden tomarse como una referencia definitiva de la duración de los tratamientos, aunque si reiteran cómo los valores obtenidos varían mucho según el litotipo. Además constituyen otro paso más hacia la construcción de un marco más general que nos puede guiar en el mantenimiento adecuado de nuestros monumentos.

    PRODUCTO:

    PROTECTORES
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/147-protectores

    Bibliografía

     

    1.      Calia A, Laurenzi Tabasso M., Lettieri M.T., Mecchi A.M., Quarta G.; “Una metodologia per il monitoraggio sostenibile dei trattamenti effettuati sui monumenti in pietra” Arkos 13 (2006).
    2.      Mila Martelli; “Problematiche della conservazione programmata applicata agli apparati decorativi e scultorei dell’architettura monumentale. Il caso dei protettivi idrorepellenti”. Tesi di Dottorato in Architettura, anni 2015-2018.

    [1]           Enel 2000 el elastómero fluorado se comercializaba con el nombre Akeogard CO

     

  • 50.2 MÁS INFORMACIÓN - BEVA, ¡QUÉ PASIÓN!

    Beva, ¡qué pasión!

     

    No lo tomemos en el buen sentido de la expresión de querer o que seamos forofos de este adhesivo, más bien hacemos referencia a la etimología original que vincula la palabra pasión a passus, participio pasado del verbo latino pati, “sufrir” o más acertado “padecer”.

    En particular, nos referimos al punto crítico para el uso de este material, ya que es realmente un verdadero sufrimiento el comprender a que temperatura trabajar, por cuanto tiempo y, sobre todo, como controlarla.

    Es un hecho conocido que para algunos restauradores es difícil incluso leer las pocas páginas de instrucciones de las fichas técnicas (ahora también descargables en el teléfono móvil); y que para otros, debido a aplicaciones fallidas y no deseadas, solo el nombre Beva les causa ansiedad y nauseas, como si fuera la causa de una alergia.

    Por esta razón, recomendamos leer las siguientes líneas sólo a aquellos espíritus estoicos que todavía profesan fe en los principios de actualización y profundización.

     

    Antes de entrar en el análisis de la temperatura, es esencial recordar el punto clave de las operaciones que involucran a la Beva, la operación final, después incluso del aporte de calor:

     

    ¡EL ENFRIAMIENTO DEBE HACERSE BAJO PRESIÓN!

     

    Desafortunadamente éste es un punto que demasiado a menudo se pasa por alto y eso ha llevado a muchos restauradores a obtener malos resultados, además de haber trabajado con la plancha a temperatura demasiado elevada, ¡como si la Beva fuese una especie de adhesivo en pasta! Incluso existe la creencia de que debe extenderse con un raspador dentado… Sin embargo la metodología es completamente diferente: una película muy delgada de adhesivo, baja temperatura, mínima presión.

    Por supuesto, el uso de una mesa caliente o de baja presión permite lograr unos mejores resultados con simplicidad y reduciendo los tiempos de ejecución, pero es posible obtener buenos resultados incluso con un vacío artesanal. Por otro lado, es mucho más difícil que salga bien agregando pesos, especialmente si la capa pictórica tiene mucho material ya que corremos el riesgo de aplanar los relieves.

    Una vez aclarado este punto fundamental, comencemos por hacer referencia a la información del folleto LINEA DE PRODUCTOS “GUSTAV BERGER’S ORIGINAL FORMULA®” relativa a las operaciones de revestimiento y en particular a lo referente al aporte de calor:

    Caliente la mesa hasta que todos los puntos de la pintura hayan alcanzado los 65°C. Es necesario que la temperatura sea homogénea para evitar que en algunas zonas no se alcance la temperatura necesaria para el reblandecimiento.

    También se recomienda utilizar un termómetro infrarrojo o de contacto si no dispone de una mesa caliente. El valor de 65°C hace que el adhesivo esté en una fase fluida ya que se supera el punto de fusión de la cera y las temperaturas de reblandecimiento de algunos componentes poliméricos.

    ¡Atención! A veces se confunde la Tg (temperatura de transición vítrea) con la Tm (temperatura de reblandecimiento); a modo de ejemplo, se dan los valores de uno de los componentes, la resina etilenvinilacetato Elvax 150: Tg = -29°C, Tm = 63°C.

    Esto quiere decir que a temperatura ambiente, por lo tanto, a aproximadamente 50°C por encima de la Tg, el material es plástico y también posee esa flexibilidad que es característica de la Beva. A medida que aumenta la temperatura el polímero se vuelve más blando hasta que a 63° alcanza el estado líquido con muy alta viscosidad (una especie de mayonesa) y por lo tanto es capaz de infiltrase, gracias a la acción de la presión, en las rugosidades de las telas.

    Si la temperatura aumenta aún más, alcanzando por ejemplo los 90°C (lo cual no es inusual cuando se utilizan planchas) la Beva se vuelve tan fluida que penetra a través de las distintas capas con el riesgo de que llegue a la capa pictórica. Este fenómeno es la causa de un “efecto plastificado” que se observa en algunas pinturas revestidas con planchas demasiado calientes.

    Por lo tanto resulta imprescindible, si se quiere utilizar una plancha, tener un termómetro adecuado: le recomendamos el infrarrojo Mod.652, más preciso que el de contacto al tener que trabajar en superficies irregulares.

     

    Otros factores importantes para considerar si se contempla la posibilidad de trabajar a temperaturas más bajas son:

    •       Por debajo de 65°C los polímeros son normalmente muy blandos, y entre 50 y 65°C la mezcla es ya pegajosa. Por lo tanto, es posible trabajar también en este rango como se informa en varios artículos [1,2,3].
    •       La presencia mínima de residuos de disolvente ayuda a trabajar a bajas temperaturas ya que las moléculas de disolvente actúan como un plastificante temporal. En este caso, es necesario trabajar con una presión mínima ya que la presencia simultaneas de disolvente y calor puede hacer que la capa pictórica se ablande y por lo tanto corre el riesgo de deformarse (aplastarse).
    •       No es posible trabajar por debajo de 50°C. Un estudio exhaustivo [1] sobre el nivel de adherencia de dos formulaciones de Beva (la antigua 371 que contenía la resina cetónica Laropal K80 y la formulación denominada en los Estados Unidos 371b que está en el mercado desde finales de 2009 y en la que el K80 se reemplazó por otra resina cetónica), ha demostrado que por debajo de 50°C la nueva formulación tiene una baja adherencia y que siempre es necesario superar esa temperatura.

     

    Con respecto a este último punto, queremos recordar que la sustitución del Laropal K80 fue un paso necesario después de su salida al mercado: desafortunadamente la única resina cetónica alternativa, que mantuvo inalteradas las propiedades de adhesión de la mezcla, fue inicialmente de color amarillo lo que dio como resultado un ligero color pajizo a la nueva Beva 371. Ésta resina cetónica también fue reemplazada, a partir del 2017, por una resina ureo-aldehída totalmente transparente, y por lo tanto, la Beva 371 es nuevamente incolora.

    El estudio realizado por el Centro de Conservación y Restauración Venaria, la Universidad y el Politécnico de Turín [4] fue fundamental para comprender la influencia de las temperaturas. Se compararon revestimientos hechos con telas de lino y poliéster, aplicando Beva por pulverización, espátula o como Beva Film; y variando las temperaturas de 62°C, poco menos del valor recomendado, a 68°C (un poco más), hasta los 75°C (valor muy alto). Resumimos los puntos destacados en el estudio.

    •       Las telas de lino dan una mayor fuerza adhesiva que las sintéticas.
    •       El aumento de la temperatura proporciona una mayor fuerza adhesiva (sin embargo, recuerde el problema de la fluidez excesiva).
    •       La aplicación del adhesivo pulverizado conduce a una mayor fuerza adhesiva que la obtenida con la Beva Film o con la aplicación con espátula.
    •       La menor penetración de adhesivo en la pintura original se obtiene pre-calentando la tela de forración sobre la que se ha pulverizado el adhesivo. Este pre-calentamiento solo se puede hacer sobre una mesa caliente.

     

    Finalmente, debe mencionarse el intento de estabilizar la Beva agregando Tinuvin 292. Los autores del estudio [5] observaron que la conocida molécula HALS, ya utilizada para estabilizar las pinturas, brinda una protección efectiva contra la oxidación. Es cierto que se observó una progresiva pérdida de la acción protectora, pero también es cierto que al final de las 8 semanas de envejecimiento acelerado, que representaban unos 25 años de envejecimiento natural, las muestras que contenían el Tinuvin 292 estaban significativamente menos degradadas que las muestras que no las contenían. Por lo tanto no sería inútil agregar este aditivo, tal vez durante la fase de dilución en caliente, justo antes de aplicar el adhesivo sobre la tela de forración.

     

    Podemos concluir señalando la necesidad de una cuidadosa reflexión sobre todas las condiciones necesarias para poder hacer el mejor uso de un material versátil pero también complejo como la Beva 371.

     

    PRODUCTO:

    LINEA DE PRODUCTOS “GUSTAV BERGER’S ORIGINAL FORMULA®
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/158-linea-gustav-berger-para-superficies-pintadas

     

    Referencias:

    1.      Rebecca Ploeger, Chris W. McGlinchey, E. René de la Rie; “Original and reformulated BEVA® 371: Composition and assessment as a consolidant for painted surfaces” Studies in Conservation, Volume 60, 2015 - Issue 4, p. 563
    2.      Giovanna.C.Scicolone, Marco Scoponi, Eleonora Canella, Stefano Rossetti, Martina Scoponi, “Polimeri a base di PVAc”, Kermes n.83 , 2011.
    3.      Enrica Boschetti; “Note sull’utilizzo del BEVA® 371 O.F.” Dis pense del corso sulla foderatura su tavola a bassa pressione.
    4.      Lisa Bianco, Massimiliano Avalle, A. Scattina, Paola Croveri, Cesare Pagliero, Oscar Chiantore; “A study on reversibility of BEVA®371 in the lining of paintings”, Journal of Cultural Heritage - ISSN 1296-2074. - 16(2015), pp. 479-485.
    5.      Rebecca Ploeger, E. René de la Rie, Chris McGlinchey, Oscar Chiantore; “The long-term stability of a popular heat-seal adhesive for the conservation of painted cultural objects”; Polymer Degradation and Stability, 2014.
  • 50.3 NUEVOS PRODUCTOS - REGAL VARNISH, ¡FINALMENTE EN SPRAY!

    Regal Varnish, ¡finalmente en spray!

     

    Después de un año de pruebas y evaluaciones sobre las formulaciones, finalmente ya están disponibles las dos primeras versiones en spray del Regal Varnish.

    Se trata del clásico Regal Varnish Gloss a base de Regalrez 1094 y del Regal Varnish Retoque a base de Laropal A81.

     

    Las formulaciones propuestas se han mantenido sin cambios sustanciales en comparación con la versión líquida. Esto nos da la oportunidad de reiterar algunos puntos que han sido objeto de discusión en los últimos años y que en particular se han abordado en la reunión organizada por la Associazione i Bastioni: “Vernici sintetiche: un aggiornamento”, que se celebró en Florencia el 28 de junio de 2019.

     

    Presencia del Kraton G-1650 en el Regal Varnish Gloss

    El Kraton G-1650 es un copolímero de estireno-butadieno, con alto peso molecular y consistencia gomosa. Influye sobre las propiedades de la aplicación confiriendo un aumento significativo de la viscosidad y flexibilidad a las resinas rígidas a las que se agrega. A diferencia de otros plastificantes utilizados para este propósito, como los ftalatos, el Kraton no puede migrar a la superficie dado que sus larguísimas cadenas están bloqueadas en la estructura de la película. Esto evita futuros fenómenos de blanqueamiento de la superficie, un hecho conocido por todos aquellos que se ocupan de conservación con plastificantes que contienen ftalatos u otras moléculas de cadena pequeña.

     

    El Kraton G-1650 es más polar que el Regalrez y sería en principio insoluble en esencia de petróleo, que es el disolvente del Regal Varnish, sin embargo, se mantiene en la solución por la combinación de dos factores:

    1.      es perfectamente compatible con Regalrez 1094;
    2.      es poco.

    En consecuencia no es necesario agregar disolventes polares a la formulación que por lo tanto sigue siendo fiel a las indicaciones dadas hace más de veinte años por De la Rie. El Regal Varnish se formuló en el 2005 con el 2% de Kraton G-1650. Luego, siguiendo las pruebas y consideraciones operativas, a partir de junio de 2012 la cantidad se redujo al 1% como se describe en el Boletín CTS 31.4 del 2012.
    ¿Sin embargo puede quedar una duda: es realmente necesaria la presencia del Kraton?
    Para responder a esta cuestión se hace referencia a algunas consideraciones tratadas en un estudio de Annalisa Marra [1].

    Al variar el contenido de Kraton (0%-3%-5%-10%) en una solución base de Regalrez 1094 (25 g de resina por 100 ml de disolvente) se aprecia una forma de trabajar diferente con el barniz y una resistencia creciente del pincel durante el trazado, confirmando el efecto de aumento de la viscosidad.

    Las películas obtenidas, sometidas a estrés mecánico y analizadas mediante microscopía, mostraron la formación de microfracturas en las muestras en las que la resina alifática estaba libre de elastómero y una progresiva disminución de este efecto con el incremento de la cantidad de Kraton. La cantidad del 10% resultaba excesiva con la formación de una película blanda y gomosa.

    Por tanto, el efecto elastizante del Kraton es necesario para obtener una película no demasiado frágil que podría desmoronarse si se somete a tensiones mecánicas pequeñas pero continuas.

     

    Presencia del Tinuvin 292 en todos los Regal Varnish

    Otro punto que siempre ha sido objeto de debate es el relativo a la presencia del aditivo Tinuvin 292. ¿Es correcto introducir este antioxidante en la fase de producción? o ¿pierde efectividad estando en solución? Por lo tanto, ¿será necesario agregarlo en el momento de la aplicación? También en este caso nos vamos a referir a un estudio bastante antiguo realizado por el CNR y publicado en el 2011 [2].

    En las pruebas de envejecimiento acelerado, se han comparado varios productos, incluida una solución de Regalrez 1094 al 25% en esencia de petróleo y una de Regal Varnish Gloss que contenía, además del Regalrez, un 0,5% de Tinuvin 292 y un 2% de Kraton G-1650. El Regal Varnish se había preparado 6 meses antes y durante este periodo, el Tinuvin podría haber perdido efectividad dejando la pintura expuesta a la oxidación.

     

    En realidad, los análisis FTIR demostraron que el Regal Varnish estaba perfectamente estabilizado en comparación con la solución solo de resina.

    Este resultado debería tranquilizar a los usuarios: ¡el Tinuvin resiste!

    Por supuesto, esto no justifica el mantener las pinturas en los estantes durante años. De cualquier forma, con la absorción de oxígeno (si el envase no está perfectamente cerrado) y con el fenómeno progresivo de la oxidación térmica (inevitable), el Tinuvin cumple con su misión de bloquear los radicales libres, consumiéndose a sí mismo. En otras palabras, cada vez que se forma un radical, es bloqueado por una molécula de Tinuvin que no podrá hacer nada más posteriormente. La concentración de Tinuvin “activo” disminuye hasta eliminarse.

     

    Por lo tanto, es una práctica excelente agregar el Tinuvin cada vez que se prepara un barniz, pero está claro que esto no se puede hacer con un barniz comercial preparado en lotes de 200-250 litros. Afortunadamente la rápida rotación de este material hace que en los almacenes de CTS siempre encontremos envases “frescos”, es decir, preparados con no más de 3-4 meses.

     

    Conclusiones

    Los aditivos Kraton y Tinuvin se consideran fundamentales para obtener películas estables y resistentes. Esta fue la opción elegida desde el principio por CTS junto con la de un disolvente (esencia de petróleo) que minimiza el impacto de la polaridad en las capas pictóricas.

    Componentes que no han cambiado en las versiones en spray.

    Por lo tanto, invitamos a todos los que han utilizado los barnices líquidos a probar estas últimas innovaciones.

     

    PRODUCTO:

    BARNICES PARA RETOQUE ART. REGAL RETOUCHING VARNISH
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/500-barnices-para-retoque-art-regal-retouching-varnish

    Referencias: 

    1.      Annalisa Marra “La verniciatura dei dipinti ad olio su tela: le resine sintetiche” Atti del Congresso Trento, 2010. Dalla tesi “Materiali di sintesi per la verniciatura dei dipinti ad olio su tela. Evoluzione della ricerca e sperimentazione di un recente prodotto”, discussa presso l’ISCR nel 2007.
    2.      Mara Camaiti, Leonardo Borgioli, Laura Rosi; "Photostability of innovative formulations for artworks restoration” La Chimica e l'Industria, novembre 2011.
  • 50.4 FORMACIÓN E INFORMACIÓN - EL NEVEK Y LAS ESTATUAS DE MADERA

    El Nevek y las estatuas de madera

     

    La mayoría de las operaciones de limpieza que se llevaron a cabo con el gel de agar triturado, denominado Nevek, se referían a trabajos en piedra o yeso y, en ocasiones, a pinturas murales. Esta vez informamos, gracias a la cortesía de la restauradora Loredana Miolla, sobre la descripción de la intervención en una estatua de madera que representa a San Nicolás. Con la eliminación en diversas operaciones, de un repintado de restauración (de 1997) que se extendía sobre una capa pictórica no muy antigua (el original es de 1977). La intervención fue necesaria no solo por los numerosos levantamientos del color, sino también por la evidente modificación del aspecto cromático de la obra debido al repintado total. Además, partes grandes como la estola y los zapatos del Santo habían sido dorados, lo que con el tiempo adquirió una apariencia verdosa (debido a la oxidación del oro falso).

    El proceso de restauración, por lo tanto, no fue diferente del realizado en una obra más antigua, pero la corta distancia temporal entre las dos capas pictóricas hizo que esta circunstancia fuese particularmente delicada: era necesario desarrollar un método de limpieza que permitiera eliminar la capa de color superpuesta sin que se afectase a la capa subyacente. El gel Nevek fue fundamental para este propósito en el que se dispersaron los disolventes identificados por las pruebas de solubilidad previas.

    Después de la eliminación de la vieja lechada presente en el interior de las grietas, fue posible consolidar la capa pictórica y proceder a inyectar Balsite fluidizado. La reintegración pictórica de los huecos se realizó con los colores de retoque de Gamblin.

    En las imágenes podemos ver la situación inicial de la estatua de San Nicolas, dos momentos de la aplicación del Nevek y la obra al finalizar la restauración.

    Imágenes de la ESTATUA DE SAN NICOLAS:

    PRODUCTO:

    NEVEK®
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/253-nevek

  • 49.1 NUEVOS PRODUCTOS - DECK 4000: LA PAREJA DIOXOLANO Y METILAL

    Deck 4000: La pareja dioxolano y metilal

    El mayor problema de los decapantes es la seguridad: llevamos muchos años intentando reducir el impacto sobre la salud de los trabajadores, pasando de unos  disolventes tóxicos a otros disolventes...¡tóxicos!
    Sin duda el nivel de riesgo ha ido bajando, pero con toda honestidad, tampoco demasiado.
    Si valoramos la eficacia de un decapante, es decir el resultado entre la capacidad de hinchar/disolver un barniz, y el tiempo que se tarda en conseguir el efecto deseado, hay que admitir que, desafortunadamente, los disolventes más eficaces son al mismo tiempo los más tóxicos, es decir los más aromáticos y los clorurados.
    Las causas de esta molesta realidad se pueden intuir fácilmente: los disolventes tienen que romper con facilidad los enlaces que unen los barnices y tener una elevada movilidad para penetrar mejor en las capas inferiores, algo que está relacionado con su energía cinética. Como ya sabemos, el aumento de las temperaturas favorece siempre la acción de decapado pero tampoco puede ser excesivo para evitar la evaporación de los propios disolventes, ya que todos tienen un punto de ebullición bastante bajo. Todo esto hace que los disolventes sean, además, especialmente agresivos con los tejidos humanos penetrando con facilidad a través de la piel, además de ser inhalados debido a su volatilidad. Por eso, las normativas han intentado limitar de forma progresiva la utilización de las sustancias más dañinas, sin establecer unos límites estrictos como para paralizar un sector tan importante (incluso a nivel económico) como el decapado y desengrase industrial.

     

    A continuación, resumimos la evolución histórica de las principales formulaciones de los decapantes:

    Años 80

    Años 90 -2011

    2011 - 2018

    Tolueno y xileno

    cloruro de metileno

    dicloropropano

    CTS ya se había enticipado, en 2011, hacia una formulación de toxicidad reducida con una mezcla de dicloropropano/dioxolano, como base para el DECK 3000, introduciendo el dioxolano del que hablaremos más abajo, aunque sólo al 20% con respecto al 60% de dicloropropano.
    Actualmente las nuevas normativas han prohibido no sólo los  compuestos aromáticos sino también todos los disolventes clorados desplazando así la atención precisamente hacia el dioxolano, asociado a un segundo disolvente de baja toxicidad y con una fuerte acción hinchante, el metilal. Con esta última evolución, el nuevo DECK 4000 da otro pequeño paso hacia la reducción del riesgo.

    Hace falta valorar, por tanto, los componentes, en todos sus aspectos.

     1,3 dioxolano_ (CE: 211-463-5, CAS: 646-06-0) Contenido en el Deck 4000 al 46%, es un éster cíclico. Su efectiva toxicidad se está todavía investigando: según el documento oficial REACH-ECHA se excluye su carcinogenicidad, pero hay sospecha de fetotoxicidad y de acción mutágena. Por consiguiente, hay que ser muy prudente especialmente en caso de embarazo.

     Metilal_ (CE: 203-714-2 CAS: 109-87-5) Llamado también dimetoximetano, sigue siendo un éster, pero lineal y no cíclico, y está presente en el Deck 4000 al 36%. Todavía no se conocen efectossecundarios.

    Metanol_ (CE: 200-659-6 CAS: 67-56-1) Es el último componente que puede originar algún problema de toxicidad, pero sólo está en un 3%. En la siguiente tabla nos puede engañar el valor elevado del DL50 (5680). Hay que tener en cuenta que las ratas de laboratorio pueden metabolizar el metanol mucho más rápidamente que los seres humanos. La dosis letal para el hombre se ha fijado en 174 mg/Kg, es decir un valor muy bajo.

     

    Todos los disolventes descritos son inflamables y éste es otro tipo de riesgo que no tenemos que infravalorar nunca.

     

    Propiedades

    Cloruro de metileno

    1,2 dicloropropano

    Metanol

    Dioxolano

    Metilal

    DL50 rata (mg/Kg)

    1410

    1900

    5680

    5800

    >2000

    TLV/TWA

    (mg/m3)

    174

    350 (46)

    260

    3000

    3100

    Velocidad de evaporación (BuAc=1)

    6,4

    >1

    4,1

    6

    n.d.

    Principal componente

    Deck 2000

    Deck 3000

    Presente en todos los Deck

    Deck 4000



    REALIZACIONES:

    DECK 4000 EN GALERÍAS PUNTA BEGOÑA (GETXO, BIZKAIA)
    https://shop-espana.ctseurope.com/1244-deck-4000-en-galerias-punta-begona-getxo-bizkaia

    PRODUCTO:

    DECK 4000
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/396-deck-4000

  • 49.2 MÁS INFORMACIÓN - LA PROTECCIÓN MATE DE LAS PINTURAS MURALES

    La protección mate de las pinturas murales

     

    Para una pintura mural en restauración el recorrido ideal finaliza con la conservación en un entorno estabilizado para reducir todas las causas de deterioro desde la humedad en la pared, casi siempre la mayor responsable, hasta las partículas y los cambios termohigrométricos.
    Desafortunadamente, la propia naturaleza de las pinturas murales casi siempre imposibilita el cumplimiento de los estándares de conservación y es necesario recurrir a operaciones que, de otra manera, serían superfluas.
    Es el caso de la aplicación de los fijadores/consolidantes necesarios para impedir los fenómenos de acumulación de polvo o de delaminación. A menudo hemos subrayado  que los consolidantes inorgánicos (nanocales e hidróxido de bario) son los más adecuados para intervenir en pinturas “al fresco” y que suelen ser eficaces también para las pinturas a “medio fresco” o a seco. En estos últimos casos, sin embargo, el resultado no es siempre óptimo y es necesario terminar la intervención con la aplicación de un fijador/protector.
    Uno de los materiales más utilizados para este tipo de intervención es el famoso Paraloid B-72, pero después de unas décadas de uso surgieron unos problemas, especialmente  en entornos húmedos:

          -    la resina tendía hacia la reticulación, perdiendo sus características iniciales de reversibilidad;

          -    la permeabilidad de la superficie se reducía llegando, en algunos casos extremos, a pérdidas de color.

    Por casualidad, en esa misma época (2008), se presentaron en el Congreso IIC de Múnich (Alemania), unas investigaciones acerca del deterioro causado por la aplicación de resinas acrílicas en pinturas murales llevada a cabo de forma independiente en diferentes zonas del mundo (desde el túmulo de Takamatsuzuka en Japón, hasta el sitio Maya de Calakmul en México; o desde el sitio australiano de Kakadu hasta el templo budista de Muwi, enCorea).
    Estos fenómenos (que en realidad ya se conocían en Italia, por ejemplo, en las pinturas de Fontanellato), han sido especialmente devastadores cuando se ha aplicado una cantidad excesiva de material consiguiendo casi un efecto barniz con la total modificación no sólo de la materialidad de la capa pictórica sino también de sus características ópticas, principalmente, suopacidad.
    Alternativas menos impactantes desde el punto de vista cromático (Primal o más recientemente Acrilmat) no mejoran la problemática de la permeabilidad de las superficies tratadas y tampoco la de la reversibilidad.
    Por eso se han ido buscando alternativas valorando materiales con un impacto menor: desde el Klucel G hasta el reciente funori.
    Pero un material poco conocido que está demostrando ser muy útil por su bajo impacto cromático y la facilidad con la cual se retira es el elastómero fluorado Fluoline HY.
    Se trata de una goma sintética (copolímero fluoruro de vinilideno – hexafluoropropileno) de cadena larga con Temperatura de Transición Vítrea (Tg) de -21°C: esto permite mantener la flexibilidad incluso a las temperaturas más bajas donde los demás materiales se vuelven rígidos y extremadamente frágiles.
    Su principal característica es su altísima estabilidad que unida a la casi total sustitución  de los átomos de hidrógeno con los de flúor: el enlace C-F tiene una energía mucho mayor que la del enlace C-H. Además, la mayor dimensión del flúor con respecto al hidrógeno estabiliza mejor los enlaces del esqueleto C-C. Finalmente, la presencia del flúor garantiza también un buen poder hidro y óleo-repelente.
    Por este motivo, ya desde su introducción, el Fluoline HY se ha ido proponiendo como hidrorrepelente para piedras (areniscas, tobas…), revoques y ladrillos muy porosos.
    Por todo esto, no es casualidad que los elastómeros fluorados se hayan extendido especialmente como protectores en la zona de Toscana donde las areniscas grises, muy porosas, son el sustrato ideal.
    Por lo que atañe a su utilización como fijador para las pinturas murales tenemos que evidenciar tanto sus resultados como sus límites. El mayor problema está relacionado con la baja Tg: su “suavidad” le lleva hacia una mayor tendencia a retener el polvo.
    Es por tanto necesario evitar acumulaciones y formación de película en la superficie que llevarían a un paulatino engrisaceamiento. El problema se puede solucionar de forma fácil, ya que la reversibilidad del producto permite su eliminación incluso después de años, pero se trata de una propiedad que hay que valorar cuidadosamente y hay que  comprobar mediante unas pruebas que el soporte absorba bien el producto.
    La otra propiedad que hace que el Fluoline HY sea extremadamente útil es su bajísimo impacto cromático: en los soportes absorbentes llega a ser incluso invisible. En los que absorben menos puede haber una ligera saturación del tono, pero nunca un efecto brillo.
    La unión de estas dos propiedades, reversibilidad y bajo impacto cromático, hace que sea extremadamente interesante como fijador de temples, tanto en paredes como en tela, tabla o escultura de madera.

    Las intervenciones

    De entre sus primeras aplicaciones como fijador de pinturas murales del elastómero fluorado (anteriormente se llamaba Akeogard CO), recordamos la que se hizo en un escudo colocado en el exterior del Castillo del Buonconsiglio de Trento [1], realizada por Martin Pittertschatscher, con la ayuda del CNR-IVBC de Florencia.
    Siempre en la región de Trentino, las imágenes nos indican la intervención de Enrica Vinante sobre las policromías del monumento a los caídos de Malosco [2], mientras que para las propiedades de hidrorepelencia y removibilidad se ha elegido el Fluoline HY como protector de una pintura a seco muy deteriorada en Bardolino, en el lago de Garda (foto AR Arte eRestauro).
    Una intervención que no atañe a las pinturas murales es la que llevó a cabo Fabrizio Iacopini en un frágil temple sobre tela de finales del siglo XIX, el Telón Histórico del  Teatro del Popolo de Castelfiorentino. Su peculiaridad se encuentra en el destino de uso: el telón tendría que volver a su funcionalidad originaria, así que al fijador se le pedía principalmente una flexibilidad que permitiera que la capa pictórica volviera a adherirse al soporte y al mismo tiempo, siguiera sus movimientos[3].
    De entre las intervenciones sobre pintura mural llevadas a cabo fuera de Italia, queremos mencionar las pinturas murales del Golden Temple de Amritsar, en la India, el lugar más importante para el culto y meta de los peregrinajes de los Sikh.

    Resumiendo las propiedades del Fluoline HY:

    Propiedades

    Ventajas

    Límites

    Cadena larga – Peso molecular de aproximadamente 400.000 uma

    El polímero se deposita en una superficie con efecto mate  y de bajo impacto cromático.

    Riesgo de acumulación del producto en superficie.

    Baja Tg (-21°C)

    Ausencia de rigidez de las superficies tratadas. No desgarra el color.

    Suavidad de la película, adhesión de las partículas atmosféricas, riesgo de griseamiento

    Estabilidad química

    Ausencia de óxido  y reticulado, reversibilidad en disolventespolares.

    Alto % de átomos de flúor

    Hidro y óleo-repelencia, con efecto       antimanchas antipintadas.


    PRODUCTO:

    FLUOLINE HY - PROTECTOR REAGREGANTE  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/187-fluoline-hy-protector-reagregante

    Bibliografía

    1.      M. Camaiti, G. Dellantonio, M. Pittertschatscher, “Restauro dello stemma affrescato del Cardinale Bernardo Cles presso il Castello del Buonconsiglio a Trento: nuove soluzioni per il consolidamento di intonaci dipinti distaccati dal supporto murario”, atti del XXIV  Convegno di studi Scienza e Beni Culturali, Bressanone 24-27 giugno 2008, Edizione Arcadia Ricerche.
    2.      Ivo Leonardelli, Roberto Pancheri; “Una storia di dolore e di distacco. Il restauro del monumento ai caduti di Malosco”, atti del XVI Congresso Nazionale IGIIC, Trento, 25-27 ottobre 2018.
    3.      http://www.teatrocastelfiorentino.it/it/il-sipario.html
  • 49.3 NUEVOS PRODUCTOS - FUNORI MULTIMATERIAL

    Funori multimaterial

    En el anterior Boletín CTS introducimos el funori y su extracto purificado funorano, que se presenta en solución acuosa al 0,5% con el nombre de Funoran Solution. Se han mencionado las aplicaciones para la consolidación de papel debilitado y telas despolimerizadas o fijador para capas pictóricas mate despegadas o con tendencia a la formación de polvo.

    Ahora queremos describir brevemente dos intervenciones que consideramos interesantes por la utilización de este consolidante natural en obras de arte moderno integradas por diferentes tipologías de materiales, incluso sintéticos.

    El primer trabajo, presentado con ocasión del reciente Congreso IGIIC “Lo Stato dell’Arte” de Trento [1], preveía la consolidación de una obra de Burri, “Nero bianco nero”, de 1955, conservada en la Galleria d’Arte Moderna e Contemporanea de Roma. Debido a la complejidad de la obra (soporte en tela, tejidos de diferentes tipos, incluyendo terciopelo y seda, celofán y PVC, pintura y resina vinílica…), el requisito primario para el consolidante era que tuviera el mínimo impacto cromático, basándose en el índice de refracción.

    Naturalmente la consolidación tenía que ser precedida por la fase de limpieza, llevada cabo tanto a seco en áreas especialmente sensibles al agua, como a través de soluciones quelantes y tensoactivas aprovechando en algunos casos precisamente las propiedades tensoactivas del funori. El mismo funori se ha utilizado posteriormente como consolidante de algunas tipologías de tejidos y de las capas pictóricas negras mate integradas por Vinavil, negro de hueso, carbonato de calcio y sulfato de bario.

    Sironi en la Casa Madre dei Mutilati di Piazza Adriana en Roma [3], el otro en las policromías del sarcófago de Butehamon, (1076-722 B.C.), conservado en el Museo Egipcio de Turín [4].

    FOTO 1: “Notte barbara”

    FOTO 2: L’Impero”

    PRODUCTO:

    FUNORI MULTIMATERIAL
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/350-funori-en-polvo

    Bibliografía:

    1. Paola Carnazza, Serena Francone, Nausicaa Sangiorgi, Domenico Poggi; “Nero bianco nero di Alberto Burri: studio e progettazione dell’intervento su un’opera d’arte contemporanea polimaterica”, XVI Congresso Nazionale IGIIC, Lo Stato dell’Arte – Trento, 25-27 ottobre 2018, 139-146.

    2. Alessandra Bassi, Virginia Bertone, Paolo Gili, Antonio Rava; “Lo studio e il restauro di una grande tela e le innovative ricerche per l’arrotolamento. La “Notte barbara” di Pinot Gallizio”, Kermes 98, 2015.

    3. Francesca Bianco et al.; “Intervento conservativo de L’Impero (1936-38) di Mario Sironi”, Kermes 98, 2015.

    4. Prestipino G., Santamaria U., Morresi F., Amenta A., Greco C., “Sperimentazione di adesivi e consolidanti per il restauro di manufatti lignei policromi egizi”, Atti del XIII Congresso Nazionale IGIIC, Torino, 2015, 261-270. 5. Lalli C.G., Kron Morelli P., Brogi A., Baudone F., Tosini I.; “Funori, adesivo naturale per pitture murali e materiali cartacei”, Linea Grafica Editrice, 2016

  • 48.1 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - AGUAS MÁS O MENOS AGITADAS PARA EL AGARART

    Aguas más o menos agitadas para el AgarArt

    Los sorprendentes efectos de limpieza que se pueden conseguir con la aplicación de los geles de agar, tanto en su forma fluida (en caliente), como en su forma triturada (en frío, como Nevek), han despertado la curiosidad y el deseo de entender, también a nivel teórico, los mecanismos básicos. Hoy podemos añadir a los centenares de aplicaciones prácticas llevadas a cabo en todo el mundo, dos importantes estudios científicos.
    El primero procede de los laboratorios de la Superintendencia de Aosta, bajo la dirección del químico, D. Lorenzo Appolonia, que ha coordenado la investigación de la becaria Sylvie Cheney, con el empleo de la Calorimetría por Escaneado Diferencial (DSC) para determinar las energías de cristalización en el paso de líquido a sólido, del Microscopio Electrónico de Barrido (SEM) para observar los canales que integran la misma estructura, y finalmente de la Resonancia Magnética Nuclear (NMR), para establecer la cantidad de agua libre y ligada a la estructura del gel: esta última información nos parece especialmente interesante, ya que está directamente relacionada con el efecto limpiador, y surge lo siguiente: en los geles de agar existen dos tipos de agua. Tenemos agua fuertemente ligada a las cadenas del biopolímero, de hecho, bloqueada, y la contenida en las cavidades, que tiene movilidad, y que se puede expulsar con una simple presión en el gel (este fenómeno se llama sinéresis); es precisamente esta agua la responsable del efecto de limpieza y de absorción de la suciedad soluble dentro del grosor del gel. Intuitivamente, cuanto mayor es la cantidad del polímero en el gel, mayor será el % de agua ligada, y menor el % de agua "libre"; por tanto, como conclusión, será menor también el efecto limpiador, sin embargo, gracias a una mayor compactabilidad del gel rígido, también habrá una menor difusión del agua en el sustrato. 
    Hoy en día, gracias al estudio de Sylvie Cheney y Lorenzo Appolonia, tenemos una indicación de las relaciones de estas dos "aguas". En la tabla podemos ver que existe un salto evidente entre las concentraciones del 3 y del 4%; en el caso de los porcentajes inferiores al 3 el agua estructural es mucho menos que la mitad del total, y este es un valor que no varía mucho, aunque baje al 1%.
    Subiendo al 4% la subida es repentina, y el valor alcanza el 77%, o incluso el 83% con una concentración de AgarArt del 5%.
    Está claro que unos valores tan elevados de agua "bloqueada" se corresponden también con una reducción de la cesión de agua al sustrato, y parcialmente también del efecto limpiador. 
                             % de AgarArt                         % de agua de estructura
                                          1                                                33,7
                                          2                                                38,9
                                          3                                                44,0
                                          4                                                77,0
                                          5                                                83,4

    Otra observación importante es la relativa a los “recocidos”: la experiencia de los que trabajan con los geles de agar es que volver a llevar los geles otra vez a la fase líquida a través de un segundo (o incluso tercer) calentamiento, mejora las propiedades limpiadoras del gel mismo. Esta impresión se ha confirmado incluso a través de las mediciones DSC: con el paso a dos y a tres cocidos se ha detectado una mayor movilidad del agua "libre" dentro del retículo del gel.

    Ha llegado a los mismos resultados también un grupo de investigación creado entre las Universidades de Turín y Milán, el CNR-IVBC de Milán y el CNR de Roma [2], que ha llevado a cabo en los geles de agar, además de las mediciones DSC y NMR, incluso mediciones termogravimétricas (TGA), que permitan establecer la cantidad de agua en las diferentes formas de asociación.
     
    En estos últimos resultados se pueden observar hasta 3 tipos diferentes de agua: 
    •       Agua ligada no-congelable que está fuertemente asociada a la estructura del polímero y no muestra ninguna transición de fase sólido-líquido. Según las mediciones DSC está alrededor del 7% si el agar está al 1%, y sube al 20% con el agar al 3 y 5%. 
    •       Agua ligada congelable, que es la fracción menos fuertemente ligada a la matriz polimérica y que tiene una temperatura de fusión y de congelación claramente diferentes con respecto al agua libre. 
    •       Agua libre que se porta como el agua no gelificada (temperaturas de fusión y de congelación similares). Según las mediciones NMR hay una cantidad de agua ligada del 4-7%, claramente inferior con respecto a lo conseguido a través de la técnica DSC, así que la libre sube al 93-96%. Las curvas TGA muestran unos procesos de complejos, ligados precisamente a estos diferentes tipos de agua, que se terminan con la deshidratación completa, alcanzando incluso los 170° en algunos casos. En general se observa que la estructura del gel ralentiza:
             1. el movimiento de las moléculas de agua con respecto a las de una solución (se establece a través de las velocidades de relajación en NMR);
             2. la evaporación del agua: primero evapora la libre, luego la ligada.

    Se han estado analizando 4 tipos diferentes de agar que se encuentran en el comercio, y AgarArt
     parece ser, de entre los diferentes tipos, el que libera el agua de forma más lenta, permitiendo así un mejor control.
     

    Como conclusión podemos decir que aumentando el porcentaje de agar se ralentiza el agua libre, porque aumentan las probabilidades de choques con la estructura del gel, y esto se corresponde con un menor mojado del material en el que se aplica, junto con una ralentización de los procesos de limpieza.

    Foto%2048%20copia.jpg



    PRODUCTO:

    AGARART  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/225-agarart

    Bibliografía

    1. www.regione.vda.it/allegato.aspx?pk=33824
    2. Moira Bertasa, Tommaso Poli, Chiara Riedo, Valeria Di Tullio, Donatella Capitani, Noemi Proietti, Carmen Canevali, Antonio Sansonetti, Dominique Scalarone; “A study of non-bounded/bounded water and water mobility in different agar gels”, Microchemical Journal 139 (2018) 306–314.

  • 48.2 NUEVOS PRODUCTOS - LA PUREZA DEL FUNORI

    La pureza del funori

    El funori es un polisacárido natural extraído de algas rojas de la especie Gloiopeltis, procedentes de Japón y tradicionalmente utilizado como apresto para los tejidos; de allí viene su nombre (FU = tela, NORI = cola).
    Como en otros productos naturales, el funori es una mezcla de sustancias, especialmente funoranos, cuyo porcentaje puede variar en función del tipo de alga utilizado, del método de extracción e incluso de factores estacionales [1].
    El funorano es el polímero obtenido de β-D-Galactosa y 3,6-anhidro-α-L-Galactosa, que son las mismas unidades presentes en el agar-agar, pero en el funori son mucho más sulfonadas, hasta perder la capacidad de formar un gel rígido. Claramente, los funoranos conservan cierta capacidad de espesamiento que, sin embargo, se manifiesta a concentraciones mayores que las del agar-agar.
    Desde hace unos años es posible encontrar en el mercado italiano el funori en forma de alga seca desde la cual, a través de un proceso de extracción en agua, en caliente, y posterior filtrado, se consigue el polisacárido funorano, aunque mezclado con otras impurezas.
    C.T.S. propone, ya desde el año 2017, una formulación del funori en polvo, que tiene la ventaja de una extracción más rápida, y de un porcentaje mayor de polisacárido con respecto al mismo producto vendido como alga seca.
    A partir de hoy, gracias a la colaboración con un laboratorio de investigación biotecnológica, CTS presenta la versión ya purificada, sin impurezas, como extracto acuoso, llamada por tanto Funoran Solution
    Con respecto a otros productos, como el Jun-Funori o el Tri-Funori, propuestos en la versión liofilizada, Funoran Solution se presenta en solución acuosa lista para el uso con una concentración de funorano del 0,5%, con el añadido del 2% de alcohol isopropílico que impide su deterioro microbiológico. 
    La solución tiene un pH neutro, y se puede utilizar como consolidante de papel debilitado y telas despolimerizadas, o como fijador para capas pictóricas despegadas y con tendencia a la formación de polvo.
    La característica más valorada del funorano consiste en otorgar un efecto final mate, con una variación cromática mínima [2,3]. 
    Las pruebas llevadas a cabo con Funoran Solution confirman lo que ya se sabía, es decir la mínima modificación del aspecto de las superficies tratadas, sin efectos de brillo o de aumento del tono, al contrario de lo que sucede con los consolidantes naturales como las gelatinas animales, la cola de esturión, o con los polímeros de síntesis vinílicos o acrílicos, o semi-sintéticos como las celulosas modificadas (Klucel G, Tylose MH300).
    Se puede conseguir un buen nivel de consolidación de las capas pictóricas trabajando con una concentración de polisacáridos del 0,5% en la que se propone Funoran Solution, con una mayor dilución del producto, si hiciera falta.
    Funoran Solution se puede aplicar con pincel, interponiendo en la superficie una lámina de papel japonés, o bien se puede añadir a soluciones de adhesivos más fuertes (colas de almidón o de buey), para modificar su viscosidad.
    El funori es menos sensible al ataque microbiológico con respecto a otros productos naturales, sin embargo su solución acuosa siempre está expuesta a la agresión de los microorganismos; por eso es necesario añadir una pequeña cantidad de alcohol isopropílico, que no genera ningún riesgo de toxicidad.
    La purificación del funori hace que sea estable a la foto-oxidación, así que no se detectan fenómenos de amarilleo.
    Todos los tipos de funori, y por tanto también Funoran Solution, tienden a la absorción de agua, pero de forma reducida hasta un nivel de humedad ambiental RH 75%. Además de este valor, hay una progresiva absorción de agua, así que se desaconseja el uso en ambientes externos o, de todas formas, expuestos a fuertes humedades relativas y fenómenos de condensación. 

    PRODUCTO:

    FUNORAN SOLUTION  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/1064-funoran-solution

    FUNORI EN POLVO  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/350-funori-en-polvo

    Bibliografía

    1. Swider J.R., Smith M.; “Funori: overview of a 300-year-old consolidant”, JAIC 2005, Volume 44, Number 2, Article 5, pp. 117-126. Tradotto nel volume “Utilizzo della colla Funori nel restauro”, Il Prato, Padova, 2012.
    2. Prestipino G., Santamaria U., Morresi F., Amenta A., Greco C., “Sperimentazione di adesivi e consolidanti per il restauro di manufatti lignei policromi egizi”, Atti del XIII Congresso Nazionale IGIIC, Torino, 2015, 261-270.
    3. Sangiorgi N., Coladonato M., Accorsi G., Pandozy S., Pastore R.; “Il consolidamento di pitture opache polverulente etnografiche: indagine comparata su fissativi e metodologie di applicazione” Atti del XV Congresso Nazionale IGIIC, Bari, 2017. 
    4. Lalli C.G., Kron Morelli P., Brogi A., Baudone F., Tosini I.; “Funori, adesivo naturale per pitture murali e materiali cartacei”, Linea Grafica Editrice, 2016

  • 48.3 NUEVOS PRODUCTOS - LLEGA EL NUEVO TEMPLUM

    Llega el nuevo Templum

    Los requisitos de un material para la reproducción de moldes son pocos, pero muy estrictos.
    -  Tiene que haber una fluidez que permita realizar el molde de forma adecuada cuidando hasta el más mínimo detalle.
    -  Tiene que endurecer en tiempos razonablemente cortos.
    -  Se tiene que endurecer sin retirarse o deformarse lo más mínimo.

    Muchos de los materiales para la reproducción tienen ciertos límites: generalmente la resistencia mecánica no es elevada, así que se pueden romper con el más mínimo golpe, y no se pueden agujerear en caso de querer enganchar la reproducción a través de tacos o barras de fibra de vidrio. Otros productos, en cambio, son difíciles de colorear, o bien su viscosidad lleva inevitablemente a la formación de burbujas o de otras imperfecciones en la superficie.

    Templum Cerámica es la nueva formulación de la línea Templum Stucco® con la que se han superado todas las problemáticas relativas a la reproducción de elementos de los cuales se haya realizado un molde.
    Se trata de una mezcla de áridos y ligantes seleccionados, que con la adición de agua genera una masa muy fluida, que se puede colar en un molde negativo de goma silicónica o yeso. Al final del fraguado, que se lleva a cabo en frío y sin un gran desarrollo de calor, la masa adquiere la dureza y consistencia de la cerámica.
    Se diferencia, por tanto, de los clásicos materiales a base de epoxi de la línea Templum Stucco, que no se pueden colar, sino solo extender dentro de los moldes negativos, porque además el ligante mineral requiere solo que se añada agua, y no un catalizador.
    De esta forma es posible reconstruir las partes faltantes de un material de cerámica, pero no solamente eso, y llevar a cabo reproducciones de objetos en los que es necesaria una definición muy elevada.
    Si se utilizan negativos de goma silicónica no es necesario aplicar un desmoldeante que, en cambio, es necesario cuando el negativo es de yeso o de otro material poroso.
    Templum Cerámica se puede colar incluso con grosores elevados, y si hace falta se puede volver a aplicar en varias capas sucesivas, que adherirán perfectamente una encima de otra.
    Se puede tanto pigmentar Templum Cerámica, para conseguir la coloración de toda la masa, como retocar la superficie con colores al temple, acrílicos o barniz.
    Si se utiliza Templum Cerámica para la reproducción de elementos de marcos, se puede extender una capa de bol para posteriormente proceder con la aplicación de la lámina de oro.
    Gracias a su alta resistencia mecánica y estabilidad dimensional, a la inercia química y estabilidad a los agentes atmosféricos, los elementos reproducidos se pueden colocar al exterior, sin los problemas que afectan al yeso o al cemento, como la formación de eflorescencias o la parcial solubilización.
    La resistencia al agua es tan fuerte que permite realizar copias de estatuas o elementos decorativos para colocarlos posteriormente en entornos muy húmedos como las fuentes.
    Trabajar con Templum Cerámica es muy sencillo: una vez coloreada la masa con tierras u óxidos en polvo - si hace falta - basta con añadir el 30% en peso de agua, mezclar y colarlo en el molde.
    No contiene sustancias peligrosas, y esto garantiza la ausencia total de toxicidad para el operador.

    Trabajo realizado con Templum Estuco Cerámica por la restauradora Raquel Racionero Nuñez, es la reconstrucción de un suelo en Ciudad Real - España.

    PRODUCTO:

    TEMPLUM CERÁMICA 
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/1104-templum-ceramica

  • 47.1 MÁS INFORMACIÓN - IONEX Y FRA ANGÉLICO

    Ionex y Fra Angélico   

    Las resinas de intercambio iónico se llevan utilizando, preferiblemente sobre las pinturas murales, desde su creación con ocasión de la restauración de la Capilla Brancacci de la iglesia del Carmen en Florencia. Entonces los restauradores del Opificio delle Pietre Dure, y especialmente D. Sabino Giovannoni, crearon las así llamadas “resinas desulfatantes”, que les permitieron eliminar de forma controlada la sulfatación de los frescos de Masaccio.
    Este ámbito de aplicación se extendió posteriormente a otros sectores, como el de los materiales cerámicos, como ya mencionamos en el Boletín CTS 16.1 de 2008,  en el cual describimos un estudio sobre la eliminación de concreciones de carbonato de calcio de cerámicas arqueológicas medievales delicadas. Como es sabido las resinas de intercambio iónico se dividen en aniónicas y catiónicas. Las primeras se ligan a los aniones, preferiblemente sulfatos, y liberan OH-, las segundas, en cambio, retienen los cationes, come Ca2+ y Mg2+, liberando hidrogeniones H+.  
       Se pueden resumir las dos reacciones:   
                                         [Resina -NH3+ OH-]   +  A-           [Resina -NH3+  A-]  +    OH-   
                                         [Resina -SO3-  H+]   +  M+           [Resina -SO3-  M+]  +    H+   

    Por Resina se entiende un copolímero estireno/DVB (divinilbenceno), en cuya estructura se introducen los verdaderos grupos intercambiadores, -SO3- y –NH3+, mientras que A- y M+ representan unos aniones y cationes genéricos. Las resinas de intercambio iónico, en forma de polvo, se amasan con agua desmineralizada y se aplican como compresas en las superficies desde las cuales queremos quitar las pátinas carbonatadas (las catiónicas), o sulfatadas (las aniónicas). Analizando estudios anteriores se pueden detectar las condiciones operativas óptimas, que resumimos en la tabla a continuación:   
          ➨ Temperatura: La temperatura óptima es de 30°C, y con temperaturas muy bajas, cercanas a 0°C, la reacción procede con extrema lentitud.     
          ➨ Tiempo de Contacto: Puede ir de pocos minutos, para la eliminación de veladuras finas en materiales sensibles, hasta 24 horas si el material con el que trabajamos no sufre por la acción de las resinas; con tiempos superiores los resultados siguen sin variar. 
          ➨ Humedad: HR = 100%. La compresa pierde eficacia al secarse, así que en los climas cálidos es aconsejable añadir sepiolita. Sin embargo, un exceso de sepiolita puede reducir la eficacia de intercambio. Otro truco para mantener húmeda la compresa consiste en extender sobre la capa de resina de intercambio una segunda capa de Arbocel y agua destilada, o bien una película de polietileno o de aluminio.  

    Leyendas metropolitanas: ¡las resinas de intercambio son muy caras!
     Hay que recordar que las resinas de intercambio actúan especialmente con la primera capa en contacto con la obra, es decir en un grosor de un centenar de micras. El grosor remanente de la capa de resina actúa sólo como soporte para el agua y, por tanto, no se “gasta”.   

    A continuación, si la superficie en la que se ha trabajado no está sucia, se puede recuperar la resina de intercambio y volver a aplicarla un par de veces, añadiendo agua, rigurosamente desmineralizada; la masa irá perdiendo eficacia de forma progresiva, así que no se podrá reutilizar muchas veces la resina. Esta sugerencia, sin embargo, ¡permitirá reducir los costes de forma importante!
       

    Características de las resinas de intercambio IONEX.
        
                                                   Ionex H catiónica fuerte              Ionex OH aniónica fuerte 
         Matriz                                                        Estireno DVB copolímero 
         Grupo funcional                     Sulfonato                                         aminas cuaternarias 
         Aspecto                                 Polvo ámbar                                    Polvo ligeramente ámbar 
         Forma iónica                               H+                                                    OH- 
         Capacidad de intercambio      >1,80 eq/L (H+)                                >1,10 eq/L (OH-) 
         Dimensión de las partículas     20 - 350 µ                                 38 - 150 µ (60-75%) >150 µ (max 10%)   <38 µ (15-30%) 
         Contenido de humedad           40%                                                       n.d. 
      

    En una publicación reciente, denominada “La Crocifissione dell’Angelico a San Marco quarant’anni dopo l’intervento della salvezza. Indagini, restauri, riflessioni”[1] se describe de forma detallada las investigaciones históricas, los estudios científicos y la intervención de restauración llevaba a cabo después de 40 años de la histórica restauración del fresco de Fra Angélico que se encuentra en la sala del Capítulo de San Marcos, en Florencia, la famosa Crucifixión.
     
    La obra maestra de Fra Angélico fue la primera gran intervención de desulfatación-consolidación llevada a cabo con el “método del bario”, también llamado “método Ferroni-Dini” por el químico Enzo Ferroni y el restaurador Dino Dini, que desarrollaron su metodología, asociando a la compresa de hidróxido de bario, sustancia ya conocida pero nunca utilizada de forma extensiva, la acción del carbonato de amonio[2]. Lo primero que hay que subrayar es que los análisis científicos hallaron la obra en buenas condiciones, no obstante, las dramáticas condiciones de contaminación debida a los sulfatos del fresco en 1970. Después de 40 años de la restauración de Dini salía una cantidad mínima de sulfatos, limitada sólo a unas zonas que ya en la fase de restauración habían evidenciado un estado avanzado de deterioro, y que se habían tratado de forma repetida con compresas de hidróxido de bario.   

    Bajo la dirección de Magnolia Scudieri y la coordinación científica de Mauro Matteini, trabajaron los expertos de IFAC-CNR, ICVBC-CNR y LABEC-INFN, a través de técnicas diagnósticas no destructivas o micro invasivas, como estudios multiespectrales, FORS y XRF.
    Los análisis proporcionaron información nueva y más profundizada, como el descubrimiento de un crucifijo pintado en un sarmiento de vid que tiene en su mano Santo Domingo, y que ya ha desaparecido casi por completo (foto 3). 
    Curiosamente Giacomo Dini, nieto de Dino Dini, fue quien tuvo que intervenir en las superficies del fresco que había empezado a tener algunos problemas, especialmente en la zona inferior a la derecha. En este punto se notaba un ligero, pero molesto emblanquecimiento, que dificultaba una buena lectura de la obra, pero sobre todo habían vuelto a aparecer, aunque con menos fuerza, unos micro-levantamientos "tipo pústolas", que iban a amenazar la conservación, más allá de un mero problema estético, si no se hubiera actuado rápidamente, con una intervención que iba desde el mantenimiento hasta una verdadera restauración. 
    Como describió en detalle Matteini en su comentario a la intervención [1, pág. 98-107], se hallaron unas dificultades al volver a intervenir con el método del bario, o con el sistema alternativo del oxalato de amonio y, después de muchas pruebas llevadas a cabo en diferentes áreas se decidió proceder con un tratamiento desulfatante con resina de intercambio aniónica Ionex OH.   

    En este caso la reacción fue la siguiente:   
                          2[Resina -NH3+ OH-] + CaSO4      2[Resina -NH3+] SO42- + Ca(OH)2   
    Con la retirada de la compresa el sulfato se elimina junto con la resina de intercambio iónico, y no se transforma en una sal insoluble como con el método del bario. Además, el hidróxido de calcio que se forma migra hacia los poros donde se carbonata volviendo a consolidar ligeramente la superficie. 
    La intervención se terminó, posteriormente, con la verdadera consolidación, mediante una aplicación del hidróxido de bario en toda la superficie, naturalmente excluyendo las zonas en seco (las con azul de ultramar, malaquita y oro), que hubieran sufrido la alcalinidad del sistema. Este proceso de consolidación mejoró además la lectura de las imágenes reduciendo todavía más la opacidad de determinadas áreas - que ya se había reducido mediante la intervención con la Ionex OH - gracias a la formación de carbonato de bario.   

    Esta obra compleja es la consagración definitiva de la metodología del bario, introducida casi hace 50 años, pasando por la criba de la ciencia y del tiempo, y de cómo este procedimiento se integre a la perfección con la utilización de las resinas de intercambio iónico.        

    Imágenes:

    Captura de pantalla 2018-12-05 a las 12-

    Captura de pantalla 2018-12-05 a las 12-


    PRODUCTO:

    IONEX OH
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/324-ionex-oh

    IONEX H
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/323-ionex-h

    Bibliografía   

    1.     “La Crocifissione dell’Angelico a San Marco quarant’anni dopo l’intervento della salvezza. Indagini, restauri, riflessioni” a cura di Magnolia Scudieri, Quaderni dell’Ufficio e Laboratorio Restauri di Firenze, Polo Museale della Toscana, N. 1, 2016.  
    2.     M. Matteini, A. Moles, M. Oeter, I. Tosini; "Resine a scambio ionico nella pulitura dei manufatti lapidei e delle pitture murali: verifiche sperimentali e applicazioni." in “La pulitura delle superfici dell’architettura”; atti del convegno di studi, Bressanone 3-6 luglio 1995

  • 47.2 MÁS INFORMACIÓN - REGAL VARNISH: FRA ANGÉLICO, BOTTICELLI Y LOS DEMÁS

    Regal Varnish: Fra Angélico, Botticelli y los demás   

    Después de un largo silencio desde el Boletín CTS 29.2 de 2012, retomamos el discurso sobre la línea Regal Varnish. A lo mejor porque nos quedamos maravillados por el éxito de esta línea de barnices, o porque dimos por sentada la buena acogida en muchos talleres de restauración, nos "olvidamos" que había que ofrecer una constante actualización acerca de las más importantes obras protegidas con estos productos. Esperamos que nos puedan perdonar con esta edición llena de referencias, caracterizadas por una gran variedad no sólo de pinturas sobre tela y tabla, sino también de otras tipologías de policromías, acompañadas por maravillosas imágenes. Empezamos recordando que ambas (Regal Varnish Gloss y Mat), son a base de Regalrez 1094, mientras que la Regal Retouching Varnish es a base de Laropal A81 cuya menor solubilidad la hace ideal como barniz de retoque, sin por eso excluir su aplicación incluso en las fases finales.   

    Vamos a analizar una serie de tablas, al óleo y al temple, restauradas entre 2013 y 2016, por el laboratorio de Florencia L’officina del Restauro de Lucia y Andrea Dori.
     Para visualizar el recorrido de la visita podemos imaginar que nos encontramos en Florencia y vamos a entrar en la Galería de la Academia, para ver la tabla al temple de Giovanni del Ponte Coronación de la Virgen y Santos; luego nos desplazamos hasta los Uffizi, donde están expuestas otras dos tablas cuyas imágenes hemos reproducido aquí: el tríptico con la Resurrección de Lazzaro, un óleo de Nicolas Froment [1] (foto 1), y la Anunciación con Santos de Luca di Tommè, realizado, en cambio, al temple (foto 2).
     

    Captura de pantalla 2018-12-05 a las 12-

    Captura de pantalla 2018-12-05 a las 12-

    Una vez salidos de los Uffizi y cruzado el Ponte Vecchio llegamos a Palazzo Pitti, en cuyo piso noble se encuentra la Galería Palatina: en su colección señalamos la Virgen y el Niño con los Arcángeles Miguel y Rafael y san Juanito, tabla de Sandro Botticelli [2] (foto 3), que en la foto podemos ver una vez finalizada su restauración. En la misma galería se encuentra la tela del Martirio de Santa Cecilia de Orazio Riminaldi, cuya restauración se describió de forma extendida en el catálogo Restituzioni 2013 [3]. 


    Muy cerca, siguiendo la orilla del río Arno, encontramos el Museo Casa Rodolfo Siviero, donde está expuesta la última de las tablas restauradas por la Oficina: el Retrato de Cosme I, un óleo del taller del Bronzino. Los que deseen conseguir documentación sobre las diferentes fases del trabajo pueden leer la publicación [4], que incluye también la descripción de otro trabajo, en esta ocasión por Shirin Afra, realizado en una figura femenina de terracota policromada y su pequeña cesta de frutas en terracota vitrificada, que se conservan siempre en el Museo Siviero; en este último caso se trata de la aplicación de Regal Varnish Mat en materiales diferentes con respecto a las clásicas pinturas sobre tela y tabla. 
    Salimos del ámbito de las pinturas, además, con el barnizado final de dos estatuas de madera policromada: una Virgen con Niño y un San José, que se encuentran en la Chapelle de Penvern, en Trébeurden (Côtes d’Armor, Francia), cuya restauración llevaron a cabo los franceses de Arthema. 
    La Aparición de la Virgen al San Andrés Corsini de Vincenzo Meucci, conservada dentro de la iglesia de San Pietro a Porto di Mezzo, Lastra a Signa (Florencia), en cambio, fue restaurada por el taller Techno-Rest-Art de Roberta Lapucci que, después de una larga campaña diagnóstica, llevó a cabo una compleja restauración que finalizó con la aplicación de Regal Retouching Varnish [5].   

    Nuestro resumen de obras barnizadas con Regal Retouching Varnish se termina con Fra Angélico que, curiosamente, está presente incluso en el otro artículo de este Boletín: el Museo Nacional de San Marcos, en Florencia, entre sus muchos tesoros, conserva una tabla al temple llamada Retablo de Annalena, cuyo nombre procede del convento del cual fue retirada durante la dominación napoleónica, realizada entre 1434 y 1443. La restauradora, Silvia Verdianelli, utilizó el Regal Retouching Varnish como barniz final aplicándolo con pistola para conseguir un efecto satinado.
       

    Este breve resumen de obras maestras solo es la punta del iceberg, de entre todas las propuestas que recibimos, porque hubiera sido imposible mencionarlas todas. Sin embargo, estamos convencidos de que estás breve anotaciones pueden ser de utilidad para todos los profesionales, con la esperanza de no haber defraudado a nadie.

    PRODUCTO:

    BARNICES FINALES BRILLANTES ART. REGAL VARNISH GLOSS 
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/482-barnices-finales-brillantes-art-regal-varnish-gloss

    BARNICES FINALES MATES ART. REGAL VARNISH MAT 
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/496-barnices-finales-mates-art-regal-varnish-mat

    BARNICES PARA RETOQUE ART. REGAL RETOUCHING VARNISH
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/500-barnices-para-retoque-art-regal-retouching-varnish

    Bibliografía   

    1.     Daniela Parenti “Nicolas Froment, il restauro della Resurrezione di Lazzaro”; Silvana Editoriale 2017.
    2.     I dipinti della Galleria Palatina e degli Appartamenti Reali – Giunti, 2015. 
    3.     Restituzioni 2013, Tesori d’Arte restaurati, catalogo digitale, Edizioni Marsilio, http://restituzioni.marsilioeditori.it/2013/docs/Restituzioni_2013_catalogo.pdf último acceso el 11 de diciembre de 2017. 
    4.     Bronzino, De Chirico e altri restauri per Casa Siviero, Vol.1 e 2, Centro Stampa Giunta Regione Toscana, 2013. 
    5.     Restituzioni 2016, Tesori d’Arte restaurati, catalogo digitale, Edizioni Marsilio, http://restituzioni.marsilioeditori.it/2016/docs/Restituzioni_2016_catalogo.pdf último acceso el 11 de diciembre de 2017.

  • 47.3 MÁS INFORMACIÓN - USAR EL CITRATO DE AMONIO

    Usar el citrato de amonio  

    Desde hace muchos años se utiliza el citrato de amonio para realizar limpiezas en diferentes tipologías de materiales. Lo más sencillo consiste en utilizar una solución ya preparada, la Saliva Sintética CTS, que es una mezcla de citrato de amonio y citrato de sodio, en unos porcentajes que permitan excluir el riesgo de dañar las superficies, y que se puede utilizar tal cual o potenciada añadiendo mucina, un fuerte surfactante. Esta última se proporciona por separado, en forma de polvo liofilizado, ya que es biodegradable cuando se mezcla con agua. Las pinturas sobre tela y tabla, y las pinturas murales son los soportes principales en los cuales se ha utilizado la Saliva Sintética CTS. 
    En los últimos años se ha ido ampliando, sin embargo, la utilización del citrato de amonio (triamonio citrato o TAC), a menudo en concentraciones elevadas, del 2% o incluso superiores, sin tener para nada en cuenta el efecto de disgregación que puede ocurrir por la acción de quelación, es decir una acción de formación de un compuesto de un catión metálico. Podemos resumir los efectos del TAC en dos tipologías de materiales que han sido objeto de dos estudios científicos profundizados. 
    ·       En las pinturas al óleo los jabones metálicos que se forman debido a una reacción entre los ácidos grasos de aceites envejecidos y determinados cationes (plomo, zinc, cobre, …), presentes como pigmentos, se pueden eliminar de las superficies. En el Boletín CTS 31.2, dedicado a la utilización de la Saliva Sintética CTS, se describió un estudio de Morrison et al.[1], en el cual los autores compararon diferentes tipos de soluciones de limpieza, basadas en amoniaco y citrato de amonio, con varias concentraciones y varios pH. La conclusión fue que una solución de TAC al 1% se puede utilizar con toda seguridad para eliminar la suciedad de un barniz, pero sobre una capa pictórica al óleo no barnizada puede causar ligeras alteraciones, incluso con un pH ligeramente alcalino (7.4).  Hay que evitar siempre, en cambio, la concentración del 2%, con cualquier pH. 
    ·       En las superficies de mármol puede haber una acción de quelación del TAC en el calcio del carbonato que constituye el mismo mármol, de forma parecida a lo que puede pasar con las soluciones de EDTA. A menudo se infravalora este fenómeno, por ejemplo, cuando se aplica de forma indiscriminada la formulación AB57, que contiene el 2,5% de EDTA disódico. La acción del TAC se ha valorado mediante mediciones de brillo en muestras de mármol abrillantado, para evaluar el brillo debido al aumento de la rugosidad superficial [2]. Se llevaron a cabo, además, mediciones de solubilidad del mármol en soluciones de TAC al 2% y al 5% con diferentes valores de pH. Se sacaron las siguientes conclusiones: 
    ✓  El ataque aumenta según va aumentando la concentración (come era de esperar) 
    ✓  El ataque es mayor con un pH neutro, y baja con el aumento del pH (hasta un pH máximo comprobado de 10). Este hallazgo coincide con el hecho de que la disolución del carbonato de calcio está ligada a la formación del ácido carbónico como intermedio. A niveles de pH elevados disminuye la concentración de ácido carbónico. 
      Las mediciones de brillo siguen de forma coherente las de la solubilización: el efecto mínimo se consigue para la solución al 2% con pH 10. 
    ✓  La pérdida de brillo es menor si la compresa se mantiene cubierta (previniendo, de esta forma, la evaporación del amoniaco y, por tanto, la reducción del pH. 
    ✓  Con las mismas concentraciones y el mismo pH, el EDTA es más agresivo que el TAC: incluso al 2% y con un pH 10 el EDTA genera un ataque visible de la superficie del mármol.     
       
    Este último resultado conseguido mediante pruebas de laboratorio es coherente con lo que se observó en el Politécnico de Milán en las pruebas de limpieza del Tornacoro del Duomo de Milán [3]. Los altorrelieves del Tornacoro, que se encuentra en la zona del ábside, estaban ofuscados por una pátina de materia grasa y partículas. Con unas mediciones colorimétricas, FTIR y SEM-EDX se detectó como sistema de limpieza menos eficiente una pasada sólo con agua desmineralizada, seguido - con la misma eficacia - por la misma técnica, pero con agua gelificada mediante AgarArt, y por soluciones (1%, siempre gelificadas con AgarArt) de TAC, de los tensoactivos no-iónicos Tween 20 y poliaspartato (PASP); finalmente, el máximo efecto de limpieza se consiguió con el gel de AgarArt, siempre con el 1% de EDTA disódico. Este nivel de limpieza, sin embargo, estaba asociado a una parcial corrosión de la superficie del mármol, y por eso quedó descartado. En el gráfico (foto 1) siempre procedente detomado de las pruebas de limpieza del Tornacoro del Duomo de Milán [3], resulta evidente que los valores colorimétricos detectan el EDTA como el sistema más eficiente, es decir más alejado del valor inicial (el punto negro): el aumento de L*, sin embargo, está ligado a una parcial corrosión de la superficie del mármol, detectada mediante microscopio óptico.   

    Para concluir, podemos sugerir la utilización del TAC para la limpieza del mármol (y, en general, de piedras carbonatadas), en porcentajes máximos del 2%. Como el producto puro tiene en el agua un pH incluido entre 7 y 8, es oportuno alcalinizar la solución con pequeños % de amoniaco, para llevar el pH aproximadamente hasta 10.    

    Captura%20de%20pantalla%202018-12-05%20a

      

    PRODUCTO:

    AMONIO CITRATO TRIBASICO (TAC)
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/316-amonio-citrato-tribasico-tac

    Bibliografía 

    1.     Morrison R., Bagley-Young A., Burnstock A., van den Berg K.J., van Keulen H.; “An investigation of parameters for the use of citrate solutions for surface cleaning unvarnished paintings”, Studies in Conservation 52 (2007). 
    2.     Gervais C., Grissom C.A., Little N., Wachowiak M.J.; Cleaning Marble with Ammonium Citrate”, Studies in Conservation 55 (2010). 
     3.     Gulotta D., Saviello D., Gherardi F., Toniolo l., Anzani M., Rabbolini A., Goidanch S.; “Setup of a sustainable indoor cleaning methodology for the sculpted stone surfaces of the Duomo of Milan”, Heritage Science, 2014, 2:6.

  • 46.1 MÁS INFORMACIÓN - ¡UN MORTERO ALCOHÓLICO!

    ¡Un mortero alcohólico! 

    En el último número de la acreditada revista Studies in Conservation merece la pena subrayar un estudio profundizado sobre la aditivación del alcohol etílico a los morteros da inyección, llevado a cabo por Dª Chiara Pasian (University of Malta), Dª Francesca Piqué y D. Albert Jornet (SUPSI, Lugano).

    En la práctica usual de inyección de un mortero líquido detrás de un revoque o una pintura mural descolgada del soporte, así como en el interior de una pared debilitada o por debajo de un mosaico levantado, hace falta utilizar un producto que añada a una serie de propiedades químico-físicas, dos calidades fundamentales: baja viscosidad y ausencia de sales.
    Precisamente por estas dos propiedades la serie de morteros PLM siempre se ha distinguido con respecto a los productos de la competencia, como recordamos en otros artículos del Boletín CTS (18.1_ PLM: ¡Desde hace veinte años bajo la lupa!  y 30.2_ PLM: los exámenes nunca terminan…). No es una casualidad que se haya convertido en el mortero de inyección de referencia para muchísimos restauradores, con 30 años de aplicaciones en innumerables obras.
    Se sabe que es siempre aconsejable pre-mojar las zonas en las que se inyecta el mortero, tanto para desplazar los polvos eventualmente presentes, que podrían atascar la inyección, como para evitar que el agua de la mezcla sea absorbida demasiado rápido, contrarrestando una reacción correcta de fraguado y el encogimiento del mortero mismo.
    A veces, sin embargo, puede aparecer el problema de la migración del agua, que desplaza las sales u otros materiales hidrosolubles.
    Establecer la tipología de las sales presentes y proceder a una cuidadosa desalinización de la pintura mural, del revoque o de la pared, no es siempre posible. Por lo tanto se intenta reducir la cantidad de agua utilizada, con tres pequeños trucos.
        • Pre-mojar con alcohol o mezclas de agua/alcohol, y no sólo con agua.
        • Aislar las superficies de la laguna. Esto es posible raramente.
        • Reducir la cantidad de agua en el mortero: esta es la posibilidad brindada por las PLM que, gracias a su contendido de súper-fluidificante permiten tener una baja viscosidad incluso con un % de agua del 80%. Como se ha demostrado en el transcurso del estudio es incluso posible forzar este % hasta llegar al 65%, sin perder la fluidez necesaria.

    Podemos recorrer también otro camino, a veces adoptado de forma empírica, pero hasta ahora nunca estudiado de forma científica: añadir al mortero alcohol etílico y no agua. Esta es la línea de investigación en el estudio, que a continuación vamos a resumir.
    Claramente añadir solo alcohol etílico es una solución ineficaz: hace falta siempre una cierta cantidad de agua para que los ligantes hidráulicos puedan desarrollar correctamente su reacción de agarre. ¿Pero en qué cantidad?
    En la primera fase los investigadores han ido probando diferentes relaciones agua/alcohol, hasta alcanzar un porcentaje óptimo del 25% de agua y 75% de alcohol, con la adición del 40% de una arena silícea fina.
    Curiosamente la mezcla agua/alcohol 50/50 no ha proporcionado resultados satisfactorios.

    Por tanto se establecieron las propiedades de tres formulaciones basadas en la PLM-A, además de otros morteros similares; una “estándar”, con la adición sólo de agua, una segunda con adición de arena silícea y sólo agua, y la tercera con arena y una mezcla agua/alcohol en la proporción 25/75. En la tabla a continuación se indican las composiciones de los 3 morteros a base de PLM-A probados.

    Sigla

    Fase líquida añadida  (65% con respecto al peso del polvo)

    Inertes añadidos

    A65/100

    100% agua

    No

    A65/100F

    100% agua

    Sí 40%

    A65/25F

    25% agua y 75% alcohol etílico

    Sí 40%

    En la tabla a continuación se indica un resumen de los datos conseguidos para los otros tres morteros a base de PLM-A.

     

    A65/100

    A65/100F

    A65/25F

    Tiempo de fraguado (días)

    2.2

    2.1

    2.8

    Resistencia a la difusión de vapor µ

    7

    12

    11

    Coeficiente de permeabilidad qw (g/m2h)

    9.4

    9.1

    8.1

    Absorción de agua capilar en 24 horas W24 (Kg/m2)

    8.7

    7.3

    6.3

    n (%) porosidad total

    57.6

    50.3

    46.5

    UE (%) porosidad capilar

    47.5

    41.6

    39.7

    d (g/cm2) densidad

    1.1

    1.3

    1.4

    σf Resistencia a la flexión (N/mm2)

    1.2 ± 0.3

    1.5 ± 0.2

    0.9 ± 0.6

    σc Resistencia a la compresión (N/mm2)

    1.7 ± 0.4

    3.1 ± 0.5

    3.6 ± 0.3

    σf Resistencia al desgarro (N/mm2)

    0.2 ± 0.0

    0.2 ± 0.0

    0.5 ± 0.1



    Para resumir las conclusiones de los autores podemos considerar que la adición de una parte consistente de alcohol no varía de forma sensible los tiempos de fraguado, la fluidez y, por tanto, la inyectabilidad, y reduce tanto la absorción de agua como la porosidad, pero a niveles todavía aceptables.

    La resistencia a la difusión de vapor µ entra dentro del intervalo normal que se consigue con morteros normales de cal aérea (5< µ <15), y aumenta con la adición de inerte, como es previsible, pero no varía de forma sustancial utilizando sola agua o la mezcla hidroalcohólica.

    Por lo que atañe a las resistencias mecánicas la adición de alcohol lleva a una disminución de la resistencia a la flexión y a un aumento a la compresión, en línea, de todas formas, con los valores de referencia para los morteros conseguidos mezclando arena y cal hidráulica NHL (0.5-1.0 para la flexión y 2.5-5.6 para la compresión).

    Considerando el valor de resistencia al desgarro la mezcla con alcohol tiene una resistencia interna incluso superior con respecto a las formulaciones sólo con agua.

    En conclusión ahora podemos sugerir, en caso de que no queramos mojar demasiado el soporte en el cual vamos a inyectar el mortero, pre-mojar con una mezcla de agua/alcohol, y añadir una arena fina al PLM-A hasta un máximo del 40%, y luego el 65-80% de una mezcla de agua/alcohol 25/75.

    PRODUCTO:

    MORTERO PLM - A  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/197-mortero-plm-a


    Bibliografía:
    C. Pasian, F. Piqué, A. Jornet; “Non-structural injection grouts with reduced water content: Changes induced by the partial substitution of water with alcohol” Studies in Conservation Vol.62, n°1, 2017.

  • 46.2 MÁS INFORMACIÓN - INCRAL 44 SOBRE PLATA

    Incral 44 sobre plata

    En el Boletín CTS 19.3 de 2009 hablamos de las problemáticas relativas a la protección de las platas. Como es sabido, el talón de Aquiles de este metal es su reactividad en presencia de sulfuro de hidrógeno (H2S), que origina la tan característica pátina negra, llamada también tarnishing. Este fenómeno aparece siempre, ya que los sulfuros son contaminantes presentes en todos los entornos, aunque en bajas concentraciones, y se puede observar también en objetos dejados en entorno marino, gracias a la acción de las bacterias sulfato-reductoras. 
    La compleja reacción de oxidación, en la que participan los gases que contienen azufre junto con el oxígeno y la humedad, que lleva a la formación del sulfuro de plata negro, se puede esquematizar de la siguiente forma:

                                                                              2Ag + H2S → Ag2S + H2 

    Las patinas detectadas en objetos de plata son casi todas pasivantes y se eliminan principalmente por motivos estéticos, para volver a descubrir las trazas del trabajo superficial o las decoraciones. 
    La limpieza mecánica de la plata es una operación delicada, ya que en la superficie de este metal es especialmente fácil inducir modificaciones superficiales no deseadas, y solo hay que llevarla a cabo si no es posible intervenir con otros medios o para eliminar pátinas muy gruesas. En general se utilizan como ligeros abrasivos dispersiones de bicarbonato de sodio o de carbonato de calcio, trabajados delicadamente mediante tampón y/o pincel, o materiales suaves como las gomas: estas problemáticas las ha tratado Dª Giulia Basilissi en su tesis de licenciatura en el Opificio delle Pietre Dure, presentada también en el Congreso IGIIC de L’Aquila junto con el químico D. Andrea Cagnini, y descrita en un artículo publicado posteriormente en OPD Restauro [1,2]. 
    Los objetos sobre los cuales se han probado los diferentes tratamientos eran tres obras en aleación de cobre damasquinadas, de producción islámica: un candelabro, un estuche y una copa. La técnica del damasquinado (en italiano 'agemina', del latino ad gemina metalla, de dobles metales), consiste en la introducción de un metal mediante martillado (por ejemplo plata, o bien oro o cobre) en las ranuras de otro metal (en nuestro caso una aleación de cobre). Una técnica similar es la del niel, donde en las ranuras se extiende una mezcla de sulfuros de diferentes metales bajo forma de polvo de color negro (de ahí “niel”), que se funde para que se adhiera al metal del fondo, a menudo plata.
    Resulta evidente que, debido a la finura de las taraceas la limpieza de estas obras requiere un cuidado especial, (ver Fotografía).
    La primera parte de la tesis se basaba precisamente en una comparación entre los métodos mecánicos de limpieza y las clásicas soluciones de agentes quelantes, Sales de Rochelle y EDTA, que ha llevado la elección hacia una goma-lápiz (Perfection 7057 con punta rosa de Faber-Castell).
    La segunda parte de la tesis analizaba, en cambio, la problemática de la protección de las platas, una vez eliminada la pátina de sulfuro. Se han comparado diferentes productos utilizados tradicionalmente: el barniz nitrocelulósico Zapon de Lechler, el protector Incral 44 de C.T.S. y algunas ceras microcristalinas. Además se han valorado también dos tratamientos bicapa (Zapon + cera e Incral 44 + cera) que, de acuerdo con la literatura relativa a la protección de los bronces, son más eficaces.
    Los protectores se han aplicado en muestras de plata, sometidas posteriormente a ciclos de sulfuración, y se han establecido los valores colorimétricos y de gloss (brillo).
    Una escasa protección se asocia a una rápida formación del sulfuro de plata negro (Ag2S), con el consiguiente ennegrecimiento de la superficie, que se puede medir en las lecturas colorimétricas. Una buena protección, en cambio, consigue unas variaciones de color mínimas.
    De entre los tratamientos individuales, él que ha dado una variación menor en términos de color ha sido el tratamiento solo con Incral 44, mientras que las ceras, en la concentración probada, no han dado una buena protección, y el Zapon a nivel intermedio, como se puede ver en la tabla sinóptica. De entre los tratamientos bicapa, el mejor ha sido él con Incral 44 más cera microcristalina que, de hecho, ha sido finalmente utilizado para la protección de las platas damasquinadas. 

    Tratamiento N° de capas   ΔE después de 4 fases de sulfuración
    Zapon al 70% en diluyente nitro o diluyentes alternativos de baja toxicidad  1 15,11-21,39
    Incral 44 tal cual  1 6,32
    Incral 44 al 70% en butil acetato  1 8,80
    Cera microcristalina R21 al 2% en ciclohexano 1 38,66
    Cera Reinassance 1 44,26
    Zapon + cera microcristalina R21  2 6,09
    Incral + cera microcristalina R21  2 2,37
                                                                                                              
    Para concluir, aunque para las platas no sea una práctica rutinaria, sin embargo el tratamiento protector con Incral 44 y cera microcristalina puede ayudar de forma eficaz a ralentizar la reaparición de la pátina negra de sulfuro. La duración de este tratamiento se incrementa conservando los objetos en un ambiente protegido (exento de sulfuros y con HR <40%).

    PRODUCTO:

    INCRAL 44  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/189-incral-44


    Bibliografía:

    1. Giulia Basilissi, Annalena Brini, Andrea Cagnini, Cinzia Ortolani; “ll restauro di tre manufatti islamici ageminati come caso studio. Metodologie di pulitura e protezione dell'argento: introduzione di una tecnica dry con gomme e considerazioni sui formulati protettivi”. OPD Restauro n. 28 (2016)
    2. Giulia Basilissi, Andrea Cagnini; “Ricerca e sperimentazione di nuove metodologie di pulitura dell’argento e messa a punto di idonei formulati protettivi”, Atti del XIV Congresso Nazionale IGIIC – Lo Stato dell’Arte, L’Aquila 20/22 ottobre 2016.
  • 46.3 NUEVOS PRODUCTOS - EL PAPEL HANJI EN LA CONSOLIDACIÓN DE FIBRAS VEGETALES

    El papel Hanji en la consolidación de fibras vegetales  


    LAS CESTAS DE LA COLECCIÓN DEL MUSEO EGIPCIO DE TURÍN EL RESTABLECIMIENTO DE LA ESTABILIDAD CONSERVATIVA Y DE LA  LEGIBILIDAD DE LA OBRA  

    El Museo Egipcio de Turín tiene una colección muy rica de restos arqueológicos, de entre los cuales podemos encontrar también numerosas obras en fibras vegetales. 
    La conservación de este tipo de obras es a menudo muy compleja. De hecho, los trenzados de fibras naturales están caracterizadas por una gran facilidad de deterioro debida a causas exógenas, como la falta de idoneidad ambiental (antes de la musealización), los traumatismos en los desplazamientos, pero también la oxidación y el envejecimiento natural, que conllevan una fragilidad acentuada. 
    En este caso específico se trataba de dos cestas en las que trabajaron el Laboratorio Restauro e Analisi Thierry Radelet y Dª Federica Miglietta, restauradora de obras en fibras vegetales, autores de esta comunicación. 
    Las dos obras estaban en pésimas condiciones de conservación (véase la foto 1” relativa a la cesta antes de la restauración), y el trenzado de las dos cestas sufría un fuerte deterioro que, en algunos casos, había causado el descuelgue de unas partes de fibras vegetales, con la consiguiente pérdida de una porción de trenzado y la formación de importantes lagunas (foto 2: cesta antes de la restauración). Además, debido a una fuerte oxidación, las fibras eran frágiles y caracterizadas por la pérdida continua de material. La intervención de restauración propuesta en las dos cestas tenía por objetivo el restablecimiento de la legibilidad de la obra devolviéndola a su estado compositivo original, sin dejar de lado la importancia de la biografía y de la historia del objeto, para poderle devolver su utilidad a efectos del conocimiento. 
    La elección de los métodos prácticos de intervención propuestos ha sido precedida por una cuidadosa valoración del valor documental de la obra; el objetivo de la intervención ha sido, por tanto, alcanzar un estado duradero de conservación y devolver la dignidad expositiva de la obra sin alterar su valor semiótico testimonial y manteniendo su capacidad narrativa. 
    La necesidad primaria consistía en la consolidación del trenzado de fibras vegetales para otorgar estabilidad a la obra. Se han integrado todas las partes en las cuales, en los haces de fibras vegetales, faltaba material constitutivo original: donde ha sido posible se ha procedido con la reintegración de algunos de los haces de fibras vegetales disponibles, despegados del trenzado original, posteriormente atados con unas hojas de papel Hanji (100% kozo coreano, 19-22 g.). El papel se ha pigmentado adecuadamente para conseguir un tono similar al original, y posteriormente cortado en tiras del mismo grosor que las fibras vegetales originales y pegado con una cola adecuada. Se han consolidado con la misma metodología también todos los haces de fibras vegetales que, debido al deterioro del trenzado original, se estaban descolgando del cuerpo de la cesta: todas las partes descolgadas del trenzado original se han reposicionado y fijado a la estructura mediante unas tiras de papel Hanji. 
    La intervención de restauración llevada a cabo está caracterizada por acciones técnicas precisas con el objetivo de una intervención mínima y reversible para restablecer la estabilidad conservativa y de forma propositiva para una correcta lectura de la obra (foto 3 y 4: las dos cestas después de la restauración).

    Captura de pantalla 2019-01-31 a las 18-
    Foto 1 Foto 2
    Captura de pantalla 2019-01-31 a las 18-
    Foto 3  Foto 4

  • 45.1 NUEVOS PRODUCTOS - VALIDACIONES Y PRESTIGIOSAS RESTAURACIONES PARA EL PAPEL DE MORERA HANJI

    Validaciones y prestigiosas restauraciones para el papel de morera Hanji  

    Los papeles Hanji y la validación del Instituto de Patología del Libro

    El pasado 15 de diciembre se celebró la Ceremonia para la entrega por parte del Instituto Central para la Restauración y la Conservación del Patrimonio Archivístico y Librario del Certificado de Validación de los papeles Uiryeong Shinhyeonse Traditional Hanji, utilizados en la restauración de los bienes archivísticos y librarios. 
    Este evento ha sido el resultado natural de una relación bilateral que se ha desarrollado a lo largo de estos últimos años entre las dos Penínsulas, la Italiana y la Coreana, donde se ha ido generando una fuerte alianza entre la excelencia de la restauración italiana y la excelencia del trabajo de la fibra de morera en Corea. 
    Los laboratorios científicos del ICRCPAL ya han analizado diferentes tipos de papeles Uiryeong Hanji, amablemente proporcionados por la Embajada de la República de Corea, de entre los cuales el Uiryeong Shinhyeonse Traditional Hanji 1 y el Uiryeong Shinhyeonse Traditional Hanji 2. 

    En el encuentro bilateral se ha presentado un informe sobre los análisis realizados y los resultados conseguidos: los papeles Hanji seleccionados se han sometido a cuidadosos análisis químicos, físicos, tecnológicos y de resistencia al ataque biológico, realizados antes y después del envejecimiento artificial de las muestras, que han demostrado su buena calidad.

    Los papeles Hanji se han probado también en el laboratorio de restauración y posteriormente utilizados en algunos importantes documentos:
        • Chartula de San Francisco (1224), conservada en la Iglesia inferior de la Basílica de S. Francisco de Asís, donada por el Santo a fray León, su secretario, confidente y confesor;
       • Codex Purpureus Rossanensis (siglo VI), evangelio miniado conservado en el Museo Diocesano de Rossano Calabro, declarado patrimonio de la UNESCO en 2015, e introducido en los 47 nuevos documentos del Registro de la memoria mundial;
        • Armorial del Archivo Histórico del Ayuntamiento de Cagliari (siglo XVI-XVII);
        • Volumen musical 243 de la Biblioteca Casanatense de Roma (1724).

    Estos dos papeles están fabricados por el maestro papelero coreano Hyeonse Shin y se corresponden en nuestro catálogo de papeles de morera coreanos a los "Hanji" identificados con el código 1401 y 1502. 

    Los papeles de Hyeonse Shin y la experiencia del Grupo 130
    Algunos papeles de Hyeonse Shin han sido analizados también por los laboratorios científicos de los laboratorios experimentales de la celulosa en Innov HUB- Cámara de Comercio de Milán por el Grupo 130, un grupo de restauradores europeos que trabajan tanto para entidades públicas como privadas, mayoritariamente procedentes de la península italiana, nacido con ocasión del 130 aniversario de las relaciones bilaterales entre Corea e Italia. El Grupo 130, con ocasión del congreso Adapt and Evolve organizado por el ICON el pasado 2015 en Londres, estudió las aplicaciones técnicas del papel Hanji como soporte temporal y permanente para la restauración de material de papel antiguo y moderno, material fotográfico, cuero y pergamino.  Los resultados de este estudio se han presentado, y profundizado en cada ocasión, en el transcurso de las intervenciones y de las aplicaciones en los Museos Vaticanos, la Biblioteca Ambrosiana de Milán, los Archivos Históricos de Turín y Villa Fabris en Thiene.  

    La última iniciativa es el próximo taller organizado por Federica Delia, una de las restauradoras del grupo 130. Este es el enlace al mismo:
    http://restaurolibro.com/corsi/laboratori/

    Finalmente, mencionamos también la restauración del Mapamundi de Papa Juan XXIII por el taller Conservazione Opere su Carta Nella Poggi (protagonista de la introducción en Italia de esta tipología de papel con peculiares prestaciones y que se ha dedicado durante aproximadamente 10 años a la investigación con viajes a Corea, estudios, búsquedas, análisis y debates) y que ha seleccionado, respectivamente para esta restauración los papeles 1901 y 1303, para la aplicación temporal y permanente, con excelentes resultados por su resistencia mecánica, adaptabilidad en 3D y estabilidad dimensional. También los papeles 1303 y 1901, presentes en nuestro catálogo, son obra del Maestro Papelero Shin.

    Desde los papeles de Hyeonse Shin y de otros maestros papeleros coreanos al compromiso de CTS para garantizar la calidad del producto introducido en el mercado y satisfacer las diferentes exigencias de los restauradores.

    Los papeles de Mr Shin, como los producidos por otros maestros papeleros coreanos seleccionados por CTS para el proyecto “Hanji, papeles para su utilización en la restauración”, se fabrican con:
    1. Materia prima en el territorio de producción y su trabajo: 
    Se selecciona sólo la fibra más interna de la corteza de la Broussonetia Papyrifera, planta nativa de Corea (dak, chamdak en coreano), depurada con lejía (en lugar de sosa cáustica), aclarada en agua corriente, blanqueada al sol. Para la preparación de la pulpa y para el peculiar drenaje del agua en el bastidor, se emplea el mucílago del hibisco de la puesta del sol como espesante del agua.
    2. Geometría de la forma, dimensiones y peso
    Mientras que los maestros papeleros japoneses se han ido especializando en la realización de producción de papeles de bajo gramaje, los coreanos son famosos por los papeles de alto gramaje; sin embargo, en ambos países encontramos la convivencia de papeles de bajo y alto gramaje. En Corea encontramos, sin embargo, la convivencia de dos bastidores estructurados de forma muy diferente, de los cuales uno es común en la tradición japonesas (ssangbal, de doble bastidor), mientras que el otro es autóctono y peculiar de la península coreana (webal, con un sólo bastidor). 
    El bastidor Webal se diferencia con respecto al bastidor “ssangbal”, de doble bastidor, por el drenaje diferente del agua en la fase de producción de la hoja. Este bastidor específico permite la producción de una hoja laminada con un cruce de las fibras multi-transversal otorgándole al papel, una vez seco, una resistencia al desgarro superior con respecto a los papeles producidos con el bastidor ssangbal/estilo japonés.
    3. Agua: se le requiere a los maestros papeleros que empleen agua pura sin demasiadas sustancias minerales.
    4. Secado de la hoja: para la restauración sobre papel, gracias al trabajo desarrollado por los restauradores que han trabajado en este proyecto, es preferible el secado sobre madera en lugar del secado sobre metal; el secado sobre madera es mucho más gradual y el resultado final es un papel mucho más suave, mientras que sobre metal el papel se queda más seco (debido al estrés térmico a que se somete la fibra que lleva a una evaporación más rápida del agua).
    5. Ildochim o calandrado: esta operación se desarrolla de forma manual para comprimir las fibras y hacer que, a través de una acción de tipo mecánico, sean menos absorbentes.

    Utilización del papel Hanji producido con bastidor Webal y SSAng BAL 
    Los papeles Hanji fabricados con bastidor Webal o SSAngbal se pueden utilizar en la restauración de papel tanto para aplicaciones temporales como permanentes.
    En nuestro catálogo está presente la gama de papeles Hanji que hemos seleccionado, con las características que le permiten al usuario elegir el papel según la condición en la que lo desea aplicar. 
    Por ejemplo, el papel Webal es, desde cierto punto de vista, menos utilizable para arreglar desgarros y huecos; Es cierto, además, que para poder desflecar el papel de morera fabricado con el bastidor Webal, la utilización de alcohol permite realizar un excelente corte desflecado consiguiendo unas tiras muy finas y resistentes y, por tanto, es una nueva herramienta para determinadas operaciones. Al mismo tiempo el Hanji fabricado con bastidor webal es excelente para forrados, incluso en 3D, por su estabilidad dimensional y al mismo tiempo adaptabilidad al cuerpo con el cual entra en contacto, gracias a la peculiar distribución de las largas fibras cruzadas. 
    C.T.S., que desde la introducción del papel Hanji en Italia, ha ido apoyando la investigación, con este artículo quiere renovar su gratitud a todos los operadores que han participado en ello, gracias a los estudios llevados a cabo, a las soluciones que ha ofrecido la utilización del Hanji  y al análisis de los resultados conseguidos, tiene el placer de poder ofrecer a sus propios consumidores un producto artesanal que se puede convertir en una valiosa herramienta operativa.

    Algunas imágenes del proyecto Hanji:
    - Mou Signing Ceremony for Collaborative Research on Cultural Heritage Preservation ICRCPAL (Nella Poggi, Foto 1
     - 29 de Enero de 2017. Congreso A thousand year of Hanji, Hanji  Meets the World, Messe Frankfurt, Francoforte Foto: Korea Art and Craft Foundation (Foto 2).
    - Taller sobre las Tinturas Naturales en el papel Hanji con el método tradicional coreano, Villa Fabris, Thiene. Restauradores del papel y de la restauración textil comparten sus experiencias durante dos días en los laboratorios del Centro Europeo para los Oficios del Patrimonio (Foto 3).
    - El grupo 130° en el taller en la Biblioteca Trivulziana en Milano (Foto 4).

    Captura de pantalla 2019-01-31 a las 18- Captura de pantalla 2019-01-31 a las 18-
    Foto 1 Foto 2
    Captura de pantalla 2019-01-31 a las 18-
    Foto 3  Foto 4

  • 45.2 MÁS INFORMACIÓN - COMPRESAS: SEPIOLITA O ARBOCEL?

    Compresas: Sepiolita o Arbocel?  


    Cuando nos enfrentamos al problema de desalinizar una pintura mural, un revoque o una mampostería, tenemos que detectar la tipología de sales presentes, a través de un diagnóstico adecuado, para poder proceder a las dos elecciones siguientes: 
        1.   Elegir la solución a aplicar (que puede ser incluso sólo agua desmineralizada, o una solución de carbonato de amonio en presencia de sulfatos, u otra más). 
        2.   Elegir el mejor material de soporte para la compresa. En un estudio desarrollado por la Politécnica de Milán [1], al que nos remitimos para el detalle del análisis, que aquí nos limitamos a resumir, se han aplicado dos tipologías de compresas sobre varios tipos de superficies, con diferentes resultados. 

    Condiciones operativas 
    Tipo de compresa: sepiolita + 55% de agua y pulpa de celulosa + 22,5% de agua. 
    Tiempo de contacto: hasta el secado (20 días). 
    Número de compresas: 2, con análisis realizados tanto después del primero como después del segundo.   

    En la tabla más abajo se indican los porcentajes de las sales detectadas en las áreas de muestra, antes y después del tratamiento de desalinización. 


    Podemos concluir que con estas condiciones operativas y estas tipologías de sales, la sepiolita actúa con mayor eficacia en el marmorino, mientras que en los otros dos casos es la pulpa de papel la más eficiente.   
    En una profundización posterior se han valorado los porcentajes de absorción sólo de los aniones, es decir la componente que puede generar los principales problemas.  

    Tipo de superficie Tipo de sales superficiales (cantidad)  % de abatimiento con sepiolita % de abatimiento con pulpa de papel
    Revoque grueso Sulfatos 116 29
    Revoque con capa pictórica Sulfatos (elevado) 17 20
    Acabado en falso marmorino en estuco brillo Sulfatos y nitratos (elevados) 298 61




    Tratándose de valores en porcentaje 
    -¿Cómo es posible conseguir valores superiores a 100?-
    - Esto es debido a una cantidad de sal extraída superior con respecto a la determinada en la superficie antes de la compresa. En otras palabras, en dos casos las compresas con sepiolita extraen también unas sales presentes por debajo de la superficie y, en el caso del marmorino, incluso en cantidades importantes.   

    Un segundo estudio del CNR-ICVBC [2] ha comparado un producto preparado para el uso con una mezcla de sepiolita y pulpa de celulosa. Condiciones operativas 
    Tipo de compresa: Westox Cocoon y mezcla de sepiolita y pulpa de celulosa (Arbocel BC 1000) en relación 1:1, con agua desmineralizada como aditivo.
    Tiempo de contacto: hasta el secado (20-30 días). 
    Número de compresas: 2, con análisis realizados tanto después del primero como después del segundo.   

    En la tabla se resumen los resultados relativos a las sales antes y después de las compresas.   

    Tipo de superficie
    Reducción % después de la 1ª aplicación 

    Reducción % después de la 2ª aplicación 
     Westox Cocoon Sepiolita + Arbocel Westox Cocoon  Sepiolita + Arbocel 
    -Ladrillos vistos  10,3 12,5 67,0 67,6
    -Ladrillos cubierto por revoque de marmorino 30,6 -2,3 64,8 73,6


    Este estudio también confirma lo que se lleva observando desde hace tiempo tanto en obras como en diagnósticos: la primera compresa pone en movimiento las sales y las atrae hacia la superficie (así, a veces, empeora la situación); en el caso de la compresa Sepiolita/Arbocel después de la primera compresa se consigue incluso una reducción negativa, es decir que hay más sales que antes. 
    Sólo la aplicación de una segunda compresa lleva a una eliminación eficaz de las sales. De hecho, las dos tipologías de compresas se nivelan con la 2ª pasada alrededor de reducciones del 68%. Una valoración ulterior para una elección adecuada se hará siempre de acuerdo con la simplicidad de eliminación del material de la compresa: la sepiolita presenta más dificultades en caso de superficies muy porosas o en las cuales están presentes micro-grietas. De hecho, las partículas, más finas con respecto a las fibras de la celulosa, se pueden quedar atrapadas y requerir una intervención más cuidadosa para su eliminación. En estos casos puede ser necesaria la interposición de un papel japonés, con el correspondiente aumento de los tiempos y de los costes. Una vez más podemos concluir que no existe el material perfecto, sino que tenemos que llevar a cabo siempre una valoración correcta tanto del material a eliminar, como del soporte en el que vamos a trabajar: una simple medición de las sales, entonces, nos puede ayudar a ahorrar tiempo y dinero, y a optimizar el resultado.

    PRODUCTO:

    SEPIOLITA
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/340-sepiolita

    PULPA DE PAPEL ARBOCEL®
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/339-pulpa-de-papel-arbocel

    Bibliografía

    1. Valentini M., Negrotti R., Braggio R., Bramante S., Vicentini R., “Efficacia di due materiali per impacco nella rimozione dei sali solubili dalle superfici murarie”, VII Congresso Nazionale IGIIC “Lo stato dell’arte 7”, Napoli, 8-10 ottobre 2009.
    2. Tiano P., Matteini M., Cianchetti R, Schonhaut G.; “Prove di rimozione di sali solubili a mezzo impacchi estrattivi da materiali porosi”, VI Congresso Nazionale IGIIC “Lo stato dell’arte 6”, Spoleto, 2-4 ottobre 2008.
  • 45.3 NUEVOS PRODUCTOS - UN ANTIGUO, NUEVO DISOLVENTE: EL CARBONATO DE PROPILENO

    Un antiguo, nuevo disolvente: el carbonato de propileno.

    No ha sido algo inmediato la introducción del carbonato de propileno en la sección “Nuevos Productos”, ya que en este caso estaríamos hablando de un disolvente conocido ya hace tiempo: incluso la Masschelein-Kleiner habla de ello en su fundamental “Les solvents”, que se remonta al lejano 1981 [1]. También Horie, en su sagrado “Materials for Conservation” [2] de 1988, lo menciona, sin embargo luego se pierden sus huellas. Hoy queremos volver a proponer al mundo de la restauración este disolvente, por unas razones que serán evidentes una vez leídas estas pocas líneas.   

    Un disolvente muy polar
    El Carbonato de Propileno (PC) es un disolvente aprótico (es decir que no contienen grupos desde los cuales se pueda separar un protón, H+, como es el caso del grupo hidroxilo de los alcoholes), con un elevado momento de dipolo, superior por ejemplo al ya elevado de la acetona (4,9 D vs 2,9 D). Con una aportación de polaridad tan elevada (Fp=38) el PC se distingue de todos los demás disolventes: de hecho, los que se acercan más son la acetona (que en muchos casos, sin embargo, es demasiado volátil), y la N-metilpirolidona, a evitar debido a su toxicidad. En muchos aspectos nos acercamos más al dimetilsulfóxido.

    Disolventes apróticos polares

      H

    Fd 

    Fp   

    Fh 

    Vevap (BuAc=1)

    Carbonato de propileno

    13,3

     48  

    38  

    14   

    <0,005

    Acetona                         

    9,8    

     47   

    32     

    21 

     7,8

    N-metilpirolidona         

    11,2 

     48 

    32   

    20   

     0,04

    Dimetilsulfóxido

    12,1  

    41   

    36    

    23    

    <0,1

    H = parámetro de solubilidad de Hildebrandt (MPa(1/2))


    Su característica más interesante para la restauración está relacionada precisamente con su polaridad. Como es sabido las resinas sintéticas, envejeciendo, son cada día más polares debido a la formación de grupos oxigenados en las cadenas, además de reticular con el consiguiente aumento de sus dimensiones. Una de las intervenciones cada día más frecuentes es la eliminación de antiguas resinas como el Vinavil o el Paraloid, aplicadas sobre pinturas murales o sobre pinturas sobre tela o tabla. Como es sabido, en el pasado se probaron unas microemulsiones con disolventes para la eliminación de ceras naturales desde pinturas murales [3]. En 2008 esta línea de investigación fue retomada por el CSGI de la Universidad de Florencia, con el desarrollo de un sistema modificado, para quitar antiguos fijadores vinílicos/acrílicos que estaban dañando las pinturas murales de los Mayas conservadas en el sitio arqueológico de Mayapán (Yucatán, México).
    Al final del estudio, la microemulsión que ha proporcionado los mejores resultados ha sido la basada en carbonato de propileno y acetato de etilo, lo que indica claramente la eficacia de esta mezcla.  
    Esta microemulsión aceite-en-agua (O/W), llamada “EAPC” se ha probado con éxito también para la eliminación de los fijadores acrílicos de las pinturas del sitio de Cholula (México) y para la eliminación de los protectores a base de silicona de las decoraciones parietales de la Gruta de la Anunciación en Nazareth, Israel [4].

    Un disolvente lento
    El PC tiene un punto de ebullición alto (242°C), una tensión de vapor muy baja, y por lo tanto evapora muy lentamente, por ello es necesaria su gelificación cuando se quiere aplicar sobre superficies pictóricas. Se aconseja también su uso mezclado con disolventes más volátiles, como el acetato de etilo arriba indicado, o alcohol etílico e isopropílico. Los mismos disolventes se pueden utilizar posteriormente en fase de lavado para eliminar los residuos del mismo disolvente o del gel eventualmente utilizado.

    ¿Un disolvente "verde"?
    El PC se ha clasificado como “VOC-free”, es decir un disolvente que, debido a su baja actividad fotoquímica, baja toxicidad y alta biodegradabilidad no entra dentro de aquella categoría (VOC es el acrónimo de Volatile Organic Compounds, o Compuestos Orgánicos Volátiles, COV), que está sometida a restricciones especiales. Está clasificado como ligeramente irritante, y se ha etiquetado de la misma manera. Debido a su baja evaporación es prácticamente inútil valorar el TLV (Valores Límite Umbral), y se toma como referencia por lo tanto el DL50, que es excelente, superior a los 5000 mg/kg (sin embargo algunas fuentes indican valores superiores a 30.000 mg/Kg). Hay que tener en cuenta que el PC a menudo se encuentra en los componentes de muchos productos cosméticos, y se prefiere con respecto a otros disolventes también porque es prácticamente inodoro.
    Finalmente no es inflamable, una calidad demasiadas veces infravalorada.

    Para resumir…
    • Tiene una baja toxicidad.
    • Es inodoro.
    • No es inflamable.
    • Es biodegradable.
    • Se puede mezclar con el 8% de agua, o bien se puede disolver el 21% de PC en agua
    • Se puede mezclar con otros disolventes.

    PRODUCTO:

    PROPILEN CARBONATO 
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/258-propilen-carbonato

    Bibliografía


    1. Masschelein-Kleiner L., Les Solvents, Institut Royal du Patrimoine Artistique, Bruxelles (1981).
    2. Horie C.V., Materials for Conservation (1988).
    3. Borgioli L., Caminati G., Gabrielli G., Ferroni, E. Sci Technol Cult Herit (1995) 4, 67.
    4. Baglioni M., Berti D., Teixeira J., Giorgi R., Baglioni P.; “Nanostructured surfactant-based systems for the removal of polymers from wall paintings: a small-angle neutron scattering study”, Langmuir (2012) 28, 15193.

  • 45.4 FORMACIÓN E INFORMACIÓN - EL ACRIL ME, ES TODAVÍA MÁS NANO

    El Acril Me es todavía más nano

    Desde hace diez años el Acril ME se viene utilizando como alternativa, al histórico Acril 33 para conseguir una mayor penetración, gracias a la mayor finura de la dispersión. De hecho, mientras que las micelas del Acril 33 rondan los 150 nm (nanómetros), las del Acril ME están alrededor de los 50 nm. Éstas son las dimensiones desde su nacimiento (2007) hasta hoy. Con el lote nº 2824, disponible a partir de marzo de 2017, las dimensiones se reducen todavía más, hasta los 30 nm: Este cambio permitirá una todavía mejor penetración en los soportes porosos. Además se ha ido reduciendo la concentración de sólidos, desde el 41% hasta el 32%. Estas dos variaciones permiten conseguir una reducción de la viscosidad, desde algo menos que 500 mPa.s hasta aproximadamente 120 mPa.s., y favorecen la capacidad de impregnación incluso en los materiales con menor porosidad. 
    Simultáneamente a la reducción del principio activo, se ha reducido también el precio, para mantener sin variaciones la conveniencia. En este sentido, hace falta subrayar que las microemulsiones acrílicas presentes en el mercado tienen unas concentraciones muy variables, entre el 15 y el 35% de residuo seco.

    PRODUCTO:

    ACRIL ME  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/47-acril-me

  • 44.1 MÁS INFORMACIÓN - ¡HA VUELTO AQUAZOL!

    ¡Ha vuelto Aquazol! 

    Es sabido que el sector de la restauración es un nicho de mercado insignificante para todos los fabricantes de polímeros. Desde hace unos meses, por problemas de distribución, Aquazol 200 se daba por muerto, con gran decepción de todos los que lo habían utilizado obteniendo buenos resultados, y se temía que también el tipo 500 iba a correr la misma suerte. 
    Ahora CTS ha logrado reactivar el suministro de ambos tipos y, aprovechando esta buena noticia, desea destacar un artículo recientemente publicado en Progetto Restauro de la editorial Il Prato, presentando un breve resumen del mismo.
    En el artículo se analiza la práctica de la protección con compresas de Aquazol: este procedimiento especial, así como la protección con ciclododecano, fue objeto de 4 encuentros teórico-prácticos celebrados a lo largo de 2016 en Como, Milán y Florencia, con el título “La protección: ¿cómo hacerla?”, en los que participaron casi 80 profesionales del sector.

    En su artículo los autores abordan la práctica de la protección de las pinturas sobre lienzo, con algunas reflexiones acerca de “cuándo” es oportuna y sobre todo “cómo” realizarla, pensando siempre en reducir al mínimo el tratamiento.
    Se ha analizado especialmente un caso: la necesidad de sanear el reverso del soporte para eliminar reentelados o viejos materiales de consolidación inadecuados y/o alterados. 
    En estas circunstancias el método utilizado para retirar los materiales no debe perjudicar la adhesión de la protección del anverso. Este resultado se puede lograr utilizando materiales insolubles en sus respectivos disolventes, por tanto, de polaridad opuesta. 
    Según esta lógica, los adhesivos para el empapelado deben cumplir un doble requisito:
    - garantizar un poder adhesivo adecuado a nivel de superficie pictórica;
    - no penetrar en los sustratos, para no contaminar aún más la morfología de la pintura y no obstaculizar la eliminación de los materiales que se desea retirar del reverso.
    Tras examinar la opción del ciclododecano para la eliminación de materiales hidrosolubles con gel de agar, los autores han estudiado el caso de una pintura tratada con adhesivos/consolidantes a base de cera o que contienen parafina (como Beva), o bien de polaridad medio-baja (como Plexisol P550), para cuya eliminación es necesario utilizar disolventes orgánicos de baja polaridad.
    Puesto que “semejante disuelve a semejante” y siendo el ciclododecano una parafina, la difusión capilar del disolvente apolar en los sustratos terminaría por deshacerlo, provocando inevitablemente el desprendimiento de la protección en el anverso. 
    Por consiguiente, siempre hay que respetar el principio de polaridad opuesta entre los materiales a retirar del reverso del soporte y los materiales de protección temporal que se apliquen en el anverso.
    Es entonces necesario utilizar unos adhesivos de tipo polar: entre las opciones actualmente disponibles destaca Aquazol 500, soluble en agua y en un amplio rango de disolventes orgánicos polares (alcoholes y cetonas). Por su peso molecular, no debería penetrar en las películas al óleo, excepto en las grietas de los cuarteados. 

    Para minimizar también el problema de la penetración de Aquazol 500 en los sustratos a través de las grietas del color, el método utilizado excluye totalmente la aplicación directa, como es habitual en la protección tradicional con gelatina animal, ya que el adhesivo se extiende sobre tisú (papel japonés bolloré, de 22 g/m2), creando unas auténticas compresas de protección.  
    Para evitar que la elevada polaridad de Aquazol en el medio acuoso pueda tener efectos secundarios sobre la película pictórica, basta con mantener bajo control el pH y la concentración iónica, paralelamente a los valores característicos de las superficies en las que se vaya a utilizar.
    La aplicación de las compresas de protección se ha realizado colocando cada una con el lado adhesivo hacia arriba sobre una película de Melinex ligeramente sobredimensionada: la película de Aquazol 500 se reactiva con una ligera micro-nebulización de la solución tampón con acetato de pH 5,6. Al humedecerse, Aquazol 500 se vuelve inmediatamente adhesivo. Cada papel tisú se coloca sobre la superficie pictórica sujetándolo con Melinex, exactamente como si fuera un “parche”. La compresa se extiende sobre el color con ligeras presiones superficiales, tamponando la película de Melinex con una pequeña esponja de látex. Una vez obtenida una adhesión satisfactoria del tisú, se retira la película de Melinex. La adhesión de la compresa de protección se estabiliza con la esponja de látex solo donde las capas pictóricas tienen un relieve de materia más acentuado. Esta secuencia de operaciones debe repetirse para la aplicación de cada compresa, hasta cubrir totalmente la superficie a proteger. Al colocar las compresas, hay que tener cuidado de ajustarlas una al lado de otra solapándolas mínimamente como se suele hacer normalmente para lograr una buena protección. Una vez completamente secas las compresas con Aquazol 500, se obtiene una notable estabilidad de adhesión de la protección temporal del color y se puede limpiar el reverso del soporte.
    La tela de forración se retira hinchando el material adhesivo con ciclohexano y desprendiéndolo progresivamente. Al mismo tiempo, en el anverso de la pintura, se mantiene bajo control la adhesión de la protección. Al finalizar esta fase, cuando en el reverso se observa una película de Plexisol compacta y firmemente fijada a la tela original del soporte, se procede a su hinchamiento con una mezcla de ciclohexano y etilacetato 50:50 en volumen. Tras ablandar satisfactoriamente el material, con la ayuda de herramientas mecánicas es posible retirar la cantidad sobrante de la tela.
    Al no poder lograr la completa eliminación del material penetrado en las fibras de la tela original, se opta por su aligeramiento. Para lograr este resultado se utiliza un solvent surfactant gel de ciclohexano, al que se añade un 10% de etilacetato, obteniendo una polaridad que no interactúa con la aplicación en el anverso de las compresas con Aquazol 500.
    Tras limpiar satisfactoriamente el reverso, se retira la protección del anverso, utilizando la misma solución tampón de reactivación, de pH 5,6 y conductividad de 1800 µS/cm, añadida a un trozo de gel rígido de Gellan. Con una breve aplicación, este procedimiento permite desprender las compresas de protección de Aquazol 500, liberando gradualmente en la superficie la cantidad mínima de humedad estrictamente necesaria para hinchar el adhesivo.

    Conclusiones
    La protección descrita con compresas de Aquazol 500 se propone como alternativa que, en su especificidad, amplía y enriquece el abanico de opciones para la protección temporal de las superficies pictóricas.

    PRODUCTO:

    AQUAZOL® 
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/99-aquazol


    Para más información
    Leonardo Borgioli, Enrica Boschetti, Christian Tortato; “I cerotti di Aquazol 500.Una procedura alternativa per la velinatura dei dipinti”, Progetto Restauro n°79, Il Prato, Padova, 2016.

  • 44.2 MÁS INFORMACIÓN - RESINAS VINÍLICAS: SITUACIÓN ACTUAL

    Resinas vinílicas: situación actual 


    Aprovechamos la noticia del enésimo cese de producción de una resina vinílica utilizada en el sector de la restauración (Vinnapas CEF 10W), para resumir la situación y aclarar algunas cuestiones.
    CTS siempre ha ofertado un surtido de resinas vinílicas, con distintas propiedades para diferentes sectores de utilización, como se puede constatar consultando el Capítulo 1.1.4 del Catálogo General. A todas ellas se añaden los adhesivos de la línea BEVA® (Capítulo 5.2).
    Como es sabido, los polímeros vinílicos han tenido un éxito inmediato en el sector de la restauración por su capacidad adhesiva, remontándose su primera utilización a 1932.

    Podemos tranquilamente afirmar que, en el sector de la restauración de la madera -del mueble más sencillo a la escultura más valiosa- el polivinilacetato en dispersión acuosa se utiliza ampliamente en todo el mundo. En Italia desde 1952 se ha venido utilizando Vinavil, que representa un excelente producto italiano hoy extendido en todo el mundo. Por supuesto, también los demás fabricantes tienen sus propias marcas y en la tabla siguiente se resume la situación general en lo que respecta a su utilización en la restauración. Ver [fig.1]

    La ausencia forzosa de Vinnapas no tiene una alternativa específica y se recomienda utilizar Peoval 33 o Eva Art, según el caso. En la tabla siguiente se indican los datos técnicos de los tres productos, para una rápida comparación. Ver [fig.2]

    Peoval 33 es un excelente aditivo para morteros, incluso mejor que Acril 33, como se destaca en un estudio de la Universidad de Florencia, descrito en el Boletín CTS 25.3 “Aditivar un mortero”. Por su bajo pH no puede utilizarse en papel, tejido o madera, ni como fijador sobre las superficies, puesto que su baja temperatura de transición vítrea conllevaría la absorción de polvo.
    En cambio, Eva Art es ideal para encolados sobre materiales sensibles al pH y, por su flexibilidad, ya era una alternativa a Mowilith para la consolidación de tejidos. Un estudio reciente ha demostrado su estabilidad a la radiación.


    PRODUCTO:

    RESINAS SINTÉTICAS VINÍLICAS  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/44-resinas-sinteticas-vinilicas

    Bibliografía:

    Eva Mariasole Angelin, “Caratterizzazione delle proprietà colorimetriche e di stabilità alla luce di materiali polimerici trasparenti in uso nel restauro” Tesi di Laurea Magistrale, 2015.

  • 44.3 MÁS INFORMACIÓN - BALSITE: ARQUEOLOGÍA Y MUCHO MÁS

    Balsite: arqueología y mucho más
     
    En los últimos años se han multiplicado los casos de importantes restauraciones de madera en las que la utilización de Balsite resolvió el problema del estucado, gracias a su buena adhesión a la vez que elasticidad. Algunos de estos tratamientos se comentaron en artículos publicados en el Boletín CTS [1] o en una página específica [2], mientras que entre los más recientes se destacan dos, especialmente interesantes.

         • El primero es el trabajo desarrollado por la restauradora Anna Paola Garberini en el techo barroco de madera de la Colegiata de San Simeone en Alvito (Frosinone) [3]. El techo artesonado, que se remonta al siglo XVIII, presentaba amplias lagunas, incluso de 20-25 cm² y, entre muchos otros estucos, se eligió Balsite por su elasticidad. Esta propiedad permite evitar la creación de tensiones, gracias a su capacidad de ajustarse a los pequeños movimientos de la madera debidos a las naturales oscilaciones termohigrométricas anuales.  Además, su ligereza ha evitado añadir un peso excesivo al artesonado
         • El segundo caso es la restauración de la estela de Durga Mahishasura Mardini: una talla policromada procedente de Nepal y conservada en el Museo Nacional de Arte Oriental “Giuseppe Tucci” de Roma [4]. En la restauración, realizada por Maria Gigliola Patrizi, se utilizó Balsite para tapar numerosas pequeñas lagunas debidas a clavos oxidados retirados y microfracturas en el reverso. El estucado se integró posteriormente con colores Gamblin.

    Sin embargo, hoy deseamos centrar la atención en la combinación de este estuco con materiales especiales, como la madera mojada, el hueso, el alabastro.
    En la restauración de las antiguas naos romanas halladas en San Rossore (Pisa), se eligió Balsite para estucar las grietas de la madera mojada. Para su consolidación se utilizó la técnica de la Kauramina, pero por supuesto fue imposible recuperar totalmente las deformaciones y las variaciones dimensionales que se habían producido a lo largo de los siglos. Fue entonces necesario crear conexiones entre los elementos de madera, para lograr una cierta adhesión, incluso sin utilizar un material demasiado resistente. En caso de posibles movimientos de asentamiento, casi inevitables, deberá romperse el estucado y no la madera original: Balsite permite conseguir este resultado, proporcionando a la vez una adhesión suficiente. Para la descripción completa del tratamiento, véase el artículo publicado en Gradus [5].

    Otra utilización en arqueología fue descrita por Paolo Reggiani y Elena Ghezzo en el artículo “Del embargo a su completa recuperación: la restauración del lince de la “Cueva del Gatopardo” (Savona)”, publicado en Museologia Scientifica nueva serie 9: 62-68 (2015).
    El esqueleto del lince tiene una historia tormentosa: procedente de una excavación ilegal, fue restaurado malamente y puesto a la venta en una página holandesa de Internet: se recuperó gracias a las investigaciones de los Carabinieri de la Unidad de Protección del Patrimonio Artístico de Monza, con la colaboración de Interpol y la policía holandesa.

    Una vez recuperado, fue necesario restaurarlo correctamente. La consolidación de los huesos fósiles se realizó con soluciones diluidas de Paraloid B72 y su encolado con Mowital B60 HH, un butiral de polivinilo.
    En su primera restauración se habían realizado reconstrucciones utilizando resinas rígidas de poliéster y epoxy: su eliminación resultó problemática, así que se optó por dejarlas.
    La reconstrucción de otras partes estructurales que faltaban y el estucado de las grietas se realizaron con Balsite, que en un futuro se podrá retirar fácilmente gracias a su flexibilidad.
    Balsite se utilizó con excelentes resultados, ya en 2009, en la restauración de un cráneo y una mandíbula de Megatherium cuvieri, conservados en el Museo Regional de Ciencias Naturales de Turín y durante las obras de restauración realizadas en los restos fósiles de algunos odontocetos procedentes de la zona de Belluno y conservados en el Museo de Geología, Paleontología y Geofísica de la Universidad de Padua.

    Por último, la aplicación sobre alabastro se describió en “A case study on polychromed alabaster: The Virgin of the Castle of Cullera”, [6], trabajo presentado en la conferencia Polychrome Sculpture, celebrada en Glasgow en 2012.
    Se trata de una estatua de la Virgen con el Niño en brazos, de alabastro parcialmente policromado: por la fragilidad del material, a lo largo de los siglos se habían producido roturas y pérdidas de volúmenes, incluso en zonas estructurales como el cuello del Niño y el velo de la Virgen. Estas lagunas se solucionaron con Balsite, que luego se retocó con acuarelas y la técnica del rigatino. 
    Por último, tanto las superficies policromadas como las de alabastro se barnizaron con Regal Varnish Mat.

    PRODUCTO:

    BALSITE® (W + K) (PRODUCTO BICOMPONENTE)  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/79-balsite-w-k-producto-bicomponente



    Para más información:
    1. El Boletín CTS en el que se habló de Balsite es el 23.2_ Balsite multiforme, de 2010.
    2. Consulta la página: www.balsite.ctseurope.com
    3. Anna Paola Garberini, Alessandra Acconci, Luciano Rea “Il restauro di un soffitto ligneo del XVIII sec. Nella Val Comino. Una scelta culturale per conservare l’opera d’arte: un equilibrio tra storicizzazione, deontologia e risultato estetico”, Atti del XIII Congresso Nazionale IGIIC, “Lo Stato dell’Arte”, Venaria 22/24 ottobre 2015.
    4. Il dio benevolo e la dea inaccessibile - Sculture dall'India e dal Nepal. Studi e Restauro. A cura di Laura Giuliano, Massimiliano A. Polichetti, Gangemi Editore (2014). 
    5. C. Calcagno, A. Camilli, F. Fiesoli, F. Gennai; “Attività di restauro della nave “I” nel cantiere delle Navi”, Gradus, 2014 9.1, pp.25-29
    6. B. Mañas Alcaide, L. Ferrazza, D. Juanes Barber. Poster 2014. A case study on polychromed alabaster: The Virgin of the Castle of Cullera. In: K. Seymour (ed) Polychrome Sculpture: Artistic Tradition and Construction Techniques Proceedings ICOM-CC Interim Meeting, Working Group Sculpture, Polychromy, and Architectural Decoration, Glasgow 13-14 April 2012.

  • 43.1 NUEVOS PRODUCTOS - EL FUTURO DE LA LIMPIEZA SE LLAMA NEVEK®

    El futuro de la limpieza se llama Nevek®


    Las propiedades de extracción y de soporte del Agar-Y ya se conocen desde hace varios años y se han aprovechado para llevar a cabo limpiezas en todo tipo de sustrato. Su principal característica es la de formar geles, útiles cuando hace falta utilizar el agua en forma espesada. 
    Proporcionando calor, las cadenas del polisacárido de Agar-Agar en dispersión acuosa se distribuyen casualmente, generando una solución fluida, mientras que con el enfriamiento se ordenan, formando unas estructuras tubulares responsables del característico gel rígido, dentro del cual las moléculas de agua se puedan mover.

    Estos geles se empezaron a estudiar a partir de los años ’60, sin embargo sólo en los últimos tiempos se han llevado a cabo estudios profundizados acerca de sus características y de sus potencialidades en la limpieza de las obras artísticas [1,2,3,4]. Después de un profundizado estudio acerca de las diferentes tipologías de Agar-Agar presentes en el mercado, CTS ha seleccionado una en particular, cuyas propiedades de limpieza se han optimizado y cuya eliminación resulta más fácil. Se está comercializando con el nombre de Agar Art, y su descripción aparece en los números del Boletín C.T.S.: 20.2,de octubre de 2009, 32.2, de octubre de 2012 y 39.2, de agosto de 2014.

    Indudablemente uno de los factores que ha ralentizado su difusión es el trabajo que hace falta para su preparación: hay que pesar y dispersar el polvo en agua, luego hay que calentarlo durante unos diez minutos y posteriormente añadir los reactantes, que no se pueden calentar; finalmente se aplica con unos pincel antes del enfriamiento, o bien se forman unas láminas sólidas para apoyar en la superficie, si la situación lo permite. Si se quiere trabajar en caliente, y que el gel se solidifique en el contenedor, durante la aplicación, hace falta volver a calentarlo, utilizando por ejemplo un horno de microondas. Como suele pasar a menudo, determinadas operaciones que son bastante sencillas en un laboratorio, se convierten en una pesadilla en la obra y muchos prefieren orientarse hacia soluciones más cómodas, como las clásicas compresas con pulpa de celulosa o sepiolita. 
    Otra situación que presenta una dificultad similar es la de las pequeñas pruebas preliminares: el objetivo es entender, a través de pequeñas pruebas localizadas, la eficacia de reagentes determinados y la tipología de la suciedad a eliminar. El procedimiento de preparación de los geles de Agar Art implica demasiado trabajo para la realización de estas pruebas, especialmente si se llevan a cabo antes de la instalación de la obra.

    Resulta evidente que con esta última propiedad tenemos un producto todavía más versátil. Esta nueva formulación, llamada NEVEK, permite por tanto superar las complejidades en el uso del Agar, ampliando las posibilidades operativas y simplificando los procedimientos.
    Aunque Agar Art haya conseguido un buen resultado a nivel comercial y se haya empleado para la limpieza incluso de superficies amplias [5,6], las potencialidades de estos sistemas de limpieza no se han aprovechado al máximo. 
    Reflexionando acerca de estas dificultades objetivas, y basándonos en las experiencias de la sociedad Aconerre, conseguimos fabricar un gel homogeneizado, utilizable tanto en frío como en caliente, en el cual es muy fácil disolver los diferentes reagentes, desde las soluciones acuosas hasta los disolventes. 
    Procedente de una alga marina y exentos de materiales de síntesis, NEVEK no presenta riesgos de toxicidad, si se manipula de forma correcta, y es un material ecosostenible.

    Como en el caso de los geles de Agar Art, el NEVEK también retiene fuertemente el agua, permitiendo realizar limpiezas acuosas de las superficies, quitando sustancias hidrosolubles sin liberar agua en profundidad y evitando, por lo tanto, la migración de eventuales sales presentes en los soportes. El agua, de hecho, moja el interfaz entre el gel y la superficie, y su penetración en la estructura porosa del material (yesos, materiales pétreos, frescos, pinturas) es por tanto limitada.
    Todos los sectores de la restauración pueden estar interesados en las propiedades peculiares de este sistema, ya que NEVEK puede soportar tanto soluciones acuosas, como todos los tipos de disolventes, polares y apolares. 

    Entre las posibles aplicaciones mencionamos las principales:
        • Eliminación de la suciedad y de los residuos de antiguos pegamentos y protectores de superficies pétreas, yesos, pinturas murales, pinturas sobre tabla y tela, papel, incluso madera policromada, terracotas, restos arqueológicos….
        • Extracción de sales de superficies pétreas, mosaicos, restos arqueológicos y pinturas murales.
        • Eliminación de barnices de maderas, también policromadas, pinturas sobre tabla y tela, y materiales pétreos.
        • Aportación de humedad con elevado control de la difusión del agua en estado líquido.

    NEVEK funciona también como una esponja, absorbiendo en su interior el material solubilizado, como en el caso de los clásicos geles de Agar Art, sin embargo tiene una serie de ventajas con respecto al gel rígido clásico:

        1. Está listo para el uso y no requiere los procedimientos de preparación del agar en polvo (pesar los componentes, disolverlos y calentarlos) 
        2. Tiene menor capacidad de adhesión y está especialmente indicado para las superficies sensibles (en presencia de levantamientos, desagregaciones, sensibilidad al calor)
        3. Se pueden aditivar disolventes orgánicos, incluso apolares como la ligroína, creando un gel que actúa de forma similar a una emulsión de aceite en agua. 
        4. Se puede también utilizar en estado fluido, ya que con el calor el gel termorreversible cambia su estado en líquido

    NEVEK está listo para su utilización, se extiende a mano o mediante espátulas, y gracias a su tixotropía esto es posible incluso en superficies verticales. Gracias a su estructura se adapta a la perfección a todas las superficies, incluso las irregulares, y es fácil de eliminar, por ejemplo con un simple pincel seco. 
    Por su muy escasa adhesión, su acción es extremadamente delicada, así que no existe el riesgo de desprendimiento de fragmentos; su eliminación es todavía más simple, con la interposición de una hoja de papel japonés. No hace falta enjuagar la superficies, ya que el producto no deja residuos.

    NEVEK se puede calentar en un horno de microondas o a baño maría, consiguiendo una fase fluida que se puede extender en las superficies con un pincel y dejar enfriar. Así se vuelve a formar el gel, que sigue a la perfección las irregularidades de la superficie, absorbiendo la suciedad hidrosoluble. Posteriormente se quita de forma mecánica levantando delicadamente la película, del centro hasta el exterior, con la ayuda de unos palitos de madera.
    Si es necesario se puede modificar el producto introduciendo sustancias que potencien su actividad, hasta un máximo del 50% del peso, utilizando un simple mezclador para añadirlas uniformemente: 
        1. Se pueden añadir soluciones acuosas de tensoactivos, quelantes, ácidos y bases como para otros geles; la liberación de la solución y el efecto de esta sustancia afectará sólo la superficie, limitando la penetración en las capas inferiores.
        2. Se pueden añadir disolventes de diferentes polaridades a evaluar con pruebas preliminares. En este caso también se limita la liberación del disolvente en las capas inferiores.
    Después de estos añadidos el gel no se puede volver a calentar.
    Los tiempos de contacto, a valorar en cada ocasión con una prueba de evaluación, dependen principalmente del tipo de sustrato, del material a eliminar, de las condiciones ambientales y de como se ha modificado NEVEK.

    Ejemplos de aplicación:
    • Limpieza de yesos, superficies pétreas y pinturas murales. Los geles de agar se utilizan desde hace tiempo sobre yesos y material pétreo, incluso con la adición de aditivos como tensoactivos y quelantes. La versatilidad del sistema de limpieza proporciona las herramientas para concebir varias metodologías de aplicación capaces de adaptarse a las múltiples problemáticas que se pueden encontrar. Un interesante ejemplo es él de los mármoles del Tornacoro en el Duomo de Milán [9]. Es más reciente la aplicación en superficies con frescos o pinturas realizadas en seco, como en el caso de las pinturas murales del siglo XIV en la capilla del Monasterio de Pedralbes en Barcelona [10].   
    • Eliminación de las sales del material pétreo: aplicar el producto en la superficie y quitar pasadas unas horas. Un estudio realizado por el CNR (Centro Nacional de Investigación Italiano) [8], certifica que la eficacia de NEVEK se puede comparar con la del gel extendido en caliente, y que ambos son más eficientes con respecto a las aplicaciones de los geles preformados. Se puede potenciar su eficacia añadiendo unos agentes complejantes como el EDTA o citrato de amonio, 
    • Preparación de un decapante de baja toxicidad: añadir a NEVEK una cantidad no superior al 50 % del peso de disolventes seleccionados en base al tipo de barniz a quitar, hasta conseguir su homogeneidad. Aplicar sobre el barniz y dejar durante un tiempo a establecer en cada caso, luego quitar de forma mecánica la película de NEVEK y el barniz levantado.
    • Eliminación de antiguas películas de pegamento acetovinílico de la parte trasera de una tela: añadir a NEVEK una mezcla 1:1 de acetona y alcohol etílico, en una cantidad no superior al 50%. Mezclar hasta su completa homogeneización. Aplicar sobre la película de pegamento acetovinílico. Al cabo de unas horas la película levantada se separa fácilmente de la tela, sin que los disolventes penetren en las capas inferiores.

    PRODUCTO:

    NEVEK®  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/253-nevek

    Bibliografía:

    1. E. Campani, A. Casoli, P. Cremonesi, I. Saccani, E. Signorini. L’uso di Agarosio e Agar per la preparazione di “Gel Rigidi” – Use of Agarose and Agar for preparing “Rigid Gels”, Traduzione di Diane Kunzelman. Quaderni del Cesmar7, n.4, Il Prato, Padova 2007.
    2. M. Anzani, M. Berzioli, M. Cagna, E. Campani, A. Casoli, P. Cremonesi, M. Fratelli, A. Rabbolini - D. Riggiardi. Gel rigidi di Agar per il trattamento di pulitura di manufatti in gesso - Use of Rigid Agar Gels for Cleaning Plaster Objects, Quaderni del Cesmar7, n.6, Il Prato, Padova 2008.
    3. M. Anzani, A. Rabbolini Il restauro del materiale lapideo con i gel di Agar Agar: il gesso “La bella Pallanza” e il marmo “Busto di donna”di Paolo Troubetzko y, in Lo Stato dell’Arte , Atti del VII Congresso Nazionale IGIIC, Napoli, 8-10 Ottobre 2009, Nardini Editore, Fi 2009.
    4. M. Anzani, Utilizzo dei gel rigidi ai agar agar per la pulitura del materiale lapideo, in  Musso, S.F., Tecniche di restauro. 2013: Utet Scienze Tecniche. PLT 43.
    5. M. Anzani, L.Borgioli, A. Rabbolini, A. Toniutti; “S.Eugenio a Milano, 120 mq di pulitura ad Agar Agar”,  Atti del IX Congresso IGIIC  “Lo Stato dell’Arte 9”, Cosenza, 13-15 ottobre 2011.
    6. A. Rava, W. Shank, P. Colombini, O. Chiantore, M. Picollo, V. Palleschi et alii  “Keith Haring a Pisa. Pulitura e protezione di un dipinto acrilico esposto in ambiente esterno”.Scienza e Beni Culturali XXVIII (2012).
    7. Sansonetti A., Casati M., Striova J., Canevali C., Anzani M., Rabbolini A.; “A cleaning method based on the use of agar gels: new tests and perspectives”  12th International congress on the deterioration and conservation of stone. New York; 2012.  
    8. Gulotta D., Saviello D., Gherardi F., Toniolo l., Anzani M., Rabbolini A., Goidanch S.; “Setup of a sustainable indoor cleaning methodology for the sculpted stone surfaces of the Duomo of Milan”, Heritage Science, 2014, 2:6.  El proceso de gelificación se puede invertir de forma indefinida calentando y enfriando, por eso hablamos de geles termorreversibles. 
    9. R. Senserrich-Espuñes , M. Anzani, A. Rabbolini, L. Font i Pagès: L’intervento con i gel di Agar sulle pitture murali del Trecento nella Cappella di Sant Miquel, al Monastero Reale di Santa Maria di Pedralbes di Barcellona. in Lo Stato dell’Arte, Atti del XIII Congresso Nazionale IGIIC - Torino 22/24 ottobre 2015 - Nardini Editore, Firenze, 2015.
  • 43.2 NUEVOS PRODUCTOS - CICLOMETICONAS: ¿DE QUÉ ESTAMOS HABLANDO?

    Ciclometiconas: ¿de qué estamos hablando?

    La limpieza de capas pictóricas “difíciles” como los acrílicos es un reto bastante complejo: no sólo estamos en presencia de una elevada sensibilidad a los disolventes de media y alta polaridad, sino que tenemos que añadir, además, una fuerte interacción con el agua, que a menudo se ha utilizado sin tomare en cuenta los efectos de lixiviación con respecto a los tensoactivos presentes en la composición de las capas pictóricas.
    Desafortunadamente los sistemas acuosos son también muy eficientes en la eliminación de las partículas que se depositan en los acrílicos, y esta es precisamente la cuestión: ¿cómo se puede limpiar con medios acuosos un material demasiado sensible no sólo al agua, sino también a los disolventes?
    Este dilema ha desencadenado la fantasía de uno de los químicos estadounidenses más sensibles con respecto a este tipo de problemáticas, Richard Wolbers, que han sacado de la chistera unos materiales hasta ahora desconocidos como las ciclometiconas. En un primer taller celebrado en el Getty Conservation Institute de Los Ángeles en 2009, y en otro posterior en el MoMA de Nueva York en 2011, se presentó la química de estos fluidos especiales y su potencialidad en el sector de la restauración.
    Dos ponencias con ocasión del VII Congreso “Color y Conservación”, en el Politécnico de Milán el pasado mes de octubre, estimularon todavía más el interés de los muchos asistentes: Lagalante y Wolbers aportaron su experiencia con algunas de estas sustancias, precisamente en la limpieza de los acrílicos, mientras que Stavroudis describió varias técnicas de utilización de las mismas [1].

    Como todos sabemos, no hay estudios específicos para el sector de la restauración, sino más bien para sectores mucho más ricos (ej. la cosmética) que son una interesante fuente de nuevas ideas. La ventaja principal que brinda la cosmética es que sus productos, como se utilizan para aplicarlos en el cuerpo humano, están sometidos a pruebas profundizadas en cuanto a su toxicidad: los costes elevados de estos estudios clínicos se compensan con los enormes retornos económicos.
    Quizás no todo el mundo sepa que el espesante para disolventes más empleado en la restauración, el Carbopol, nació y se utiliza (¡en gran cantidad!) para la producción de geles para el pelo, champús, acondicionadores y jabones en gel.
    Sin embargo, una gran innovación de los últimos veinte años es la de los disolventes silicónicos y de sus geles: materiales con una polaridad muy baja que no interfieren con los tejidos humanos pero que pueden funcionar como transportadores (carriers) de principios activos.
    Estos disolventes no son químicamente diferentes de otra clase de sustancia ya conocida y muy utilizada en la restauración: los siloxanos. Con este término nos referimos, sin embargo, a unos polímeros integrados por decenas o centenares de monómeros, con pesos moleculares de muchos millares de umas, no volátiles y fuertemente hidrofóbicos, utilizados como protectores permanentes para los materiales pétreos.
    Aquí, en cambio, hablaremos de fluidos con pesos moleculares de entre 200 y 400 umas, y que evaporan por completo de las superficies tratadas, y de sus geles. 
    La inspiración genial de Wolbers consiste en el hecho de tomar en cuenta la capacidad de transporte de estos geles a base de silicona incluso para poner en contacto la capa acrílica hipersensible con micro gotas de soluciones acuosas, que por lo tanto pueden limpiar, pero no difundir en el interior, ni tampoco extraer, los tensoactivos que integran la película pictórica.
    Estos materiales se presentan en la última publicación de Paolo Cremonesi, editada por Il Prato, cuyo título es “Proprietà ed esempi di utilizzo di materiali siliconici nel restauro di manufatti artistici” (Propiedades y ejemplos de utilización de materiales a base de silicona en la restauración de obras de arte). Esta publicación recopila las experiencias de varios restauradores que participaron en los cursos de actualización, ya en su 3ª edición, organizados por Cremonesi y Wolbers cuyo título es “Solvent-Surfactant Gels y Emulsiones”.

    Con el término ciclometiconas nos referimos a un grupo especial de moléculas, que pertenecen siempre a las siliconas, en las cuales el esqueleto, integrado por una cadena de átomos de silicio y oxígeno, forma un anillo. En comercio se encuentra el compuesto con 4 átomos de silicio (en el cual se enlazan 2 grupos de metilo, -CH3), y 4 de oxígeno, llamado D4 (se prefiere esta abreviatura con respecto a su nombre completo, es decir octametilciclotetrasiloxano), que aparece aquí al lado.
    En los cursos de Wolbers-Cremonesi, sin embargo, se propone el término inmediatamente superior, con 5 grupos Si-O, llamado D5, que tiene una menor volatilidad y un punto de ebullición más elevado  (210°C con respecto a los 175°C del D4). Sin embargo, la diferencia más importante entre los dos disolventes es, la ausencia declarada de riesgo, según el Reglamento CPL, del D5, mientras que en el D4 aparece la frase H361 “Se sospecha que puede perjudicar la fertilidad o dañar al feto.”, además de ser inflamable. No obstante su lenta evaporación y su mayor persistencia en el interior de las capas pictóricas, explica la fuerte preferencia que atañe al D5.

    Otro producto presentado en los cursos de actualización, y bien descrito en el texto, es el Velvesil Plus, un gel basado en un siloxano reticulado que contiene el D5 como disolvente. Este gel también es un material extremadamente apolar, no tóxico, y se puede mezclar con pequeñas cantidades de agua o de disolventes, que se enlazan a determinadas áreas polares del polímero reticulado, aumentando de esta forma la polaridad global del gel.
    Si la cantidad de agua o de los disolventes supera determinados valores, típicos por cada líquido (por ejemplo, para el agua es el 10%), se forma una emulsión, que genera unas pequeñas gotas del líquido dispersado en el interior del gel, y que se conoce como fase dispersante.
    Estos geles se pueden usar para limpiar las obras sensibles al agua o a los varios disolventes, minimizando la interacción sólo con la superficie, para luego proceder a su eliminación en seco. Finalmente se termina con la aplicación del disolvente D5 para completar la eliminación del gel.
    El texto sigue con una serie de ejemplos aplicativos, tanto del D5 como del Velvesil Plus, como la hidrofobización de una tela antes de la eliminación mediante el uso de gel acuoso de la cola de pasta para forrado envejecida, o la eliminación de los residuos de cera resina de la tela forrada con este material, utilizando el Velvesil Plus aditivado con el 30% de una mezcla de ciclohexano/etilacetato.
    Los casos de aplicación se extienden también a obras diferentes de las pinturas: obras de todas formas sensibles al agua como las obras sobre papel o sobre yeso.

    En fin, se está abriendo un nuevo horizonte en el amplio panorama de las limpiezas, que nos obligará a un ulterior esfuerzo mental, pero que seguramente nos permita superar ciertos límites, y trabajar en mayor seguridad, tanto para las obras como para los operadores.


    PRODUCTO:

    DISOLVENTE/ESPESANTE/GELES DE SÍLICE
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/151-disolventeespesantegeles-de-silice

    Bibliografía:

    1. Anthony LAGALANTE, Richard WOLBERS; “The Cleaning of Acrylic Paintings: New Particle-based water-in-oil Emulsifiers” e Chris STAVROUDIS; "Silicone-Based Solvents in Conservation. As free solvents and components of gel systems and microemulsions", Atti del VII Congresso Internazionale Colore e Conservazione “DALL’OLIO ALL’ACRILICO, DALL’IMPRESSIONISMO ALL’ARTE CONTEMPORANEA. Studi, ricerche, indagini scientifiche ed interventi conservativi”, Milano, 13-14 Novembre 2015.
  • 43.3 MÁS INFORMACIÓN - LUCHAR CONTRA LA HUMEDAD

    Luchar contra la humedad en las mamposterías con Porodry.

    La humedad es el origen más importante de los deterioros que aparecen en la construcción, generando fenómenos de solubilización e iniciando el movimiento de las sales en la porosidad de los materiales de construcción. Además, con la repetición de los ciclos de aportación de humedad y posterior secado, se generan en muchos casos fenómenos de hinchamiento y contracción, con formación de microfisuras o desagregación de los materiales pétreos.
    Las causas que pueden generar una aportación de humedad a las estructuras pueden ser diferentes:
        1) Agua pluvial, agravada en el caso de las lluvias ácidas.
        2) Infiltraciones de agua a través de las cubiertas o de los sistemas de desagüe (aleros) de los edificios.
        3) Condensaciones superficiales o capilares del vapor de agua presente en el aire, especialmente donde hay nieblas frecuentes.
        4) Infiltraciones de agua en estructuras en contacto con el suelo.
        5) Ascenso capilar de estructuras apoyadas en el suelo.

    En general un proyecto de restauración adecuado tendría que prever la eliminación de estas causas, por ejemplo: 
    • Con la realización de drenajes de piedra en seco u otras zonas de ventilación, para evitar fenómenos de condensación e infiltraciones.
    • Aplicando un protector repelente al agua para solucionar el problema de la lluvia batiente.
    • Inyectando unas resinas hidrorrepelentes en la base de la mampostería para impedir los ascensos capilares. Este tipo de intervención es difícil de llevar a cabo y su éxito es parcial, debido a las irregularidades morfológicas de las estructuras.
    Sin embargo no es siempre posible conseguir un saneamiento óptimo, así que hay que acostumbrarse a convivir con el problema, enfrentándose al mismo con un planteamiento diferente.
    En estos casos uno de los errores más frecuentes es la utilización de revoques hidrorrepelentes, a menudo llamados “antisal”. Estos revoques, casi siempre a base de cemento, contienen resinas sintéticas que impiden la penetración del agua en estado líquido: si el problema de la humedad no se soluciona en su origen, la consecuencia es que el agua se desplaza hacia otras zonas, a menudo generando un deterioro en zonas sanas hasta ese momento.
    Si la humedad presente en las estructuras es debida a condensación o al ascenso capilar, la intervención de impermeabilización no sólo llega a ser inútil, sino que puede resultar incluso perjudicial.
    Al agua en estado líquido presente en la estructura, le cuesta incluso más salir, y tiende a acumularse en la zona de interfaz entre el material no tratado y la zona impermeabilizada, tanto si se trata de un mortero a base de cemento con aditivos como si se trata de un material protector hidrorrepelente, aunque sea transpirable.

    Un ejemplo típico es una pintura mural realizada sobre una pared húmeda: el revoque circunstante, deteriorado, se retira y se repone con un revoque "antisal", sin haber solucionado el problema de la humedad de la mampostería. El agua presente en profundidad, con su carga de sales, se desplaza hacia las zonas más porosas, como las del fresco. Debido a la evaporación las sales se cristalizan, no sólo con la formación de eflorescencias en la superficie, sino también con un aumento de volumen dentro de los poros, con la consiguiente desagregación de las capas pictóricas. Además las sales cristalizadas son higroscópicas y acumulan agua en los puntos que se han ido formando, generando zonas más oscuras. 
    ¡Esto nos indica cómo se puede transformar una intervención de restauración en un proceso destructor!

    Una posible solución: Porodry
    Un planteamiento totalmente opuesto a los así llamados “revoques antisal” consiste en realizar un revoque macroporoso, con una estructura integrada por macroporos comunicantes a través de una red de capilares.
    La consecuencia es una absorción de la humedad de la estructura hacia la superficie, gracias el efecto de aspiración de los capilares, y la posterior evaporación rápida del agua cuando alcanza los macroporos.
    De hecho, en el interior de los capilares se puede tener agua líquida incluso con valores de H. R. inferiores al 100%, así que la reevaporación puede aparecer simplemente por el cambio de sección que se produce en los macroporos.
    Un revoque macroporoso se puede conseguir simplemente añadiendo Porodry a la masa, tanto si se trata de un mortero a base de cal aérea (en este caso utilizando Porodry 5), como a base de cal hidráulica o de cemento (que habrá que desalinizar de todas formas, para evitar la ulterior aportación de sales), añadiendo Porodry 2.
    A no ser que la alimentación de agua sea tan abundante como para compensar el aumento de evaporación, el revoque macroporoso conseguido con Porodry consigue disminuir la cantidad de humedad de las estructuras sobre las que se aplica. Incluso en situaciones que hacen que la estructura sobre las que se aplica el revoque permanezca húmeda, se mantienen las condiciones de anclaje del revestimiento.
    Se puede aplicar tanto en las superficies interiores de muros en contacto con el suelo, bodegas o locales subterráneos, como en mamposterías que no están en contacto con el suelo afectadas por la acción combinada del ascenso capilar y de los efectos del agua meteórica.
    Claramente tendrán un papel importante en los fenómenos de secado las condiciones de H.R. del aire alrededor de la estructura tratada. La velocidad del aire en la proximidad de las estructuras y los recambios de aire en los ambientes tratados, llevan a cabo por tanto una acción favorable para la resolución de dichos problemas.

    Aplicación del Porodry
    Antes de la aplicación hay que proceder a quitar el revoque de la zona de revestimiento deteriorada, incluido el mortero presente entre las juntas. En caso de humedad debida a ascenso capilar la operación tiene que seguir hasta por encima del nivel máximo alcanzado por el agua en el transcurso de las diferentes estaciones.
    Posteriormente limpiar las paredes mediante cepillado o con un chorro de agua, en todo caso procurando mojar bien la superficie.
    Aplicar un chorro con mortero semilíquido de agarre integrado por arena, mortero hidráulico o cemento desalinizado e imprimación PORODRY 1, al 2% del peso del aglutinante.
    Posteriormente aplicar dos manos de revoque a base de arena y cal hidráulica o cemento desalinizado, adicionados en hormigonera con aditivo porógeno PORODRY 2, al 0,4% del peso del aglutinante (envase de 200 g. cada 50 Kg de aglutinante).

    EJEMPLO
    Cal Lafarge NHL 3,5                    50 Kg
    Arena o polvos de mármol        150 Kg
    Porodry 2                                   200 gr

    Si queremos preparar un revoque a base de cal aérea (cal en pasta), mezclar en la hormigonera arena y cal, con aditivo porógeno PORODRY 5 al 1% (500 g cada 50 Kg de cal).

    EJEMPLO
    Cal en pasta                              50 Kg
    Arena o polvos de mármol      100 Kg
    Porodry 5                                 500 gr
    En ambos casos hay que procurar mantener húmedo el revoque durante unos días. El secado superficial, de hecho, es tan rápido que si el revoque se secara demasiado rápido, podrían aparecer grietas.

    PRODUCTO:

    ADITIVOS DESHUMIDIFICADORES  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/163-aditivos-deshumidificadores

    Algunos casos de aplicación del Porodry

    Nombre del monumento                                                Localidad – Provincia
    Villa Algardi (Casino del Bel Respiro)                                       Roma
    Abadía de Rambona                                                                Pollenza (MC)
    Complejo del San Michele en Ripa Grande                             Roma
    Iglesia de S. Stefano (siglo XV), Complejo 
    Masserizio Calandrella y Casino Montone (siglo XIX)              Noci (Ba)
    Yacimiento Arqueológico de Alfas del Pì                                 Alicante - España
    Pinturas murales románicas de la Iglesia de Pinarejo             Segovia - España
  • 42.1 NUEVOS PRODUCTOS - EVA ART

    Eva Art   

    Uno de los problemas para la utilización de dispersiones acuosas de polímeros es la complejidad de estas mezclas: los polímeros, tanto acrílicos, como vinílicos o poliuretánicos, son insolubles en agua, por tanto su polimerización se realiza directamente en agua, y su estabilización está relacionada con fuertes cantidades de tensoactivos y de otros aditivos. 
    Precisamente estos aditivos son parte integrante del secreto industrial, por tanto no se publican, aún representando un porcentaje importante de los componentes; Se trata de coloides protectores, biocidas, reguladores de la viscosidad, tampones y antiespumantes. En el transcurso del envejecimiento natural de los materiales estos productos interfieren con el polímero y pueden ocasionar un empeoramiento de las propiedades, como por ejemplo el amarilleo, o bien, como en el caso de los colores acrílicos, pueden migrar hacia la superficie creando otros problemas a nivel de conservación y, posteriormente, de restauración. 
    Por ello es necesario comprobar el comportamiento al envejecimiento, aunque sea de forma acelerada, de los productos en dispersión, especialmente los que entran en contacto con materiales delicados como el papel y las pinturas. 
    Son ya bien conocidas las excelentes prestaciones de los adhesivos de la línea BEVA®, tanto del clásico GUSTAV BERGER’S O.F. 371 (BEVA® 371)como de los así llamados “Beva en frío”, es decir del BEVA® O.F. GEL y del BEVA® O.F. D-8-S, mientras que todavía no se han investigado las dispersiones acuosas sólo a base de etilenvinilacetato, o más familiarmente EVA.
    De hecho tanto el BEVA® O.F. GEL  como el   BEVA® O.F. D-8-S son unas mezclas de polímeros de varias clases; el primero es a base de EVA y acrílico, el segundo contiene tanto EVA como acetato de polivinilo y alcohol de polivinilo, que otorgan una mayor resistencia. 
    Se ha considerado interesante, para una mayor disponibilidad de productos a base de agua, por lo tanto con un menor impacto ambiental y menor toxicidad, seleccionar de entre las varias dispersiones presentes en el mercado a base de sólo EVA, una formación que, por sus propiedades químico-físicas, fuera interesante para el sector de la restauración. Esta dispersión, llamada Eva Art, se ha comparado, mediante envejecimiento acelerado, con otra dispersión denominada Evacon-R™, ya presente en el mercado anglosajón, pero no fácil de encontrar en Italia.
    Ambas dispersiones no contiene plastificantes y agentes coalescentes. El estudio se ha llevado a cabo en el CNR-IFAC en el ámbito de la tesis magistral de Eva Mariasole Angelin, con la supervisión de Marcello Picollo. En esta tesis las valoraciones colorimétricas y de estabilidad a la radiación ultravioleta (UV), visible (Vis) y de infrarrojo cercano (NIR) de los adhesivos Evacon-R y Eva Art se han llevado a cabo sometiendo dos tipologías de muestras (sobre soporte inerte y de naturaleza pictórica) a ciclos de envejecimiento natural (radiación solar filtrada por el cristal de la ventana) y acelerado mediante exposición a fuentes artificiales (lámpara LED y fuente de descarga de gas) para comprender su comportamiento a medio-largo plazo. Además, para monitorizar el comportamiento de los materiales poliméricos una serie de muestras se ha guardad en una condición de oscuridad total por toda la duración de las pruebas de exposición. 

    Algunas consideraciones con respecto a los efectos de las lámparas tradicionales y de LED se presentaron en el Boletín CTS del pasado mes Julio (41.2, “Colores estables con los LEDs HI-CRI”), mientras que ahora nos centraremos en el comportamiento de los materiales irradiados     Los dos adhesivos se extendieron tanto en los portaobjetos, como en dos tendidos de color, un azul de ultramar alquídico Griffin Winsor & Newton, y un cerúleo acrílico Liquitex. De esta forma se ha intentado entender tanto el comportamiento de los adhesivos puros, como sus posibles interacciones, una vez en contacto con una capa pictórica con ligante polimérico. Los espectros en espectroscopía infrarroja (FT-IR) conseguidos de los dos adhesivos puros son muy parecidos entre sí y confirman la presencia del mismo copolímero EVA en dispersión (Figura 1).


    También los espectros 1H-NMR y 13C-NMR de los adhesivos Evacon-R y Eva Art son perfectamente comparables entre si.
     Para ambos análisis ha sido imposible identificar la naturaleza de los aditivos, ya que los picos de estos, presentes en pequeñas cantidades, son débiles y están, por tanto, cubiertos por las señales más intensas de los polímeros, presentes en cantidades preponderantes. 
    Sin embargo ha sido posible determinar los porcentajes relativos a las fracciones de etileno y de acetato de vinilo, presentes en bloques en los dos productos.     

                                   etileno       
    acetato de vinilo 
               Evacon-R       63                    37 
               Eva Art           43                    57 
      

    Las cantidades de etileno dentro del copolímero etileno-acetato de vinilo llegan a garantizar simultáneamente un bajo valor de la temperatura mínima de filmación (TMF = 3°C), y al mismo tiempo una elevada tenacidad y flexibilidad, mientras que la Tg resultante (14°C) hace que a la suavidad se asocie una baja pegajosidad de la película.
       
    Al final de los diferentes envejecimientos no se registran variaciones significativas de las bandas de absorción tanto para los espectros FTIR en transmitancia, como para los en reflectancia, tanto para Evacon-R como para Eva Art. 
    Esta estabilidad se ha confirmado posteriormente con mediciones colorimétricas, muy importantes porque a veces pueden aparecer variaciones cromáticas (amarilleos, blanqueamientos), que no se pueden detectar sólo mediante la espectroscopía FTIR. Además para ambos productos no se evidencia la formación de ácido acético como compuesto volátil y el inicio de reacciones de fotoxidación y fotofragmentación en cantidad detectable mediante las técnicas-instrumentos utilizados. 
    La técnica FORS (Espectrorradiometría de Reflectancia de Fibra Óptica) ha proporcionado menos información, ya que ha evidenciado sólo algunas variaciones imputables al color alquídico azul de ultramar, y no a las dispersiones aplicadas encima. 
    Para confirmar la estabilidad del adhesivo Eva Art se indica (en la Figura 2) la comparación entre el espectro de referencia (t0) y los espectros infrarrojos adquiridos en transmitancia de los tendidos envejecidos una vez terminadas las irradiaciones (t4). 
    “led”: envejecimiento acelerado mediante lámpara LED CTS ART LUX 10L; 
    “sc gas”: envejecimiento acelerado mediante fuente de descarga en gas; 
    “sol”: envejecimiento natural con radiación solar filtrada por el cristal de la ventana; 
    “caj”: oscuridad total en cajón.



    La dispersión Eva Art presenta una reología de tipo pseudoplástico; esta característica le otorga a las mezclas pigmento-Eva Art unas buenas características de aplicación. 
    Como consecuencia de los buenos resultados observados en el transcurso de este estudio, decidimos introducir en nuestro catálogo la dispersión Eva Art, que se puede utilizar en muchos sectores de la restauración conservativa como: 
    ·    Adhesivo para documentos de papel. 
    ·    Consolidante y fijador de las capas pictóricas; 
    ·    Ligante para pigmentos naturales y sintéticos, y de cargas.

    PRODUCTO:

    EVA ART  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/94-eva-art

  • 42.2 TRABAJOS EN CURSO - LA ANOXIA LLEGA AL MUSEO DEL PALACIO DE TOPKAPI

    La anoxia llega al Museo del Palacio de Topkapi   

    La palabra Topkapi (Puerta del Cañón), evoca tesoros de otros tiempos y atmósferas exóticas. El Palacio de Topkapi, en Estambul, tiene este nombre por una de sus puertas (la del cañón), y tiene una larga historia: construido entre 1460 y 1478 por el Sultán Mehmed el Conquistador, fue durante más de 4 siglos la residencia de los Sultanes del Imperio Otomano, hasta la mitad del siglo XIX. 
             
    Para el Laboratorio de restauración de materiales de papel y de libros de este Museo tan importante, CTS realizó la implementación de una Instalación de Desinsectación por Anoxia de Nitrógeno con Cámara móvil. ISOSEP es fabricado por la empresa Isolcell y distribuido en exclusiva por CTS. 
    En este caso especial la operación es de una instalación integrada, con funcionamiento autónomo y automático mediante control y gestión por parte de un software dedicado. La instalación puede trabajar tanto en la Cámara de Desinsectación instalada (como se puede ver en las dos imágenes, con la cámara abierta y después de haber sellado la pared móvil), como en envoltorios que se pueden crear a medida según los objetos a tratar, permitiendo el tratamiento en atmósfera controlada o modificada.   
    Una vez ajustados los valores deseados mediante el software  (Oxígeno residuo, humedad relativa y temperatura), la Instalación podrá funcionar de forma automática por toda la duración del tratamiento, preparando de forma adecuada la obra dentro de la Cámara o en los envoltorios y garantizando el mantenimiento de los valores ajustados, apagándose y encendiéndose según las necesidades. 

    Nuestra Instalación, además, garantiza el trabajo en total seguridad para el operador y para el medio ambiente, llevando a cabo de forma continua el análisis medioambiental del oxígeno, cuyos valores se gestionarán mediante el software que, en caso de anomalías, interrumpirá el funcionamiento de la Instalación, avisando el operador mediante el sistema de alarma.
     
    La instalación de desinsectación por anoxia ISOSEP se propone una vez más como el sistema por excelencia para los mejores laboratorios de restauración.

    PRODUCTO:

    EQUIPO DE DESINFECTACIÓN POR ANOXIA EN ATMÓSFERA CONTROLADA  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/223-equipo-de-desinfectacion-por-anoxia-en-atmosfera-controlada

  • 42.4 FORMACIÓN E INFORMACIÓN - DESAPARECE TAMBIÉN EL MOWILITH DS 5/2

    Desaparece también el Mowilith DS 5/2

    Después del cese de la producción de los Mowilith DMC2 y Mowilith SDM5, nos deja también el Mowilith DS 5/2, después de una corta aparición durante 6 años (2009-2015). Como la empresa fabricante Hoechst en el año 2009, hoy también Celanese (que englobó Hoechst) decide cesar la producción de este polímero suave, muy usado en el sector de la restauración textil, y en más ámbitos. Desafortunadamente no consideramos que los productos sustitutivos propuestos sean adecuados para nuestro sector: demasiado baja la Tg (-8°C), con respecto a la de los otros Mowilith (13-15°C), y la consecuencia es la formación de una película pegajosa a temperatura ambiente. 

    La propuesta de CTS es reemplazar el Mowilith por un polímero diferente desde el punto de vista químico (etilenvinilacetato en cambio de un copolímero dibutil maleato-vinil acetato), siempre suave pero no pegajoso, con una Tg de 14°C. El producto es el nuevo Eva Art, descrito en el artículo 42.1 de este Boletín Eva Art.
     

    La principal diferencia desde un punto de vista operativo es la diferente viscosidad: aunque el porcentaje de seco en las dispersiones se acerque mucho (56% para el Mowilith, 50% para Eva Art), el difunto Mowilith era mucho más viscoso (12.000 mPas, con respecto a los 2.000 del Eva Art). También desde el punto de vista mecánico los valores Mowilith/Eva Art son muy similares, con una elasticidad incluso mayor para la nueva propuesta, con un alargamiento a la rotura del 800% contra el 560% del DS 5/2. Finalmente, otro claro punto de fuerza del Eva Art es el pH=6, cercano a la neutralidad, contra el pH=4, ácido, de los Mowilith.

  • 42.3 NUEVOS PRODUCTOS - LAS ASPIRACIONES JUSTAS

    Las aspiraciones justas    

    Durante el montaje de los Laboratorios de restauración de la Academia de Bellas Artes de L'Aquila, CTS ha proporcionado muebles y equipos, de entre los cuales: 
    - Armarios de Seguridad para productos inflamables y químicos 
    - Grupos carrelados filtro-aspirantes 
    - Lámparas de luz natural 
    - Mesa Caliente   
    Se presentaba una problemática especial para el laboratorio de gráfica, donde se utilizan ácidos volátiles, como el ácido nítrico y el ácido clorhídrico, que se tienen que extraer del ambiente de trabajo a través de sistemas de aspiración. Estos ácidos pueden causar la corrosión de las partes interiores de las campanas y de los motores aspirantes, y esto conlleva una pérdida de la eficiencia asociada a la necesidad de reemplazar con cierta frecuencia los equipos. 
    Por ello CTS ha diseñado y luego instalado un Banco Campana "especial" para los trabajos debajo de la campana con ácidos, certificado en base a las normas EN 14175 2-3-6. En concreto, el Banco Campana está revestido internamente con polipropileno anti-ácido, con un tanque en lugar de la encimera, siempre en polipropileno anti-ácido, con dos desagües distintos: 
    ·        Uno para descargar el agua, conectado a la red.
      
    ·        El segundo conectado a un sistema de recirculación para ácidos integrado por un tanque para el almacenaje, una bomba de recirculación, un grifo y la correspondiente tubería y racores. 
    Todo esto recibe los mandos del panel que se encuentra en el mismo Banco Campana con toda la seguridad en cuanto a la eventual manipulación por parte de los alumnos. El Banco Campana claramente está dotado de un sistema de filtración, aspiración y expulsión del aire depurado hacia el exterior, además de tener todas las dotaciones básicas de un Banco Campana certificado, es decir: 
    -     Cuadro electrónico para el control de la velocidad del aire aspirado, con su correspondiente alarma acústica y visual. 
    -     Cuadro de mandos externo. 
    -     Iluminación interna con un rendimiento de 400 lux. 
    -     Pasador frontal contrapesado, con cristales correderos también en sentido horizontal, con retén de posición de fin de carrera salvadedos. 
    -     Hojas de cierre bajo encimera para la protección del sistema de recirculación de ácidos.   
    El Banco Campana es, por lo tanto, capaz de aspirar también todos los disolventes que se pueden manipular en un laboratorio. Este sistema innovador permitirá a todos los laboratorios de gráfica, y no sólo a los de las Academias de Bellas Artes, trabajar de forma segura abaratando los costes de los equipos utilizados hasta ahora, inadecuados para la gestión de sustancias tan agresivas como los ácidos empleados en muchas técnicas artísticas.

    Captura de pantalla 2019-03-26 a las 17-

    PRODUCTO:

    EQUIPOS PARA LABORATORIO
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/220-equipos-para-laboratorio?fbclid=IwAR3SGiA2eif3pKCQbuLHXkiDwArYAcgDfMiuoA9TxkmcK21Q1tihMsNjR8c

  • 41.1 NUEVOS PRODUCTOS - NANO ESTEL (SEGUIMOS INVESTIGANDO)

    Nano Estel


    Definir el Nano Estel un “nuevo producto” no es del todo correcto, ya que se introdujo en nuestro catálogo en 2011. Es sabido, sin embargo, que el sector de la restauración, en cuanto a introducción de novedades, es bastante “conservador” (¡perdonar el juego de palabras!...).
     
    Por otro lado tampoco es del todo equivocado, ya que en el transcurso de los años nos hemos ido dando cuenta de que algunas novedades no cumplían con lo que prometían, porque el valor del bien cultural sometido al tratamiento es tal como para no permitir experimentos, y además es correcto utilizar productos que ya hayan superado con éxito el número más amplio de pruebas posibles. 
    Por eso nos comprometimos a realizar una actualización periódica en uno de los productos más interesantes bajo nuestro punto de vista, el Nano Estel, por dos razones importantes: 
    ·         Como consolidante que basa su acción en la formación de sílice es un producto irreversible, análogo en este sentido al silicato de etilo.
    ·         En los últimos años el mercado ha sido invadido por decenas de nano-productos, que aprovechan la terminología para alardear de una eficacia apoyada sólo por las palabras, pero que no tiene ningún soporte con respecto a estudios científicos. Por eso retomamos el Boletín CTS n°29.1 (Nano Estel: primeros resultados experimentales), y ampliamos la información con estudios más recientes, en esta ocasión desarrollados por investigadores portugueses.   

    1. Determinación de la velocidad de secado
     Un estudio de Musacchi y Diaz Gonçalves [1] ha comparado dos sistemas consolidantes a base de nanopartículas (nanocal Calosil E25 y nanosílice Nano Estel), aplicados en tres piedras diferentes, para poder comprobar la eventual variación en la velocidad de secadoComo es sabido, algunos tratamientos dificultan incluso más este proceso, y el resultado es que el agua permanece durante más tiempo en el interior de la piedra tratada, con consecuencias negativas tanto a nivel cromático (obscurecimientos), como de ataque microbiológico. El estudio se ha llevado a cabo en el ámbito del proyecto Drymass (ref. PTDC/ECM/100553/2008), y su objetivo era aclarar otros resultados conseguidos dentro del mismo proyecto[2], según los cuales uno aumento de la cinética de secado se podía conseguir a través de la aplicación de una capa de cal. Además, otros autores habían detectado el mismo incremento en términos de secado después de la aplicación de nanocales (Nanorestore y Calosil).  

    Los substratos utilizados en las pruebas eran un mortero a base de cal (con porosidad capilar del 20,8%), una roca carbonática (Ançã, de Portugal, con una porosidad del 22,9%), y una arenisca (Bentheimer, de Alemania, con una porosidad del 17,7%). 
    En la foto (1) se pueden ver las muestras en la fase de curado. La curva de secado se ha determinado en base a la norma RILEM 1980. Los dos productos han resultado ser irrelevantes en cuanto a la velocidad de secado, y esto no obstante los autores hayan cometido un error de valoración inicial, considerando el Nano Estel un producto listo para el uso. En realidad, como se indica en la ficha técnica, hay que tomar en cuenta la dilución del producto, cuyo uso tal cual se tiene que limitar sólo a substratos extremamente deteriorados y absorbentes. 
    Podemos concluir que el Nano Estel no presenta contraindicaciones en este sentido, ni siquiera en caso de tratamiento excesivo.    



    2. Comparación entre nanosílices y silicato de etilo modificado.
    En el caso específico de la investigación que vamos a describir, de Borsoi, Veiga y Santos Silva [3], las propiedades de las nanosílices se han comparado también con las del silicato de etilo (TEOS), modificado mezclándolo con nanocales. En este caso los substratos han sido unas muestras de morteros pobres de ligante (ligante:inerte 1:4), estudiados para simular un mortero degradado y poroso. Se han ido preparando, por tanto, tres series de muestras: 
    ·         Sin tratar (ST) 
    ·         Tratadas con una mezcla de nanocales (Nanorestore, 95%) y TEOS (Estel 1000, 5%), con un residuo seco final de 24 g/lt (NLSE). 
    ·         Tratadas con nanosílices (Nano Estel diluido en agua 1:8) , con un residuo seco final de 57 g/lt (NS).   

    Los productos se han ido aplicando mediante rociadura en 10 aplicaciones sucesivas, dejando el tiempo para la absorción del producto, entre una aplicación y otra, y luego dejando un tiempo de curado de 90 días antes de someterlos a una serie de mediciones indicadas a continuación. En las mediciones de resistencia mecánica se aprecia como ambos tratamientos incrementan sus valores, incluso de forma importante, y como la dureza superficial, en este caso también, aumenta, pero no de forma excesiva; Se trata de un resultado positivo ya que un exceso de dureza superficial indicaría una acumulación de los consolidantes en las capas más externas y, por tanto, una distribución no óptima dentro de las muestras.  

    Tratamiento  Resistencia a la flexión (N/mm2) Resistencia a la compresión (N/mm2) Dureza superficial (Shore A) 
    ST 0,28 ±0,03 0,43 ±0,02 73                                      
    NLSE 0,38 ±0,04  0,66 ±0,04 79 (+8%)
    NS 0,43 ±0,05   0,73 ±0,04 82,5 (+13%)


    Aunque los productos examinados no son repelentes al agua, sino sólo consolidantes, se han determinado las velocidades de absorción de agua a través del tubo Karsten, y se han registrado los siguientes valores: 
                                        Tratamiento          Velocidad de absorción, en segundos, y desviación estándar
                                              ST                                                       36,50 ±4,92 
                                            NLSE                                                    40,16 ±7,43
                                             NS                                                        62,33 ±13,04

    Como es sabido, el silicato de etilo pierde su efecto repelente al agua después unas semanas y, por lo tanto, habiendo pasado 90 días de la aplicación, el valor para las muestras de la serie NLSE ha vuelto casi a los niveles iniciales. Puede que haya habido simplemente una reducción parcial del volumen de los poros, y lo mismo ha pasado en el caso de la nanosílice, otro producto que no tiene un efecto hidrófobo intrínseco. Otro resultado que nos ha parecido interesante es que la mezcla NLSE parece haberse adherido perfectamente al material carbonático, como si la nanocal hubiera actuado como promotor de la adhesión, con la formación final de silicatos de calcio. Después de un análisis SEM-EDS, también la sílice que se forma va asumiendo un aspecto diferente, ya no de placas, sino más bien de filamentos, una clara señal del desarrollo lineal de los tetraedros de sílice. Para concluir, ambos productos han demostrado un efecto consolidante, y el principal problema parece haber sido un exceso de producto que se ha quedado en la superficie y que, en el caso del sistema NLSE lleva a un blanqueamiento mientras que, en el caso de la nanosílice, a un efecto brillo. Aunque ambos efectos cromáticos no se pueden percibir a simple vista, de todas formas indican una absorción no completa. Hay que añadir, además, que los investigadores a lo mejor han exagerado un poco, ya que 10 nebulizaciones, aún con productos diluidos, nos parecen un poco excesivas y a lo mejor un restaurador en el equipo hubiera podido limitar los efectos negativos, quizás taponando las superficies al final de la aplicación, para eliminar el exceso de ambos productos.    

    No obstante todos los límites de penetración indicados anteriormente, estos estudios confirman la validez del Nano Estel, que ha demostrado ser compatible con todos los substratos analizados. El punto crucial es por tanto aplicativo, por lo que siempre hará falta la máxima atención, como se ha ido subrayando siempre en el caso de la aplicación de consolidantes, precisamente para evitar esas acumulaciones superficiales que, con el tiempo, podrían llegar a ser un problema en términos de conservación.  

    PRODUCTO:

    ESTEL 1000 - CONSOLIDANTE A BASE DE SILICATO DE ETILO 
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/170-estel-1000-consolidante-a-base-de-silicato-de-etilo



    Bibliografía
        

    [1] J. Musacchi, T. Diaz Gonçalves; ”Influence of nano-lime and nano-silica consolidants in the drying kinetics of three porous building materials” Relatório 168/2014.
    [2] V. Brito, T. Diaz Gonçalves; “Artisanal lime coatings and their influence on moisture transport during drying. 3rd Historic Mortars Conference, 11-14 September, Glasgow, Scotland, 2013. 
    [3] G. Borsoi, R. Veiga, A. Santos Silva; “Effect of nanostructured lime-based and silica-based products on the consolidation of historical renders”, 3rd Historic Mortars Conference 11-14 September 2013, Glasgow, Scotland.
  • 41.2 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - COLORES ESTABLES CON LOS LEDS HI-CRI

    Colores estables con los LEDs HI-CRI

    En enero de 2013 en la página web del Independent apareció un titular alarmante: Sunflowers wilt: Van Gogh's masterpiece is slowly turning brown as a result of exposure to LED lighting,  es decir que se había detectado una alteración cromática en uno de los girasoles de Van Gogh como consecuencia de la iluminación a través de lámparas de LED [1]. Numerosas páginas especializadas en campo artístico y museológico reportaron de inmediato la noticia, que se amplificó con tonos alarmantes también en la prensa y en la televisión. 

    Se hablaba de la tonalidad amarillo cromo, que habría sufrido una reducción virando hacia tonalidades pardas-verdosas, debido a la formación de Cr2O3 .H2O y otros compuestos de Cr(III). El amarillo cromo (cromado de plomo), siempre se ha considerado estable, pero algunas tonalidades, que contienen sulfato, serían más sensibles a la luz (y no especialmente de los LEDs, sino a la irradiación UV y visible, procedente de cualquier fuente). 
    Hoy no queremos profundizar en el debate, (indicamos algunas referencias en la Sitografía [2,3]), que se llevó a cabo como consecuencia de los estudios de importantes instituciones, como la Universidad de Amberes, en Bélgica, el ESFR en Francia, el Desy de Hamburgo y el CNR en Italia, queremos en cambio describir los resultados muy recientes de un estudio realizado por el CNR-IFAC, en Florencia. Eva Mariasole Angelin, una joven investigadora de Parma, bajo la supervisión de Marcello Picollo, investigador del CNR experto en el sector del diagnóstico de obras artísticas con técnicas no invasivas, ha sometido a irradiación diferentes materiales, como un color alquídico azul ultramar y un acrílico azul cerúleo, colocados sobre fondos pictóricos y sobre portaobjetos, empleando dos tipologías de fuentes artificiales muy diferentes:

    •       Lámpara de descarga de gas de vapor de mercurio (Hg) PHILIPS MASTERColour CDM- TD 150W/942 RX7s 1CT con filtro UVBlock, montada en el interior de un reflector difusor, actualmente utilizada en el ámbito de las exposiciones;
    •       Lámpara de LED de luz natural CTS ART LUX 10L diseñada por CTS y F&M para su utilización durante la fase de restauración del retoque pictórico.


    En el espectro de emisión de la fuente de descarga de gas (véase abajo “Espectro 1”) se ve que el filtro UVBlock es capaz de bloquear las radiaciones con unas longitudes de onda inferiores a 350 nm, dejando sin embargo pasar radiaciones UV-A entre 350 y 380 nm.   

    El espectro de emisión de la lámpara CTS ART LUX 10L (véase abajo “Espectro 2”) está centrado, en cambio, en el intervalo visible (380–780 nm) sin aportaciones de frecuencias ultravioletas y infrarrojas. El valor medio de contenido UV registrado por los sensores es de cero para la fuente de LED y aproximadamente 400mWm-2 para la fuente de descarga de gas.
       

    Los parámetros termohigrométricos como la temperatura (°C) y la humedad relativa (RH %) se ha monitorizado, en cambio, mediante datalogger LASCAR EL-USB-2 y EL-USB-2-LCD. El envejecimiento se llevó a cabo con la irradiación de las muestras durante diez horas diarias por un plazo de seis meses, colocando las dos lámparas más cerca que en su utilización normal, para incrementar la iluminación; no se trató, por tanto, de un clásico envejecimiento acelerado llevado a cabo con flujos energéticos muy altos concentrados en periodos breves, sino de algo que se acerca mucho a las condiciones naturales de trabajo. Al final del ciclo de envejecimiento acelerado con ambas fuentes, las muestras han sido sometidas a una dosis de aproximadamente 900.000 lx/h equivalente a un año y medio de exposición de materiales “relativamente sensibles” según la clasificación de fotosensibilidad CIE [4]. Aunque estas condiciones sean mucho más suaves con respecto a los clásicos procesos de envejecimiento acelerado, la única variación que se ha podido observar está relacionada con la muestra de azul ultramar conservada en la oscuridad.
    Sabemos que si se excluyen los procesos de alteración inducidos por las variaciones de temperatura y humedad, la mayoría de los fenómenos de degradación dependen de acciones de tipo fotoquímico por exposición a la radiación UV–visible; las componentes ultravioletas del espectro de emisión se consideran como las más dañinas y se deben de eliminar del espectro de emisión, como en el caso de la lámpara LED. 
    Después de este envejecimiento se han llevado a cabo en las muestras, tampoco envejecidas, mediciones con diferentes técnicas espectroscópicas, fotométricas y colorimétricas : 

    •       Espectroscopía UV–Vis–NIR
    •       Espectroscopía infrarroja
    •       Espectroscopía de Resonancia Magnética Nuclear
    •       Instrumentos fotométricos (luxómetro)
    •       Instrumentos colorimétricos (espectrocolorímetro)


    Estos datos nos indican que todos los productos examinados son estables y que las variaciones inducidas por las dos lámparas no son comparables, de hecho las únicas variaciones colorimétricas significativas se han asociado a las muestras de Azul Ultramar francés Winsor & Newton alquídico colocadas en la oscuridad total por toda la duración de las pruebas de envejecimiento. Los resultados del comportamiento de los diferentes materiales aparecerán detallados en el siguiente Boletín CTS; por lo que atañe, en cambio, al efecto de la lámpara de LED, con respecto a la clásica de vapor de mercurio, podemos afirmar que no existen los supuestos para formular la hipótesis de una mayor acción de deterioro en los pigmentos.   

    PRODUCTO:

    LÁMPARAS  
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/213-lamparas 

                                  

    Bibliografía
      

    1. http://www.independent.co.uk/arts-entertainment/art/news/sunflowers-wilt-van-goghs-masterpiece-is-slowly-turning-brown-as-a-result-of-exposure-to-led-lighting-8449304.html
    2. http://www.ledsmagazine.com/articles/2013/01/led-lighting-suffers-bad-press-in-van-gogh-paint-degradation-study.html
    3. http://electronicdesign.com/blog/what-s-all-about-van-gogh-and-leds
    4. Control of Damage to Museum Object by Optical Radiation, CIE No 157:2004
  • 41.3 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - INTRODUCCIÓN AL PAPEL HANJI

    Introducción al papel Hanji

    El papel Hanji es un material tradicional realizado en Corea por artesanos que llevan siglos transmitiéndose la técnica, y en el que se imprimió el Jikji, es decir el primer libro impreso con tipos metálicos móviles, en 1377. Esta fecha nos puede desorientar un poco, ya que estamos acostumbrados a considerar como fecha de nacimiento de la impresión con tipos móviles el año 1453, cuando Gutenberg realizó la primera Biblia. El Jikji es el más importante texto del budismo coreano, y la única copia existente llegó a Europa por medio de un coleccionista privado, que posteriormente lo donó a la Biblioteca Nacional Francesa donde, en 1970, lo volvió a descubrir una estudiosa, Ms. Park Peyong-Seon, y donde se sigue conservando a día de hoy. Desde el año 2001 el Jikji (en la “foto 1” abajo podemos ver la primera página de la reproducción anastática), es parte del listado Memory of the World de la Unesco.
     Dejando de lado las curiosidades históricas, nos volvemos a centrar en el papel Hanji, que posee todas las calidades para su uso en el ámbito de la conservación.Reproducimos aquí integralmente el excelente artículo de Paolo Calvini (Profesor de Química de los Soportes de Papel, de la Universidad Cà Foscari de Venecia), escrito para el Congreso que se celebró el 6 de Junio pasado en al Biblioteca Trivulziana del Castello Sforzesco de Milán, “Del Código de Leonardo al descubrimiento del Jikji: una inédita alianza entre Corea e Italia para la excelencia en la restauración sobre papel” en el ámbito del workshop impulsado por el Consulado General de la República de Corea sobre la conservación del papel.  El artículo se publicó en el número 6/2014 de la revista online ARTLAW, por Gianfranco Negri-Clementi y Silvia Stabile.
      


    Notas acerca del uso del papel oriental en la restauración de libros y documentos.
      
    En el trienio 2005-2008 el Instituto Central para la Patología del Libro, el Centro de Fotorreproducción, Encuadernación y Restauración de los Archivos del Estado (recientemente unificados en el Instituto Central para la Restauración y la Conservación del Patrimonio de los Archivos y de los Libros) y la Biblioteca Nacional Central de Florencia han redactado un Pliego Especial Técnico para estandarizar los procedimientos de restauración de los libros y de los documentos. 
    Mediante la Directiva del 23 de Abril de 2008 el Secretario General, el Ministerio de los Bienes y de las Actividades Culturales adoptó el Pliego para las Licitaciones de externalización de la restauración de dichos bienes. 
    En el Pliego aparece a menudo el término "papel japonés" para indicar el material fibroso a emplear en la restauración manual de papeles o pergaminos desgarrados o incompletos. A falta de directivas específicas, es claramente evidente que dicho término indica un tipo de papel genérico disponible a nivel comercial, y no se refiere a un producto preparado específicamente para cumplir con los requisitos de permanencia y durabilidad requeridos en un sector delicado como él de la restauración de los documentos de importancia histórico-artística. En cuanto al cumplimiento de dichos requisitos, es oportuno recordar que los Conservadores de soportes de papel en el pasado han tenido un largo trabajo de mediación entre las exigencias de las industrias papeleras y las necesidades de los Bibliotecarios y de los Archivistas para alcanzar la producción y el control de calidad de papeles destinados a durar en el tiempo, un trabajo que ha llevado a las Normas UNI 1032, UNI 1033 e ISO 9706 (Information and documentation - Paper for documents - Requirements for permanence). Estas normas requieren un mínimo de características físico-químicas: que los papeles para documentos tiene que tener (buena resistencia mecánica, pH no ácido, reserva alcalina, bajo contenido de lignina, resistencia a la oxidación), pero no entran detalladamente en la composición del material. Por ejemplo un papel a base de pasta de madera tratado químicamente para la eliminación de la mayoría de la lignina, con encolado alcalino a base de AKD (dímeros alquilceténicos) y adicionado de Caolín puede fácilmente cumplir con los requisitos establecidos por las Normas. Claramente un buen papel oriental (Japonés, Coreano o Chino) sin encolado alcalino y sin caolín, pero que contenga Carbonato de Calcio, puede cumplir con los mismos requisitos. 
    Ya en los años '80 el Laboratorio de Tecnología del Instituto Central de Patología del Libro [1] y el American Institute for Conservation [2] habían examinado diferentes muestras de papel japonés con las técnicas analíticas establecidas por las Normas UNI e ISO, con la adición de ulteriores análisis (gramaje, composición fibrosa, porcentaje de cenizas, presencia de almidón y hierro), hallando importantes diferencias entre los varios fabricantes y los diferentes tipos de papeles producidos por cada empresa. Se ha subrayado especialmente que algunos papeles comerciales definidos "japoneses" están integrados por un elevado porcentaje de fibras occidentales procedentes de pasta de madera (pasta química), mezcladas con fibras típicamente orientales (Kozo, Gampi, Mitsumata). En algunos casos se ha detectado una refinación insuficiente, con la presencia de residuos esporádicos de lignina que, sin duda, no ayudan a una buena conservación del material. 
    En ausencia de lignina, la pasta de madera bien refinada puede cumplir con las Normas UNI e ISO, sin embargo el estado actual de la investigación científica no permite valorar si y, eventualmente, en qué medida, puede ser perjudicial a largo plazo. Hay que hacer un discurso diferente acerca de la presencia de hemicelulosa, un polímero similar a la celulosa, pero más corto y con "defectos" químicos a lo largo de la cadena, por la presencia de grupos ácidos (carboxilos) y acetilos. Las Normas UNI e ISO no contemplan una valoración del contenido en hemicelulosa, ausente en los linters de algodón y presente en el lino y en las fibras orientales, bast fibers utilizadas respectivamente en la manufactura de los antiguos papeles occidentales y orientales. 
    La misma pasta de madera moderna, aunque esté químicamente tratada para eliminar la lignina, contiene en general unas cantidades importantes de hemicelulosa. Teniendo en cuenta que desde hace por lo menos cincuenta años se está insistiendo en la estabilidad de los papeles de celulosa pura, podría parecer que los defectos químicos de la hemicelulosa contribuyan a disminuir la resistencia al envejecimiento natural de los papeles que la contienen. Sin embargo unas publicaciones recientes [3,4] sugieren que la hemicelulosa, de alguna forma, protege las zonas amorfas de las cadenas de celulosa, secuestrando la acidez y sacrificándose a si misma para salvaguardar las cadenas de celulosa, más largas y resistentes, en el interior de las fibras. 
    Las técnicas analíticas modernas, no destructivas o microdestructivas y, especialmente, la Espectroscopía Infrarroja en Transformada de Fourier (FTIR) [5] y la Gel Permeation Chromatography (GPC o SEC) [6] permiten identificar con bastante facilidad la presencia de esta sustancia. Especialmente la FTIR permite identificar también la presencia de Carbonato de Calcio (reserva alcalina) y de lignina, posibilitando así un estudio profundizado y no destructivo de las relaciones entre la presencia de estas sustancias y el actual estado de deterioro de documentos orientales envejecidos de forma natural, una rama de investigación actualmente poco explorada. 
    Podemos concluir afirmando, por lo tanto, que en el estado actual de la investigación científica no hay nada en contra del uso de papeles orientales comerciales para la restauración de los documentos, firme quedando, claramente, la ausencia de lignina y la presencia de carbonato de calcio. 
    La elección de un tipo especial de papel depende esencialmente de la sensibilidad y de la experiencia del restaurador en su valoración de las características físico-mecánicas que se adaptan mejor a los papeles o a los pergaminos a restaurar.   

    Paolo F. Calvini

    Bibliografía  

    [1] Mario Ansalone, Anna Di Majo, Carlo Federici, Lucia Mita, La Connotazione dei Materiali Impiegati nel Restauro. Bollettino Istituto Centrale Patologia del Libro, 1986, Vol.40, pp. 7-40. 
    [2] Sue Beauman Murphy and Siegfried Rempel, A Study of the Quality of Japanese Papers Used in Conservation. The Book and Paper Group Annual, 1985, Vol.4, The American Institute for Conservation.
    [3] [Helena Håkansson, Per Ahlgren and Ulf Germgård, The degree of disorder in hardwood kraft pulps studied by means of LODP. Cellulose, 2005, Vol.12, pp. 327–335. 
    [4] Catherine H. Stephens and Paul M. Whitmore, Comparison of the degradation behavior of cotton, linen, and kozo papers. Cellulose, 2013, Vol.20, pp. 1099–1108. 
    [5] Paolo Calvini, Andrea Gorassini, Rosanna Chiggiato, Fourier Transform Infrared Analysis of Some Japanese Papers. Restaurator, 2006, Vol.27, pp. 81-89; 
    [6] Arlene A. Silva and Murray L. Laver, Molecular weight characterization of wood pulp cellulose: Dissolution and size exclusion chromatographic analysis. TAPPI Journal, 1997, Vol.80, pp.173-180.

  • 40.2 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - LO QUE QUEDA...

    Lo que queda...


    Desde hace años se considera la técnica de desinsectación por anoxia como la metodología más avanzada para la eliminación de insectos que infestan bibliotecas, archivos, museos e incluso las colecciones privadas. Es una técnica caracterizada no sólo por una gran eficiencia, sino también por una ausencia total de toxicidad, como se ha subrayado en numerosos encuentros técnicos acerca de este tema. De hecho la anoxia es la alternativa totalmente sin riesgos con respecto a las sustancias químicas que presentan siempre, aunque a niveles diferentes, una cierta toxicidad, a veces asociada a carcinogenicidad’. Queremos llamar la atención, resumiendo un estudio muy reciente publicado en Studies in Conservation [1], el problema relativo a los residuos de los pesticidas utilizados para las desinsectaciones.

    Los autores se han preguntado si dichos residuos podían ser peligrosos para los que trabajan diariamente en entornos que se dedican a la conservación de objetos, con especial referencia a las colecciones de manufacturas textiles; éstos son materiales que, como es sabido, pueden absorber en las fibras varias sustancias para luego liberarlas con el tiempo. El estudio se ha llevado a cabo en uno de los más grandes museos de Europa, el Deutsches Historisches Museum (DHM) de Berlín que, no obstante se haya destruido al finalizar la Segunda Guerra Mundial, conserva a día de hoy imponentes colecciones de objetos de todo tipo, incluso prendas civiles y militares, dentro de las cuales 3500 uniformes y banderas [2]. La investigación estaba finalizada a entender si en las fibras se han depositado sustancias tóxicas y si éstas se han extendido también a los entornos de exposición y almacenaje. Es sabido que en el pasado se han utilizado pesticidas a base de arsénico, mercurio y plomo, además de moléculas orgánicas cloradas. Posteriormente se han medido los niveles de estos contaminantes (como el cloro en referencia para los orgánicos), en siete diferentes substratos (lino, algodón, lana, seda, fibra sintética, cuero y piel), procedentes de 112 objetos militares y civiles.

    La tabla más abajo contiene la información acerca de los pesticidas utilizados en el pasado en el DHM, así como muchísimos más museos y archivos, y no solamente, ya que el naftaleno se ha comercializado con el nombre de  “naftalina”, que todos hemos usado, pero que no es comestible, a no ser que te llames Eega Beeva…
      

    Valores relativos a la peligrosidad de las sustancias insecticidas
        
                                           

     

    LD50 oral rata mg/kg

     

    Carcinogenicidad

    Presión de vapor Pa (20°C)

    p-diclorobenceno

    500

    Nocivo

    Sospecha Carc.Cat.3

    170

    Naftaleno

    490

    Nocivo

    Sospecha Carc.Cat.3

    4

    PCP

    27

    Tóxico

    Si STOT RE 2*

    0.008

    Lindano

    76-125

    Tóxico

    Si STOT RE 2*

    5.1

    DDT

    113

    Tóxico

    Sospecha Carc.Cat.2

    0.00045

    MXC metoxicloro

    1860

    Nocivo

    Sospecha Carc.Cat.3

    <10-5



    * STOT RE 2 = 
    Toxicidad específica para órganos diana - exposiciones repetidas Categoría de peligro 2
              

    Algunas de las sustancias indicadas en la tabla presentan también toxicidad para la reproducción, efectos sobre la lactancia o a través de lactación, y otras consecuencias poco agradables.
    Las mediciones de los investigadores alemanes se han realizado mediante cromatografía de gases (GC-MS), con fluorescencia a los rayos X (XRF), y en algunos casos con Espectrometría de Absorción Atómica (AAS), y  han evidenciado una baja presencia de arsénico y mercurio, junto con una mayor concentración de plomo, sin llegar a ser preocupante. Hay que tener en cuenta que estos metales pesados podían estar presentes en algunos reactantes empleados en la realización de las obras, como el curtido de los cueros, y esto explica algunos resultados anómalos.

    Es más preocupante, sin embargo, el dato relativo al cloro, que ha resultado ser ubiquitario, y en algunas obras incluso con niveles elevados. En algunas fibras y en el polvo se han detectado directamente trazas de MXC y de un segundo insecticida (Eulan BLN).
    Se han llevado acabo incluso mediciones ambientales que han detectado bajos niveles de cloro en las áreas expositivas, pero concentraciones preocupantes dentro de las vitrinas; esta es una señal evidente de que las moléculas cloradas, retenidas durante años en las fibras textiles, se liberan de forma progresiva, y que en un área cerrada y sin circulación de aire se puede producir una acumulación peligrosa.  

    Resultados de las mediciones de las emisiones en el museo 
       

                                       

    Aire en los entornos (μg/m3)

    Aire en las vitrinas (μg/m3)

    Límites de exposición (μg/m3)

    Naftaleno

    0-9

    8-425

    500

    p-diclorobenceno

    0

    4-84

    6000

    Lindano

    0

    4-9

    100 



     Para el cloro también puede que existan otras fuentes, como los mordientes utilizados en el tinte de las telas, el sudor depositado por los que llevaron las prendas y la contaminación del aire, pero las concentraciones superiores en entornos cerrados y la detección de las moléculas mismas confirma la presencia de este tipo de sustancias que pueden ser inhaladas por los profesionales que se dedican a la manipulación de los objetos en los depósitos y en las vitrinas.                                                                                

    Bibliografía
      
    1)    Krug S., Hahn O.; “Pesticides at the German Historical Museum  Studies in Conservation, Vol.59, n°6, November 2014. 
    2)    http://www.dhm.de/en/collections-research/sammlungen0/militaria-ii.html  
  • 39.2 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - AGARART: ¡SABEMOS ALGO MÁS!

    AgarArt: ¡sabemos algo más!


    Cuando hace años se introdujo el agar agar en nuestro catálogo, no se conocían todavía muchas de sus propiedades. Progresivamente el producto fue sometido a un análisis desde el punto de vista aplicativo, seleccionando de entre los muchos tipos de agar presentes en el mercado él que, para nuestro sector, garantiza las mejores características, es decir un elevado poder limpiador y facilidad de eliminación,: ¡nació el AgarArt!
     Hoy podemos añadir a los centenares de aplicaciones prácticas realizadas en todo el mundo, también importantes confirmaciones científicas. La primera nos llega de los laboratorios del CNR-ICVBC de Milán, en colaboración con el Departamento de Ciencia de los Materiales, Milán-Bicocca, y el INOE de Florencia, como consecuencia de algunas observaciones de los restauradores Anzani y Rabbolini de Aconerre [1].
    Se está planteando cómo eliminar las sales de la piedra de Angera, una piedra porosa (16-21%), muy usada en las arquitecturas del norte de Italia. En un capitel realizado con dicha piedra se han ido probando geles de AgarArt al 1%, aplicados como soluciones todavía fluidas a una temperatura de 50-60°C, se han dejado gelificar en la superficie, o bien como geles ya formados y, finalmente, como geles triturados en una mezcladora.  Una segunda serie de pruebas se basó en la aplicación de gel preformado, pero con diferentes niveles de concentración (del 1 al 4%). La cantidad de sales se determina mediante Cromatografía Iónica (CI) y Espectrometría de Emisión Atómica de plasma acoplado por inducción (ICP-AES).
    Los hallazgos mediante las dos técnicas ponen ambos en evidencia la fuerte presencia de sulfatos, y esto es un hecho normal debido a la sulfatación en un entorno contaminado como el de Milán, desde dónde procede el capitel en el que se llevaron a cabo las pruebas. El dato operativo que nos interesa más, relativo a las diferentes metodologías aplicativas, nos indica que los sistemas de aplicación en caliente, y con el gel triturado, son más efectivos con respecto a las aplicaciones de geles preformados. Otro dato fundamental es el que asocia el aumento de concentración de AgarArt con la capacidad de extraer las sales, una vez más sulfatos de calcio y sodio, con una buena presencia de magnesio, ya que la piedra de Angera es una dolomita., De hecho si el gel al 1% extrae una cantidad muy baja de sales, esta aumenta de forma importante pasando al 2%, luego al 3 y, finalmente, al 4%. Trabajar con porcentajes incluso mayores complica la aplicación y la eliminación del gel, por tanto no se han tomado en cuenta concentraciones superiores al 5%.  

    Otro importante estudio [2], que ha tenido una resonancia a nivel internacional, se ha publicado recientemente en la revista Heritage Science, y ha sido llevado a cabo por el Politécnico de Milán en colaboración con los restauradores pioneros de las limpiezas con agar: Anzani y Rabbolini de Aconerre, con ocasión de la limpieza del conjunto pétreo del Tornacoro en el Duomo de Milán (Foto 1).
     Se evaluaron los efectos en las superficies de mármol del gel de agar en concentraciones entre el 1 y el 4%, con la adición al 1% de varias sustancias (Tween 20, EDTA, citrato de amonio, poliaspartato de sodio), con unos tiempos de contacto desde los 15 hasta los 120 minutos.

    Los análisis (colorimétricos, FTIR, XRD), se llevaron a cabo antes y después de las pruebas de limpieza para detectar eventuales desperfectos de la superficie pétrea. Los mármoles presentaban tanto acabados diferentes, más o menos lisos, cómo niveles de suciedad diferentes, debidos también a la inclinación de la superficies. En las superficies verticales era más visible una capa más adherente de color amarillo-pardo, debido a los residuos de antiguos tratamientos con cera,  que en las zonas horizontales estaba cubierta por una capa gris de polvo, integrada principalmente por yeso, nitratos y silicatos. 
     

    Información de interés: El azufre se ha detectado solo en esta capa externa, a indicar que no hay ninguna sulfatación del mármol en curso, al contrario de los mármoles de las superficies externas del Duomo.
    Las mediciones FTIR han puesto en evidencia la eliminación casi total del yeso y de los nitratos: los picos relativos ya no se detectan, y esta es una diferencia con respecto a una limpieza realizada sólo con agua desmineralizada. Este fenómeno se puede explicar con un nuevo depósito de las sales debido al uso de tampones de algodón, que no son capaces de absorber por completo lo que se disuelve.
    Los materiales disgregados se absorben parcialmente en el interior del gel, y en parte se quedan en el interfaz gel/mármol; una vez eliminado el gel es más fácil eliminarlos con una ligera acción mecánica, pasando por la superficie una esponja humedecida. Los diferentes aditivos no varían sustancialmente el nivel de limpieza.
    El resultado de optimización del procedimiento nos ha llevado a trabajar con unos tiempos de contacto de 1 hora, con un gel de AgarArt al 3%, aplicado después de nebulizar en la superficie agua desmineralizada con un 1% de Tween 20; este aditivo permite una eliminación más homogénea de los residuos insolubles que se han quedado en la superficie.
    La aplicación del método a gran escala ha pedido la comprobación de todos los parámetros de valoración: densidad, grosor de la capa de gel, tiempos de aplicación, en base a las características morfológicas y de conservación específicas del material pétreo tratado.                                                                              

    PRODUCTO:

    AGARART  
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/225-agarart


    Bibliografía
      
    1)    Sansonetti A., Casati M., Striova J., Canevali C., Anzani M., Rabbolini A.; A cleaning method based on the use of agar gels: new tests and perspectives”  12th International congress on the deterioration and conservation of stoneNew York; 2012. 
    2)    Gulotta D., Savielllo D., Gherardi F., Toniolo l., Anzani M., Rabbolini A., Goidanch S.; “Setup of a sustainable indoor cleaning methodology for the sculpted stone surfaces of the Duomo of Milan”, Heritage Science, 2014, 2:6. 

  • 38.1 MÁS INFORMACIÓN - EPO 150: APLICACIONES EN EL SECTOR ARQUEOLÓGICO

    Epo 150: aplicaciones en el sector arqueológico

    Las resinas epoxídicas llevan muchos años siendo utilizadas en ámbito arqueológico, no sólo para los encolados sino también, por ejemplo, para la realización de copias a dejar en el sitio, en caso de musealización de los originales, como se indica en la revista Kermes para la Tumba de los Caballos en la necrópolis cretense de Priniàs [1].
    En ese caso, por razones conservativas, era necesario llevarse los esqueletos de los caballos del área de excavación, sin embargo esta operación hubiera implicado la pérdida de la visión de conjunto y, por lo tanto, también del valor histórico-simbólico del sitio mismo. Se decidió por tanto realizar una copia exacta de resina, conseguida mediante la creación de un molde en goma silicónica, y el posterior colado de resina epoxídica cargada con áridos (en la foto se puede ver la copia de resina).
    Hoy, de entre las muchas aplicaciones de las resinas epoxídicas, describimos la utilización de la Epo 150, en dos casos relativos al sector arqueológico.  

    La primera intervención se refiere a un trabajo llevado a cabo por los técnicos de la Conservaduría de bienes Arqueológicos de la región Abruzzo. Se hallaron numerosos restos fósiles de grandes mamíferos en un yacimiento descubierto por casualidad al sur de Ortona (CH), durante unas obras en la carretera [2].
    La excavación realizada con carácter urgente en el mes de Octubre de 2002 permitió recuperar los restos fósiles, en su mayoría Hippopotamus Antiquus, que se remontan al Pleistoceno medio inicial (aproximadamente hace 700.000 años): la mandíbula casi completa, un incisivo, dos molares y un canino superior, algunas vértebras cervicales, torácicas, lumbares y caudales, algunas costillas, el coxal y el fémur derecho. La mandíbula, por su tamaño y su integridad, era el resto más significativo, gravemente dañado por numerosas fracturas y grietas, así como por infiltraciones en el tejido esponjoso de aparatos radicales.
    Una vez preparada toda la documentación, las operaciones de aislamiento y excavación sellevaron a cabo de forma simultánea con la protección y la primera consolidación de los restos. Por cada elemento se procedió a la aplicación de una fina película de PVC transparente, seguida por el vendaje con una gasa yesada.
    En la recuperación de la mandíbula de hipopótamo fue necesario proceder con extremo cuidado debido a su fragilidad, tamaño, conformación y colocación. Este resto, de hecho, antes de la extracción final, se englobó, además, en poliuretano expandido dentro de una estructura de protección.
    Una vez transportada hasta el laboratorio, la mandíbula fue liberada progresivamente y restaurada. Para la consolidación y para la continuidad estructural se empleó la dispersión poliuretánica Akeogard AT40, mientras que en los puntos especialmente frágiles de la pieza y sujetos a hundimientos se inyectó resina epoxídica Epo 150.  

    La segunda intervención se llevó a cabo en una parte de la rica colección de paleobotánica del Museo de Geología y Paleontología de la Universidad de Pádua, expuesta en la “Sala delle Palme”, de acuerdo con la Conservaduría Arqueológica de la región Veneto [3].
    Las frondas de palmeras fósiles en cuestión tienen un excepcional valor científico, histórico y estético, gracias también a su gran tamaño que, en algunos casos, supera los dos metros de altura. La preparación de los restos se remonta, en algunos casos, a la mitad del siglo XIX, mientras que el montaje es de finales de los años Treinta del siglo XX y, por tanto, ambos están ya dentro de un contexto histórico.
    Después de una importante campaña de diagnóstico, se procedió en el sitio con las operaciones de limpieza, consolidación de las superficies (con Paraloid B72 en butil acetato), estucado (con una masa de sílice micronizada y Paraloid B72 en acetona), y finalmente al encolado de las grietas profundas, con Epo 150.    

    PRODUCTO:

    EPO 150 (PRODUCTO BICOMPONENTE)  
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/82-epo-150-producto-bicomponente



    Bibliografía

    1. Borgioli L., Venturini G., “Resine epossidiche per copie”, Kermes n°55, 2004.
    2. Agostini S., Caramiello S., Rossi M.A.; “Un intervento di scavo e restauro paleontologico: il giacimento con Hippopotamus antiquus di Ortona (CH)”, Il MIBAC, ricerca e applicazioni a confronto, X Salone dei Beni e delle Attività Culturali, Venezia, 1-3 Dicembre 2006.
    3. Del Favero L, Fornasiero M., Reggiani P., Zorzi F., Molin G.; “Il restauro dei vegetali fossili esposti nella “Sala delle Palme” del Museo di Geologia e Paleontologia dell’Università di Padova”, Museologia Scientifica nuova serie, 6(1-2): 49-57  (2012).
  • 38.2 NUEVOS PRODUCTOS - NOVEDADES EN LA LÍNEA GAMBLIN

    Novedades en la línea Gamblin

    Durante un seminario celebrado el 28 de Octubre de 2013 en el Istituto per l’Arte e il Restauro, en Palazzo Spinelli, Robert Gamblin presentó una serie de novedades relativas a las reintegraciones de las lagunas de las capas pictóricas.  

    La primera novedad importante es la introducción de los Gamblin Conservation Colors, comercializados hasta ahora en botes de cristal, en el formato godet. La gama de los así llamados half-pans vuelve a proponer integralmente los botes, con una sola excepción: el Azul Manganeso..
    Este color, introducido en 2009, se basaba en el manganato de bario (PB33), un pigmento muy estable que, sin embargo, se había dejado de producir. Las reservas de pigmento están agotadas, así como la formulación en tarro basada en este pigmento, mientras que siguen existiendo unos godets con esta composición. Una vez acabados, los godets se fabricarán utilizando una ftalocianina de cobre (PB15:4), y se comercializarán con la indicación “Tonalidad Azul Manganeso” (Manganese Blue Hue), como ya se está haciendo con el pigmento en bote.
    La segunda novedad es el regreso del albayalde en las paletas. Con el nombre de Blanco de Cremnitz vuelve, de hecho, el carbonato básico de plomo (PW1), con CAS 1319-46-6. Naturalmente para este pigmento hay que cumplir con todos los procedimientos de seguridad, por su nivel de toxicidad. Finalmente nos pareció especialmente interesante un nuevo tipo de estuco a base de ceras y de resina aldehídica Laropal A81 (el mismo ligante de los Gamblin Conservation Colors).
    Dicho estuco, presentado como adelanto pero todavía no disponible, se calienta en la llama, luego se reparte con una espátula en la zona de la laguna, moldeándolo posteriormente para imitar la superficie. Sobre esta integración es posible realizar el retoque en un segundo momento.   

    CTS lleva desde 2002 distribuyendo los Gamblin Conservation Colors, y esta relación se ha ido estrechando hasta el punto que, en estos días, se ha firmado un contrato en exclusiva para Italia y para los 6 países (Francia, España, Suiza, Rumanía, Turquía e India), donde están presentes empresas asociadas de CTS.
      

    A estas alturas nos parece importante retomar unos puntos que abordamos ya hace unos años (Boletín nº 
    24.2 - Gamblin Conservation Colors), considerando también que a menudo las preguntas insisten en los mismos aspectos operativos. Las respuestas de hoy vienen enriquecidas por 4 años de experiencia.

    ¿Cuál es el disolvente recomendado? Esta es la pregunta más frecuente, sin embargo la respuesta no es unívoca, ya que el “mejor” disolvente depende de la “mano” de cada restaurador, y también del efecto final que queremos conseguir. En general considero que el alcohol isopropílico es un buen punto inicial: eficiente y rápido, no especialmente tóxico, proporciona un efecto sin brillo. Sin embargo no está bien limitarse a un solo disolvente, sino jugar con dos o incluso tres de varias características, mezclándolos para conseguir diferentes niveles de volatilidad. Por ejemplo, al alcohol isopropílico se le pueden añadir tanto disolventes hidrocarbúricos, como aguarrás mineral D40, más lento en la evaporación, esencia de petróleo, ligroína, como disolventes polares como la acetona, si se quiere conseguir un efecto todavía más mate, o lactato de etilo, muy lento en su evaporación. Hay que recordar que si sacamos el color del tarro se puede diluir sólo con disolventes hidrocarbúricos, sin embargo si empezamos con el color secado en la paleta o en el godet, es necesario añadir a los disolventes hidrocarbúricos por lo menos el 25% de disolventes polares como aromáticos, acetona o alcohol isopropílico/etílico. Conclusión: no existe un disolvente “mejor”, hay que tomar en cuenta varios factores y también la metodología de trabajo de cada uno.
    ¿Es posible conseguir unos colores con más brillo? Sustancialmente se consigue este efecto incrementando el ratio resina/pigmento, y luego añadiendo de forma paulatina la Laropal A81 al color para el que deseamos más efecto brillo. Se puede hacer empezando por la resina y solubilizándola por separado, o bien utilizando soluciones ya preparadas de Laropal A81, como el barniz Regal Retouching Varnish, o también el medium fabricado por Gamblin y denominado Galdehyde Resin Solution.
    ¿Qué barniz hay que utilizar durante el retoque y para finalizar? Todos los barnices para retoque en comercio se pueden utilizar por rociadura, mientras que para la aplicación con brocha es necesario proceder con mucho cuidado, debido a la mayor reversibilidad de los Gamblin Conservation Colors también en disolventes de baja polaridad. Para el barnizado final se aconseja la Regal Varnish Gloss o Mat, tanto con brocha como por rociadura.
    ¿Qué hay que hacer si el color en el tarro se ha secado? Puede pasar que un cierre defectuoso del tarro haga que se seque el color en su interior: es suficiente añadir un disolvente polar (como acetona o un acetato, pero se recomienda el alcohol isopropílico), y mezclar bien. El color se puede volver a utilizar, sin ninguna alteración ni pérdida de material.  

    PRODUCTO:

    GAMBLIN COLORES CONSERVACIÓN 
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/435-gamblin-colores-conservacion-tarritos-de-cristal-de-15-ml

  • 38.3 MÁS INFORMACIÓN - ESTEL 1000 EN EL TRATAMIENTO DEL CEMENTO

    Estel 1000 en el tratamiento del cemento

    El cemento es algo que se mira mal en el mundo de la restauración y hay razones para ello.
    En primer lugar es excesivamente resistente y, en caso de movimientos (de la estructura, por dilatación/contracción térmica,….), tiende a romper la piedra o los revocos adyacentes.
    Además, contiene sal (sulfato de calcio, es decir yeso) que pasa al material contiguo provocando más daños aún; en efecto, la porosidad del cemento es inferior a la de los revocos y, a menudo, también de la de la piedra. Por ello, las sales tienden a acumularse en el exterior del mortero de cemento y es típica la eflorescencia blanca en las murallas cerca de las fugas de agua. Aunque se hayan comprendido los problemas relacionados con la utilización del cemento y hoy por lo general se utilicen morteros hidráulicos desalinizados (Lafarge o, para inyecciones, los de la línea PLM de nuestro segmento Mortelos y Ligantes), no se puede olvidar que son cada vez más frecuente las actuaciones en obras hechas de cemento, es decir la llamada “piedra artificial”.

    Este material empezó a utilizarse como imitación de la piedra en la segunda mitad del siglo XIX, paralelamente al desarrollo de la industria del cemento, y era una mezcla a base de cemento, arena, piedra granulada y agua. 
    Utilizando pigmentos en polvo o áridos de color adecuado, unos hábiles artesanos lograban morteros cromáticamente idénticos al material pétreo a imitar y que todavía hoy en día no son nada fáciles de reconocer. 
    La utilización de la piedra artificial se extendió rápidamente, porque permitía conseguir a precio mucho más bajo unos elementos decorativos y esculturas imitando perfectamente las piedras naturales. Un texto que describe muy bien esta técnica [1] está disponible en nuestro catálogo.
    En efecto, el cemento ofrecía indudables ventajas respecto a los morteros de cal aérea, que fraguaban lentamente y de forma desigual del exterior hacia el interior; en cambio, el cemento dio origen a morteros que fraguaban de manera homogénea en todo su espesor, logrando una obra muy sólida y resistente. El punto crítico era la durabilidad de este material, que no se puede comparar con la de una piedra natural. De hecho, en un siglo, muchas de estas obras presentan un deterioro que requiere una restauración y aquí se plantea la pregunta: ¿cuál es el mejor consolidante para el cemento?
    Debido a la baja porosidad del mortero de cemento, los clásicos consolidantes a base de polímeros pueden no tener una penetración satisfactoria e incluso atrapar las sales todavía presentes debajo de una película impermeable, con efectos aún peores a corto plazo. Se sabe que se ha utilizado el silicato de etilo con resultados bastante buenos, pero es necesaria una mayor comprensión del fenómeno.
    Para ello, puede ser útil un estudio de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Bolonia, que empezó por la caracterización de los materiales (silicato de etilo Estel 1000, cal y mezclas de los dos productos, curados a distintos porcentajes de humedad relativa, a los 2 meses y al año de su preparación), seguida de la evaluación de los efectos en el cemento.

    El objetivo de la investigación era comprender si con la aplicación de los productos se forma la llamada fase C-S-H (Calcium-Silicate-Hydrate), es decir el material que constituye la “cola” del cemento. 
    En la primera parte del estudio [2], se caracterizaron los materiales con análisis XRF, FTIR y TGA, llegando a la conclusión de que el silicato de etilo parece tener un efecto puzolánico, con formación de la fase C-S-H, y por lo tanto puede reemplazar a la “cola” perdida en los procesos de deterioro del cemento.
    En la segunda parte del estudio [3], en la que los investigadores italianos contaron con la colaboración de estudiosos suizos, el silicato de etilo se aplicó en dos tipos de mortero de cemento, con árido idéntico y cemento portland normal, pero con diferente cantidad de agua, como se muestra en la tabla siguiente.        

    0,45-35% 

    0,65-35%
    Relación agua/cemento (w/c)  0,45 0,65
    Contenido de cemento (Kg/m2) 330 275
     Contenido de aire (vol %)  2,0 2,5
    Resistencia a compresión después de 28 días (MPa)  52,5 31,0


    Las muestras de cemento, una vez curadas, se trataron con Estel 1000: la más débil y porosa (0,65) absorbió mayores cantidades de silicato de etilo.
    Se midieron varios parámetros, de los que por sencillez se indican solo los dos que parecen más relevantes.

    Se detectó una reducción de la profundidad de carbonatación, que es uno de los indicadores del deterioro de un cemento, como se muestra en la tabla siguiente. Por supuesto, el cemento más poroso (0,65) sufre una carbonatación a pesar del tratamiento.

    Tipo de cemento →                           0,45-35%            0,65-35%
    Profundidad de
    carbonatación (mm)  
    Sin tratar Tratado
    con Estel 1000
    Sin tratar

    Tratado
    con Estel 1000

         3,0                       0,0 9,1   3,5

    Se logra una reducción de la penetración de los cloruros. En la tabla sinóptica se puede observar que se produce una efectiva y notable reducción de la profundidad de penetración de los cloruros en el cemento tratado con Estel 1000.

    Tipo de cemento →                     0,45-35%                    0,65-35%
    Profundidad de
    carbonatación (mm) 
    Sin tratar       Tratado
    con Estel 1000
    Sin tratar Tratado
    con Estel 1000
    Promedio 11,6                   0,25  41,2                         0,75
    Máxima 15,0                    1,0  47,5                         1,5


    Conclusiones
    La aplicación de Estel 1000 da lugar a sílice, que se une al calcio produciendo la fase SCH. La reacción se realiza en su mayoría en los poros más finos, dejando abierta la permeabilidad al vapor de agua y reduciendo sensiblemente los factores de deterioro como la profundidad de carbonatación y penetración de los cloruros. Todos los resultados indican la acción positiva del silicato de etilo Estel 1000 en morteros de cemento.

    PRODUCTO:

    ESTEL 1000 - CONSOLIDANTE A BASE DE SILICATO DE ETILO 
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/170-estel-1000-consolidante-a-base-de-silicato-de-etilo


    Bibliografía
    1. Cavallini M., Cimenti C.; “Marmi e pietre artificiali – Manuale per la realizzazione e il restauro delle decorazioni plastico-architettoniche di esterni e interni”, Alinea (2000).
    2. Sandolini F., Franzoni E., Pigino B.; “Ethyl Silicate for Surface Treatment of Concrete. Part I: Pozzolanic Effect of Ethyl Silicate” Cement & Concrete Composites, DOI: 10.1016/j.cemconcomp.2011.12.003 
    3. Pigino B., Leemann A., Franzoni E., Lura P.; “Ethyl silicate for surface treatment of concrete. Part II: characteristics and performance”. Cement & Concrete Composites, 2011.

  • 37.2 MÁS INFORMACIÓN - GEL PARA LA LIMPIEZA: ESTADO DEL ARTE Y DESARROLLOS DE LA INVESTIGACIÓN

    Gel para la limpieza: estado del arte y desarrollos de la investigación

    En el ámbito de la conservación con el término "limpieza" se entienden todas esas operaciones cuyo fin no es sólo la recuperación de los valores estéticos originales de la superficie tratada, sino también la eliminación de las sustancias que podrían originar un deterioro. En la mayoría de los casos los materiales que no permiten una lectura correcta de una obra de arte se encuentran en la superficie, por ejemplo en una pintura se hallan por encima del estrato pictórico. La limpieza, por tanto, es una operación muy dedicada ya que se lleva a cabo en unos estratos muy cercanos a los pictóricos y, especialmente, por el hecho de que su acción es irreversible. Por eso la acción de los sistemas de limpieza tiene que ser sólo superficial y focalizada a la eliminación exclusivamente de las sustancias indeseadas; un sistema ideal, por tanto, tendría que ser activo sólo y exclusivamente con los materiales a eliminar sin interactuar de ninguna manera con el substrato pictórico. La introducción de sistemas de limpieza gelificados, indudablemente han mejorado las herramientas a disposición del conservador para una acción de limpieza más adecuada y segura. Dichos sistemas consiguen limitar la acción del disolvente sólo a los primeros estratos de la obra, gracias a las capacidades de retención características de las estructuras certificadas.

    La utilización de gel como herramienta para la limpieza de obras de arte es bastante reciente. Los primeros estudios en este sentido los llevó a cabo Wolbers hacia la mitad de los años 80 [1], sin embargo, como pasa a menudo en estos casos, las primeras verdaderas aplicaciones se realizaron después de unos años y se introdujeron en Italia gracias a la actividad de Paolo Cremonesi hacia la mitad de los años 90 [2]. Las aplicaciones y el reconocimiento en ámbito internacional por parte de los restauradores y de la comunidad científica fueron graduales, pero al final la utilización de las soluciones densificadas y de los solvent-gel en la limpieza se ha convertido en una práctica consolidada y frecuente.

    Con la divulgación de la práctica se multiplicaron incluso los materiales utilizados, hasta el punto que hoy CTS ofrece hasta 10 de ellos en su catálogo: Klucel GCarbogelVanzan FC-N Etilcelulosa, como espesantes, mientras que para la preparación de los auténticos solvent-gel se utiliza el emparejamiento Carbopol Ultrez 21/Ethomeen (C/12 C/25 según la polaridad del disolvente); además se introdujo hace poco también el Pemulen TR2, análogo al Carbopol, pero con mayor viscosidad. Si quisiéramos ampliar el discurso a los geles rígidos tendríamos que mencionar también el Gellano y el Agar-Art.


    El éxito de los geles es debido principalmente a sus características, que presentan muchas ventajas con respecto a los métodos de limpieza utilizados con anterioridad. De hecho, espesando la solución limpiadora se puede reducir la migración y penetración del disolvente en el interior de la obra y, además, se reduce de forma importante también la volatilidad, lo que implica una reducción de los riesgos para los operadores y unas excelentes capacidades detergentes.
    Los geles físicos, no obstante las claras ventajas que aportan en el ámbito de la limpieza de las obras de arte, presentan una problemática relacionada con su eliminación que, en algunos casos, puede ser de difícil solución [3]. En los últimos años los estudiosos han ido buscando una solución para dicho problema, investigando unos sistemas que conservaran las buenas características de los geles físicos sin generar, por otro lado, el problema de los residuos.
    Sin embargo, antes de presentar los desarrollos de la investigación en este campo es necesario profundizar un poco acerca de lo que es un gel y de sus características esenciales que determinan sus propiedades macroscópicas. Una definición de gel unívoca y aceptada a nivel universal no se ha formulado todavía, no obstante el hecho de que la utilización de estos materiales esté muy extendida, de hecho es famosa una frase de Jordan Lloyd: “el gel es más fácil reconocerlo que definirlo” [4].  

    Una primera y más amplia definición se encuentra siempre en las obras de Lloyd: “Sólo una regla parece ser válida para todos los geles, es decir que se forman juntando dos componentes, uno de los cuales es un líquido a la temperatura de trabajo y el otro, la sustancia gelificante, es un sólido. El gel mismo posee unas propiedades mecánicas parecidas a los sólidos, por ejemplo la capacidad de mantener su forma cuando esté sometido a un estrés equivalente a su mismo peso, y bajo cualquier estrés mecánico muestra fenómenos de tensión”.

    Existen diferentes clasificaciones de los geles basadas en diferentes características, sin embargo la más interesante para nuestros objetivos considera como criterio discriminante la naturaleza de los enlaces creados entre las diferentes cadenas poliméricas. De esta forma los geles se pueden dividir en dos grandes grupos:
    Los geles químicos y los geles físicos.
     En los geles químicos la estructura tridimensional del gel está caracterizada especialmente por enlaces covalentes que unen fuertemente las cadenas poliméricas. Los geles físicos, en cambio, están caracterizados por interacciones débiles entre las cadenas (interacciones de van der Waals, enlaces de hidrógeno o enlaces dipolo-dipolo). Las diferencias sustanciales existentes entre las energías de estos enlaces tienen una repercusión también en las características de los dos tipos de gel.
    El enlace covalente otorga al gel químico unas propiedades mecánicas y reológicas totalmente diferentes con respecto al gel físico. En el caso de un gel químico la viscosidad es claramente mayor con respecto a los valores normales típicos de un gel físico; dichos valores son tan elevados que muy a menudo los geles químicos se comportan como un objeto sólido. Esta característica, por lo tanto, permite la completa eliminación del gel evitando de antemano el problema de los residuos: de hecho, si las fuerzas de adhesión entre superficie y gel son inferiores con respecto a las fuerzas de cohesión internas del gel, es necesaria una simple acción mecánica para quitar por completo el gel aplicado.  

       Además, las excelentes características de los geles físicos como sistema de limpieza las poseen integralmente también los geles químicos. De hecho ellos también teniendo una elevada afinidad con la fase líquida, consiguen cargar una cantidad de la misma muy superior con respecto a su peso y permiten una importante reducción tanto de la penetración del disolvente en el interior de la superficie, como de la volatilidad del disolvente mismo.
    La investigación realizada principalmente por el C.S.G.I. de la Universidad de Florencia [4, 5] se ha centrado por tanto en la síntesis de nuevas sustancias gelificantes con características adecuadas para la restauración. El resultado han sido unos geles químicos muy compactos con características variables según el polímero utilizado: se han conseguido geles opacos o transparentes capaces de cargar agentes detergentes de base acuosa o soluciones agua-disolvente (especialmente etanol, MEK y acetona). Los resultados de las primeras pruebas aplicativas realizadas sobre soportes de papel y sobre lienzos para la eliminación de adhesivos usados en antiguos reentelados han sido alentadores.
    Gracias a la investigación, por tanto, las herramientas puestas a disposición del restaurador se van ampliando cada día más: desde los primeros solvent-gel a los geles rígidos (Agar-agar y Gellano), para llegar en futuro a los nuevos geles químicos.        

    PRODUCTOS:

    EDISOLVENTE/ESPESANTE/GELES DE SÍLICE 
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/151-disolventeespesantegeles-de-silice


    Bibliografía
      

    1. R. Wolbers; Workshop on new Methods in the Cleaning of Paintings; Getty Trust Pubblications: Getty Conservation Institute; Marina del Rey; 1988.
    2. Per un quadro aggiornato su tutta la problematica degli addensanti e dei solvent-gel si veda il recente P.Cremonesi, E.Signorini; “Un approccio alla pulitura dei dipinti mobili”, Il Prato, 2012.
    3. D. Stulik, D. Miller, H. Khamjian, N. Khandekar, R. Wolbers, J. Carlson, W.C. Petersen, and V. Dorge; Solvent Gels for the Cleaning of Works of Art: The Residue Question; Getty Trust Publications: Getty Conservation Institute; Marina del Rey; 2004.
    4. D. Jordan Lloyd; The Problem of Gel StructureColloid Chemistry; J. Alexander Ed.; New York; 1926, 1, 767-782
    5. Giacomo Pizzorusso, Emiliano Fratini, Josef Eiblmeier, Rodorico Giorgi, David Chelazzi, Aurelia Chevalier, and Piero Baglioni; Langmuir, 2012, 28 (8),3952–3961.
    6. Joana A. L. Domingues, Nicole Bonelli, Rodorico Giorgi, Emiliano Fratini, Florence Gorel, and Piero Baglioni; Langmuir; 2013, 29 (8), 2746-2755.
  • 36.1 MÁS INFORMACIÓN - CUANDO EL ENEMIGO ES EL MANGANESO
    Cuando el enemigo es el manganeso

    CTS lleva casi 20 años proponiendo un producto único y muy conocido a los expertos de la restauración arqueológica, el B.D.G. 86. Se trata de una solución de hidrazina y cloruro de hidroxilamonio - agentes redox - capaces de solucionar el problema de las manchas de manganeso presentes en algunos restos procedentes de sitios arqueológicos.
     Estas manchas afean mucho y son prácticamente imposibles de eliminar de forma mecánica, ya que están arraigadas en el interior de las porosidades del material. De hecho, su origen es de tipo biológico, ya que existen bacterias, algas y hongos (vamos a mencionar sólo la bacteria que lleva el nombre inequívoco de Bacillus manganicus) que, en presencia de manganeso, pueden oxidar el metal con su correspondiente óxido (pirolusita) o hidróxidos (manganita o psilomelano).
    Una posibilidad para transformar y, por lo tanto, decolorar estos óxidos consistía en utilizar el proceso de reversión de la albayalde ya estudiado y propuesto para las pinturas murales por Matteini en 1976 [1]. El procedimiento aprovecha la doble naturaleza del agua oxigenada: con pH alcalino, predominando el efecto oxidante, con pH ácido, en cambio, el efecto reductor. Para evitar los efectos del pH ácido (conseguido con ácido acético), sin mellar la matriz carbonática de las pinturas murales, los químicos y los técnicos del "Opificio delle Pietre Dure" llevaban a cabo un riguroso control tanto de los tiempos de contacto, como de la modalidad de aplicación, que preveía la gelificación con carboximetilcelulosa (CMC), para reducir la difusión de los reagentes en la porosidad.

    La reacción es la siguiente:  

                                              PbO2 +H2O2 + 2CH3COOH  Pb(CH3COO)2 + 2H2O + O2
      

    Así que del óxido de plomo oscuro, resultado del deterioro de la albayalde, se pasaba al acetato de plomo, blanco que, con el tiempo, se carbonataba y se volvía a transformar en albayalde. La ventaja de este sistema, es decir la escasa penetración, se convertía, sin embargo, en una limitación considerando la naturaleza de las manchas de manganeso, penetradas en profundidad, así que se decidió optar por un método que permitiera mantener el objeto en contacto con una solución, sin causar reacciones secundarias dañinas. Como consecuencia de un estudio profundizado llevado a cabo por la Conservaduría Arqueológica de Roma [2], basado también en una campaña diagnóstica con XRD, SEM y micro-análisis, se llegó finalmente a la definición de una serie de productos denominados B.D.G. 86, cuyos principios activos son precisamente dos agentes reductores, la hidrazina y el hidroxilamonio.
    Los factores cruciales para la elección del B.D.G. óptimo son la concentración y el pH. De hecho, una concentración elevada de los principios activos podría dañar los materiales más frágiles (cerámicas, huesos, vidrio). Por lo tanto, un contenido del 10% se aconseja sólo para los materiales más resistentes, como los pétreos. Además una ligera acidez es necesaria para trabajar en el cristal y en el hueso, así que dos formulaciones se taponaron a pH 5,5 y 6,5, respectivamente.

    Para resumir:


         

     Tipo de material

    Tipo de B.D.G. 86

    pH

    Concentración delos principios activos (%)

    Pétreo

    Verde

    7

    10

    Cerámico

    Rojo

    7

    5

    Óseo

    Amarillo

    6,5

    5

    Vítreo

    Azul claro

    5,5

    2,5 



     La aplicación del B.D.G. 86 se realiza preferiblemente mediante compresas de algodón hidrófilo colocados sobre las áreas a tratar, pero también, si hace falta, mediante inmersión de las obras en el producto en cuestión.
    La operación de limpieza requiere, en situaciones no complicadas, entre 15 y 20 minutos, eliminando/decolorando exclusivamente los resistentes microagregados de manganeso.
     Cuando las manchas están asociadas de forma sinérgica a concreciones de naturaleza calcítica, silícea o fosfática, hacen falta unos tiempos de aplicación más largos (hasta un máximo de 30-40 minutos), sin que se produzca ninguna posterior recristalización de sales. Junto con el manganeso, a menudo se puede detectar también la presencia de hierro bajo forma de manchas pardo-rojizas que se quedan inalteradas después de la aplicación del B.D.G. 86 [4]. En este caso es por tanto necesario colocar una segunda compresa con EDTA disódico en una concentración entre el 10 y el 15%, para tiempos variables, en base a numerosas pruebas, entre los 20 y los 45 minutos. Es también posible realizar la eliminación de las manchas ferrosas mediante inmersión en la solución de EDTA al 10%.
    Es buena norma, después del tratamiento, realizar siempre un lavado de las obras en agua desionizada, o bien, especialmente cuando hay cristales iridiscentes o huesos deteriorados, en alcohol.  

    Durante varios años, el B.D.G. 86 ha solucionado innumerables casos de manchas desfigurantes de manganeso, permitiendo incluso el cambio de identificación de un importante resto etrusco [5], y se ha introducido en la práctica cotidiana de muchos laboratorios de restauración arqueológica [3, 6] además de haber sido objeto de estudios comparativos con otros sistemas de limpieza [7].
      

    Finalmente, para más información, podemos indicar que la última importante aplicación, en orden cronológico, ha sido la eliminación de las molestas "manchas negras" presentes en determinadas áreas de la decoración de estuco presente en el Vestíbulo de la Basílica subterránea de Porta Maggiore en Roma. Actualmente se están llevando a cabo más pruebas tanto en las dos naves laterales, como en el ábside del monumento en cuestión y los primeros resultados son muy alentadores, o incluso… sorprendentes.
        

    Bibliografía:

    1. Matteini M., “Ossidazione della biacca in pitture murali. Metodi proposti per la riconversione del pigmento ossidato nelle pitture di A. Baldovinetti nella Chiesa di san Miniato a Firenze”, in Atti del Convegno sul Restauro delle opere d’arte, Firenze, 2-6 Novembre 1976, pp. 257-269.
    2. Bandini G., Diana S., Guidi G., “Rimozione di macchie nere da reperti ceramici, vitrei e ossei”, in Notiziario ENEA, nn.7-8, luglio-agosto 1989.
    3. Fancelli P., “Una scoperta nel restauro archeologico. Rimozione delle macchie nere da reperti di scavo”, in “Antiqua”, a. XIV, n.1, 1989, pp. 44-50.
    4. Bandini, G., “Metodo combinato per la rimozione da ceramiche di macchie causate da composti di ferro-manganese”, in “Faenza”, a. 80 (1994), n. 3-4, pp. 117-121, tavv. XXXVI-XXXVII. (Atti della II Giornata di Studio sul restauro della ceramica, Faenza, 25 settembre 1993).
    5.  Carraro A.- Mizzoni F., “Cambiamento di immagine e restituzione di leggibilità del ‘Sarcofago dei Leoni’ nel Museo di Villa Giulia a Roma”, in "Faenza", a. 80 (1994), n. 3-4, pp. 114-116, tav. XXXV. (Atti della II Giornata di Studio sul restauro della ceramica, Faenza, 25 settembre 1993). 6.    Banegas de Juan I., “Conservació-Restauració de material ceràmic arquològic. Laboratori de conservació-restauració del museu comarcal de l'Urgell , in URTX  n. 20, 2007, págs. 349-362 7.    Venault de Bourleuf  E., “Caractérisation du phénomène de brunissement du vitrail et évaluation de traitements de réduction” CeROArt [Online],  | 2013, online since 11 May 2013, connection on 05 September 2013. URL : http://ceroart.revues.org/3237.      


  • 36.2 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - LOS VINÍLICOS, BAJO OBSERVACIÓN ESPECIAL

    Los vinílicos, bajo observación especial

    No obstante la aparición de resinas sintéticas de alta estabilidad o de las especiales características de reversibilidad, como las alifáticas, la urea-aldehido, o los polioxazoles, las resinas vinílicas se siguen utilizando mucho en el campo de la restauración: no sólo fueron de entre las primeras resinas sintéticas en encontrar una aplicación como adhesivos, barnices o consolidantes, sino que en algunos campos siguen manteniendo su importancia.

    Su punto de fuerza es el poder adhesivo, y no es un caso que el producto más famoso sea sin duda el Beva 371; sin embargo no nos tenemos que olvidar del Vinavil para el encolado de la madera y el alcohol polivinílico usado como fijador de las capas pictóricas de las pinturas murales.
    A estos hay que añadir otros vinílicos “menores”, pero de todas formas excelentes: el K40 y el K60 para el encolado rápido de cerámicas, los Mowiliths usados en los tejidos, el Mowital B60HH como fijador, los otros componentes de la familia Beva (Gel, D-8-S y las dos Películas), y finalmente el Peoval 33, un excelente aditivo para los morteros a base de cales hidráulicas (Boletín CTS 25.3 "Aditivar un mortero"). Uno de los miedos en la utilización de esta familia de productos en presencia de capas pictóricas es la posible interacción con los pigmentos. De hecho se conocen las propiedades de coordinación de algunos cationes metálicos con los oxidriles, abundantemente presentes en el alcohol polivinílico, pero también, en menor medida, en el PVA, especialmente como consecuencia del envejecimiento. De hecho, el grupo acetato introducido en las cadenas poliméricas tiende, por hidrólisis, a despegarse, produciendo por un lado ácido acético, y por otro un oxidrilo.
    El enlace de coordinación entre los oxidriles y los cationes metálicos de los pigmentos lleva a una reducción de la solubilidad y, por lo tanto, a un riesgo de irreversibilidad.  

    Este aspecto ha sido objeto de la tesis de licenciatura de Virgilio Vecchio, cuyo ponente ha sido la Profesora Antonella Salvini, de la Universidad de Florencia, en el Curso de Ciencias y Materiales para la Conservación y la Restauración, titulada “La influencia de los pigmentos en el comportamiento de algunas resinas vinílicas utilizadas en la restauración”.
     En el estudio se han analizado cuatro compuestos vinílicos disponibles en comercio. Tres de estos se eligieron por su importancia en el marco de la restauración de los bienes históricos-artísticos: el polivinil butiral (PVB) Mowital 60HH, el polivinil alcohol (PVOH) Mowiol 30-92 y la masa da reentelado BEVA 371 (integrada por la mezcla de varios componentes de entre los cuales los principales son dos copolímeros etilenvinilacetato EVA). Finalmente se eligió una dispersión acuosa a base de etilenvinilacetato, que podría unir la ventaja de un adhesivo al agua, a la estabilidad ya conocida de las resinas EVA más famosas como el BEVA 371.
    Se prepararon unos tendidos de color, cada uno con un pigmento dispersado en un ligante o bien sólo el ligante, para establecer si la interacción de estos compuestos con algunos pigmentos podía influir en sus características químicas y ópticas y, especialmente, ayudar a reducir su solubilidad en los disolventes en los cuales éstos son totalmente solubles. Los ligantes utilizados son los clásicos: cola de conejo, aceite de linaza, caseinato de amonio, goma de cerezo.

    Los pigmentos se eligieron de entre los más extendidos en la pintura antigua y que contienen iones metálicos di- y tri-valentes, y por ello con diferente potencialidad como coordinantes. El envejecimiento se ha llevado a cabo durante un período de 300 horas en Solar Box Xeno 3000, siguiendo la norma UNI 10925, y cortando los ultravioletas por debajo de los 315 nm.
    Las mediciones colorimétricas realizadas en muestras envejecidas artificialmente han demostrado que la exposición a la luz en el interior no implica variaciones de color significativas en el revestimiento vinílico de las muestras. Los análisis con espectroscopía FTIR han demostrado que el envejecimiento artificial no produce cambios importantes en las muestras.
    Finalmente, los análisis 1H-NMR cuantitativos para la valoración de la variación de solubilidad de los compuestos vinílicos no han evidenciado diferencias en la solubilidad de las muestras como consecuencia del ciclo de envejecimiento artificial. Se detectó, en cambio, la existencia de variaciones de solubilidad en el PVOH y, en menor medida, en el PVB en función de los pigmentos y de los ligantes pictóricos con los cuales entran en contacto.
    Los valores más significativos de las variaciones de solubilidad del PVOH se indican en la tabla abajo.  

                         

    Ligante

    Pigmento

    Solubilidad % PVOH

    Solubilidad % PVB

    Ninguno

    Ninguno

    100

    100

                            

     

     

     

    Goma de cerezo

    Ninguno

    49

    79

     

    Yeso

    60

    99

     

    Rubia

    71 

     

     

    Azurita

    74 

     

                            

     

     

     

    Cola de conejo

    Ninguno

    69

    91

     

    Yeso

    57

    98

     

    Rubia

    65 

     

     

    Azurita

    68   

     



    La goma de cerezo reduce especialmente la solubilidad del PVOH (49%) y menos la del PVB (79%), y esta reducción es más importante que la originada por la acción de los pigmentos. En las muestras preparadas con cola de conejo la reducción de solubilidad de los dos polímeros es más moderada (69 y 91% respectivamente), sin embargo en presencia de yeso la solubilidad para el PVOH baja al 57%, un dato que indica la acción coordinante del ion Ca2+.

    Si en general el PVB es más reversible que el PVOH, con la dispersión acuosa EVA no se han observado reducciones de solubilidad, y esto nos hace pensar que su utilización en la restauración puede ser interesante.
    En cambio, con la técnica 1H-NMR no ha sido posible confirmar (¡como si realmente hiciera falta!), la reversibilidad de la “criatura” de Gustav Berger, debido a su composición compleja.
    Estos resultados son especialmente interesantes si pensamos en el envejecimiento bastante corto al que se sometieron las muestras debido al poco tiempo a disposición para terminar la tesis, y sería interesante poder analizar las muestras dentro de unos años.  

    PRODUCTOS:

    RESINAS SINTÉTICAS VINÍLICAS
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/44-resinas-sinteticas-vinilicas



    Bibliografía

    Vecchio V; “L’influenza dei pigmenti sul comportamento di alcune resine viniliche utilizzate nel restauro”, Tesi Magistrale, Università di Firenze, Corso in Scienze e Materiali per la Conservazione e il Restauro, 2013.    

  • 35.1 MÁS INFORMACIÓN - UN PROTECTOR IRREPRENSIBLE: SILO 111

    Un protector irreprensible: Silo 111

    Nuestra atención a menudo se deja atraer por las novedades: un poco por el deseo de estar actualizados, un poco por la curiosidad de ver si el protector de última generación podrá solucionar los problemas pasados y futuros de un monumento para olvidarnos, de esta forma, de los grandes clásicos.
    Ojeando los antiguos catálogos de CTS podríamos encontrar uno de estos clásicos llamado CTS 111, abandonado hacia la mitad de los años noventa para adquirir el actual y más conocido nombre de Silo 111. Se trata de un polidimetilsiloxano, perteneciente a una familia, la de los siloxanos, claro, que ha superado ya infinitos controles, si consideramos que las primeras aplicaciones se remontan a los años sesenta.
    Veamos por tanto algunos puntos de fuerza y algunas limitaciones de estos materiales. Empecemos por la terminología, ya que hay cierta confusión al respecto: los siloxanos se conocen también como poliorganosiloxanos o, especificando el grupo orgánico unido a la cadena, alquilsiloxanos o arilsiloxanos, y a veces también, erróneamente, silanos. El silicio y el oxígeno se alternan formando el esqueleto del polímero, y el silicio puede ocupar los dos enlaces libres con grupos alquílicos todos iguales como el poli-metil-siloxano del ejemplo (ver imagen nº1), o también diferentes entre sí, como el poli-metil-fenil-siloxano).

    En el más sencillo de los alquilsiloxanos, el polimetilsiloxano, los pequeños grupos metílicos -CH3, no impiden la rotación de la molécula alrededor de los enlaces Si-O, por lo tanto estas cadenas siguen siendo flexibles no sólo a temperatura ambiente, sino también a bajas temperaturas: de hecho su Tg es de -123°C. Las propiedades están afectadas, además de por los grupos sustituyentes, también por la longitud de la cadena: si los átomos de silicio son menos de 10, los siloxanos ya no son polímeros, sino más bien oligómeros (pequeños polímeros), y son líquidos a temperatura ambiente, de lo contrario asumen una textura cerosa.

    Para definir con exactitud el Silo 111 hablamos de un polimetilsiloxano oligómero reactivo.
    El Silo 111, de hecho, con respecto a los polimetilsiloxanos de peso molecular elevado, que garantizan repelencia al agua después de la simple evaporación del disolvente, pero no son capaces de penetrar en los poros de la piedra, actúa en dos fases:

           1.    Evaporación del disolvente (necesario para que el producto penetre hasta el fondo)
           2.    Reacción de enganche de los grupos terminales etoxi a la piedra, con eliminación de pequeñas cantidades de alcohol etílico.

    El resultado es una penetración profunda, y una mayor estabilidad del producto al envejecimiento. Independientemente del tipo de sustituyente y del hecho de hablar de polímeros o de oligómeros, los siloxanos se han ido afirmando como hidrorepelentes por sus propiedades características:
    ·     -  Proporcionan una elevada repelencia al agua con una alteración de la permeabilidad mínima, a menudo imperceptible a simple vista;
    ·     -  Son incoloros y, en general, no alteran la tonalidad de la piedra (sólo ligeras variaciones si el producto se aplica en exceso);
    ·     -  Son estables a la irradiación y a los agentes meteorológicos en general; de hecho, los parámetros químico físicos recopilados para zonas expuestas de diferentes modos tienen unas evoluciones análogas;
    ·     -  No presentan problemas de toxicidad.

    Los siloxanos tienen también sus puntos débiles, y uno de ellos es la limitada durabilidad en presencia de anhídrido sulfuroso. Algunos autores, estudiando películas de siloxanos [1], han detectado los efectos devastadores del anhídrido sulfuroso SO2, que produce una verdadera perforación de la película y, en el caso de películas muy finas, esto puede llevar incluso hasta la pulverización de las mismas. Este efecto puede ser en parte el responsable de una escasa duración de los efectos protectores de los siloxanos en zonas muy contaminadas, especialmente en áreas industriales.
    No obstante, se pone el acento en el hecho de que la aplicación de protectores (y también consolidantes), a base de silicio reduce el nivel de deposición de SO2 con respecto a la piedra sin tratar [2].
    Un estudio mirado [3] ha comparado el Paraloid B-72 con el Silo 111, aplicados en muestras de mármol pentélico posteriormente sometidos a envejecimiento acelerado en un entorno de SO2: es interesante notar en la tabla abajo que la absorción de SO2 depende de la temperatura: a 40°C el Paraloid alcanza la misma adsorción de la muestra sin tratar, mientras que con el Silo 111 la cantidad es ya la mitad. Sin embargo es a 80°C (temperatura que se puede alcanzar en verano bajo irradiación directa), cuando la diferencia de valores llega a ser impresionante: las superficies tratadas con Silo 111 adsorben aproximadamente 1/50 con respecto a las superficies no tratadas, y aproximadamente 1/5 con respecto a las tratadas con Paraloid B-72.

              Temperatura (°C)               
    Cantidad total de SO2 adsorbida  (μmol/g)
                                                         Sin tratar          Silo 111       Paraloid B-72
                                   40                   1,401                0,603                1,383
                                   80                    23,593             0,429                2,183

    Además del estudio mencionado, el Silo 111 en el transcurso de los años ha sido objeto de muchos más estudios y valoraciones de su eficacia en el tiempo: mencionamos sólo algunos.

    Aplicación de protectores en piedras tufáceas
     [4] El Silo 111 garantiza las mejores prestaciones en términos de variación de porosidad, reducción de permeabilidad y resistencia a la abrasión, además de no alterar el color de la toba.


    Protección de los paramentos del Palacio de San Esteban, Murcia
      [5] Se valoraron en una comparación el Silo 111, el Estel 1100 (silicato de etilo+ siloxanos), y un repelente al agua polisiloxánico no identificado. Según lo indicado por los autores los 3 tratamientos consiguen resultados similares, sin embargo los que llevan Estel y Silo 111 son tiene los que tienen con el mínimo impacto cromático.
      

    Asociación de Silo 111 con biocidas 
    [6] Para intentar mejorar la resistencia a la biodegradación se han valorado los comportamientos de 4 consolidantes/protectores asociados a varios biocidas, y aplicados a dos tipologías de piedra y a un revoque. Recordamos que ya es conocida la sensibilidad de los siloxanos a los microorganismos, especialmente en presencia de altos niveles de humedad y fuertes posibilidades de inóculo.
      

    El caso de las iglesias barrocas de Lecce 
    (ver imagen nº2) [7] Un equipo de investigadores del CNR ha llevado a cabo una monitorización de las condiciones de las superficies de algunas iglesias sometidas a restauración en los años noventa. Todas las fachadas son de piedra de Lecce, especialmente porosa y absorbente, y en todas se han llevado a cabo consolidaciones con silicato de etilo (Estel, Wacker OH, RC70), y tratamientos con polisiloxanos (Silo 111 o Silirain 50), o con tratamientos combinados (Estel 1100 o RC80/90).


    Al final de los monitoreos los autores afirman que los hidrorepelentes que se llevan aplicando desde hace más de diez años son todavía capaces de reducir la absorción de agua por parte de las superficies tratadas”. Para proporcionar unos datos, los valores conseguidos en la fachada de la iglesia de San Matteo (ver imagen nº3), tratada en 1993, eran de 27-28 mg/cm2.min, tanto en 2003 como en 2004, con respecto a las absorciones típicas de la piedra de Lecce, generalmente superiores a 100.
    El aspecto del Duomo de Lecce en 2004.  En 1991 se trató en parte con Estel 1000 y Silo 111, en parte con Estel 1100.    

    La conclusión es que el Silo 111 ha demostrado ser estable en el tiempo, sin la aparición de variaciones cromáticas perceptibles, fácil da aplicar y versátil, por su compatibilidad con todos los substratos; consideradas todas estas propiedades queda claro porque este producto haya tenido tanto éxito en estas últimas décadas.  

    PRODUCTO:

    SILO 111 - HIDROFUGANTE A BASE DE ORGANOSILOXANO OLIGOMÉRICO EN DISOLVENTE
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/190-silo-111-hidrofugante-a-base-de-organosiloxano-oligomerico-en-disolvente

    Bibliografía

    1.    Mavrov G.; “Aging of silicone resins”, Studies in Conservation 28 (1983), 171-178.
    2.    Elfving P., Johansson L.G., Lindqvist O.; “A study of the sulphatation of silane treated sandstone and limestone in a sulphur dioxide atmosphere” Studies in Conservation 39, (1994), 199-209.
    3.    Kapolos J., Bakaoukas N., Koliadima A., Karaiskakis G.; “Evaluation of acrylic polymeric resin and small siloxane molecule for protecting cultural heritage monuments against sulfur dioxide corrosion”. Progress in Organic Coatings 59, (2007), 115-159.
    4.    Dell’Agli G., Ferone C., Mascolo G.; “Durability of tufaceous stones treated with protection and consolidation products”, 9th International Congress on Deterioration and Conservation of Stone, Venezia, (Giugno 2000)
    5.    Arana,R.; Mancheno, M.A.;Hernandez J.M.; “Estudio de la proprietades físicas de unas muestras de roca de construccion del conjunto Palacio de San Esteban, Murcia”, in Estudio del estado de deterioro del conjunto Arquitectonico de San Esteban, (2000).
    6.    Pinna D., Salvadori B., Galeotti M.; “Monitoring the performance of innovative and traditional biocides mixed with consolidants and water-repellents for the prevention of biological growth on stone” Science of The Total EnvironmentVolume 423, 15 April 2012, Pages 132–141. 7.    Calia A, Laurenzi Tabasso M., Lettieri M.T., Mecchi A.M., Quarta G.; “Una metodologia per il monitoraggio sostenibile dei trattamenti effettuati sui monumenti in pietra” Arkos 13 (2006).

  • 32.2 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - AGARART Y LOS PROBLEMAS DE LAS PINTURAS MURALES MODERNAS

    AgarArt y los problemas de las pinturas murales modernas.

    Puede ocurrir que la limpieza de una pintura mural reciente sea más problemática que la de un fresco de hace siglos. Es el caso del acrílico de Keith Haring “Tuttomondo”, realizado en 1989, cuyo estudio diagnóstico y posterior restauración se incluyeron en el Proyecto COPAC (Conservazione Preventiva dell’Arte Contemporanea - Conservación Preventiva del Arte Contemporáneo), financiado por la Región Toscana y dirigido por la profesora Maria Perla Colombini de la Universidad de Pisa. Además de la acumulación de suciedad por la contaminación ambiental, la pintura mural presentaba una capa muy fina de carbonato cálcico por recristalización que había vuelto mate los vivos colores originales.

    Para la limpieza, los restauradores Antonio Rava y Will Shank tuvieron que solucionar toda una serie de problemas.   
    - No se podían utilizar disolventes orgánicos, ya que hubieran atacado la capa acrílica original.
    - Tampoco se podían utilizar sistemas con compresas, puesto que provocan una parcial migración del agua, ni los que requieren un aclarado, ya que el agua libre iba a remover las sales presentes en las capas de revoco subyacentes.
    - Tampoco las gomas Wishab o gomas de caucho podían dar resultados satisfactorios, debido a la liberación de residuos u otros problemas secundarios.

    Por ello se ensayó y optimizó el método de aplicación en caliente del gel de agar. El sistema que resultó ser óptimo es un 5% de AgarArt en una solución de EDTA al 1%, neutralizado con el 0,2% de carbonato amónico, y aplicación a 45°C. Al retirar el gel se elimina también una pátina blanca, sin que se desprendan fragmentos de color, lo que demuestra la suavidad del sistema. Los tiempos de actuación fueron distintos según el color: sobre el verde agua, el turquesa y el rosa bastaron 10 minutos de contacto y el EDTA pudo reducirse al 0,5%; en cambio, sobre el rojo y el blanco los tiempos se prolongaron hasta 30 minutos. Fue posible limpiar toda la superficie de casi 200 metros cuadrados con unos kilos de Agar Art. 

    La puesta a punto del sistema de limpieza con Agar Art contó con el asesoramiento de Anzani y Rabbolini de Acconerre, que ya habían trabajado en una situación similar: una pintura mural realizada por Baruzzi en 1960, que ocupa los 120 m2 del ábside de la iglesia de Sant’Eugenio en Milán. 
    De hecho, durante la restauración llevada a cabo por Andrea Toniutti, se presentó el mismo problema de tener que limpiar sin aporte de agua, para no poner en marcha fenómenos de migración de sulfatos, ya que la obra se realizó con la técnica del fresco, pero utilizando una mezcla de cal y yeso en lugar de solamente cal.
    A pesar de la eficacia de las soluciones acuosas, la fuerte sensibilidad del yeso a la humedad y la reducción de la resistencia mecánica del material pictórico después del mojado, obligaron a ensayar la aplicación de geles rígidos, con la mínima liberación de agua.
    El resultado de los numerosos ensayos con geles de agar fue excelente: la superficie no resultó dañada, no se produjo migración de yeso del soporte y la suciedad superficial se eliminó sin acción mecánica sobre el estrato pictórico. 
    El resultado operativo se obtuvo con una serie de pasos: el primero para eliminar el grueso de las partículas y los siguientes para la limpieza propiamente dicha, con una concentración de AgarArt al 4% en agua con adición de citrato triamonio al 1%, aplicado durante 20/30 minutos. Al añadir el quelante, se obtuvo una limpieza más profunda eliminando manchas y halos.

    Las imágenes muestran la aplicación del AgarArt líquido (a unos 45°C) y la película que se retira ennegrecida por la suciedad absorbida. En la película no hay restos de pigmentos, demostrando la suavidad del método.

    Keith Haring “Tuttomondo”

    PRODUCTO:

    AGARART
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/225-agarart


    Bibliografía
      
    A. Rava, W. Shank, P. Colombini, O. Chiantore, M. Picollo, V. Palleschi et alii  “Keith Haring a Pisa. Pulitura e protezione di un dipinto acrilico esposto in ambiente esterno”.Scienza e Beni Culturali XXVIII (2012)
    M. Anzani, L.Borgioli, A. Rabbolini, A. Toniutti; “S.Eugenio a Milano, 120 mq di pulitura ad Agar Agar”,  Atti del IX Congresso IGIIC  “Lo Stato dell’Arte 9”, Cosenza, 13-15 ottobre 2011.

  • 31.2 MÁS INFORMACIÓN - LOS MALENTENDIDOS ACERCA DE LA SALIVA.

    Los malentendidos acerca de la saliva  


    Aún siendo un elemento siempre presente en todos los talleres de restauración de pinturas, sigue habiendo varios aspectos indefinidos acerca de la saliva artificial: el citrato de amonio ¿es una solución demasiado sencilla? ¿Es necesaria la mucina? ¿Quita el barniz? ¿Cómo afecta la capa pictórica? ¿Se puede utilizar en todos los tipos de pinturas? ¿Hay que aclararla? Intentemos contestar a estas dudas….  

    El primer punto a esclarecer es que la Saliva Sintética CTS (SSC) es una mezcla de citrato de amonio y citrato de sodio, que se puede utilizar tal cual o potenciada, añadiendo mucina, un fuerte surfactante. Esta última se proporciona por separado, en forma de polvo liofilizado, ya que es biodegradable cuando se mezcla con agua. Por eso aconsejamos preparar la cantidad estrictamente necesaria y, si sobra un poco de producto mezclado, guardarlo en la nevera durante un máximo de dos semanas. 
     

    Segundo punto a subrayar: la solución de citrato de la SSC ejerce de por sí una acción limpiadora, así que la mucina no es siempre necesaria. Indudablemente, sin embargo, ayuda en el extendido sobre materiales más hidrofóbicos (óleos recientes), y también en la eliminación de material gracias a su capacidad emulsionante. Además no es necesario aclarar la superficie después de la limpieza con SSC; de hecho ésta se puede utilizar como último paso después de la aplicación de otros sistemas (enzimas, geles….).  

    Tercer punto, a refutar: “es un sistema tan flojo que no interactúa con la capa pictórica, a malas no funciona”. Totalmente falso: como contiene un disolvente (el agua) y un quelante (el citrato), la saliva puede tener un fuerte efecto tanto en las pinturas sensibles al agua, como en todos los materiales que se disgregan por la acción de quelación, o bien una acción de complejación de un catión metálico. Por ejemplo, los jabones metálicos que se forman debido a una reacción entre los ácidos grasos de aceites envejecidos y determinados cationes (plomo, zinc, cobre, …) presentes como pigmentos, se pueden eliminar de las superficies. Por eso es necesario llevar a cabo unas pruebas y, sobre todo, valorar la concentración del quelante.

    Este último punto requiere una aclaración acerca de la concentración de los citratos en la SSC: unos restauradores han observado que algunos productos de la competencia contienen cantidades mayores de citratos y, por eso, "limpian mejor”. Queremos profundizar este concepto, ya que nuestra elección se basa en un razonamiento específico, basado en datos científicos, y no en una elección económica (basta con echar un par de cuentas para entender que mejorar la calidad de los citratos del 0,2 al 1% no cambia en absoluto el coste del producto y que lo que incide mayormente es, eventualmente, la mucina….).
     Ya que estos datos científicos sobre los riesgos de altas concentraciones de citratos existen, y son accesibles para todos, aunque en inglés, los vamos a analizar.    

    La SSC nace como producto para la limpieza de superficies
    , especialmente para la eliminación de la suciedad debida a polvos y partículas en general, que se pueden encontrar por encima de un barniz, y que se puede eliminar sin perjudicarlo. Sin embargo se puede utilizar también para la limpieza de superficies no barnizadas, por eso el contenido de citrato es inferior al 1%. Unas concentraciones por encima del 1% pueden llevar a la desagregación de algunos componentes de la película pictórica, como demuestra un estudio de Morrison et al. Los autores han comparado diferentes tipos de soluciones de limpieza, basadas en amoniaco y citrato de amonio, con varias concentraciones y varios pH. 
    Éstas se han aplicado rodando un pequeño tampón de algodón sobre la superficie de una pintura al óleo no barnizada, realizada alrededor del año 1940 y, por eso, ya envejecida. La superficie tenía unas partículas adheridas, presentes sobre todo en las estrías de las pinceladas, y una pátina, presente uniformemente en toda la superficie, identificada en jabones metálicos, es decir el producto de ácidos grasos migrados hacia la superficie y cationes metálicos.

    Resumimos los resultados en la tabla a continuación.  

    Solución

    pH

    Efecto

    Saliva natural

    -

    La mayor parte de la suciedad se elimina, la pátina se queda intacta.

    Amoniaco C.M. ~10-8

    7.7

    La mayor parte de la suciedad se elimina, sin embargo, aparecen unas grietas en la pátina orgánica.

     

     

     

    Amoniaco C.M. ~10-5

    9.1

    El efecto de limpieza es más rápido con un valor mayor de pH, aumentan las micro-grietas,
    aparecen unos pequeños agujeros en la pátina, los relieves de las pinceladas se vuelven más rugosos

    Amoniaco C.M. ~10-3

    10.2

    Amoniaco C.M. ~10-1

    11.1

     

    Citrato de amonio al 1%

    6.2

    El efecto de limpieza es análogo al que se consigue con el amoniaco,
    los relieves de las pinceladas empiezan a ser más rugosos.

     

    7.4

    La limpieza es más rápida y, visualmente es análoga a la que se consigue con el amoniaco, sin
    embargo, los relieves de las pinceladas empiezan a perder la pátina.

     

    8.3

     

    9.4

    Citrato de amonio al 2%

    6.0

    La limpieza es muy rápida, hay variaciones en las tonalidades debidas a la eliminación de la pátina ya
    con un pH 6.0. Visualmente se percibe una opacificación y un aclarado, muy evidente con un pH 9.5

     

    7.2

     

    8.3

     

     

    9.5

     

    C.M. = concentración molar.  

     

     



    Conclusión: 
    Una solución de citrato de amonio al 1% se puede utilizar con toda seguridad para eliminar la suciedad de un barniz, pero sobre una capa pictórica puede causar alteraciones, incluso con un pH ligeramente alcalino (7.4). Hay que evitar siempre la concentración del 2%, con cualquier pH.
       Una última recomendación: para los que quieran organizar un poco sus ideas acerca de los sistemas de limpieza acuosos, es decir el uso no sólo de saliva y de quelantes, sino también de tensoactivos y de soluciones ácidas o básicas, es fundamental estudiar la publicación, que se lee con mucha facilidad, es de la colección Talenti de il Prato, siempre por Paolo Cremonesi, cuyo título es: "El ambiente acuoso para la limpieza de obras policromadas". Si no entendemos estos mecanismos, una vez abandonadas las butilaminas y las demás "bombas de disolventes", el riesgo es que sigamos en la ilusión de la delicadeza de los sistemas acuosos y, por tanto, que volvamos, dando marcha atrás, al punto inicial, es decir a las soluciones de lejías…..  

    PRODUCTO:

    PROTECTORES
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/330-saliva-sintetica-cts-ssc



    Bibliografía
     Morrison R., Bagley-Young A., Burnstock A., van den Berg K.J., van Keulen H.; “An investigation of parameters for the use of citrate solutions for surface cleaning unvarnished paintings” Studies in Conservation 52 (2007). 

  • 31.3 NUEVOS PRODUCTOS - NANO ESTEL Y SUS PROPIEDADES AGLUTINANTES

    Nano Estel y sus propiedades aglutinantes

    Después de examinar las propiedades de Nano Estel como consolidante, vamos a analizar las potencialidades de las nanosílices como aglutinantes de áridos y pigmentos.
    También en este caso se produce un efecto de conexión entre las partículas del material inerte o del pigmento y las de la sílice por la evaporación del agua, como apuntado previamente, para la formación del gel de sílice se puede aprovechar la modificación de parámetros como el pH o la adición de disolventes hidrosolubles (alcohol, acetona). El restaurador Stefan Wörz es el descubridor de este último sistema, especialmente indicado para restablecer la adhesión de escamas de color levantadas de pinturas murales. Actuando primero con una aplicación de nanosílice y justo después con una de alcohol etílico, la escama vuelve a adherirse de inmediato. La aplicación se realiza con jeringas, pipetas o brochas.

    Nano Estel como aglutinante para áridos

    Desde el punto de vista de la acción aglutinante, Nano Estel presenta propiedades que no se alcanzan con los silicatos de etilo, es decir la posibilidad de crear puentes entre partículas muy lejanas entre sí (desde un punto de vista microscópico, superiores a 100 μm). Hasta ahora en la restauración como aglutinantes para áridos se han utilizado dos clases de materiales:

    - Inorgánicos
    .- Cal, aérea e hidráulica, con las limitaciones de una adhesión no muy elevada y el clareo de la masa durante el secado, que dificulta una integración cromáticamente exacta.
    - Orgánicos.- De los acrílicos a las resinas epoxídicas, con las limitaciones de transpirabilidad, reversibilidad, diferencia de coeficientes de dilatación térmica respecto al soporte.

    Conscientes de las limitaciones de las dos clases, ya en el pasado se intentó mejorar las propiedades de la cal con la adición de materiales orgánicos, desde la leche como en los tiempos antiguos hasta las actuales resinas acrílicas o vinílicas (véase también el artículo 25.3 del Boletín CTS, “Añadir aditivos a un mortero”).
    La ventaja del uso de la nanosílice es evidente: se pueden conseguir morteros inorgánicos, con un buen poder de adhesión, sin resinas orgánicas, y por ello con una excelente permeabilidad al vapor de agua, y que además permiten mantener el color de los áridos, sin el clareo que conlleva la cal.
    Los ensayos llevados a cabo en nuestros laboratorios han evidenciado que no todos los áridos pueden aglutinarse con las nanosílices y que siempre hay que realizar una prueba previa con la mezcla de áridos que se desea aglutinar.
    En la literatura se describen unos morteros para inyección que contienen nanosílices utilizadas para la consolidación de pinturas murales tibetanas en el templo de Maitreya en la ciudad de Leh [1], unos morteros para sellado de juntas utilizados en la catedral de Nidaros en Noruega [2] y en la catedral de Friburgo, basados en una mezcla de áridos de granulometría seleccionada para aglutinar con nanosílices.

    Nano Estel como aglutinante para pigmentos
      
    Aunque a veces sea necesario patinar superficies pétreas, no hay estudios detallados sobre las ventajas y las limitaciones de los distintos métodos. Hoy se utilizan dos metodologías que permiten realizar veladuras en exteriores, pero ambas presentan unas limitaciones.
    Las dispersiones acrílicas son cómodas de utilizar, pero su resistencia en el tiempo está limitada y a menudo los patinados “desaparecen”, especialmente en las zonas sujetas a arrastre por escorrentías y la acción simultánea de los rayos ultravioletas. Además el tono del color está “apagado”. Las pinturas al silicato tienen más resistencia y los colores son más vivos, pero al ser a base de silicatos alcalinos se produce la formación de subproductos secundarios perjudiciales (con los silicatos de sodio y potasio se forman respectivamente sosa y potasa, que carbonatan al aire formando sales solubles).
    En cambio, los pigmentos dispersos en las nanosílices mantienen una buena saturación del color, sin el inconveniente de la liberación de sosa o potasa (la cantidad de NaOH utilizada para su estabilización es inferior al 0,5%).
    La empresa Agora utilizó Nano Estel para la realización de veladuras en las integraciones en piedra en la catedral de Barcelona (España), obteniendo un buen resultado cromático y resistencia en los ensayos de resistencia al roce y escorrentías.

    Conclusiones  
    En lo que respecta a la acción aglutinante, Nano Estel proporciona resultados interesantes y, como siempre, hay que esperar la prueba del tiempo para valorar la resistencia a la intemperie de los morteros y patinados obtenidos. Más información sobre la adición de pigmentos podría recabarse del estudio en curso en la escuela SUPSI de Lugano, a cargo de Francesca Piquè y Jacopo Gilardi, docentes del curso de restauración de pinturas murales.  

    PRODUCTO:

    NANO ESTEL - CONSOLIDANTE A BASE DE NANOSÍLICE
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/174-nano-estel-consolidante-a-base-de-nanosilice


    Bibliografía
      
    Nicolaescu A., Alexander A.; Red Maitreya Temple –Leh, Ladakh. Mural Conservation Project (Part 2) - A Tibet Heritage Fund Project. e-conservation magazine n°7 Storemyr P., Wendler E., Zehnder K., “Weathering and Conservation of Soapstone and Greenschist Used at Nidaros Cathedral (Norway)”, Raphael Programme – European  Heritage Laboratory. Report 2/2001, Restoration Workshop of Nidaros Cathedral, Norway 

  • 30.2 OBRAS - PLM: LOS EXÁMENES NO TERMINAN NUNCA….

    PLM: los exámenes no terminan nunca….

    Queremos dar a conocer los resultados de dos estudios pormenorizados de evaluación de morteros de inyección, que no tuvieron una gran repercusión, a pesar de que el tema sea de gran interés y escasa la literatura al respecto: uno se publicó en una revista internacional de poca difusión y el otro todavía no se ha publicado. En ambos estudios los morteros PLM se incluyeron entre los examinados.  

    En el primer trabajo [1], llevado a cabo por un equipo de investigadores del Getty Conservation Institute y publicado en la revista del International Institute of Conservation, Reviews in Conservation, se realizaron múltiples pruebas comparativas. En efecto, el objeto del trabajo fue evaluar las prestaciones de los morteros de inyección más utilizados por los restauradores en todo el mundo, y poner a punto un protocolo de análisis, seleccionando entre los distintos métodos los que pueden suministrar la información más útil. Los autores excluyeron del examen los morteros a base de cemento utilizados para el refuerzo estructural de mamposterías, limitando el campo a la fijación y consolidación de pinturas murales, revocos y mosaicos.
    El estudio comenzó con un examen meticuloso de la literatura, para brindar una visión general de las técnicas actualmente utilizadas por los estudiosos de todo el mundo. Las propiedades estudiadas se pueden así resumir: buena inyectabilidad, relacionada con la fluidez/viscosidad, y por lo tanto con el nivel de penetración, ausencia de sedimentación y separación de los áridos, tiempo de fraguado razonable, capacidad de fraguar en ausencia de aire y en entornos constantemente húmedos, baja toxicidad y buena trabajabilidad.
    En el estudio se evidenciaron algunas dificultades a la hora de estandarizar los métodos, por ejemplo en la elección del modo para determinar la fluidez: una técnica desarrollada para morteros mucho más viscosos que los de inyección.
    Otro punto focal del estudio fue la evaluación de las propiedades mecánicas, no solo la resistencia a la compresión (siendo el parámetro más conocido), sino también de adhesión. Surgió alguna crítica respecto al modo de llevar la investigación, puesto que casi siempre cada uno utiliza los procedimientos (preparación, curado,….) de la normativa de su propio país, lo que dificulta la comparación de datos.
    Una de las autoras manifestó en su ponencia en Londres en el congreso “Filling the Void”, organizado en 2009 por ICON, que los morteros PLM dieron buenos resultados, y estamos esperando ver publicados los resultados alcanzados en la segunda parte de la investigación.  

    El segundo estudio [2], con una finalidad análoga, no incluye solo a los morteros de inyección, sino también a los consolidantes a base de polímeros inyectables en el interior de la mampostería, siendo la continuación de una experimentación llevada a cabo en 2004 [3].
    En esta investigación, en el interior de un cilindro de plexiglás se recreó una situación similar a la que se puede encontrar en una mampostería con descohesión o en un muro relleno con fragmentos de piedra y áridos más finos. En el cilindro se vertió una solución diluida de resina en agua y luego el mortero de inyección.
    Se estudiaron productos a base de polímeros: resinas poliuretánicas (Akeogard AT35), acrílicas (Acril 33, Acroterio y Acrisil 201), fluoradas (Akeogard PU), siloxánicas (Stoprim Micro), caseinato de calcio y polioxazolinas (Aquazol 500), además de productos no poliméricos como el hidróxido de bario y el silicato de potasio (Keim Spezial-Fixative).
    Entre los morteros de inyección se aplicaron el PLM-H, el PLM-AL y el Microlime Novecento.
    Después de una primera fase en la que se compararon varios porcentajes de impregnantes y varias técnicas de aplicación, se seleccionaron los mejores productos: Acril 33 y los dos Akeogard. Sin embargo, estos últimos se descartaron por su coste elevado y porque nunca se ensayaron para este tipo de aplicación (hoy en día estos productos ya no se fabrican).
    Entre los morteros la elección recayó en el PLM-H, más ampliamente utilizado y el estudio se centró en determinar las mejores condiciones operativas para la pareja Acril 33/PLM-H. Además, los autores manifestaron que en futuras investigaciones otros impregnantes y otros morteros se compararán con los mejores productos del momento.

    PRODUCTO:

    MORTEROS Y LIGANTES
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/148-morteros-y-ligantes

         

    Bibliografía
     .
    1. Biçer-Simsir, B., Griffin I., Rainer L., Palazzo-Bertholon B., “Lime-based injection grouts for the conservation of architectural surfaces”,  Reviews in Conservation, vol. 10, pp. 3-17, 2009.
    2.    Doglioni, F., Mirabella Roberti, G., Guadagnin, A.; “Sperimentazione di tecniche e prodotti per il consolidamento di murature decoese a piu’  paramenti”. Project Report. RELUIS - Rete dei Laboratori Universitari di Ingegneria Sismica, Venezia. (2006) (non pubblicato) 3.    Doglioni, F., Mirabella Roberti, G., Guadagnin, A.; “Sperimentazione di materiali consolidanti applicati a nuclei decorsi di murature a più paramenti”, in: Dalla conoscenza e dalla caratterizzazione dei materiali e degli elementi dell’edilizia storica in muratura ai provvedimenti compatibili di consolidamento. Edizioni del Politecnico di Milano - DIS, Milano, (2004)  pp. 85-96  

  • 29.1 NUEVOS PRODUCTOS - NANO ESTEL: PRIMEROS RESULTADOS EXPERIMENTALES

    Nano Estel: primeros resultados experimentales

    En el reciente congreso de la Società Chimica Italiana (Sociedad Química Italiana), celebrado en Lecce, se presentaron los resultados de los estudios llevados a cabo por un grupo de investigadores del Departamento de Química de la Universidad de Pavía dirigido por el Prof. Maurizio Licchelli. Se estudiaron y compararon tres sistemas de nanopartículas y el clásico consolidante silicato de etilo, aplicados en una piedra predominantemente carbonatada: la piedra de Lecce.

    Los cuatro tipos de consolidantes pueden dividirse en dos grupos: por un lado los hidróxidos alcalinos Ca(OH)2 y Sr(OH)2, que forman sus respectivos carbonatos, y por otro el silicato de etilo y la nanosílice (Nano Estel), basados en la química del silicio.
     Con la nanosílice, por la evaporación del agua, y con el silicato de etilo, por el más complejo proceso de hidrólisis y polimerización, siempre se forma un agregado amorfo de gel de sílice (SiO2).

    Las muestras, tratadas por absorción capilar y con pincel, dejándolas reaccionar durante el tiempo necesario, se examinaron midiendo la absorción de agua por capilaridad, la permeabilidad al vapor de agua, así como con análisis por SEM-EDX. En las muestras de piedra tratadas y sin tratar también se produjo un envejecimiento acelerado con solución salina según la norma UNE-EN(12370), durante 15 ciclos de cristalización, al final del cual se pesaron para determinar su pérdida de peso debido al deterioro de las superficies por la acción violenta de la sal.
    Mientras que con la aplicación por absorción capilar el silicato de etilo logró impregnar toda la muestra y conferir una resistencia excepcional a la muestra sometida  a envejecimiento acelerado con soluciones salinas, en el caso más cercano a la realidad del trabajo (es decir la aplicación con pincel) los resultados permiten afirmar que la protección que ofrecen los tres sistemas con nanopartículas es discreta, como se puede  observar en la tabla siguiente:  
        Tratamiento                  Pérdida de peso %
        Sin tratar                                 18,94
        Nanopartículas SiO2                8,28
        Nanopartículas Ca(OH)2          5,18
        Nanopartículas Sr(OH)2           4,18
        Silicato de etilo                         3,54 
     

    Una vez más el silicato de etilo demostró ser el consolidante más eficaz, el porcentaje de pérdida de peso de aproximadamente una quinta parte respecto a la muestra sin tratar, mientras que los sistemas con nanopartículas abarcan entre una cuarta parte y la mitad de la pérdida porcentual del peso  respecto a la sufrida por el original.
      
    Por otro lado, las nanopartículas dejaron la piedra más permeable al vapor de agua, respecto al silicato de etilo, como se muestra en la tabla siguiente con la variación de permeabilidad al vapor respecto a la piedra sin tratar.  

        Tratamiento                    Disminución de la permeabilidad %
       Nanopartículas SiO2                              14,5
       Nanopartículas Ca(OH)2                         24,8
       Nanopartículas Sr(OH)2                         18,3
       Silicato de etilo                                       43,1 
       

     Las mediciones por SEM-EDX demostraron una vez más que el silicato de etilo impregna en profundidad las muestras, mientras que el porcentaje de sílice depositado por las nanopartículas es relevante solo en la superficie, es decir en un milímetro de profundidad. Este resultado concuerda con el conocido límite de las nanopartículas, ya determinado para las de hidróxido de calcio.  

    Conclusiones
      
    El silicato de etilo confirmó ser el único sistema realmente capaz de penetrar en profundidad y lograr un buen nivel de consolidación también en un sustrato pétreo de matriz carbonatada como la piedra de Lecce. Las nanopartículas pueden considerarse una válida alternativa, pero su efecto se limita al primer milímetro del material pétreo. Dichos resultados deberán compararse con futuros estudios sobre piedras de matriz de silicato, como las areniscas, de lo que se informará en los próximos números del Boletín CTS.    

    PRODUCTO:

    NANO ESTEL - CONSOLIDANTE A BASE DE NANOSÍLICE
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/174-nano-estel-consolidante-a-base-de-nanosilice



    Bibliografía

    Licchelli M., Weththimuni M., Zanchi C.; “Nanoparticles For the consolidation of Lecce Stone”, Atti del XXIV Congresso Nazionale della Società Chimica Italiana, Lecce, 11-16 settembre 2011.  

  • 29.2 NUEVOS PRODUCTOS - ¡POR FIN EL NUEVO BARNIZ DE RETOQUE!

    ¡Por fin el nuevo barniz de retoque!

    La creación de Regal Retouching Varnish es la etapa final de un largo trayecto emprendido en 2003 por CTS con el lanzamiento al mercado italiano de las resinas Regalrez y Laropal A81. Nuestra elección se basó en sólidas bases científicas: los estudios detallados realizados sobre todo por De La Rie [1,2], que habían determinado la resistencia al envejecimiento de estos polímeros de bajo peso molecular, resistencia que se incrementa al añadir el estabilizador Tinuvin 292.

     Sin embargo, no nos limitamos a los estudios realizados en Estados Unidos, sino que seguimos llevando a cabo numerosas pruebas para comprobar la estabilidad de estos materiales también en presencia de radiaciones ultravioleta, puesto que en Italia a menudo las condiciones de filtrado de los rayos UV no son óptimas [3,4].
    El segundo paso en el desarrollo de materiales de alta estabilidad fue la formulación de barnices finales  -basados en la resina alifática Regalrez 1094-  con la creación en 2005 de la línea Regal Varnish, disponible en dos versiones (Gloss y Mat), listos para el uso y aplicables con pincel o spray. Hoy en día -después de una larga fase de ensayo- proponemos el nuevo elemento de esta línea cuyo punto fuerte es la estabilidad, utilizando precisamente la resina urea-aldehído Laropal A81:  Regal Retouching Varnish, aplicable con pincel y spray, crea una película incolora y muy estable, perfectamente compatible con los colores del barniz, tanto con los clásicos Maimeri a base de resina masilla, como los innovadores Gamblin, también a base de Laropal A81.
     La esencia de petróleo desaromatizada con punto de ebullición 140-160°C es el disolvente recomendado para la dilución, especialmente para la aplicación con spray. Unos efectos más mates pueden obtenerse con disolventes con punto de ebullición más bajo, como la ligroína.
    Regal Retouching Varnish puede aplicarse sobre pinturas porosas y absorbentes, que también pueden pintarse previamente con un barniz aislante como Gustav Berger’s O.F. Isolating PVA Spray Varnish. Regal Retouching Varnish también puede utilizarse como barniz final, ya que además de una excelente función óptica, de saturación del color, desempeña una función de protección contra los agentes externos. Sobre el mismo pueden aplicarse Regal Varnish Gloss y Mat, así como todo tipo de barnices finales.  

    PRODUCTO:

    BARNICES, ACEITES, ESENCIAS, ETC.
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/441-barnices-aceites-esencias-etc



    Bibliografía

    1. De la Rie E.R.; McGlinchey C.W.; “New synthetic resins for picture varnishes” e Leonard M.; “Some observations on the use and appearance of two new synthetic resins for picture varnishes”, in Cleaning, retouching and coatings, Ed. Mills & Smith, Londra (1990).
    2. De la Rie E.R., Quillen Lomax S., Palmer M., Maines C.A.; An investigation of the photochemical stability of films of the urea-aldehyde resins Laropal A81 and Laropal A 101; ICOM  Committee for Conservation 2002, Vol.II.
    3. Borgioli L., Camaiti M.; “Stabilizzazione di polimeri per la verniciatura dei dipinti”, Atti del Convegno “Colore e conservazione”, Thiene (VI), 29-30 Ottobre 2004.
    4.  Borgioli L., Camaiti M., Rosi L.; “Comportamento all’irraggiamento UV di nuovi formulati polimerici per il restauro”, Atti del Congresso “Lo stato dell’arte 6”, Spoleto, 2-4 Ottobre 2008.

  • 28.3 MÁS INFORMACIÓN - CUBAS DE LAVADO

    Cubas de lavado
                     
    Las cubas se están convirtiendo cada vez más en un elemento fundamental en todo taller de restauración, considerando las múltiples operaciones que requieren lavado o consolidación por inmersión. En efecto, se utilizan en talleres para estudios arqueológicos, de papel/tejidos, madera y piedra. Sin embargo, no siempre es fácil determinar qué cuba se necesita. En primer lugar hay que distinguir entre cuba/cubeta de fabricación industrial y cuba a medida.
    Las primeras son recipientes de tamaño pequeño y mediano, habitualmente de plástico (PVC, polipropileno, polietileno), así como de acero inoxidable y se fabrican industrialmente, por lo tanto son perfectas desde el punto de vista estético ya que en general no presentan soldaduras o elementos artesanales. Sin embargo, tienen sus limitaciones: las medidas (hay que contentarse con el tamaño estándar), no pueden transformarse en cubas aspirantes y/o calefactadas y casi nunca se pueden dotar de accesorios o personalizar (con tapas, desagües, rejillas/mallas/separaciones interiores, ruedas, etc.).
    En cambio, las cubas a medida son artesanales y por definición pueden crearse expresamente según las necesidades específicas. C.T.S. está especializada en el diseño y fabricación de cubas a medida para todos los sectores. En este caso es importante tener en cuenta algunas premisas y saber qué se necesita. Veamos los elementos principales:
    - Tamaño._ Es la primera característica fundamental que no siempre resulta fácil de determinar. Habitualmente siempre es mejor comenzar por el tamaño interior útil, es decir tener en cuenta los objetos que debe contener, a menos que deba colocarse en un alojamiento (nichos, huecos, etc.) de tamaño predeterminado. Las dimensiones son tres: largo, ancho y alto; a su vez la altura se divide en altura desde el suelo hasta el borde de la cuba y profundidad interna. No siempre una cuba grande es mejor que una pequeña: de hecho, requiere más líquido (agua, disolventes, consolidantes, etc.) y además, si se calienta, requiere más tiempo y potencia eléctrica para alcanzar y mantener la temperatura necesaria; además, si la cuba es muy profunda (altura interna) podría ser incómodo llegar hasta el fondo. En definitiva, siempre conviene dimensionar la cuba según el tamaño de las piezas que vaya a contener.
    - Desagües._ Normalmente todas las cubas requieren un desagüe, pero puede no ser necesario. C.T.S. siempre recomienda el desagüe con by-pass, para separar el agua a evacuar en la red de alcantarillado de los productos "contaminantes" que hay que recoger y eliminar según establecen las normativas vigentes. Si resulta útil, es posible conectar un rebosadero interior a la cuba, introducido en el mismo desagüe.
    - Tapas._ Cada cuba puede ir acompañada de tapa con asas.
    - Ruedas o patas fijas._ ¿La cuba debe ser siempre móvil? ¿El local permite su desplazamiento (ancho de las puertas respecto al tamaño de la cuba, etc.)? Las patas fijas son más baratas y permiten la nivelación de la estructura portante de la cuba.
    - Rejillas/mallas._ Cada cuba puede dotarse de rejillas o mallas internas; en este caso hay que conocer el peso que deben soportar estas estructuras, el tamaño de la malla y cómo se van a utilizar: apoyadas en el borde de la cuba para escurrir, transporte en otras estructuras con asas, etc.
    - Separaciones internas._  La cuba puede dividirse en su interior, con separadores fijos o móviles, para tener huecos más pequeños. Cabe destacar que un separador móvil de "guillottina" no garantiza la estanqueidad entre los compartimientos y además, una vez retirado, se quedan las guías de desplazamiento que pueden entorpecer la utilización de todo el área de la cuba.
    - Panel para servicios._ La cuba puede dotarse de panel frontal (respecto al operario) para los distintos servicios (grifos de agua caliente-fría, desmineralizada, conexiones de aire comprimido, etc.)
    - Bajo encimera/hueco de almacenamiento._ Si el espacio lo permite, se puede aprovechar para colocar un estante debajo de la cuba, dejándolo a la vista o cerrado con paneles laterales y puertas delanteras.
    - Calefacción._ La cuba puede dotarse de un sistema de calefacción. También en este caso es necesario evaluar las necesidades: si hace falta disponer de agua caliente en el interior de la cuba, es preferible y conveniente conectarla a un calentador. En cambio, si hay que alcanzar y mantener una determinada temperatura de un líquido, hay que contar con una cuba calefactada. En este caso hay que conocer la temperatura máxima que debe alcanzar el líquido en el interior de la cuba y los productos a "calentar", con las respectivas evaluaciones relacionadas con la seguridad en caso de productos inflamables, comburentes, explosivos, etc.
    - Aspiración._ Si en el interior de la cuba se utilizan productos tóxicos-nocivos, es recomendable una cuba aspirante. C.T.S. fabrica a medida una "caja aspirante" a lo largo del perímetro de la cuba, con conexiones oportunas para conectarla a un equipo de aspiración y filtrado. Este sistema innovador permite conseguir una aspiración "tangencial", a través del perímetro superficial, de las emanaciones que se producen dentro de la cuba, así que el operario puede trabajar en la cuba en condiciones seguras. Hay que evitar el antiguo (y justamente obsoleto) sistema de aspiración desde lo alto, tipo "campana de restaurante", ya que el operario respiraría los vapores antes que los mismos alcancen la campana situada por encima del mismo.
    - Material._ Es el último pero no menos importante aspecto a evaluar: los materiales más utilizados y adecuados para la fabricación de las cubas a medida son el acero inoxidable, el polipropileno y el PVC. C.T.S. fabrica cubas utilizando estos tres materiales, según el caso.  

    Hay que tener en cuenta que una cuba "a medida" de acero inoxidable no puede compararse con un fregadero de acero inoxidable de cocina, ya que el mismo está estampado. En cambio, en nuestro caso se trata de un elemento artesanal que se fabrica a partir de chapas de acero inoxidable cortadas y soldadas entre sí hasta realizar la cuba. Las soldaduras se convierten en uno de los puntos débiles para el acero inoxidable, ya que pueden oxidarse a causa del cloro y los minerales ferrosos que contiene el agua de la red de suministro y, aunque no se puede hablar de cantidades importantes de óxido, para ciertos sectores/obras puede ser un grave problema.    
    Los plásticos (como la cuba de polipropileno, PP, que se muestra al lado o la de PVC, más abajo) no resisten a todas las sustancias químicas y tienen una resistencia a las altas temperaturas inferior al acero inoxidable. En cambio, el acero inoxidable no aguanta los ácidos fuertes. En definitiva, el material de una cuba debe elegirse según los materiales y productos que se utilizarán en la misma.           

    b_20-3_1.png

  • 28.2 OBRAS EN EJECUCIÓN - ANOXIA EN EL CIBORIO DE VASARI

    Anoxia en el ciborio de madera de Vasari

    Los tratamientos de desinsectación por anoxia de obras de arte requieren no solo equipos adecuados, sino también un profundo conocimiento de los materiales en los que hay que actuar. Si bien puede caber cierto margen de error si se trata de la cómoda de la abuela, no se puede improvisar si hay que tratar un objeto de valor inestimable como el ciborio de madera de Vasari, procedente de la iglesia de Santa Croce en Florencia, que se expuso en los Uffizi en octubre, en ocasión de la muestra “Vasari, los Uffizi y el Duque”.
    La complejidad del tratamiento está relacionada no solo con el valor histórico-artístico de la obra, sino también con sus dimensiones: en efecto, se trata de una enorme estructura de madera de chopo, dorada y pintada, de 6,5 metros de altura y un diámetro máximo de 2,3 metros. El ciborio, construido en la segunda mitad del siglo XVI con diseño de Giorgio Vasari, formaba parte del gran altar de madera colocado en la capilla mayor de la iglesia de Santa Croce en Florencia. Este conjunto complejo se desmontó en 1869, para la transformación de la iglesia en clave medieval, y el ciborio monumental y dos grandes ángeles de madera dorada se conservaron en una capilla. La desinsectación fue realizada por la empresa Relart de Roberto Buda, bajo la dirección de Brunella Teodori. 
    Por el ataque de insectos xilófagos (anóbidos) a la obra, en 2009 se  realizó un tratamiento de desinsectación en atmósfera anóxica de los dos ángeles dorados. Aunque el ciborio presentara problemas análogos, no se sometió a tratamiento puesto que el tamaño de la obra y el espacio reducido de la capilla lo dificultaban. 
    El préstamo y el traslado del ciborio a la exposición “Vasari, los Uffizi y el Duque” fue la ocasión oportuna para realizar el tratamiento que ya no se podía aplazar dado el alcance del ataque. Se desmontaron los principales elementos del  ciborio y esta operación permitió acceder al interior de los compartimientos y realizar una cuidadosa limpieza de la espesa capa de polvo e impregnar la madera sin decorar de la superficie interna con disolvente que contiene permetrina. La obra desmontada se trasladó a la Galería de los Uffizi y debido al tamaño limitado de la sala de exposiciones se decidió volver a montarla y preparar una única burbuja con film polibarrera termosellado.   
    Dado el gran volumen a tratar, se eligió reducirlo lo más posible llenando las partes internas del ciborio con burbujas llenas de nitrógeno puro. Dichas burbujas se colocaron de forma que el aire pudiera circular libremente en el interior del ciborio para permitir que el nitrógeno introducido eliminara todo residuo de oxígeno. Esquemáticamente el tratamiento se desarrolló en las fases siguientes: 
    ·       Colocación en el suelo de un film polibarrera de forma cuadrada y tamaño adecuado.
    ·       Reensamblaje del ciborio sobre dicho cuadrado con unas capas de protección. 
    ·       Preparación de un cilindro con film polibarrera de tamaño adecuado para contener toda la obra. La burbuja se colocó como una capucha con la ayuda de unos andamios posicionados en los lados. El cilindro y el cuadrado se termosellaron para lograr una bolsa hermética. 
    ·       Aspiración del aire del interior de la burbuja, para reducir el volumen del aire a tratar. 
    ·       Conexión del equipo de desinsectación ISOSEP [1] con válvulas y tubos aplicados a la burbuja, en cuyo interior se había colocado una sonda para detectar los valores de humedad relativa y temperatura. 
    ·       Introducción de nitrógeno con un grado de pureza de 99,8 [2]. 
    ·       Dichos valores se mantuvieron durante el tiempo necesario para que murieran los insectos, es decir tres semanas, gracias al software que controlaba la burbuja durante todo el tiempo y que se encargaba de restablecer los valores al detectar la más mínima variación reiniciando automáticamente el equipo de desinsectación.   

    Nuestro agradecimiento a la Opera di Santa Croce y a Brunella Teodori de la Soprintendenza Speciale PSAE y Conjunto Museístico de la ciudad de Florencia por haber permitido el acceso a las fotos de los tratamientos, financiados por el Comité organizador de la exposición " Vasari y los Uffizi"
       

    PRODUCTO:

    EQUIPO DE DESINFECTACIÓN POR ANOXIA EN ATMÓSFERA CONTROLADA
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/223-equipo-de-desinfectacion-por-anoxia-en-atmosfera-controlada

    Notas: 

    1.     ISOSEP es fabricado por la empresa Isolcell y distribuido por C.T.S. Srl. 

    2.     Para alcanzar los valores deseados correspondientes a un residuo de oxígeno del 0,3% y humedad relativa del 50%, hicieron falta unas 40 horas. La temperatura en el interior de la burbuja mantenía los valores del entorno de la exposición, es decir unos 26 grados.

  • 27.1 NUEVOS PRODUCTOS - UN CONSOLIDANTE ATÍPICO: NANO ESTEL

    Un consolidante atípico: Nano Estel

    En estos últimos años el avance en todos los campos de la técnica ha estado estrechamente vinculado con el desarrollo de las nanotecnologías. En 2008 CTS empezó a proponer las nanocales fabricadas, con la marca Nanorestore®, por CSGI-Universidad de Florencia (véase el Boletín C.T.S. n. 14.2 de 2008).
     Esta dispersión alcohólica de nanopartículas de cal tuvo un gran éxito también a nivel europeo, hasta el punto de que a veces no se conseguía satisfacer la demanda. CTS propone ahora un segundo producto basado en nanopartículas y denominado NANO ESTEL: en este caso se trata de una dispersión coloidal acuosa  y no alcohólica y las nanopartículas no son de hidróxido de calcio, sino de bióxido de silicio (SiO2). El tamaño de las partículas, por debajo de 20 nm, es inferior al declarado para las microemulsiones acrílicas (40-50 nm) y al de la nanocal (200 nm). Precisamente por el tamaño reducido de las partículas, el producto se presenta como un líquido muy fluido, aunque con un residuo seco del 30%, que en la mayoría de las aplicaciones debe ser diluido, bajando la cantidad de sílice por debajo del 10%. Es importante recordar que existen decenas de tipos de nanosílices (por tamaño y distribución de las partículas, modo de estabilización, presencia de aditivos de vario tipo, etc.) y solo algunas entre las testadas por nosotros dieron resultados interesantes para la restauración. La más prometedora es la que se ha denominado Nano Estel.    

    ¿Para qué puede servir Nano Estel?
     Tras la evaporación del agua, las partículas se combinan entre sí formando un gel de sílice (análogo al que se obtiene de la reacción del silicato de etilo), que puede crear puentes entre los gránulos descohesionados de una piedra o un revoco (efecto consolidante) o combinar partículas de pigmento en las superficies pétreas (patinados) o bien puede mantener juntos áridos de vario tipo (realización de morteros inorgánicos para enmasillado). La formación del gel de sílice no se realiza solo por evaporación del excipiente acuoso, sino también actuando en otros tres parámetros:
    ·      Cambiando el pH (mezclado con la cal se endurece al momento)
    ·      Mezclándolo con disolventes hidrosolubles (alcohol, acetona)
    ·      Añadiendo una sal (método no recomendado para la restauración)
    Antes de realizar la aplicación, hay que evaluar las consecuencias de estos parámetros.
    Nano Estel como consolidante  
    La aplicación de nanopartículas de sílice con acción consolidante no es nueva: ya se publicaron algunos estudios en Alemania y Martin Pittertschatscher, restaurador italiano de habla alemana, las aplicó con buenos resultados para la consolidación de un revoco muy poroso, asociándolas a nanocales para reducir el tiempo de fraguado [1].
    No se puede pensar en las nanosílices como sustituto del silicato de etilo, que por tamaño a nivel molecular es aún más penetrante. El nivel de penetración de una nanosílice es forzosamente muy inferior, al tratarse de partículas, aunque sean “enanas”.
    En cambio, es razonable pensar en Nano Estel cuando la consolidación con silicato de etilo sea inviable (plazo de realización del trabajo corto, incompatible con las 3-4 semanas de reacción imprescindibles para el silicato de etilo o en caso de temperaturas inferiores a 10°C o bien soportes ligeramente húmedos –este último caso es aún más importante). En efecto, Nano Estel presenta un tiempo de fraguado reducido (3-4 días) y al ser una dispersión acuosa no plantea los consabidos problemas del silicato de etilo relacionados con la presencia de agua libre (por capilaridad, condensación, lluvia….). Precisamente en una situación como ésta las nanosílices se aplicaron con éxito en un tramo de acueducto romano en la zona de Sesto Fiorentino.
    Los primeros datos de los ensayos comparativos con silicato de etilo indican que la reducción de la permeabilidad al vapor de agua es mínima, incluso inferior al silicato. Hay que recordar que se trata de un producto concentrado, al 30% en seco, para diluir con agua desmineralizada hasta llevar el porcentaje de materia activa al 10-15%.
    Para la aplicación en pinturas murales es necesaria una evaluación cuidadosa, debido a los limitados conocimientos actuales y especialmente por la alcalinidad de algunos tipos de nanosílices, como Nano Estel.
    Un estudio reciente sobre muestras que simulan frescos dañados [2] demostró hasta qué punto son fundamentales las condiciones de aplicación y sobre todo la porosidad del soporte en el que se aplican las nanosílices. En efecto, al compararlas con nanocales y microdispersiones acrílicas se constató con todos los productos una reducción de la absorción de agua y una reconsolidación de la capa pictórica.  

    Conclusiones
      
    Aunque se trate de un material todavía poco estudiado, los primeros resultados son prometedores y, como para todas las nuevas sustancias, se requieren ensayos más meticulosos respecto a lo que se puede hacer utilizando productos ya conocidos, especialmente para evaluar:
     - El grado del efecto consolidante que se desea conseguir.
     - La cantidad de material a utilizar (es decir, la relación de dilución).
     - La ausencia de cambios cromáticos en los materiales tratados.
    Por último, tampoco hay que descuidar la seguridad ya que, al tratarse de una dispersión acuosa, NANO ESTEL no es inflamable y no presenta símbolos de toxicidad, con la consiguiente reducción de los factores de riesgo en laboratorio y a pie de obra, así como de los costes de transporte y almacenamiento.  

    En el próximo Boletín CTS se describirá la aplicación de Nano Estel como aglutinante
    .
      

    PRODUCTO:

    NANO ESTEL - CONSOLIDANTE A BASE DE NANOSÍLICE
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/174-nano-estel-consolidante-a-base-de-nanosilice



    Bibliografía:
    1. Camaiti M., Dellantonio G., Pittertschatscher M.; “Restauro dello stemma affrescato del Cardinale Bernardo Cles presso il Castello del Buonconsiglio a Trento: nuove soluzioni per il consolidamento di intonaci dipinti distaccati dal supporto murario” Scienza e Beni Culturali XXIV, Bressanone, 2008.
    2. Costa E., Dei L., Gaetani M.C., Giovagnoli A., Ioele M. “Studio di consolidanti nanometrici per il consolidamento della pellicola pittorica dei dipinti murali” Atti Convegno IGIIC,  Cremona, 2007.

  • 27.2 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - ADHESIÓN Y FLEXIBILIDAD: EPO 155

    Adhesión y flexibilidad: Epo 155

    Cuando en 2005 se introdujo la resina epoxi en el catálogo CTS Epo 155, se pensó que se iba a utilizar en un campo muy limitado: para encolar materiales sujetos a fuertes variaciones dimensionales (relacionadas con cambios de humedad relativa, como en la madera) o bien para unir materiales con coeficientes de dilatación térmica muy distintos. En efecto, en estos casos la utilización de una resina epoxi clásica, rígida, podría conllevar un estrés para la unión, con el daño consiguiente si el material encolado es demasiado débil. El clásico ejemplo es el encolado de un elemento metálico sobre una piedra deteriorada, que a la larga puede presentar microgrietas o deslaminación de la zona de encolado.
     En realidad, en estos años Epo 155 mostró otras interesantes posibilidades de utilización y vamos a describir ahora un estudio comparativo de uso como consolidante para la madera y un ejemplo de uso nada habitual. Recordamos que, como las demás resinas epoxi reticulables en frío, Epo 155 es un producto bicomponente, que debe mezclarse con un endurecedor a base de aminas alifáticas modificadas. En la tabla se resumen sus propiedades:  

             Aspecto de la mezcla EPO 155+K 156
          
    Líquido transparente
             Peso específico a 25° Kg/l                                        1,1
             Tiempo de trabajabilidad a 25°C                              30’
             Resistencia a tracción (N/mm2)                               >3,0
             Resistencia a flexión (N/mm2)                                 >3,5
             Resistencia a compresión (N/mm2)                         >5,0
             Viscosidad del sistema a 25°C (mPa.s)                  120-240
             Módulo elástico (N/mm2)                                         1.800 
     

    Como indica el dato de la viscosidad, la resina es muy fluida y, gracias a esta propiedad, fue examinada en algunos recientes estudios de Enriques et al [1,2], sobre la consolidación de elementos arquitectónicos de madera atacados por hongos.
    Además de dos resinas clásicas como Paraloid B-72 (acrílica) y Butvar B-98 (butiral de polivinilo), se examinaron cuatro resinas epoxi de baja viscosidad -entre las cuales precisamente Epo 155-, que se aplicaron sobre muestras de pino marítimo deteriorado por exposición a los hongos de la podredumbre cúbica.
    Con varios intervalos de exposición a la acción de los hongos (4, 8 y 12 semanas) se lograron distintos niveles de degradación, que se podían medir mediante la determinación de la pérdida de masa, entre el 3 y el 25%. La aplicación se realizó por inmersión directa en las resinas epoxi, durante 15’, mientras que las dos resinas termoplásticas se disolvieron al 20% en acetona y al 15% en una mezcla de etanolo y tolueno 40:60, respectivamente.
    Para más información, se recomienda la lectura del artículo completo, pero es interesante observar la tabla correspondiente al incremento de la resistencia mecánica a compresión respecto a la muestra sin tratar (por brevedad se indican solo los valores obtenidos con niveles de deterioro bajo y alto, 5% y 20% de pérdida de masa de la muestra).  

    Pérdida de masa

    epoxi

    Epo 155

    epoxi Lw

    epoxi Li

    Paraloid B-72

    Butvar B-98

    5

    7.0

    17.2

    10.7

    8.2

    12.7

    15.1

    20

    -3.8

    38.5

    29.6

    15.4

    26.6

    36.6 


    Como se puede observar, dos resinas epoxi dieron resultados totalmente negativos, tal vez por falta de penetración en las fibras de la madera, y los mejores resultados se alcanzaron con Epo 155 y Butvar. Sin embargo, Butvar no logra aumentar la resistencia de la superficie, como se deduce de la tabla siguiente, correspondiente al valor de incremento de la resistencia superficial.  
         

    Pérdida de masa

    epoxi R

    Epo 155

    epoxi Lw

    epoxi Li

    Paraloid B-72

    Butvar B-98

    5

    7.6

    32.9

    12.5

    14.4

    14.9

    6.8

    20

    19.8

    90.8

    22.3

    13.2

    26.9

    2.5 



    Los autores destacan que solo en algunos casos existe una relación entre la cantidad de resina absorbida y las resistencias obtenidas: por ejemplo, Paraloid B-72 se absorbe poco, pero los incrementos están alrededor del 27% tanto para la compresión como para la superficie. Butvar se absorbe en cantidad aún más reducida, pero presenta un buen resultado solo para la compresión. La resina epoxi denominada R es la que más se absorbe, pero su eficacia es escasa. En conclusión, teniendo en cuenta todos los parámetros, Epo 155 es el producto que presenta los mejores resultados. Por consiguiente, es una válida alternativa a Paraloid B-72, especialmente cuando no se requiera la reversibilidad de la actuación.  

    Además, deseamos añadir un apunte acerca del aspecto de la madera tratada con estas técnicas, haciendo referencia a un reciente trabajo de Genco et al. [3], en el que se describen productos consolidantes similares (resinas epoxi y resinas naturales/sintéticas termoplásticas), aplicados sobre muestras de maderas distintas, chopo y nogal, y con deterioro distinto, mediante ciclos hielo/deshielo. Se registró un efecto mínimo sobre el color aplicando soluciones de resinas naturales y sintéticas, tanto acrílicas como alifáticas, pero el nivel de consolidación fue bastante bajo, mientras que las dos resinas epoxi, Epo 155 Templum Epo Top, provocaron fuertes alteraciones del color, pero un mejor nivel de consolidación, óptimo en el caso de Templum Epo Top.

    Por ello, es necesario elegir ponderando en primer lugar la oportunidad de conseguir una variación de color, entendida como refuerzo del tono o “efecto mojado”, con tal de lograr un fuerte aumento de la resistencia mecánica. Si este parámetro no es fundamental en la recuperación de un elemento estructural como una viga, en cambio sí lo es en caso de objetos de interés histórico-artístico.  

    El segundo ejemplo se refiere a la utilización de Epo 155 como material de integración para una estatua de cartón piedra, revestida con piel gamuzada pintada que representa a “Cristo muerto”: la característica principal de la obra es la movilidad de sus extremidades. En efecto, para que el objeto sea lo más parecido posible a un cuerpo de verdad, los hombros, los codos, los puños, las rodillas y los tobillos son articulados. Para imitar mejor las oscilaciones del cuerpo humano durante las procesiones y la Crucifixión, también el cuello y el busto son articulados. El artista logró recrear con éxito el efecto teatral de la cabeza inclinada hacia abajo y del busto hacia adelante, para simular el estado de abandono de Cristo en la Cruz. Puesto que la obra se realizó para la procesión del Viernes Santo, había que restablecer el funcionamiento de las articulaciones, originalmente realizadas con piel gamuzada que se desgastó.

    Su falta se compensó con la aplicación de Epo 155, espesada con sílice micronizada -para poder aplicar la resina con espátula- y coloreada con ocre amarillo claro (el pigmento más adecuado para imitar el tono de la piel gamuzada). Esta mezcla se extendió sobre una tira de lienzo, encolada en los extremos con la misma mezcla epoxídica.
    Se logró así una posibilidad de extensión difícilmente alcanzable con otros materiales, como se observa en las dos fotos, y por último se realizó el retoque pictórico con colores acrílicos para una mejor adhesión al soporte y mayor elasticidad del color.
    Las resinas epoxi muestran una vez más sus propiedades excepcionales, con la única limitación de la reversibilidad, puesto que se trata de resinas termoendurecibles. Sin embargo, siempre hay que considerar la posibilidad de crear una capa barrera (por ejemplo, con una resina termoplástica reversible como Paraloid), entre las áreas a encolar, o incluso aumentar el efecto tapando la porosidad de los materiales con aplicaciones de ciclododecano.    

    PRODUCTO:

    EPO 155 (PRODUCTO BICOMPONENTE)
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/83-epo-155-producto-bicomponente


    Bibliografía:
    1. Henriques D.F, Nunes L., de Brito J.; “Test of consolidation products for wood degraded by fungi” 3rd Meeting on pathology and rehabilitation of buildings – PATORREB 2009, Porto, 467-472.
    2. Henriques D.F., Nunes L., de Brito J.; "Consolidation of Timber Degraded by Fungi in Buildings: an Experimental Approach” Atti del 18° CIB World Building Congress, Salford, UK (2010), 424-433.
    3. Genco G., Lo Monaco A., Pelosi C., Picchio R., Santamaria U.; “La valutazione sperimentale dei consolidanti per il legno” Atti del XXV Convegno “Scienza e Beni Culturali” Conservare e restaurare il legno, Bressanone, (2009), 475-484
    4. Panvini R., Nucera G.C., Gabbriellini C., Rossi F., Borgioli L.; “Il Cristo morto di Mazzarino. Un singolare caso di applicazione di resine epossidiche su un’opera polimaterica” Progetto Restauro n. 45 (2008). 

  • 27.3 MÁS INFORMACIÓN - LA CAL LAFARGE

    La cal Lafarge

    Las cales Lafarge, que C.T.S. comercializa desde siempre, se obtienen de una cantera cuya pureza permite conseguir un producto prácticamente exento de sales eflorescentes, siendo éste su punto fuerte y razón de su éxito en el sector de la restauración.
    En nuestro catálogo siempre ha habido dos tipos de cales Lafarge: Crualys y Chaux Blanche. La cal Crualys, ideal para soportes suaves, se incluye en el tipo NHL 2, al ser una cal hidráulica natural sin aditivos, con resistencia mecánica a compresión de entre 2 y 5 N/mm2, medida después de 28 días de curado (es decir un valor bastante bajo). Según la normativa UNI EN 459-1:2001, pueden denominarse NHL (Natural Hydraulic Lime) solo las cales sin aditivos, mientras que la adición “de productos especiales que pueden contener materiales puzolánicos o hidráulicos hasta el 20%”  las convierte en NHL-Z.
    En el esquema siguiente se resumen las distintas clases.

      Familia

    Tipo

    SIGLA

    Clase de resistencia*

    Tipo Lafarge

    - Cales hidráulicas

    - Cales hidráulicas naturales

    NHL 2

    De 2 a 5

    Crualys

     

     

    NHL 3,5

    De 3,5 a 10

    Chaux Blanche Nathural

     

     

    NHL 5

    De 5 a 1

     

                                              

    - Cales hidráulicas naturales
    con aditivos

    NHL-Z 2 

    De 2 a 5 

     

     

      NHL-Z 3,5  

    De 3,5 a 10

    Chaux Blanche ↑

     

     

    NHL-Z 5

    De 5 a 15

    Tradifarge

    - Cales hidráulicas HL

    -  Cales aéreas Cales cálcicas**

    CL   

     

     

     

    -  Cales dolomíticas***

    DL  

     

     

           
    * El número indica la resistencia mecánica a compresión después de 28 días de curado, en MPa N/mm2.
    ** Cales aéreas formadas preferentemente por óxido o hidróxido de calcio sin adición de materiales hidráulicos o puzolánicos.
    ***Cales aéreas constituidas preferentemente por óxido o hidróxido de calcio y magnesio sin adición de materiales hidráulicos o puzolánicos.    
    Puesto que la clásica Chaux Blanche, la cal Lafarge por antonomasia, contenía un porcentaje de componentes hidráulicos que se añadían para que el fraguado fuera más rápido, se clasificaba como NHL-Z. La incomprensión de esta clasificación generó malentendidos, incluso el relacionado con el nombre del fabricante, “Lafarge ciments”: la inscripción “ciments” en los sacos podía dar a entender que se trataba de cemento y no de cal hidráulica.
    Desgraciadamente, la difusión de noticias imprecisas* por parte de una competencia cada vez más “desleal”, requiere una puntualización: la cal Lafarge Chaux Blanche nunca fue un cemento, sino una cal hidráulica natural con aditivos.

    La cal Lafarge se ha utilizado durante más de 25 años en las restauraciones monumentales más importantes en Italia y en el mundo, sin ningún problema de eflorescencias o de otra clase. Esta ha sido la primera y más importante garantía para los profesionales. Además, desde siempre la cal Lafarge es uno de los componentes en la formulación de los morteros de inyección de la LÍNEA PLM, cuyos porcentajes de sales solubles se comprueban en cada producción. Lafarge ha querido eliminar los aditivos, trasformando la Chaux Blanche en Nathural™, que por ello se clasifica como NHL 3,5.
    Este cambio conlleva una resistencia mecánica menor (de 6,9 a 5 MPa, valores medios), que cumple perfectamente con los preceptos de una cal para restauración, y un tiempo de fraguado mayor, que permite tiempos de trabajo más largos (inicio del fraguado de  4 a 6 horas, mientras que su final de casi 6 horas a más de 8).  
    C.T.S. confirma su elección que se basa no solo en una marca de gran tradición, sino sobre todo en la excelente casuística de utilización de la cal Lafarge.            

    * Una página web de una conocida cal de la competencia de Lafarge tergiversa el sentido de la frase “cales hidráulicas naturales con adición de productos especiales que pueden contener materiales puzolánicos o hidráulicos hasta el 20%“, y llega a defender que la norma dice que las NHL-Z no son cales, sino “productos especiales que pueden contener materiales puzolánicos o hidráulicos hasta el 20%” 

    PRODUCTO:

    MORTEROS Y LIGANTES
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/148-morteros-y-ligantes




  • 26.1 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN

    Desde su apariciónen el mercado nos gustaría hacer el estado de la cuestión acerca de los barnices finales a base de Regalrez 1094, tomando en cuenta los estudios más recientes y las experiencias acumuladas por muchos restauradores.
    La apreciación del Regal Varnish se ha cruzado con una serie de problemas que surgieron con los barnices comerciales a base de resinas cetónicas, después de la salida del mercado de la resina quetónica Laropal K80.  

    Hay que tener en cuenta que Regalrez 1094 es un polímero alifático de bajo peso molecular (aproximadamente 900 uma), cuya estructura podemos ver en la imagen, y que se consigue a través de la polimerización de vinil-tolueno y alfa-metil-estireno, posteriormente hidrogenados. Con la hidrogenación se estabiliza el polímero, reduciendo los dobles enlaces que son los “puntos débiles” de donde empieza el envejecimiento.  

     El índice de refracción de la resina es elevado (1.519), y la dimensión reducida de las cadenas implica una baja viscosidad y, por lo tanto, una excelente capacidad de nivelación. Estos dos factores acercan el comportamiento óptico de este barniz al de las resinas naturales como la dammar.  

    Confirmaciones acerca de la estabilidad

    Ya en la edición anterior del Boletín  de CTS nº 25.2 (“Polímeros bajo examen”) indicamos de forma sintética los resultados conseguidos por una tesis titulada “Estudio de las resinas sintéticas empleadas en el arte contemporáneo” realizada en la Universidad de Pisa [1], que confirmaban la ausencia de grupos polares en el Regalrez 1094, mediante mediciones GC/MS que habían demostrado la presencia principalmente de dímeros (dos unidades ligadas entre si), trímeros (tres unidades) y oligómeros (cuatro o más, pero que formen cadenas de bajo peso molecular). Se observó, además, mediante análisis FTIR y GC/MS que el proceso de envejecimiento de los Regal Varnish se realizaba mediante una inicial oxidación del Tinuvin 292, seguida por la formación en la estructura del Regalrez de carbonilos (enlaces C=O), y de un doble enlace (C=C) en el anillo de ciclohexano. Este comportamiento se había observado, pero sólo mediante mediciones FTIR, en el primer estudio “italiano” (después de los estudios fundamentales de De la Rie y otros [2-4]), en el Regalrez 1094. En la experimentación con fuerte irradiación UV, realizada por Mara Camaiti en el CNR-ICVBC [5], se evidenció, de hecho, el efecto protector del Tinuvin 292, y estos datos, junto con las pruebas relativas a la posibilidad de eliminación realizadas por Paola Mariotti sobre muestras envejecidas de forma natural [6], son el primer paso hacia el nacimiento de los Regal Varnish, a finales de 2005. La oxidación del Regalrez 1094, como consecuencia del fuerte estrés debido al envejecimiento acelerado mediante radiaciones UV, se había detectado incluso en el estudio de Fabio Talarico de 2008 [7], que a través de mediciones colorimétricas proporcionaba una ulterior confirmación acerca de la reducida aparición del amarilleo. Además se evidenciaba la eficacia como estabilizador del Tinuvin 292, fácilmente deducible en el análisis FTIR de la reducida formación de la señal alrededor de 1700 cm-1, relativa al carbonilo.  

    Los enemigos del Regalrez
      
    Como todas las sustancias el Regalrez 1094 tiene unos límites bien definidos, que no permiten su utilización en determinadas situaciones. Si se ignoran estas propiedades el resultado puede ser un barnizado inadecuado y, como desafortunadamente pasa a menudo, se puede achacar el resultado negativo al material. Veamos entonces dos características que hay que tener siempre en cuenta.  

    Regalrez 1094 es fácilmente reversible en disolventes poco polares
    .
    Si esta característica se puede considerar como uno de los puntos de fuerza del material, también es cierto que si las capas pictóricas están todavía impregnadas por un disolvente con esta polaridad, después de la aplicación el disolvente mismo del barniz puede “llamar” hacia la superficie las moléculas de disolvente todavía presentes.
    La evaporación del disolvente se realiza especialmente a través de las grietas, con la formación del fenómeno de “piel de naranja”. Este efecto se observa especialmente si:
    1.     Se ha llevado a cabo una limpieza con disolventes con fuerte retención.
    2.     Se ha llevado a cabo un barnizado de retoque con disolventes con fuerte retención.
    3.     Se ha llevado a cabo un retoque disolviendo los colores de barniz con disolventes con fuerte retención.
    Por “disolventes con fuerte retención” entendemos, por ejemplo, los aromáticos de peso molecular elevado, el acetato de amilo, el lactato de etilo, el dipenteno/mentadieno y muchos más, pero sobre todo la esencia de trementina que, como es sabido, no es sólo el disolvente con mayor retención en una película de aceite envejecido, sino que incluso - en un determinado porcentaje - ya no se libera. Que la esencia de trementina sea totalmente incompatible con el Regalrez se demostró en un estudio realizado con Lucia Dori y Daniele Piacenti [8] La reversibilidad en disolventes poco polares tiene también un efecto añadido: no se puede utilizar el Regalrez como barniz de retoque, por lo menos empleando los métodos “clásicos”. Sólo con unas medidas adecuadas (como, por ejemplo, la utilización de colores Gamblin disueltos en alcohol isopropílico), a veces es posible este tipo de utilización.  

    Regalrez 1094 tiene moléculas muy pequeñas
    Esto significa que, además de tener un buen poder nivelante, tiene también una elevada penetración en los materiales más porosos. En el caso de áreas especialmente empobrecidas, a lo mejor por antiguas limpiezas agresivas (los así llamados “agotamientos”), el barniz a base de Regalrez 1094 tiende a “desaparecer”, y por tanto no se puede utilizar en esta fase. Es mucho mejor saturar estas zonas con Tylose o Klucel en alcohol, o bien con la Gustav Berger’s O.F. Isolating PVA Spray Varnish. Este último barniz nació precisamente con esta función, de “sostener” de forma excelente los retoques, y luego se tiene que sobrebarnizar.  

    Considerados los dos puntos arriba indicados, está claro el motivo que nos ha empujado a proponer desde un principio Regal Varnish como barniz final.
      

    Como ya indicado en los varios encuentros técnicos que tuvimos en estos años la fórmula de los Regal Varnish se puede modular a partir de los productos básicos que CTS tiene, de todas formas, en el catálogo. Los porcentajes en peso son:  

    Regalrez 1094

    23

    Kraton G-1650

    2

    Tinuvin 292

    0,5

    Esencia de petróleo D30 no desnaturalizada

    74,5 

    Regal Varnish Mat contiene también el 3,5% de cera microcristalina Cosmolloid 80.  

    Aunque hoy en día pueda parecer paradójico, en el sector de los barnices comerciales las pruebas de laboratorio necesarias (como los envejecimientos acelerados), que tendrían que acompañar todas las nuevas fórmulas, son totalmente ausentes. En nuestro caso los estudios publicados están acompañados por innumerables pruebas aplicativas: a los amigos restauradores que aceptaron con mucha paciencia probar las muchas variantes de los Regal Varnish, en el lejano 2004, ¡les damos las gracias!.  

    PRODUCTOS:

    REGALREZ® 1094
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/107-regalrez-1094



    Bibliografía
    1. Hace 5 años
    2. Orsini S.; “Studio delle resine sintetiche impiegate nell’arte contemporanea”, Tesis de Licenciatura Especializada en Química, (2010) 2_ de la Rie E.R.; McGlinchey C.W.; “New synthetic resins for picture varnishes” in Cleaning, retouching and coatings, Ed. Mills & Smith, Londra (1990), 168-173. 4_ de la Rie E.R.; “Why use a sinthetic picture varnish?”, in Art et Chemie: les polymères, París (2002), 63-68 3_ Berns R.S.; de la Rie E.R.; “Exploring the optical properties of picture varnishes using imaging techniques”, Studies in Conservation 48 (2003), 73-82. 5_ Borgioli L.; Camaiti M.; “Stabilizzazione di polimeri per la verniciatura di dipinti”, Convegno “Colore e conservazione”, Thiene (2004) 6_ Borgioli L.; Mariotti P.; “Applicazione di nuove vernici ad alta stabilità”, II Congresso Nazionale IGIIC, Génoa (2004), 470-476. 7_ Talarico F.; “Proprietà delle vernici idrocarburiche e prospettive”, Kermes 72, Octubre-Diciembre de 2008, 70-73. 8_ Borgioli L., Dori L., Piacenti D.; “Effetti della temperatura e dei solventi su vernici sintetiche e naturali” Lo stato dell’arte 5, Cremona, 11-13 de Octubre de 2007

  • 26.2 PROTECTORES ANTIPINTADAS PARA SUPERFICIES MONUMENTALES (II)

    Protectores antipintadas 

    Después de haber descrito en el número anterior (25.1  Protectores antipintadas para superficies monumentales) la principal e histórica propuesta por parte de C.T.S. en el campo de los protectores antigraffiti, el Art-Shield 1, ahora vamos a analizar las propiedades del elastómero fluorado Fluoline HY, cuyo principio activo entra dentro de las Líneas guías, para la eliminación de pintadas que estropean las superficies arquitectónicas, redactadas por la Dirección Regional de Bienes Culturales y Paisajísticos de la región Emilia-Romagna, por la Dirección General de Bienes Arquitectónicos y Paisajísticos de las provincias de Bolonia, Modena y Reggio Emilia, por la Dirección General de Bienes Arqueológicos de la región Emilia-Romagna, y por el Ayuntamiento de Bolonia y descritas en el volumen “Contra el vandalismo gráfico”, que se pueden descargar de la página web [1].
      

    Línea antipintadas CTS: Fluoline HY  

    ¿Qué es un elastómero fluorado? Se trata de una goma, un polímero con una cadena muy larga y flexible, que sigue manteniendo su estructura inalterada incluso a bajas temperaturas. De hecho, su Temperatura de Transición Vítrea (Tg) es de -21°C. Esto significa que sólo bajando por debajo de temperaturas “siberianas” este material se pondrá más rígido.
    Si por un lado esta propiedad representa un punto de fuerza, por otro nos lleva también hacia un límite que hay que tener siempre en cuenta con atención: su “suavidad” hace que se deposite más polvo.
    Por lo tanto es necesario evitar acumulaciones y formación de películas en la superficie, que llevarían a un gradual griseamiento, especialmente evidente en las piedras claras. El problema tiene fácil solución, ya que la reversibilidad del producto permite su eliminación incluso después de varios años, pero es un problema que hay que valorar con atención. Otra característica que tiene es la sustitución casi total de los átomos de hidrógeno por los de flúor; esto garantiza estabilidad y un poder repelente al agua.
    Un elastómero fluorado (Akeogard CO) ya se había detectado entre los productos adecuados como antigraffiti, junto con el Art Shield 1, en el mencionado estudio ICR/ICCROM [2,3], y se habían indicado más propiedades en otros estudios [4], sin embargo las experiencias en mármoles y travertinos nos enseñaron que un producto de cadena larga no penetra de forma suficiente en este tipo de materiales, con los arriba mencionados problemas de griseamiento.
    No es un caso que los elastómeros fluorados se hayan extendido especialmente en Toscana, donde las areniscas grises, muy porosas, son el substrato ideal.
    Por esa razón, desde su introducción, el Fluoline HY se ha ido proponiendo como repelente al agua para piedras (areniscas, tobas….), enlucidos y ladrillos muy porosos. El mecanismo que permite su utilización como antipintadas se basa en su reversibilidad: el disolvente contenido en el spray y en los barnices lo disuelve parcialmente, permitiendo el englobamiento del residuo resina/pigmento en que se convierte la “pintada” una vez evaporado el disolvente. Posteriormente podemos quitar con disolventes polares (acetona, acetatos…), el elastómero y la “pintada” que se ha quedado atrapada en su matriz. Al final de la operación de eliminación es, por lo tanto, necesario volver a aplicar el Fluoline HY.  

    Recientemente se compararon, en el ámbito de una tesis realizada en la Universidad de Pavia por Simona Varesi, cuatro productos con efecto antipintadas.

    El substrato era la Piedra de Lecce, especialmente porosa, “ensuciada” con rotulador permanente negro Basic Office, y la cantidad de antipintadas aplicado era de 30 g/m2. Como podemos ver en la tabla la variación de color como consecuencia del tratamiento (ΔE*) es significativa sólo para la cera microcristalina.
    Los ángulos de contacto αt, que nos proporcionan una indicación de la repelencia al agua, indican un nivel mayor para los productos a base de disolvente (HY y microcristalina), con respecto a los que son de base de agua (Art-Shield 1 y terpolímero fluorado). Esta propiedad es importante para una protección eficaz de las pintadas realizadas con barnices a base agua, y para una sencilla eliminación de los carteles, que se atacan con colas celulósicas en agua.
    La diferencia de color entre el substrato original y el substrato conseguido después del ciclo de “ensuciado+eliminación” (ΔE* p-tq), es más alta para los productos hidrocarbúricos (Cera microcristalina y Art Shield), con respecto a los fluorados. Esto significa que la protección que garantizan los fluorados es superior. En este sentido el producto que daba el mejor resultado (ΔE* p-tq = 6.8) generaba, sin embargo, también una reducción de permeabilidad inaceptable (90%), mientras que él que dejaba la piedra más permeable era el Fluoline HY (<10%).
    Resulta evidente que este parámetro es fundamental para cualquier producto que se aplica sobre un monumento.      

     

    ΔE*

    αt

    ΔE* p-tq (media)

    Reducción P (%)

    Cera microcristalina

    5,83

    118

    30,1

    <20

    Art-Shield 1

    2,66

    100

    27,7

    <20

    Fluoline HY

    4,11

    115

    19,3

    <10

    Fluoroelastómero experimental

    3,11

    90

    6,8

    90 

      

    Desde el año 2008 uno de los monumentos de Milán más expuestos a actos vandálicos, las columnas de San Lorenzo, se protegen con Fluoline HY.          
    A continuación resumimos algunas propiedades del producto Fluoline HY (copolímero fluoruro de vinilideno – hexafluoropropileno)  

    Propiedad

    Ventajas

    Límites

    Cadena larga – Peso molecular del átomo  400.000 u.m.a.

    Ideal para materiales muy porosos donde otros productos tienden a “desaparecer” en el interior

    Limitada penetración en los materiales  más compactos, riesgo de acumulación en superficie.

    Baja Tg (-21°C)

    Ausencia de rigidez de las superficies tratadas. Capacidad de adaptarse a los movimientos de las estructuras.

    Suavidad de la película, 
    adhesión de las partículas atmosféricas con el consiguiente griseamiento

    Estabilidad química 

    La ausencia de oxidación y reticulación lo mantiene siempre soluble en disolventes polares.

    Alto % de átomos de flúor

    Elevada repelencia al agua, reduce la adhesión de barnices y colas a base acuosa, como las que se utilizan para pegar los carteles.

     

                                                Para casi todos los substratos el impacto cromático es mínimo    

    PRODUCTOS:

    FLUOLINE HY - PROTECTOR REAGREGANTE
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/187-fluoline-hy-protector-reagregante


    Bibliografía:    
    1.     Vigliano G. “Graffiti e antigraffiti” Bollettino ICR 1, (2001). 
    2.     Borrelli E., Moreno Caballero B., Vigliano G.; “Progetto Axum – Sperimentazione prodotti antigraffiti” ICCROM, 2000. 
    3.     Krumbein W.E. “Graffiti and antigraffiti – An appraisal” International Workshop on conservation of Architectural Surfaces: stones and wall covering, Venice (1992). 
    4.     Cardilli L., Cancelieri C., Bernardini C.; “Graffiti e antigraffiti: sperimentazione su pietre all’aperto in contesto urbano e verifica in laboratorio”, Records from the Conference “Lo stato dell’arte 2”, Genova, September 27-29 th, 2004. 
    5.     www.emiliaromagna.beniculturali.it/index.php?it/221/linee-guida-vandalismo-grafico

  • 25.1 MÁS INFORMACIÓN - PROTECTORES ANTI ESCRITURA PARA SUPERFICIES MONUMENTALES

    Protectores anti escritura para superficies monumentales 

    Con la explosión del fenómeno del “graffiti” en sus diferentes manifestaciones que van desde el puro vandalismo hasta el “mural art”, se han hecho necesarias intervenciones de protección de las superficies arquitectónicas, que en el caso particular de los monumentos necesitan un profundo conocimiento de los materiales a proteger y de los productos a aplicar.

    Para la eliminación de un grafiti las técnicas son muy variadas las técnicas que se pueden aplicar: productos químicos en gel o en solución, chorros de vapor, hidrolimpieza, micro-proyección, hasta llegar al laser, pero en este breve artículo nos ocuparemos de los sistemas de protección pasiva, es decir, de las barreras poliméricas que no impiden la realización del grafiti, pero que si facilitan la eliminación: los anti graffiti.  

    Existen los anti graffiti “temporales”, o bien, aquellos que, en el momento de la eliminación del grafiti de la forma que se ha indicado arriba, se eliminan en parte o totalmente, y por tanto deben ser nuevamente aplicados. Son los usados en la restauración monumental justamente porque son reversibles.
     Sin embargo, los anti graffiti “permanentes” se constituyen por resinas reticulantes e irreversibles que constituyen un estrato homogéneo y resistente, que no penetra por el grafiti siendo insoluble en disolvente. El grafiti se elimina sin que el anti graffiti se despegue. Además del  problema de la irreversibilidad aparece a menudo también el problema estético, ya que las superficies adquieren un aspecto “barnizado”. Esto es lo que los hace inadecuados en el uso del sector monumental 

    Con el término “grafiti” se ha perdido ya, el significado original de “pintura mural ejecutada con una punta de hierro sobre una superficie oportunamente enyesada de modo que en un estrato se sobreponga uno o más estratos de color diferente”, y comprendemos sin embargo, todas las escrituras y los diseños realizados en la gran mayoría con barnices, en particular spray, y marcadores. En raros casos encontramos también el uso de carboncillo, pasteles a cera, yesos, incluso materiales anómalos como pintalabios y esmalte para las uñas.
     Examinando el caso principal de los grafiti hechos con spray (más de 50% de los  grafiti urbanos), y con marcadores, debemos observar en primer lugar el mecanismo de depósito, para intervenir correctamente tanto con métodos preventivos, como para las operaciones de limpieza.
    •       Barnices spray – Se trata de un caso particular de barniz, cuyo pigmento se mezcla con una resina termoplástica, conducida por un disolvente volátil (hidrocarburos ligeros como butano y propano después de la prohibición de los CFC).
    •       Marcadores – También aquí tenemos un pigmento disperso en un disolvente, sin embargo con cantidades reducidas de resina respecto a los barnices, cosa que hace el medio menos viscoso y más penetrante, dado que el disolvente se absorbe por capilaridad, y el pigmento con él.    

    En ambos casos los pigmentos se dispersan en disolventes de elevada volatilidad, pero en el caso del spray la vaporización del disolvente al salir de la boquilla reduce la penetración del pigmento en el poro ; en el caso de la vehiculacion del fieltro del marcador si tiene una fuerte penetración en la porosidad de la piedra o del enyesado, con el transporte del pigmento a los poros, y la consiguiente dificultad de eliminación, a veces es imposible, dado que la intervención de limpieza con disolventes a menudo lleva a transportar al pigmento a zonas todavía más profundas, con la permanencia de halos.  

    Este tema sobre la facilidad de eliminación se confirma con resultados obtenidos por un estudio ICR [1] y ICCROM [2] sobre la eficacia de los protectores en el momento de la eliminación: para todos los productos examinados. La eliminación del spray, tanto en mármol como en travertino, es aceptable, los problemas se incrementan en la eliminación de los marcadores.  

    Requisitos y selección de un anti graffiti
      

    Los anti graffiti deben respetar los cánones impuestos en los tratamientos de las superficies monumentales, y deben por tanto tener:  
           - Durabilidad. La eficacia debe mantenerse por un periodo de tiempo razonable, para reducir las intervenciones de manutención, y por tanto los costes.  
           - Resistencia al envejecimiento e inercia hacia el soporte tratado.

           - Ausencia de productos dañinos que puedan formarse con el tiempo (esto lleva a excluir productos sobre los que se hayan encontrado restos microbiológicos, como aquellos a base de  polisacáridos, PSS 20 de la All-Remove, o a base de siloxanos, Funcosil de la Remmers [3]).
           - Fácil eliminación del graffiti (no solo una reversibilidad teórica)
           - Ausencia de variaciones cromáticas
           - Baja toxicidad e impacto ecológico
           - Bajo coste  

     Para una correcta valoración de un producto deberán recogerse informaciones:  

    • - De las fichas técnicas y de seguridad de los productos comerciales
    • - De los resultados de los test llevados a cabo sobre las interacciones entre los propios floruros y los diferentes soportes (reducción de permeabilidad al vapor acuoso, color,…);
    • - De la casuística de aplicación y los resultados obtenidos en el tiempo.


      Línea anti graffiti CTS: Art-Shield 1  

    C.T.S., operando exclusivamente en el sector monumental, ofrece diferentes productos (Art-Shield 1, objeto de este artículo, y los fluorizados Fluoline HY y Fluoline PE, que estarán como protagonistas de un futuro Boletín), los tres son aplicables sobre tipologías de piedra de diferentes porosidades, y también tienen diferentes niveles de impacto estético.   Tanto el Art-Shield 1 como el elastómero fluorizado como base del Fluoline HY ya se habían identificado en 2004 en el citado estudio ICR/ICCROM [1,2] como solución idónea a la protección de materiales de piedra. Tal estudio describe datos de variación cromática y de capacidad protectora, sobre mármol y travertino, antes y después de envejecimiento artificial.
    La validez de estos principios activos está confirmada por las recientísimas directrices para la eliminación de graffitis perjudiciales para superficies arquitectónicas, llevadas a cabo por la Direzione Regionale per i Beni Culturali e Paesaggistici dell’Emilia Romagna, por la Soprintendenza per i Beni Architettonici e Paesaggistici para las provincias de Bologna, Modena y Reggio Emilia, por la Soprintendenza per i Beni Archeologici dell’Emilia Romagna, y por el Comune di Bologna. Las directrices se han definido con el término de un estudio articulado que comprende:
    - Una clasificación de las tipologías de contaminación.
    - Una ficha y una creación de una base de datos.
    - Una experimentación llevada a cabo sobre varias obras-estudio con la identificación de los materiales óptimos para la eliminación y sucesiva protección.

    Los resultados, recogidos en el volumen “Contra el vandalismo grafico”, son también descargables en la página web oficial [5] que os invitamos a consultar, y confirman que para las tipologías particulares de las superficies arquitectónicas boloñesas (areniscas, ladrillos, yesos), de elevada porosidad, se han obtenido mejores resultados en la fase de protección operando con un copolimero fluorizado elastómero de alto peso molecular en disolvente. Se trata del principio activo del protector Fluoline HY, que presenta también la ventaja de un bajo impacto cromático. En el caso de piedras claras poco absorbentes, madera y metales, es sin embargo oportuno orientarse sobre emulsiones acuosas de polímeros parafinicos, como el Art-Shield 1.
      

    En el trabajo de selección de los principios activos, C.T.S.ha excluido el uso de anti graffiti a base de siloxano alchilalcossisilani, por otros óptimos hidrorepelentes, por el escaso efecto barrera en los límites de los productos a base de disolvente como los marcadores. Los productos comerciales tienen generalmente un buen efecto cromático, pero su irreversibilidad ha sido subrayada también por el citado estudio del Instituto Central (Imagine “0” IR 200 della IRCA, BS-28 de la Wacker y Guardian de la Zernike, Funcosil de la Remmers).  

    Art-Shield 1
     debe su efecto barrera a la formación de una película transparente, sutil y adherente que reviste los poros de las superficies tratadas, e impide a los grafiti penetrar en profundidad en el soporte. 
    La tipología de cera hace del tratamiento a bajo efecto cromático y estable químicamente, al contrario de productos  a base de ceras naturales, que además de presentar escasa eficacia en el momento de eliminar el escrito, dan problemas de degradación en el tiempo (B-Wax de la All-clean).
    Productos similares (PMC 20 de la CIR, G-Pro de la Mega Corp., Wallgard Graffiti Barrier de la Mapei y AGS Grafficoat 3 de la Tensid) han dado mayor efecto de alteración cromática en el estudio ICR arriba mencionado. En un estudio llevado a cabo por la Sovrintendenza ai Beni Culturali del Comune de Roma con la coordinación científica del Istituto Centrale del Restauro [4] han comparado 6 productos anti escritura a base de diferentes principios activos, y Art-Shield 1 ha resultado ser el mejor protector para la eliminación de barnices  spray y marcadores en mármol, toba y peperino. Para el ladrillo se ha demostrado eficaz solo si la escritura se hacía con spray, quizás por el poder absorbente en los límites de los marcadores: de hecho ningún anti escritura se revelaba eficaz en esta situación. Sobre travertino el mejor producto es sin embargo resultado de ser otro producto a base parafinica, OFF A/700 de la Agep.
     Los otros productos, todos contenedores de flúor, no han dado resultados aceptables.  
     
    La tabla de abajo resume los resultados del estudio:    

     

    Mármol

    Travertino

    Toba

    Peperino

    Ladrillo

    OFF A/700 (Agep)

    -

    ++/+

    -

    -

    -

    Akeogard CO (Syremont)

    -

    -

    -

    -

    -

    Fluorophase 3 (Phase)

    -

    -

    -

    -

    -

    Prostone (Pelicoat)

    -

    -

    -

    -

    -

    Protectosil (Degussa)

    -

    -

    -

    -

    -

    Art-Shield 1 (CTS)

    ++

    -

    ++/+++

    +++

    +++/-

    En el caso del doble resultado el primero se refiere al spray, el segundo al marcador.  
    Art-Shield 1 presenta óptima reversibilidad: para la eliminación de las escrituras pueden presentarse dos casos:  

    De superficies no protegidas por Art-Shield 1

    Art-Shield 4, eliminar al gel listo para usar,
    a base de disolventes de baja toxicidad y  tensoactivos    

    De superficies preventivamente protegidas con Art-Shield 1

    Agua caliente (más de 80°C) a baja presión o bien,
    donde no existiese la posibilidad, con Art-Shield 4     

    Art-Shield 1 es el anti escritura más conocido en los restauradores italianos, dado que desde hace casi 20 años está presente en el mercado, y ha sido aplicado sobre monumentos como el  Duomo de Milán, la Basílica de San Giovanni e el Ara Pacis de Roma, la Fontana del Neptuno en Nápoles. Desde 2003 ha sido seleccionado y aplicado en los más importantes monumentos de Madrid, y desde 2006 en Bilbao y otros sitios de España.    

    PRODUCTO:

    PROTECTORES
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/147-protectores


     Bibliografía

    1.     Vigliano G. “Graffiti e antigraffiti” Bollettino ICR 1, (2001).

    2.     Borrelli E., Moreno Caballero B., Vigliano G.; “Progetto Axum – Sperimentazione prodotti antigraffiti” ICCROM, 2000.
    3.     Krumbein W.E. “Graffiti and antigraffiti – An appraisal” International Workshop on conservation of Architectural Surfaces: stones and wall covering, Venezia (1992).
    4.     Cardilli L., Cancelieri C., Bernardini C.; “Graffiti e antigraffiti: sperimentazione su pietre all’aperto in contesto urbano e verifica in laboratorio”, Atti del Congresso “Lo stato dell’arte 2”, Genova, 27-29 Settembre 2004.
    5.    http://www.soprintendenzaravenna.beniculturali.it/index.php?it/196/contro-il-vandalismo-grafico

  • 25.2 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - POLÍMEROS BAJO EXAMEN

    Polímeros bajo examen

    Los análisis químicos sobre los materiales usados en la restauración tienen el riesgo, a menudo, de permanecer solo bajo el conocimiento de los “encargados de los trabajos”, químicos y físicos que se ocupan del diagnóstico.
    Por ello, queremos exponer de manera sintética, para vuestro uso, restauradores, algunos de los resultados obtenidos en la Universidad de Pisa, en el curso de una tesis de título, “Estudio de las resinas sintéticas usadas en el arte contemporáneo” (de Francesca Modugno e Ilaria Bonaduce de la Universidad de Pisa).
    Los materiales examinados pertenecen a varias clases, usados en varios modos tanto en la restauración como en la actual realización de obras de arte.                

    Tipología de la resina

    Nombre comercial

    Acrílica

    Paraloid B-67 y Acril 33

    Urea-Aldeídica

    Laropal A81

    Alifática

    Regalrez 1094 y Regal Varnish

    Polietiloxazol

    Aquazol 500

    Alquídica

    Ferrario y Winsor & Newton 

    Una primera parte de la tesis se refiere a las resinas con análisis “clásicos”: FTIR, cromatografía de gases con pirolisis (Py-GC/MS), análisis térmicos (TGA). Como a menudo hemos comentado, estos análisis desarrollados por entes independientes, confirman lo que se describe por los productores y distribuidores de los materiales. Se ve aquí la importancia de datos posteriores, que nos ayudan en la valoración de diferentes polímeros, y que nos permitan integrar los datos provenientes de otras fuentes, como el Congreso “Color y Conservación” del pasado Noviembre, donde está inmerso el interés para materiales de alta estabilidad como los barnices finales Regal y los colores Gamblin, a base de la resina Laropal A81. Estos datos asumen también mayor valor considerado al afirmarse el Laropal A81 después de la salida de escena de la resina cetonica Laropal K80.  

    Para las pinturas alquídicas Ferrario y de barniz Regalrez 1094 se han llevado a cabo también ensayos de envejecimientos acelerados. 
     

    • - Los análisis han confirmado lo que se conoce en literatura (composición de los polímeros, modalidad de degradación); por ejemplo el Paraloid B-67 está constituido por isobutilmetacrilato (i-BMA), mientras el Acril 33 por etil-acrilato (EA) y metil-metacrilato (MMA).
    • - Se confirma la ausencia de grupos polares en el Regalrez 1094, y de cómo, después del envejecimiento acelerado, los análisis FTIR muestra la formación de carboncillos en la estructura, señal de un inicio de oxidación. Puede estar presente en el anillo cicloesanico una doble unión.
    • - El pirograma efectuado sobre  Regal Varnish muestra, además de las señales de Regalrez 1094, también las de los productos típicos del Kraton y del Tinuvin 292.
    • - Después de 4 meses de envejecimiento natural es posible ver individualmente las modificaciones debidas a la oxidación del Tinuvin 292.
    • - Se ha llevado a cabo un profundo estudio de las resinas alquídicas tal cual y envejecidas naturalmente y artificialmente.
    • - La Py-GC/MS es resultado de la técnica que ha dado mayores informaciones, permitiendo reconocer monómeros, dimeros y productos de degradación derivados de la fragmentación pirolitica de las resinas de referencia, y enriqueciendo así la literatura.

      El trabajo de la tesis continua con la aplicación de una técnica hasta ahora poco usada en el diagnostico artístico, la espectrometría de masa a exposición directa (DEMS). En particular es posible disponer los resultados obtenidos en un gráfico en el que las sustancias de la misma tipología química se reagrupan en áreas diferentes. Por primera vez esta técnica ha sido usada para caracterizar estos polímeros, y por primera vez se ha experimentado para la identificación de materiales sintéticos en manufacturados pictóricos.  

    Después de la fase de caracterización se ha pasado a una fase diagnóstica, analizando pruebas provenientes de tres obras diferentes por tipología y periodo. Después de análisis DEMS las tres pruebas se posicionaban en la zona de los acrílicos, aquí podían ser individuales como tales. Con la conformidad de la validez de esta identificación, las pruebas se analizaban inclusa a través de FTIR y Py-GC/MS.  

    Obra

    Autor/periodo

    Tipología de resina

    “Apolo, la Musica y la Geometria”
    Colección privada

    Pompeo Batoni, hasta el sigloXVIII

    Barniz acrílica a base de butilmetacrilato

    Pintura mural, realizada desde el abside,
    iglesia de S.Giovanni Battista, Ossel, Belgio  

    Desconocido, siglo XVI

    Copolimero isobutilmetacrilato
    stirene/2-etilesil-acrilato          

    Fondo del mural “Tuttomondo”, 
    muro externo, iglesia de Sant’Antonio.

    Pisa Keith Haring, 1989

    Copolimero stirene/etilacrilato      

  • 25.3 MÁS INFORMACIÓN - ADITIVAR UN MORTERO

    Aditivar un mortero


    En el pasado,
     Plinio y los recetarios del Siglo XVIII, prueban una infinidad de aditivos orgánicos con el deseo de mejorar las calidades de los morteros. Leche,  colas animales, huevo, azúcar, sangre, han sido entre otros los aditivos más comunes, para incrementar en ocasiones la adhesión, la hidrofobicidad o la velocidad de pegado.
    Hoy los  productos naturales han dejado el campo de los polímeros en dispersión acuosa (a menudo llamados “fermentos”), pero esta práctica tan común no encuentra muchos datos o investigaciones escritas: poquísimos son de hecho los estudios dedicados al análisis de las propiedades de estos compuestos, y para un estudio más profundo referimos el texto de Pecchioni, Fratini y Cantisani [1]. A menudo nos envía a recetas o valoraciones empíricas.  

    Una recientísima tesis de Laurea, desarrollada por Caterina Materassi (Relatores Mara Camaiti del CNR-ICVBC y Luca Rosi de la Universidad de Florencia), da datos útiles para tener un mejor conocimiento de los fenómenos en estudio. El estudio posee una fase preliminar de indagaciones químicas y mineralógicas llevadas a cabo sobre dos tipos de morteros presentes en los manufacturados provenientes del lugar arqueológico de Villa delle Paduline en Castiglion della Pescaia (GR). Se encuentran, dos tipologías, una seguramente original a base de cal aérea, y otra realizada en una restauración precedente, a base de cal hidráulica. Con el fin de valorar los efectos de los aditivos en nuevos morteros para insertar en los manufacturados, se han preparado en laboratorio morteros que reproducen los dos tipos encontrados en el sitio, así denominados:

           - “Original”
     constituida por grasa de cal e inerte (70% arcilla pesto + 30% arena de granulometría alrededor de 100 μm) en relación 1:1
           - “Restaurado” constituida de cal Lafarge e inerte (10% arcilla pesto + 70% arena de granulometría alrededor de 200 μm, + 20% polvo de mármol, siempre de granulometría alrededor de 200 μm) en relación 1:3.

    Con y sin la adicción del  3% de seco de dos aditivos comúnmente usados en el sector: Acril 33 y Peoval 33.    

      
                 Acril 33 y el látex acrílico más usado en Italia, habiendo sustituido al Primal AC-33. Se caracteriza por una buena resistencia a los álcalis, al envejecimiento, a las radiaciones ultravioletas. Como todos los látex acrílicos tiende progresivamente a reticular perdiendo reversibilidad. Tiene un residuo seco del 46%.
                 Peoval 33 es una dispersión acuosa de un copolímero del éster del ácido versatico con acetato de vinilo, con óptimas características de resistencia y estabilidad, con un residuo seco del 42%, aunque con una viscosidad superior al Acril 33. Se distingue de los otros látex por su elevada elasticidad (Alargamiento a rotura del 450%).    

     Además de valoraciones de las propiedades macroscópicas (facilidad de mezcla, de textura en los estampados, retiro), se han realizado pruebas colorimétricas, ha sido evaluada la velocidad de carbonatación, y finalmente, después de 28 días de estacionamiento, se ha determinado la resistencia mecánica a través de preparación.  

    Resultados

    Se observa una mejor fluidez de los morteros aditivadas. No hay significativas variaciones de color, si no en la malta “original”, que con el  Peoval permanece ligeramente más oscura.
    La velocidad de carbonatación de las zonas internas del mortero“original” aditivado resulta casual según las zonas del ejemplo, mientras es homogéneo para el “original” no aditivado, y para todos los morteros “restaurados”. Para explicar este fenómeno es necesario recordar que mientras el mortero “original”, a base de cal aérea, progresa con el paso de  CO2 hacia el interior, esto no es el fenómeno que regula el endurecimiento el mortero a base de  cal Lafarge, que es hidráulica. Las medidas de drilling nos indican que de cualquier manera el  Peoval da una mayor resistencia mecánica a la malta, mientras el Acril lleva a un refuerzo de la malta “original”, y a un debilitamiento de la malta “restauración”.    

    Fuerza media (1-10mm) en tres agujeros

    Mortero “original” no aditivado

    12,80 ± 2,04

    Mortero “original” + Acril 33

    24,01 ± 2,34 

    Mortero “original” + Peoval 33

    61,44 ± 6,16

    Mortero “restauración” no aditivado

    10,64 ± 1,46

    Mortero “restauración” + Acril 33

    5,63 ± 0,60

    Mortero “restauración” + Peoval 33

    23,13 ± 0,43

             
    Conclusiones Estos polímeros aumentan la fluidez y la adhesión de todas las maltas que se han adjuntado. En el caso que se desee incrementar la resistencia mecánica de una malta el producto que se revela óptimo es el Peoval 33.    

    PRODUCTOS:

    ACRIL 33
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/46-acril-33

    PEOVAL 33
    Link: 
    https://shop-espana.ctseurope.com/96-peoval-33



    Bibliografía
    Pecchioni E., Fratini F., Cantisani E.; Le malte antiche e moderne tra tradizione e innovazione, Pàtron Editore, Bologna, 200

  • 24.2 NUEVOS PRODUCTOS - GAMBLIN CONSERVATION COLORS

    Conservación Gamblin Colores

    La operación del retoque pictórico ha sido objeto de profundas discusiones,  principalmente dirigidas al ámbito de la ética, a la relación entre el efecto óptico obtenido y la obra original, a la metodología ejecutiva y las relativas corrientes de pensamiento (retoque mimético, rasgados, punteos, selección y abstracción, …). No es de nuestra incumbencia intervenir en estas cuestiones, y recomendamos a los interesados los textos sagrados [1,2].
    Para aquello que nos incumbe, o bien, los materiales usados en esta operación, encontramos, sin embargo un vacío, por lo menos por lo que se refiere a un análisis científico sobre los aglutinantes. El interés suscitado por los estudios sobre los barnices, que ha sucedido en este último decenio también en el ambiente italiano, no ha encontrado en el frente de las investigaciones sobre los colores para el retoque.
    Quizás esto es debido a la difusión de los colores a barniz “Restauro Maimeri”, que han monopolizado los catálogos de todas las empresas distribuidoras de productos para la restauración, y que usan la gran mayoría de los restauradores italianos.
    De hecho, podemos resumir el mercado actual en cuatro líneas:
       - Colores al barniz a base de resina (goma almáciga de la isla de Chios) “Restauro Maimeri” (en su mayoría).
       - Colores al barniz a base de resina cetónica. - Preparaciones a base de resina mástique, a veces con adicción de bálsamo de Canada.
       - Preparaciones a base de Paraloid B-72 u otros aglutinantes/adhesivos sintéticos como el Berger Inpainting Medium (una ligera minoría).  

    Un problema inherente a los retoques que usan la resina mástique como pegamento es el progresivo amarilleamiento, asociado también a un aumento de polaridad, a causa del natural proceso de oxidación, ya ampliamente evidenciado también por los barnices a base de resinas naturales.


    En los países anglosajones, donde la investigación sobre los barnices sintéticos se ha desarrollado durante decenios, se han avanzado varias propuestas de tipologías de colores a barniz, que principalmente recalcan los materiales usados para los mismos barnices finales y de retoque. De hecho, una técnica muy usada (como se ha visto arriba, pero en menor medida, también en Italia, es aquella de dispersar pigmentos puros en soluciones de Paraloid B-72.

    Si estos colores a base de resinas sintéticas han resuelto el problema del amarilleamiento, análogamente a lo que sucede con los barnices, permanece una cierta preocupación debida a su polaridad. De hecho, ya en partida estas resinas tienen una cierta polaridad, que conlleva para su aplicación el uso de disolventes con fd alrededor de 92; además tal polaridad aumenta con su envejecimiento, con el resultado que en el futuro para su eliminación podrán ser necesarios disolventes muy polares, con fd inferior a 60. Una solución que promete se ha delineado después de los estudios, llevados a cabo principalmente por Renè De La Rie (National Gallery of Art, Washington), que ha evidenciado la estabilidad de algunas resinas de bajo peso molecular, la más famosa es la ya conocida Regalrez 1094 [3].
    Entre los diferentes materiales puestos a examen, ha mostrado también buenas propiedades una resina aldehídica, la Laropal A81, cuya ligera polaridad permite la mezcla con pigmentos en polvo.
    Si hacemos referencia a la polaridad es importante recordar que Laropal A81 no se une perfectamente en hidrocarburos completamente apolares como el ciclohexano puro (como hace el Regalrez), y que por debajo de los 15°C se puede separar. Por esto se procede a añadir pequeñas cantidades (5%) de algún disolvente más polar para obtener una perfecta solubilidad también en frío.
    Aplicada en un film sutil se ha expuesto al envejecimiento acelerado (3000 horas simulando la luz solar que pasa a través de un vidrio en una ventana, UV incluidos), y Laropal A81 conserva la capacidad de disolverse en una mezcla con el 90% de ciclohexano y solo el 10% de aromáticos [en correspondencia con la mezcla n°2 (fd 92), en la escala del test de Feller, que recordamos, va desde una polaridad mínima para solo el ciclohexano (fd 96), a una polaridad máxima para solo la acetona (fd 47)]. Para valorar en paralelo un producto ya usado tanto como aglutinante para pigmentos como para barniz, la resina cetónica Laropal K80 (hoy en día fuera de producción) después de un análogo envejecimiento resultaba eliminable solo con una mezcla mucho más polar (70% acetonas/30% tolueno, o sea entre las mezclas n°10 y n°11 del test de Feller, con fd 60 y 56 respectivamente).  

    No resulta por tanto sorprendente que el natural seguimiento de estos estudios haya sido el desarrollo de una nueva generación de colores de retoque, por parte de la firma Gamblin, basados inicialmente sobre una resina aldehídica experimental y después justo sobre la resina Laropal A81.
     Los resultados de esta experimentación se describen en el trabajo de Leonard, Whitten, de la Rie y Gamblin [4]. Iniciado en 1995, el estudio se centró sobre la solución de algunos puntos críticos:

    • - La determinación de la relación óptima resina/pigmento, del cual depende el poder cubriente;
    • - La puesta a punto de una óptima granulometria de los pigmentos;
    • - La mezcla de la resina y del pigmento en molinos apropiados, que lleva a una homogeneidad (de la que depende el resto), no se obtiene a través de la mezcla a mano;
    • - La selección de pigmentos sintéticos de alta estabilidad, que pudiesen sustituir los  “históricos” como el amarillo indiano o la alizarina carmesi que tienen una elevada fugacidad (por inciso, todos los pigmentos de Gamblin Conservation Colors tienen Lightfastness de Classe I, el máximo de la escala ASTM D-4302, que mide la estabilidad de los colorantes y de los pigmentos)


    Estos colores de retoque han sido sometidas a numerosas pruebas efectuadas por más de 25 restauradores estadounidenses [4,5], y posteriormente han sufrido algunas modificaciones, como aquella de las mezclas del disolvente, la reformulación en los vasitos de vidrio que sustituyeron los tubos, y por último, el progresivo añadido de pigmentos, de las 20 tintas iniciales se han conseguido actualmente 44. Desde aquel momento, con el nombre Gamblin Conservation Colors, han tenido una rápida difusión en los Estados Unidos, después en Gran Bretaña y en Francia, tanto que desde finales de  2002, CTS Francia empezó a distribuir la gama en el negocio de París.  

    CTS
     ya había incluido en su línea la resina Laropal A81, pero su difusión siempre se ha limitado a pocos “artesanos” que habían apreciado la calidad, y que procedían a su disolución en disolventes y a la sucesiva mezcla manual con pigmentos en polvo.
     Desde hoy todo el grupo CTS pone a disposición de sus clientes la gama completa de los “Gamblin Conservation Colors” contenidos en vasitos de vidrio de 15 ml. ¿Por qué el vidrio y no el clásico tubo? Considerada la baja polaridad de la resina aldehídica, los pigmentos tienden con el tiempo a separarse, y es por tanto necesario mezclar todo antes de proceder a la aplicación. Esto es naturalmente posible solo con vasitos, dotados de un tapón especial que bloquea la evaporación del disolvente. Este descubrimiento resuelve también el inconveniente, bien conocido por todos, del tubo que se ha cerrado mal, y el consiguiente secado del color en su interior.
    ¿Que disolvente utilizar para la aplicación? Esta respuesta es muy compleja, tanto porque las indicaciones dadas por Gamblin se refieren a disolventes comercializados solo en Estados Unidos, ya que la respuesta depende de la “mano” de cada restaurador. Como línea general se considera que se parte del color “fresco”, en su caja, pueden ser utilizados tanto disolventes hidrocarburos, como white spirit D40, esencia de petróleo, ligroína, como disolventes polares como alcohol isopropílico, acetonas, etíl lactado, mezclándolos para obtener diferentes niveles de volatilidad. Si se prefiere elegir una pastilla sobre la paleta es necesario añadir a los disolventes hidrocarburos un 25% de disolventes polares como aromáticos, acetonas o alcohol isopropílico.
    ¿Es posible hacer los colores más brillantes? Se aconseja utilizar una parte pequeña de Laropal A81, y añadirla poco a poco al color para que se consiga un mayor efecto brillante. 
    ¿Que barniz utilizar durante el retoque y como final? Todos los barnices de retoque en comercio pueden ser utilizables pulverizados, mientras que para la aplicación a pincel es necesario proceder muy delicadamente, considerando la mayor reversibilidad de Gamblin Conservation Colors también en disolventes a baja polaridad. Para el barnizado final se aconseja Regal Varnish Gloss o Mat, tanto a pincel como ha rociado.  

    PRODUCTO:

    GAMBLIN COLORES CONSERVACIÓN
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/435-gamblin-colores-conservacion-tarritos-de-cristal-de-15-ml


    Bibliografía
      

    1. Althofer H.; “La questione del ritocco pittorico”, Ed. Il Prato, Padova.
    2. Casazza O.; “Il restauro pittorico”, Ed Nardini, Firenze.
    3. de la Rie E.R.; Quillen Lomax S.; Palmer M.; Maines C.A. “An investigation of the photochemical stability of films of the urea-aldehyde resins Laropal A81 and Laropal A 101”; ICOM  Committee for Conservation (2002), Vol.II, 881-887.
    4.  Leonard M., Whitten J., Gamblin R., de la Rie E.R.; “Development of a new material for retouching”Tradition and Innovation: Advances in Conservation. Contributions to the Melbourne Congress, 10-14 October 2000, IIC, London 2000, pp.111-113.
    5. Dunkerton J. “Retouching with Gamblin Conservation colors” in Mixing and Matching, Ed. Archetype, London.
  • 24.3 MÁS INFORMACIÓN - A VECES VUELVEN….

    A veces vuelven….

    El redescubrimiento de los materiales tradicionales debe asociarse siempre a una valoración crítica de la documentación científica. Se corre de hecho el riesgo de enterrar materiales que estaban justamente relegados a la historia.
     Como ejemplo llevamos, en el campo de los consolidantes, la vuelta  al escenario de los ochocentescos silicatos alcalinos (de sodio y potasio), conocidos desde finales de 1825 con el nombre de water glass o vidrio líquido. Estos productos son seguramente atrayentes por tres razones:

    • - Su vehículo (el agua), que resuelve problemas de inflamabilidad y da parte al responsable de la seguridad.
    • - Su baja sensibilidad a las condiciones termo-higrométricas, que permite su uso incluso a temperaturas cercanas a cero grados, y en presencia de fuerte humedad.
    • - El coste contendido (que no trataremos en este boletín, limitándolo por los químicos a consideraciones exclusivamente técnicas).


    Sus propiedades de “pegado” hacen que, si se mezclan con pigmentos e inertes, decoren pinturas murales y revestimientos para exteriores por las óptimas prestaciones, y está en continua expansión sobre este segmento de mercado.
      

    ¿Pero como consolidantes?
    Hay, sobre todo, que preguntarse porque tantas empresas y restauradores se han dirigido desde los años 60 al silicato de etíl, no obstante el vehículo disolvente, la necesidad de respetar ciertas condiciones ambientales para obtener buenos resultados, la imposibilidad de aplicación sobre superficies bañadas, y el coste más alto...
    Podremos partir de la capacidad de penetración: el silicato de etilo se encuentra entre todos  los productos consolidantes como aquel que tiene la mayor capacidad de penetración, naturalmente si se compara a los polímeros, pero también a los sistemas inorgánicos como el bario, agua de cal y silicatos alcalinos, que por su viscosidad tienden a “vitrificar” las superficies. Los silicatos son sustancias fuertemente alcalinas, con pH entre 10 y 13, y su uso debe excluirse totalmente sobre pinturas murales.  

    Pero el punto central que nos permite comprender los silicatos alcalinos de sodio y potasio se hayan abandonado como consolidantes es por su reactividad química, y en particular sus bajos productos de reacción:
      
                                     
                                              Si(ONa)4
       +  4 H2O       Si(OH)4      +    4 NaOH

                                       silicato de sodio                                                 soda  
                                        
                                               Si(OK)4
       +  4 H2O        Si(OH)4     +     4 KOH

                                       silicato de potasio                                           potasa   

    Como se puede ver los subproductos de la reacción son hidróxidos de sodio (soda), e hidróxido de potasio (potasa), sustancias de doble cara. Estamos frente a bases fuertes, con pH 14, que son también sales fuertemente higroscópicas, con la potasa además delicuescente (o bien en presencia de humedad atmosférica la absorbe hasta licuarse). Con el tiempo la soda y la potasa reaccionan con el anhídrido carbónico para dar carbonatos de sodio y potasio, sales solubles siempre higroscópicas, pero menos alcalinas.
      
    La reacción de hidrólisis del silicato de etilo se produce, sin embargo así:  
                                                       Si(OEt)4    +    4 H2O        Si(OH)4    +    4 EtOH  

    Se obtiene después la formación de alcohol etílico que evapora rápidamente del ambiente de reacción. No es por tanto necesaria ninguna operación sucesiva a la aplicación del silicato de etilo, mientras si es absolutamente necesario enjuagar abundantemente con agua desmineralizada las áreas tratadas con los silicatos alcalinos, controlando el pH hasta obtener la neutralidad. Este procedimiento no garantiza la completa eliminación de la soda y de la potasa de dentro de la estructura porosa.  

    También si en los años se han hecho tentativas de mejorar las prestaciones de estos materiales, invitamos a los más curiosos a documentarse solicitando a los distribuidores una documentación científica1, antes de tomar una decisión (¡y estos deberían valer para todos los productos!). Arriesgamos de todas formas, después de años de consideraciones sobre la vil acción de las limpiezas con soda y potasa sobre las superficies, de hacer entrar los mismos productos desde la puerta de servicio.
          

    1.      
    Una vastísima literatura defiende sin embargo el uso del silicato de etil, y CTS pone a disposición la gran bibliografía relativa al silicato de etil, Estel 1000.
      

  • 23.1 MÁS IMPORTANCIA - NMP ADIÓS!

    NMP adiós!  

    Las continuas actualizaciones de las normativas europeas sobre la seguridad y el etiquetado nos obligan a veces a eliminar productos considerados hasta hace poco tiempo de baja toxicidad.
    Cuando hace años se proponían como alternativas a la tóxica Dimetilformamida (DMF) los desconocidos Dimetilsulfóxido (DMSO) y N-Metil-Pirrolidona (NMP), el mundo de la restauración inició lentamente una operación de sustitución, que todavía hoy no puede decirse que haya terminado. La DMF tiene de hecho todavía su ámbito de “seguidores”.
    Personalmente siempre he visto con simpatía el DMSO: a pesar del olor, muchos eran los estudios clínicos que atestaban el bajísimo nivel de toxicidad.
    Quien quiera verificar las fuentes es suficiente que escriba sobre cualquier página de búsqueda las palabras “DMSO” y “dimethylsulphoxide” para obtener millones de referencias al uso como vector (o bien, disolvente de transporte, que se inyecta), para farmacias antitumorales.
    No me convencía del todo la reducción de toxicidad del N-Metil-Pirrolidona, que había sido clasificado como solo Irritante (Xi), con frases de riesgo R36/38 “Irritante para los ojos y la piel”. Y también era nota inicial contraindicación relativa al feto toxicidad, referida ya en 1997 por Paolo Cremonesi.  

    No obstante esto, dada su eficiencia al inflar o solubilizar resinas y barnices, se habían multiplicado las fórmulas de desbarnizadores que contenían N-Metil-Pirrolidona.
      

    La última adecuación (30°) de la Comunidad Europea reclasifica el  N-Metil-Pirrolidona como Toxico (T), con el añadido de la frase de riesgo R61 “Puede dañar al feto”, representan por ello el problema de la feto toxicidad.
      

    Este “retroceso” debería forzarnos a reducir el uso de este material, adoptando todos las posibles herramientas para reducir la inhalación, y sobre todo el contacto. De hecho, dada su baja volatilidad, el riesgo principal es el debido a la absorción cutánea: una gota de NMP caída sobre la piel, antes de poder completamente evaporar, penetra y se absorbe por el organismo.
    Esta nota no debe hacer que teman a los que hasta ahora han usado este disolvente. Recordamos sobre todo para lo que ha sido introducido: sustituir la Dimetilformamida (afectuosamente llamada “dimetil”), esta si es una “bestia mala”. De hecho la DMF, además de ser seguramente feto toxica, puede hidrolizarse formando dietilamina, potencialmente cancerígena y altamente volátil.
    Por tanto, podemos agradecer a NMP por los servicios prestados, y dejar la última botella en nuestro armario, en la balda,  “usar en casos extremos”……    

    BIBLIOGRAFÍA:

    Cremonesi Paolo, “Materiali e metodi per la pulitura di opere policrome” Manuale tecnico Phase (1997), p.59.
    Cremonesi Paolo, “L’uso dei solventi organici nella pulitura di opere policrome” Il Prato (2000), p.36. 

  • 23.2 MÁS INFORMACIÓN - LA BALSITE MULTIFORME

    La Balsite multiforme

    Hace algunos años que CTS, al lado de los clásicos estucados para madera, propone un estucado epoxídico bicomponente denominado Balsite, cuyas características fundamentales son la extrema ligereza, una cierta elasticidad, la baja tenacidad y la fácil reversibilidad. Estas características están estrechamente unidas a la particular estructura de microesferas, bien evidenciadas en la foto (ver imagen 1) (realizada en los laboratorio R&C Lab).   

    Dos estudios recientes han examinado varias de sus propiedades, con particular posibilidad de fluidificarla, y así aplicarla a través de inyección.
     Este uso puede resultar utilísimo para consolidar manufacturados (soportes, obras…) particularmente degradados después de ataques de insectos xilófagos o por efecto de ataques microbiológicos. De hecho, pueden presentarse a veces casos extremos donde gran parte del soporte de madera se encuentra en condiciones de degradación tal que no resulta funcional y se hace necesario su sustitución con un nuevo soporte. Con las mesas de madera se procede al transporte del color, intervención siempre arriesgada y que necesita, además una gran capacidad operativa, incluso un estudio atento de la nueva mesa sobre la que se efectúa el transporte, dado que en el pasado, dichas mesas han causado, con su movimiento de asentamiento, daños al estrato pictórico.   

    En el primer estudio, desarrollado por Ciocchetti y Munzi para sus tesis de diploma en el Instituto Central de Restauración, y publicado en el  Boletín n°15 ICR [1], se ha centrado la atención sobre el uso de Balsite para un fin bien preciso: realizar copias de manufacturados artísticos colándola en estampas de resinas siliconicas. Son resultados que evidencian algunos puntos fuertes, como la capacidad de adaptarse a los movimientos de la madera en condiciones de inestabilidad termo higrométrico, y la posibilidad de poder efectuar reintegraciones de las superficies con acuarelas o colores a barniz, previo un ligero lijado de la superficie.
     Ha sido también destacado el defecto del material: la resina tiende con el tiempo a separarse de los inertes, depositándose en el fondo del recipiente,  por este fenómeno se hace necesaria una fase de “pre-mezcla” para rehomogenizar las dos fases.   

    En el segundo estudio [2], preparado por la restauradora Michela Fasce, se habla de una metodología aplicativa del Balsite basada sobre el uso de la mesa a baja presión, análogamente al procedimiento utilizado para la aplicación de consolidantes en solución: a veces en objeto de material plástico, como un film poliéster, se aplica en un vacío removiendo así parcialmente el aire de las lagunas (en nuestro caso galerías de xilófagos). Después se procede a la inyección del fluido a través de jeringuillas, perforando después el mismo film poliéster.
     El consolidante “desaparece” en los espacios vacíos, y la penetración y funciones de varios parámetros entre las cuales la viscosidad del fluido, la presión ejercitada y la tipología del material. 

    Los resultados confirman que la Balsite puede utilizarse previa a la fluidificación con disolventes. La presión que se debe usar está en función del espesor del soporte; de hecho se obtiene resultados óptimos con una presión baja en manufacturados sutiles, mientras la presión aumenta para añadir las galerías más internas cuando se tienen espesores importantes, teniendo la precaución de controlar siempre la película para no provocar una profundidad en la misma. Se observa como las partes tratadas con las dos presiones diferentes, bien usando la misma mezcla o bien con el mismo porcentaje de disolvente, presentan una diferente disposición de la resina dentro de las galerías. Las partes tratadas con la presión a 120Pa muestran todas las galerías cerradas hasta la base inferior del módulo, mientras las tratadas a 60Pa presentan la Balsite solo en las zonas superiores. En lo que refiere a los disolventes se ha notado que el alcohol etílico, evaporando muy velozmente, puede ser usado tranquilamente para espesores de madera sutiles (menores de 1 cm); este el procedimiento adoptado para la consolidación de una mesa pintada de finales de 1800, de espesor de aproximadamente 0,5 cm, que presentaba agujeros en las galerías por insectos xilófagos. La mesa ha estado bajo un ligero vacío (presión ejercitada por 60 Pa), porque con una presión mayor se corría el riesgo del aplastamiento de la mesa. La Balsite ocupa completamente las galerías. Y en las zonas donde resulta visible, el rellenado se nota a nivel táctil y el color no presenta más agujeros. 
    Para espesores mayores (donde por efecto del vacío el alcohol etílico puede separarse de la mezcla, llevando a un aumento de viscosidad y consiguiente bloqueo de la Balsite, que no consigue después rellenar totalmente la galería), conviene sin embargo usar la esencia de petróleo cuyo menor tiempo de evaporación respecto al alcohol permite un mayor nivel de penetración.   

                                                                                                                     §§§§§§§§§  

    Aunque la Balsite presentaba una buena reversibilidad, esta se puede mejorar con la aplicación de una capa de intervención que reduzca la penetración de parte del pegamento del estuco dentro de la fibra de la madera. De hecho, unido al mecanismo de la adhesión más o menos profunda entre el pegamento del estucado y el sustrato de madera. Una excesiva penetración puede hacer el estucado menos reversible, y es por esto que se puede reducir la adhesión saturando la porosidad con un material reversible, como el Paraloid B-72 o el Klucel G, para así facilitar las operaciones de despegado del estuco. 
    Un producto de este tipo puede tener en ocasiones también un pequeño efecto consolidante, y esto hace que el área adyacente a la interfase resulte más resistente a las tensiones. 
    Por lo que respecta al campo de la  doradura a guazzo, la superficie de las reconstrucciones resulta porosa, después de una ligera aplicación, por lo que se recomienda aplicar yeso, bol y finalmente dorar. Los estucados realizados de esta manera, no son sensibles al agua.   

    Describimos tres casos de uso que parecen particularmente interesantes:   

    Estucado de estatuas de madera fisuradas [3]_ 
    La intervención ha estado conducida por la restauradora Gigliola Patrizi sobre tres obras de madera del siglo XVII-XVIII: una escultura con grupo de la Inmaculada, en madera esculpida dorada y pintada, y una pareja de columnas talladas y doradas, provenientes de Sud-America, presumiblemente de un área española. Las esculturas, muy degradadas, se han consolidado tanto a nivel de la película pictórica como del soporte que lo sujetaba con Regalrez 1126, disuelto al 10% en white spirit (formula hoy disponible con el 25% de Regalrez 1126, con el nombre Rexil). 
    Para el estucado de mayor entidad y donde ha sido necesario colmar una importante laguna de una de las dos columnas se ha usado Balsite, elegida porque unía una resistencia mecánica no elevada y una cierta elasticidad. Lo que permite la adaptación a las tensiones que pueden crearse en el objeto, evitando así la formación de nuevas fisuras. 
    La Balsite ha sido aplicada tal cual, inyectándola en las fisuras después de su fluidificación con el añadido del  5% de alcohol etílico.   

    Reintegración plástica de una escultura de madera [4]_
     Una compleja escultura barroca presentaba en las partes inferiores un defecto que originariamente mostraba indecorosamente las partes al observador. El chiquillo había sido castigado por su exhibicionismo con la mutilación de la cabeza y de las articulaciones, y sé disimulo bajo estratos de color y cartapesta, hasta transformarlo en nube. Después se había realizado una copa, un poco más púdica, en cartapesta, que lo había sustituido.
     La intervención ha llevado a la eliminación del falso pequeño ángel, de la cartapesta y de los retoques reparadores. Las partes que faltaban han sido reconstruidas en arcilla sobre la base de la copia en cartapesta. Ha sido efectuado un calco con silicona, y el  positivo se  realizó en Balsite, justamente por sus propiedades de toma del detalle, ligereza y facilidad de integración pictórica.   

    Creación de un estrato de interposición entre una estructura metálica y una terracota policroma [5]_ 
    Este tipo de intervención se diferencia de los que hemos descrito hasta ahora, y aprovecha las propiedades elásticas del producto. Una estatua en terracota, representando una Madonna con un niño, proveniente de la iglesia de San Francesco en Citerna (Arezzo), se reconstruyó después de los graves daños sufridos en un terremoto.
     
    Dentro se insertó una estructura de acero inox., regulable y desmontable, que tiene funciones de ayuda y apoyo. La parte superior del esqueleto en acero se englobó en una forma de Balsite, sobre la que se apoya la escultura. La forma se ha obtenido  mediante un molde realizado en silicona, de la parte superior interna del busto, que se corresponde a la zona entre la nuca y la espalda, de forma que se adhiere perfectamente a la superficie. Esta especie de cuna asume la función de sostén para la obra que, de esta forma, descarga todo  su peso sobre el cuerpo central de la estructura sin incidir ni en la nuca, ni en la superficie de contacto entre las piernas y el busto. Además, se ha realizado una forma de  Balsite que colma una amplia laguna, y que está enganchada a la estructura a través de un imán. Este injerto es por tanto movible sin ejercitar esfuerzos mecánicos, y permite el acceso al esqueleto interno.   

    Recientemente la Balsite ha sido usada para la reintegración de las lagunas de  Politico de Palma il Vecchio de Peghera, restauración efectuada en el Opificio delle Pietre Dure [6], sobre mesas del  “Trittico di Benedetto Portinari”, de Hans Memling, ahora a los Uffizi [7], y del techo de madera tallado y policromado de la Iglesia de Santa Maria degli Angeli en Caccamo (PA), del siglo XV  [8]. Finalmente, para la consolidación y la reconstrucción de pequeños fragmentos de un crucifijo de Francesco da Sangallo [9].
       

    PRODUCTO:

    PIGMENTOS PUROS CTS PARA ARTISTAS
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/79-balsite-w-k-producto-bicomponente


    Bibliografia:

    1. Ciocchetti C., Munzi C.; “La Balsita: un nuovo materiale per il risanamento dei supporti lignei e per la realizzazione di parti mancanti” Bollettino ICR n.15, Luglio Dicembre 2007.
    2. Fasce M., Borgioli L.;“metodología di iniezione di stucchi in opere lignee policrome”, Atti del Congresso “Lo stato dell’arte 7”, Napoli, 8-10 Ottobre 2009
    3. Patrizi M.G., Ridolfi S., Carocci I., Borgioli L.; “Tre sculture lignee dorate e policrome: indagini diagnostiche non distruttive ed utilizzo di metodologie e prodotti innovativi a minor impatto ambientale nel rispetto dell’opera, dell’operatore e dell’ambiente”, Atti del Congresso “Lo stato dell’arte 7”, Napoli, 8-10 Ottobre 2009. 4.      Cassiano A., Minerva B., Guarini I., Martignano G.; “Il San Giovanni Evangelista del Monastero delle Benedettine di Lecce: un caso di reintegrazione plastica di una scultura lignea policroma”, Atti del Congresso “Lo stato dell’arte 7”, Napoli, 8-10 Ottobre 2009 5.      Shirin Afra “Una madonna con bambino dalla chiesa di S.Francesco a Citerna” Tesi di diploma Opificio delle Pietre Dure, 2007. 6.      Castelli C., Cianfanelli M., Ciatti M., Daffra E., Innocenti F., Lallai C., Lanterna G, Moioli P., Parri M., Ramat A., Santacesaria A., Seccaroni G.; “Il restauro Polittico di Palma il Vecchio di Peghera”, OPD Restauro 21 (2009). 7.      Buda R., Dori A., Dori L.; “Gli sportelli del Trittico di Benedetto Portinari”, Kermes n°72, 2009 8.      Sebastianelli M., Palla F., Mancuso F.P., Rizzo G., Megna B., Di Natale M.C.; “Un soffitto ligneo intagliato e miniato del XV sec. in Sicilia. Studio ed indagini diagnostiche”, Atti del XX Congresso “Scienza e Beni Culturali”, Bressanone, 2009 Teodori B., Fulimeni A, Fioravanti M., Spampinato M.; “Il Crocifisso di Francesco da Sangallo dell’Ospedale di Santa Maria Nuova a Firenze”, Kermes 76, Ottobre-Dicem

  • 23.3 QUIMICA E INVESTIGACIÓN - LA PERCEPCIÓN DEL COLOR

    La percepción del color

    El fenómeno del color nace de la interacción entre luz y materia: deriva de la capacidad de un material de transmitir, reflectar, difundir, absorber las diferentes radiaciones luminosas que lo rodean. La luz solar, como es sabido, puede descomponerse según la longitud de onda: el conjunto de todas las posibles frecuencias de emisión se llama espectro electromagnético. El ojo humano es sensible solo a una pequeña parte de este espectro, de los 400 nm a los 700 nm, dentro del cual podemos distinguir los colores (ver imagen nº1).

    La suma de todos los colores visibles hace que la luz parezca blanca (síntesis aditiva). Para ver los colores de una luz blanca se necesita que intervengan fenómenos de refracción, como en el caso del arco iris o de las plumas de los pájaros, o bien que un objeto absorba selectivamente determinadas longitudes de onda. En este último caso, el color resultante será aquel que no se absorbe por el material del cual está compuesto el objeto. Por ejemplo, las hojas aparecen verdes, ya que la clorofila absorbe todas las radiaciones del espectro visible excepto el verde (ver imagen nº2).

    Cuando un objeto, golpeado por un rayo de luz visible, absorbe todos los componentes  parece negro, si no absorbe ninguna aparecerá del mismo color del rayo incidente (blanco, en vez de azul o verde).

     El color de un objeto varía sensiblemente, incluso según los factores extrínsecos, como por ejemplo:
    ·        Calidad de la luz: y la propiedad determinada del espectro de radiaciones emitidas por una fuente luminosa. La lámpara a luz natural a LED High CRI mod. Art Lux 100L, por ejemplo, permiten reproducir un espectro lo más similar posible al solar, y permiten una visión extremadamente realista del color de los objetos iluminados.
    ·        Escabrosidad de la superficie: si la superficie se presenta rugosa el color resultará más claro y blanquecino por los efectos de la difusión de la luz. Cuando se anulan las asperezas superficiales (por ejemplo, barnizando una superficie) el color se “satura”, resultando más oscuro e intenso.
    ·        Codificación de las imágenes: esto es un dato importante para los colores vistos a través de la pantalla de un ordenador o de las cámaras digitales, que difícilmente respetan el color “real”. La misma observación se puede hacer para el papel impreso.

    Además de estos factores, es necesario tener en consideración que la sensibilidad a los diferentes colores no es universal: sí hubiésemos observar a diferentes individuos el mismo objeto coloreado, en las mismas condiciones de luz, en el mismo instante, la sensación del color por parte de cada sujeto sería diferente. Se puede decir que el color, como nosotros lo entendemos, es la percepción visible generada por las señales nerviosas que los fotorreceptores de la retina envían al cerebro cuando absorben radiaciones electromagnéticas de determinadas longitudes de onda e intensidad. ¿Como se puede definir entonces con precisión un determinado color? Los primeros intentos los hizo Isaac Newton, que reconocía la doble naturaleza de la luz (electromagnética y corpuscular) y la posibilidad de descomponer las diferentes radiaciones por medio de un prisma. Los colores, descompuestos y clasificados, se insertaban en una porción circular de espacio, manteniendo cuenta de tres parámetros fundamentales: tonalidad (rojo, verde, amarillo, etc.), saturación (vivo, encendido, pálido, apagado, etc.) y contraste/luminosidad (claro u oscuro).

    La esquematización del color según Newton (foto de al lado) fue el primer tentativo científico de dar una colocación espacial unívoca al color. De la rueda del color newtoniana, se ha unido a la definición de un standard que define los colores de manera univoca en 1931, cuando un organismo conocido como CIE (Commission Internationale de l'Éclairage) fijó valores numéricos (coordenados), cuantificando las respuestas de un ojo humano con características “standard” a diversas longitudes de onda de luz.    

    En esta porción de espacio bidimensional a forma de “vela”, (ver imagen nº4), no puede visualizarse un parámetro fundamental: la luminosidad. De hecho, muchos colores, como por ejemplo el marrón, existen solo en un espacio tridimensional, no fácilmente esquematizable, que tiene en cuenta también la posición larga de un haz (del blanco al negro). Un esquema que hace visible la posición de los colores en un espacio tridimensional ha sido propuesto por Munsell.

    Siguiendo el esquema de Munsell (ver imagen nº5), el espacio CIE se modifica en CIEL*a*b*, el cual es uno de los modelos matemáticos todavía hoy mas usados para la reproducción de los colores: L* define el brillo o luminosidad, a* indica el valor comprendido entre rojo (positivo) y verde (negativo), b* indica el valor entre amarillo (positivo) y azul (negativo). Con este sistema, el color de coordenadas L*= 34, a*= 60, b*= 39, corresponde a un preciso y univoco color rojo. La disciplina que se ocupa de la standarización de los colores se llama colorimetría y el instrumento que permite medir el color se llama colorímetro.

    En el sector de la restauración, el color ocupa un puesto muy importante y cuando se habla de color, en general, se habla de pigmentos. De hecho, poder definir de manera univoca el color de un pigmento permite  “comprender” en un cierto sentido cuál es la tonalidad del pigmento mismo. Hacemos un razonamiento práctico: sabemos que el espacio  CIEL*a*b* se articula a lo largo de tres haces que indican la luminosidad L (haz z), las variaciones entre colores opuestos verde-rojo (a) y azul-amarillo (b).

    El parámetro L varía de 0 (ausencia completa de luminosidad) a 100 (máxima luminosidad)(ver imagen nº6). El parámetro “a”, cuando es positivo, indica un cambio de la tonalidad hacia el  rojo, mientras un valor negativo indica el cambio hacia el verde. El parámetro “b”, si es positivo, indica un cambio hacia el  amarillo, mientras un valor negativo indica el cambio hacia el azul. A la luz de estas consideraciones, el color rojo citado anteriormente con parámetros L*= 34, a*= 60, b*= 39 podría ser descrito como un rojo medio, con bajos tonos amarillo-naranja. En algunas recientes tesis de licenciatura del curso de Scienze e Tecnologie Chimiche per la Conservazione ed il Restauro de Ca' Foscari, los estudiantes han analizado los pigmentos puros CTS, dando unas informaciones, de las que daremos unas breves pinceladas sobre el argumento específico. En los trabajos, de los que describimos el título en bibliografía, han sido extrapolados los parámetros colorimétricos de todos los pigmentos CTS, que describimos a continuación. Queremos aprovechar también la ocasión para agradecer, además de a los estudiantes, a los profesores Renzo Ganzerla y Emilio Francesco Orsega por los óptimos resultados publicados en las tesis.  

    PIGMENTO

    L*

    a*

    b*

    Blanco de Titanio 0241

    80,32

    -0,17

    -0,67

    Blanco de Zinc 0240

    89,58

    -0,19

    2,8

    Marrón de Cassel 0260

    22,88

    3,49

    5,79

    Morellone 0343

    26,47

    9,02

    7,07

    Tierra Sombra Ciprés quemada 0272

    21,95

    7,21

    13,05

    Tierra Sombra quemada 0261

    39,21

    13,84

    23,11

    Tierra Verde 0264

    58,03

    -9,83

    13,05

    Tierra Verde Nicosia 0282

    61,63

    -13,21

    2,23

    Verde Cal 0286

    56,2

    -41,98

    24,23

    Verde Oxido Cromo 0559

    43,48

    -13,58

    14,01

    Verde Esmeralda 0557

    53,89

    -28,24

    2,52

    Amarillo Cadmio Claro 0550

    85,61

    -11,23

    75,37

    Amarillo Cadmio Oscuro 0551

    77,49

    9,24

    95,19

    Amarillo Óxido 0325

    61

    13,05

    45,07

    Amarillo Ocre 0324

    67,8

    12,7

    49,04

    Tierra Amarilla0269

    64,61

    11,58

    46,02

    Ocre Habana 0275

    51,99

    9,33

    30,82

    Ocher Dunkel 0276

    53,9

    14,48

    31,72

    Tierra Siena natural 0263

    51,74

    13,68

    37,39

    Tierra Sombra ciprés natural 0274

    32,64

    9

    24,07

    Tierra Sombra natural 0266

    35,13

    4,21

    14,01

    Negro Avorio 0597

    12,56

    0,54

    2,45

    Negro Roma 0268

    27

    1,14

    4,69

    Negro Vite 0321

    18,89

    0,69

    2,55

    Negro fumo 0341

    9,98

    -0,45

    -0,49

    Azul Cerúleo 0602

    41,48

    -23,19

    -28,48

    Azul Cobalto 0558

    52,02

    4,58

    -42,25

    Azul Herculano 0303

    53,16

    -20,66

    -31,74

    Azul Oltremar 0561

    35,52

    18,91

    -53,84

    Azul de Prusia 0340

    4,69

    9,95

    -21,82

    Violeta Oltremar 0560

    50,3

    18,88

    -28,73

    Rojo Cadmio Claro 0554

    48,89

    57,98

    46,95

    Rojo Cadmio Medeo 0553

    41,9

    55,14

    37,47

    Rojo Cadmio Oscuro 0555

    34,49

    43,1

    23,49

    Rojo Lacado oscuro 0308

    43,25

    47,46

    13,05

    Rojo Lacado claro 0307

    49,72

    56,05

    30,97

    Rojo Cinabrio 0604

    42,94

    55,42

    26,94

    Rojo Herculano 0316

    41,46

    36,4

    36,32

    Rojo Pozzuoli 0318

    41,72

    31,66

    33,15

    Rojo Veneto 0315

    36,04

    20,81

    22,65

    Tierra Rosa 0270

    33,99

    21,52

    24,24

    Tierra Siena Quemada 0262

    38,6

    23,55

    31,71 

    b 23-3_2.png

    PRODUCTO:

    PIGMENTOS PUROS CTS PARA ARTISTAS
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/437-pigmentos-puros-cts-para-artistas



    Bibliografía

    ·        Ball Philip, Colore una biografia, BUR saggi , febbraio 2004;  

    Tesi de laurea del Corso de laurea in Scienze e Tecnologie Chimiche per la Conservazione e il Restauro, depositate presso l'Università Ca' Foscari de Venezia - Relatore prof. Ganzerla Renzo, Correlatore prof. Orsega Emilio Francesco:
    ·        Ambrosi Alberto, Pigmenti sintetici moderni e terre naturali de colore Amarillo: uno studeo sulle caratterisitche chimiche, fisiche e colorimetriche  (aa 2007/2008).
    ·        Maccagnola Sonia, Pigmenti moderni Azul e neri: studeo e caratterizzazione attraverso indagini chimiche e fisiche (aa 2007/2008).
    ·        Melotti Elena, Studeo e caratterizzazione medeante analisi chimico-fisica de pigmenti moderni: verde, bianchi e bruni (aa 2007/2008).
    ·        Pontoglio Enrico, Pigmenti sintetici e terre naturali de colore Rojo: uno studeo sulle caratteristiche chimiche, fisiche e colorimetriche.

  • 22.1 NUEVOS PRODUCTOS - TECNOLOGÍA LED: EL FUTURO DE LA ILUMINACIÓN

    Tecnología LED: el futuro de la iluminación

    ¿Qué quiere decir LED?

    Es el acrónimo de “Light Emitting Diode”, o bien “diodo que emite luz”, un dispositivo que explota las propiedades ópticas de algunos materiales semiconductores para producir  fotones, un fenómeno llamado electroluminiscencia. Los fotones no se producen por calentamiento de un material, como sucede en los neones (donde se calienta un gas) o en las clásicas lámparas de incandescencia (donde es el filamento de tungsteno el que alcanza elevadas temperaturas). Otra de las propiedades de los LED, que los diferencia de los otros sistemas de producción de la luz, es la de poder emitir flashes de luz a frecuencias muy altas, superiores al Mhz. El tiempo de encendido es típicamente de 200 ns (nanosegundos, o bien billonésimas de segundo)  

    ¿Qué es un LED?

    Un LED es un diodo constituido por una adicción de semiconductor (silicio) oportunamente estimulado, que emite fotones (por lo tanto luz) cuando es atravesado por una corriente. La calidad del semiconductor es uno de los factores que determinan la eficiencia de los LED. Los primeros LED estaban disponibles solo en color rojo, e inmediatamente después salieron en color amarillo y verde. Dado que tenían un bajo nivel de emisión, se usaron exclusivamente como luces-espía. Con la realización de LED en luz azul fue posible realizar dispositivos que, integrando tres LED (uno rojo, uno verde y uno azul), podían generar cualquier color. El sucesivo desarrollo de la tecnología ha llevado al uso como verdaderos iluminadores.  
    En el esquema podemos ver como el semiconductor estimulado se monta sobre un chip, y que dos hilos de oro permiten pasar la corriente. Los fotones emitidos  por el semiconductor van a excitar un estrato de fósforo depositado sobre la superficie. De la tipología y de la calidad del fósforo depende el color de salida y la calidad de la luz. Una lente de plástico tiene la misión de multiplicar el efecto y de direccionarlo. Es fácilmente intuible que la luz de salida es direccional (tiene un cono de aprox. 120° de apertura), a diferencia de una lámpara clásica, cuya luz se difunde a 360°. En las lámparas clásicas, por tanto, la parte de la luz se dispersa en el ambiente, incluso con algunas soluciones (espejos, superficies metalizadas), puede ser en parte recuperada. En los iluminadores a LED es posible, con oportunas lentes, restringir el cono por debajo de los 10°, y por tanto concentrar la luminosidad aun área bien precisa.     

    ¿Por qué usar la tecnología LED?

    La tecnología LED se propone sobre todo en el sector de la restauración por la CALIDAD de la luz. Hay sin embargo otras ventajas (que por ejemplo han sido explotadas para la retro iluminación del display de los televisores LCD o en los teléfonos celulares de última generación), como:

    •        Bajísimo consumo energético
    •        Seguridad debida al bajísimo voltaje
    •        Larguísimo tiempo de vida (hasta 100.000 horas para el LED de alta calidad = 11 años de uso continuo), y por tanto reducida manutención (un ahorro indirecto).
    •        Pequeñas dimensiones y ligereza.
    •        Alta eficiencia luminosa respecto a las lámparas de incandescencia y alógenas.
    •        Bajo impacto ambiental (nada de mercurio).
    •        Amplio rango de temperatura de funcionamiento (desde -40C a + 90°C).

    Los puntos de fuerza que interesan a nuestro sector, además de la calidad que analizaremos más abajo, son:
    •        Ausencia de radiaciones UV (no se estancan los ojos y no se degradan los estratos pictóricos).
    •        Ausencia de radiaciones IR (no se calientan las superficies iluminadas).
    •        Resistencia a shock y vibraciones (debida a la ausencia de filamentos incandescentes).


    Para comprender la diversa calidad de la luz emitida por el LED es necesario introducir algunos términos técnicos, el principal es el CRI, o sea el Índice de Rendimiento Cromática.


    Los objetos que no emiten luz propia se presentan de un cierto color porque absorben parte de las radiaciones luminosas que reciben, y reflejan el resto, que es lo que define el color. Las fuentes de luz artificial no emiten todas las longitudes de onda visibles. Para medir su capacidad de acercarse al nivel óptimo, correspondiente a una emisión completa sobre todas las longitudes de onda, como aquella de la luz solar, se usa el CRI, que es un índice que va desde 0 a 100. Los LED pueden ir desde 65 a 95, sobre la nueva escala basada en 15 bandas, ó longitudes de onda (la antigua preveía solo 8).


    Otros términos útiles son:
    Flujo luminoso.- Se entiende la cantidad de luz que se emite desde una fuente luminosa en un segundo y se mide en lumen (lm).
    Iluminación.- Se define como la cantidad de luz (por tanto el flujo) que golpea una superficie, y se mide en lumen/m2. La unidad de medida de la iluminación es el lux, definido como 1 lumen sobre 1 m2. Para dar una idea de las dimensiones de esta unidad de medida, la tierra en una noche de luna llena está iluminada por 1 lux.
    Eficiencia luminosa.-  Es la relación entre el flujo luminoso y la potencia eléctrica absorbida. Se mide en lumen/Watt (lm/W). Es necesario tenerlo presente en la lección de una lámpara, porque las fuentes luminosas diferentes, pueden absorber la misma potencia, pero para emitir un flujo diferente, necesitan una cantidad de energía diferente. Los LED tienen una eficiencia luminosa hasta los 100 lm/W. Como término de parangón basta pensar que una lámpara de incandescencia tiene una eficiencia luminosa máxima de 15 lm/W, una lámpara alógena de 25 lm/W y una fluorescente linear típicamente 70 lm/W.
    Temperatura de color.- Con este término se cuantifica la tonalidad de la luz. Cada fuente luminosa tiene una temperatura de color que se mide en kelvin (k). Cuanto más baja es la temperatura, la luz que percibe el ojo humano es de tonalidad más cálida: si la temperatura sube, nos acercamos a tonalidades frías. Por ejemplo, una lámpara de incandescencia desde 100W tiene una temperatura de 2.900k ; una lámpara de 40W toca los 2.650 k. Importante subrayar que mientras en una lámpara de incandescencia si se varía la intensidad, varía su temperatura de color, esto no sucede con el LED que mantiene constante su temperatura para todos los niveles de variación de la intensidad desde el 10% hasta el 100%. 

    High-CRI: el futuro del retoque
    De las múltiples ideas que pueden surgir al valorar las aplicaciones de las propiedades de los LED en el campo de los bienes culturales, la mejor aplicación es en el retoque pictórico, ya que podemos aplicar la explosiva prospectiva de las más recientes innovaciones en la tecnología LED: la puesta a punto de sistemas High-CRI.
    Para comprender la potencialidad en el campo de la restauración debemos recordar que los fotones emitidos por los semiconductores de los diodos van a excitar un estrato de fósforo depositado sobre la superficie. Estos fósforos de diferente tipología, oportunamente medidos, permiten obtener una emisión completa, en todas las zonas del espectro, y por lo tanto trabajar con un alto índice de restos cromáticos.
    Naturalmente la sobreexposición de muchos fósforos lleva a una reducción de la eficiencia, porque este material funciona en cierto sentido como filtro.
    La consecuencia es una reducción del flujo luminoso, pero como ventaja hay una mejor calidad: es sobre todo esto lo que nos interesa, dado que en las operaciones de retoque más complejas una luz no perfecta puede evidenciar la zona reintegrada en la fase de exposición.
    Como precedentemente se ha señalado, el CRI hasta hoy se calculaba midiendo la respuesta espectral de una fuente luminosa en ocho niveles de color. De esta forma, los fabricantes que querían declarar un alto nivel de CRI, se preocupaban de cubrir bien las longitudes de onda requeridas por la normativa incluso en detrimento de las otras. Estas lámparas, declaradas de esta forma  CRI 100, si se midieran aplicando las nuevas reglas de la nueva normativa que mide el rendimiento medio sobre 15 frecuencias (colores) no tendrían un CRI adecuado.

    Un ejemplo son las luces alógenas consideradas con CRI 100, pero que no permiten distinguir perfectamente un azul de un negro o de un marrón oscuro.

    Este gráfico evidencia como un led HCRI de luz fría 5000K° no obstante el pico de rendimiento en la zona del azul, sea de todas formas eficaces en toda la escala cromática del visible. Además se nota la ausencia de componentes ultravioletas (por debajo de 420 nm) y de infrarrojos (por encima de 700 nm)


    Esta potencialidad la intuyó el restaurador Daniele Piacenti, que ha integrado sus observaciones con una larga experiencia como fotógrafo. El estudio partió del caso de una problemática reintegración llevada a cabo en una tela de Matteo Rosselli que figura en San Giovanni Battista (colección privada). El problema era particularmente difícil: había un rasgón que atravesaba la cara en sentido horizontal, a nivel del labio superior, y que ocupaba también el cielo en azul claro, color que era particularmente sensible a pequeñas, pero determinantes variaciones cromáticas vistas a la luz al neón (5500°K), con la cual se ejecutaba el retoque, y el sol. Ha sido posible obtener un resultado óptimo usando una fuente de LED High Cri, que ha sido estudiada y desarrollada en colaboración con F&M Progetti Srl, empresa especializada en la aplicación de los LED a la iluminación, y C.T.S. Srl.

    Hoy es posible proponer en el mercado de las lámparas estudiadas para la restauración pictórica de alta calidad, que presentan todas las ventajas  de esta innovación tecnológica,  bajo consumo y de la seguridad para los operadores.


    Son las primeras de una nueva generación de cuerpos “iluminadores” destinados a revolucionar los laboratorios.
  • 22.2 MÁS INFORMACIÓN - ARMARIOS DE SEGURIDAD Y CERTIFICACIONES

    En 2004 entró en vigor la norma EN 14470-1, que regula la construcción de los armarios de seguridad para  productos inflamables. C.T.S. distribuye desde hace años los armarios certificados CHEMISAFE®  producidos por  Arredi Tecnici Casarin. Esta empresa, líder del sector, con producción propia de armarios CHEMISAFE®  está en posesión desde hace tiempo de todas las pruebas y los certificados para 2 tipologías: TYPE 90 y TYPE 30   Los constructores y los usuarios de esos artículos deben seguir esta normativa que establece fundamentalmente estos puntos:  

    • La clasificación se hace mediante  test al fuego que deberá demostrar la “resistencia” de los armarios por intervalos de tiempo de 15, 30, 60 hasta el máximo de 90 minutos. En base a la resistencia se denominan los armarios TYPE 15 … TYPE 90. La precedente referencia normativa DIN 12925-1 tenía solo dos resistencias al fuego: 20 y 90 minutos.
    • La clasificación indica un tiempo (15-30-60-90 minutos) dentro del cual el producto inflamable dentro del armario no constituirá un peligro para personas y cosas, permitiendo la evacuación de los locales y la intervención  en seguridad de los Bomberos.
    • Los armarios deben ser probados por un laboratorio acreditado y certificado por el Ministerio para pruebas al fuego, particularmente por tipologías y dimensiones. La prueba consiste en la práctica, en registrar mediante sondas la temperatura que se alcanzan las repisas cargadas con el máximo peso declarado por el fabricante. El armario, se coloca en un horno específico y se “quema”, registrando la temperatura alcanzada en el interior.
    • El cierre automático de las puertas con una fuerza no superior a 100 N dentro de un tiempo limite de 20 segundos (los armarios CHEMISAFE®  se certifican con una fuerza de 10N).
    • Las guarniciones termoexpandientes deben garantizar el sellado de los espacios entre la puerta y las paredes del armario en caso de aumento de temperatura, y debe controlarse que el funcionamiento sea efectivo.
    • Sucesivamente se valoran, según los puntos constructivos de la norma, y después de visualizar los test, se certifican los armarios.

      Los armarios CHEMISAFE®  se han desarrollado durante años con particulares modificaciones como las repisas regulables en altura y cierre a pedal con un dispositivo térmico automático, que se activa en el caso que la temperatura ambiente supere los 50 °C.  

    Todas estas novedades permiten prevenir los riesgos derivados de verdaderas y propias explosiones, que podrían verificarse en el caso de disolventes contenidos dentro de armarios de metal, o bien cohibentados pero no certificados: además a ciertas temperaturas, los disolventes vaporizan inmediatamente dando lugar a mezclas que, superada la temperatura de autoencendido, dan lugar a la deflagración. Cuando se habla de seguridad en los laboratorios es necesario respetar las reglas más severas, no tanto por cuestiones legales, sino por la salvaguardia personal. En el sector de la restauración estamos en una “zona gris” en la que, sea por los reducidos controles, sea por el juego sutil de las terminologías, se presentan armarios para productos inflamables sin serlo (por ej. Armarios no certificados paras productos inflamables ¡con un extintor interno!). Es por tanto esencial preguntarse: ¿Qué certificación tiene el armario que he adquirido (o que voy a adquirir)?  

    Aprovechamos la ocasión para describir, a través de algunas fotos, los ambientes del recién creado centro de restauración del prestigioso Museo Nacional del Cairo, que se propone como uno entre los más grandes laboratorios de restauración del mundo. En el 2009 C.T.S. ha efectuado la distribución, entre los diferentes materiales y herramientas, también unos armarios de seguridad para inflamables CHEMISAFE®.
      

    PRODUCTO:

    EQUIPOS PARA LABORATORIO
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/220-equipos-para-laboratorio


    Nota
    : la norma ha sido efectuada según las directivas UNICHIM - Asociación para la unificación en el sector de la industria química, y descrita con el  título “Armarios de almacenamiento de seguridad para incendio - Parte 1: Armarios de almacenamiento de seguridad para líquidos inflamables”. Fecha de recepción: 31/08/2004

  • 22.3 MÁS INFORMACIÓN - ESCRUTANDO LO INVISIBLE

    Escrutando lo invisible

    "Aquello que es esencial es invisible al ojo"; esta bellísima frase sacada de El principito (
    Le Petit Prince) de Antoine de Saint-Exupéry, lleva a las reflexiones que puedan surgir incluso en el campo de los Bienes Culturales: si de verdad ¿aquello que no podamos ver en la obra es de extrema importancia?
    Afortunadamente las técnicas analíticas permiten indagar las obras, revelando a menudo las "verdades ocultas".
    Todavía, la mayor parte de los análisis están a prerrogativa de técnicos especializados y necesitan herramientas costosas que dan como resultado los espectros, a menudo muy difíciles de interpretar. Sin embargo, algunas técnicas permiten incluso a los menos expertos obtener información importante para la restauración como, por ejemplo, la microscopía óptica, la fluorescencia UV y la reflectografía IR. 
     

    En este artículo hablaremos justamente de esta última que explota las capacidades de las radiaciones infrarrojas que atraviesan los estratos más superficiales de una obra policromada, desde el barniz final al estrato pictórico, hasta llegar al diseño preparatorio. Retoques, estucados, abrasiones y caídas de film pictórico y preparación resultan más evidentes y, algo bien importante, se pueden recabar indicaciones sobre las técnicas de ejecución a través de los trazos del diseño preparatorio, que puede revelarse bajo la superficie.  

    Antes de adentrarse en el pleno discurso sobre la reflectografía, hagamos un paréntesis que permita hacer más comprensible la técnica misma.
    Todo el trabajo de los hombres que en el curso de los siglos se han dedicado al arte figurativo, desde los artistas rupestres de la prehistoria hasta las vanguardias contemporáneas, pasando  por quien cada día se ocupa de conservar y volver a dar vida a estos testimonios, se basa sobre la luz. La luz no es otra cosa que una pequeña porción del espectro electromagnético que el sistema visible humano alcanza a elaborar. El espectro electromagnético se divide a base de la longitud de onda de las radiaciones que lo componen, que van desde varios metros ("ondas largas", como por ejemplo las ondas de radio) hasta cualquier billonésima de milímetro (por ejemplo los rayos X). El campo del visible se coloca con "ondas cortas" que van desde los 400 nm a los 700 nm (billonésimas de milímetro).

    El efecto complejo de una radiación electromagnética que incide sobre cualquier objeto depende de tres factores:
    1)    El tipo de radiación incidente (lámpara, luz solar, neon, etc.).
    2)    La composición y la estructura del objeto sobre cuya radiación incide. 
    3)    El dispositivo que destaca la radiación reflejada por el objeto (ojo humano, telecámara a infrarrojos, etc.).

    Esta reflexión es útil en muchos campos de la restauración conservativa, como por ejemplo para las operaciones de retoque donde se necesitaría siempre usar una fuente luminosa lo más similar posible al sol. En el caso de las indagaciones reflectográficas al infrarrojo la condición de base para el éxito de la operación  diagnóstica es que la fuente luminosa contenga, en su espectro de emisión, una buena “dosis” de radiación infrarroja, que pueda interactuar con los estratos pictóricos y ser resaltado por un “ojo” calibrado a propósito (o sea una telecámara sensible a longitudes de onda comprendidas entre 700 y 1100 nm, el Infrarrojo cercano). Una lámpara de incandescencia en este caso irá mejor, teniendo la seguridad de no posicionarla demasiado cercana a la obra, obteniendo una situación de luz difusa y evitar el calentamiento.

    Observando el gráfico (ver imagen 2) resulta evidente la diferencia entre el espectro de emisión que caracteriza la luz solar y el de una lámpara normal de incandescencia: la luz natural tiene intensidades de misión bien distribuidas dentro del intervalo del visible, mientras la luz de la lámpara es decididamente “descompensada” hacia las altas longitudes de onda (y por tanto los colores amarillo/naranja/rojo). Las lámparas de luz natural emiten solo en el espectro visible, mientras "cortan" tanto los componentes UV (dañadas a nivel fotoquímico) como las infrarrojas (dañadas por efecto del calor). Se deduce de ello que una lámpara óptima de retoque será absolutamente inútil en el caso de que se quiera profundizar en el diagnóstico por medio de técnicas como la reflectografía IR. El espectro de emisión del filamento de tungsteno, sin embargo, tiene un fortísimo componente de infrarrojo, que no puede ser visto por nuestros ojos, pero que se percibe fácilmente a nivel térmico (los rayos infrarrojos “calientan”) y puede ser usada en reflectografía. Naturalmente, la fuente de luz óptima es puramente infrarroja y una solución económica se da por las lámparas IR con añadido E27 a 250 W que pueden ser colocadas sobre las lámparas comunes en sustitución de las lámparas de incandescencia.  

    Una  simple fuente de infrarrojos sin embargo no es suficiente: es necesario que la radiación que se refleja de la superficie de la obra después de haber interactuado con los estratos pictóricos sea adecuadamente “filtrada” y resaltada por la videocámara, cumplido respectivamente por las lentes de los reveladores. El secreto para una buena investigación en el campo del infrarrojo cercano es por tanto una mezcla óptima de fuentes de luz, filtros y reveladores,  combinados de tal forma que enfaticen la intensidad y la eficiencia de resalte de aquellas longitudes de onda (700-1100nm) que consiguen “meter la nariz” bajo los estratos más superficiales de una obra pictórica y poner en su lugar diseños preparadores, retoques, correcciones: aquello que en definitiva no aparece a la luz del sol.
      

    La "lectura" de aquello que se registra y aparece sobre la pantalla no es siempre fácil de interpretar, Sobre todo, no siempre el diseño preparatorio está presente e, incluso admitiendo que el artista haya sido ayudado, aparece visible si ha sido trazado con carboncillo, grafitos o similares. El negro, de hecho absorbe las radiaciones del cercano IR mientras otros materiales, como la hematita que dona la tonalidad rosa a la sanguínea, reflejan las radiaciones y son después "invisibles" al ojo de la telecámara IR.  

    Justamente esta absorción selectiva de las radiaciones incidentes por parte de diferentes materiales ha permitido el desarrollo de las técnicas espectroscópicas, como la espectrofotometría IR. También con un simple  reflectógrafo IR es posible obtener cualquier indicio sobre materiales presentes: podemos decir que los pigmentos a base orgánica y a base de plomo son en general transparentes al IR, mientras pigmentos a base de cobre o ferrocianuros (como el 
    azul de Prusia) son medianamente o fuertemente opacos y no permiten la aparición de lo que está debajo. 
     

    Por último, pero no menos importante, la elección de la herramienta. La reflectografía IR destaca en los años 30 y nace como fotografía IR, pero ya en los años 60 tiene un gran desarrollo debido al uso de telecámaras a tubo Vidicon. Actualmente se usan las  videocámaras a CCD  (Charged Couple Device) que permiten una relación más alta señal/rumor, una respuesta más rápida, menores distorsiones geométricas y mayor estabilidad en altas intensidades luminosas en entrada respecto a los tubos Vidicon. Para “limpiar” la señal destacada por los CCD se aplica un filtro con banda pasante 720-1100nm, que permite eliminar las longitudes de onda del visible, que crean molestias en la imagen IR: de esta forma es posible tener imágenes nítidas y bien contrastadas, eliminando el efecto “scattering” provocado por la reflexión de la longitud de onda por debajo de los 700 nm (recordemos que la capacidad de penetración es directamente proporcional a la longitud de onda
    ). 
     

    El coste de una herramienta para la reflectografía IR puede ser también muy alto, según las características técnicas, como precisión y resolución de las imágenes. Una solución de bajo coste, es la instalación portátil MIR 10 propuesta por CTS que, junto con otras técnicas simples y económicas de las que hablaremos en futuros artículos, permite al restaurador tener un cuadro completo de la obra que se quiere investigar. 
     

    PRODUCTO:

    EQUIPO DE REFLECTOGRAFÍA MOD. MIR 10 NEW
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/871-equipo-de-reflectografia-mod-mir-10-new


    BIBLIOGRAFIA Y FUENTES

    • Walmsley, Elizabeth, Fletcher, Colin, Delaney, John, Evaluation of system performance of near-infrared imaging devices. Studies in Conservation, Volume 37, pp 120-131, 1992
    • Palazzi Sergio, Colorimetria, la scienza del colore nell’arte e nella tecnica, Firenze, Nardini, 2000
  • 21.2 MÁS INFORMACIÓN - LIGROINAS, ¡QUÉ PASIÓN!

    Ligroinas, !Qué pasión¡

    El amigo Paolo Cremonesi tiene un reciente artículo sobre la ligroina, o mejor, la compleja familia de las ligroinas, esclareciendo en un campo bastante complejo como el de las fichas de seguridad y de las normativas sobre los etiquetados.
    Estoy plenamente de acuerdo con él cuando afirma que en las fichas de seguridad hay imprecisiones que no nos esperamos de grandes empresas multinacionales, y contradicciones a veces incomprensibles. Después de diez años de actividad como responsable de la Oficina Técnica de CTS me he dado cuenta de que en muchos aspectos somos más cuidadosos y rigurosos nosotros que no los “grandes” de la química internacional. Un ejemplo que tenemos muy cerca, dado que CTS trata desde hace años la ligroina pura para análisis de Carlo Erba. Una elección dictada por la bajísima cantidad de benceno contenido (inferior al 0,1%), y por esto la ausencia de riesgos de cancerogenidad.
    Esto es fácilmente confirmable yendo a verificar la primera versión de la ficha de seguridad (CH1397 del 18.3.2003), que no describe la frase de riesgo R45 “Puede provocar cáncer”. Después, con una sucesión de eventos descritos por Cremonesi, desde finales de 2006 Europa introduce nuevas reglas e Italia se adecúa, con el recibimiento de una nueva clasificación de productos químicos, que como algunos de vosotros sabéis ha llevado a una actualización de las fichas técnicas que deben responder a la normativa REACH (Registration, Evaluation and Authorisation of CHemicals).
    En esta nueva clasificación las ligroinas son consideradas Cancerigenas de Categoría 2, sigla Carc.Cat.II (que indica por tanto, la sospecha de cancerogenidad), a la que se asocia la famosa frase R45.  ¡Esto porque el término genérico ligroina incluye también fracciones del petróleo con altos contenidos de aromáticos e, implícitamente, de benceno!

    Si sin embargo el contenido de benceno es inferior al 0,1% el riesgo no es significativo, y es necesaria la necesidad de la etiqueta con R45 y Carc.Cat.II.
    Como todas las actualizaciones incluso el del REACH procede progresivamente, favoreciendo los productos de mayor importancia (por facturado), y dejando detrás los de menor interés. Este es el procedimiento seguido por las casas productoras, que se continúa como en cascada por todos los distribuidores. Quizás por esto las fichas de la ligroina, con los diferentes intervalos de ebullición, no han sido bien realizadas.
    De hecho, hasta hace unos meses seleccionando la palabra “ligroina” aparecía en la página Web de Carlo Erba una sola ficha:  

    •                                CH0145_I Vers. N° 12 Revisión 08.07.2009, relativa a la Ligroina 80-100°C;


    Esto era claramente una imprecisión, porque tal ficha se asociaba a 3 ligroinas con intervalos de ebullición diferentes. Así como se ha hecho notar por Cremonesi en el artículo, había una incongruencia entre la presencia de la sigla Carc.Cat.2, y la ausencia de la frase de riesgo a describir en la etiqueta R45. Las fichas Carlo Erba se han actualizado recientemente, y desde la página Web (última entrada 11/12/2009), podemos descargar las versiones denominadas:

    •                                CH0795_I Vers. N° 35 Revisión 04.12.2009, relativa ala Ligroina 100-140°C;
    •                                CH2306_I Vers. N° 15 Revisión 04.12.2009, relativa ala Ligroina 75-120°C;
    •                                CH2308_I Vers. N° 11 Revisión 04.12.2009, relativa ala Ligroina 100-120°C.

    Todas tienen CAS 64742-32-4  

    Estas fichas no solo no describen la frase R45, sino por los 100-140°C aparece incluso Carc Cat II. ¿Todo bien entonces? No, porque aparece una nueva frase “H350 - Puede provocar el cáncer y H304 - Puede ser letal en caso de ingestión y de penetración en las vías respiratorias.”, o bien, dos frases que nos llevan a las preocupaciones de partida.
    Para la Ligroina 75-120 y para la 100-120 permanece en el punto 3 la frase Carc Cat.II que, hemos dicho, desaparece en el punto 3 de la Ligroina 100-140° C. Pero lo más grave para estas dos ligroinas se describe, siempre en el 3, también otros dos códigos,  3.6/1B, 3.10/1.

    ¿Qué significan? Es necesario hacer referencia a la normativa denominada GHS (Globally Harmonized Systems, https://unece.org/DAM/trans/danger/publi/ghs/ghs_rev04/Spanish/ST-SG-AC10-30-Rev4sp.pdf). En base a esta normativa se deduce que el producto es un presunto cancerigeno, por tanto más peligroso que un cancerígeno sospechoso (la escala es 1A, cancerígeno, 1B, presunto, 2, sospechoso) Nota: en la versión 15, Revisión: 21.10.2009, no aparecía H350, que ha sido añadido solo después.  

    Al punto 11 no se le hace mención, y se describe como “Irritante”, y lo mismo se dice en el punto 15, que sería “Informaciones sobre la reglamentación”. ¡Pero aquí la sorpresa! En el punto 16, hasta hoy zona destinada a indicaciones bibliográficas y otras cosas, Carlo Erba inserta una frase de riesgo como un R48/20 Nocivo: peligro de graves daños a la salud en caso de exposición prolongada por inhalación.
     Y es más preocupante R62 Posible riesgo de reducida fertilidad. Es casi como decir: la reglamentación te dice esto, pero yo añado también esto otro, aún peor, y siendo todavía más prudente te digo también que” La sociedad CARLO ERBA Reagenti S.p.A., no podrá ser considerada responsable por cualquier daño derivado del uso o del contacto con el producto de arriba” En el caso de que se te ocurra hacerme culpable.....  

    Pasemos ahora de la ligroina Carlo Erba, que entra entre los reagentes de laboratorio (puro para análisis), por el elevado coste, al producto puro, que tratamos con el nombre Ligroina 100-140° C, y que proponemos a un coste muy contenido (8 €/lt, aproximadamente la mitad que el del  Carlo Erba).
     Incluso este no describe la frase R45, pero se indica como Carc.Cat. II, no obstante el contenido de benceno sea también en este caso inferior al 0,1%.

    Llegados al término es importante evidenciar como, tanto por la normativa ya en vigor (REACH), como por aquella que quizás la estará (GHS), la clase de los hidrocarburos ligeros, a la que pertenecen también las ligroinas, es considerada Carc.Cat.II, con algunas precisiones no siempre aplicadas.
     Una vez más el caos normativo deja amplios márgenes a las empresas que se aprovechan de esta “zona gris” para distribuir productos no acompañados de un claro etiquetado o de correctas fichas de seguridad (¡cuando se distribuyen!), a veces además suprimiendo con desenvoltura las indicaciones más “fastidiosas”, como los famosos R45 o Carc.Cat.II.
    CTS sigue una línea de transmisión integral de las fichas recibidas por los productores, incluso cuando estas describen detalles “incómodos”, y pueden por lo tanto suscitar temores relativos a nuestra salud. Lo que podemos afirmar es que la cosa para nosotros más relevante, para determinar el efectivo riesgo de cancerogenidad de la ligroina, es el reducido tanto por ciento de bencenos y aromáticos, que debe ser inferior al 0,1%, y que confirmamos para las ligroinas que nosotros comercializamos.  

    PRODUCTO:

    LIGROÍNA
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/252-ligroina


    Para saber más:

    Cremonesi Paolo, “Parola d’ordine: ligroina! .... Vale ancora?” Progetto Restauro n°51 (2009) Cremonesi Paolo, “Parola d’ordine: ligroina!” Progetto Restauro n°24 (2002)

  • 21.3 MÁS INFORMACIÓN - CÁNCER DEL BRONCE

    Cáncer del bronce

    No es una novedad que las atmósferas contaminadas de nuestras bellas ciudades multiplican la degradación de las obras de arte.
    En algunos casos, esta degradación puede parangonarse a una enfermedad, como la corrosión electrolítica cíclica de ramas de cobre, esta degradación puede llamarse “cáncer del bronce”. Porque si se desencadenan, deben de estar presentes cloruros, pero estos no faltan ni en las ciudades (las famosas lluvias ácidas, donde los cloruros superan incluso los 0,1 ppm), ni obviamente en los ambientes marinos, donde se generan nieblas salinas por reacción entre las gotas de agua salada y gas, como el dióxido de nitrógeno, normalmente presente en la atmósfera incluso en la que no está excesivamente contaminada.  
                                            2NaCl + 3NO2 + H2O --> 2NaNO3 + NO + 2HCl  

    El primer paso de esta corrosión parece ser la formación del ión de cobre por obra del ácido clorhídrico:  

                                            4HCl + 4Cu +O2 --> 2Cu2Cl2 + 2H2O
      
                                            2Cu2Cl2 + 2H2O --> 2Cu2O + 4HCl  

    El cloruro de cobre (nantokite) es un mineral muy inestable y poco soluble, que en ambiente ácido se solubiliza para dar cobre (Cu2O) y nuevamente HCl. El ácido clorhídrico se une al cobre metálico en presencia de oxígeno y humedad:

     
                                              2Cu + HCl + H2O + O2 --> Cu2 (OH)3Cl  

    Se forman unos hidroxicloruros de cobre básicos, verde azulados (atacamita y paratacamita) y ácido clorhídrico, que corroe el metal sano, formando otra nantokite. El fenómeno comporta también la alveolización de la superficie (pitting). En la foto (ver Fig. 1), eflorescencias y pitting debidos a esta degradación sobre una moneda de bronce. La reacción continua hasta consumar completamente el cobre presente. 
     
    Resulta esencial por tanto, en presencia de este tipo de corrosión, inhibir los cloruros, eliminando los compuestos de cobre o convirtiéndoles en monóxido de cobre (Cu2O, cobre), muy estable. Los principales tratamientos son:

    •           - Limpieza galvánica.
    •           - Reducción electrolítica.
    •           - Tratamiento con ditonito alcalino.
    •           - Limpieza química.

    Como ya se ha descrito en artículos precedentes, los tratamientos galvánicos y electrolíticos llevan una reducción de los óxidos y el retorno de los mismos al metal elemental (17.3 - Los "complejos" del hierro). Estos tipos de limpieza son muy invasivos y se evitan sobre manufacturados frágiles, decorados o que no posean alguna pieza metálica (por ejemplo, muchos objetos arqueológicos). Incluso el tratamiento con ditonito alcalino, nacido para la consolidación reductora de la plata, y reductor y disgregador de las manchas, permitiendo una efectiva eliminación de los cloruros y la estabilización de la obra. Los métodos químicos, sin embargo, permiten preservar las manchas y pueden usarse también sobre objetos completamente mineralizados. La prevención de la corrosión cíclica sucede por tanto con la combinación de métodos que permitan la eliminación del cloruro de cobre y/o la conversión en óxido de cobre, con productos que “sellen” el cloruro de cobre en contacto con la atmósfera. Los principales reagente usados son:

    •             - Sesquicarbonato de sodio (Na3H(CO3) 2), obtenible mezclando carbonato y bicarbonato de sodio (Na2CO3 + NaHCO3);
    •             - Carbonato de sodio (Na2CO3);
    •             - Benzotriazol.

    El cloruro de cobre es insoluble y no puede ser eliminado con agua solamente. En la solución al 5% de sesquicarbonato de sodio, el ión hidroxilo de la solución alcalina reacciona con el cloruro de cobre formando óxido de cobre. El ácido clorhídrico se neutraliza en la formación de cloruro de sodio, soluble. La operación ha de realizarse varias veces hasta que el objeto se seca con agua desmineralizada hasta obtener una solución de lavado de pH neutro. El baño inicial puede ser hecho de agua normal si los cloruros presentes son muchos (superiores a los presentes en el agua normal). Los lavados finales se hacen con agua desmineralizada. El proceso puede necesitar también varias semanas, por ejemplo si el objeto ha sido sumergido en agua de mar. Este tratamiento no quita las manchas verdes en superficie, sino que puede hacer precipitar las Sales básicas de cobre verde o la tenorita negra (CuO) sobre la superficie. Los primeros se eliminan con facilidad, mientras que el óxido negro que se forma preferentemente según la composición de la aleación, es muy persistente. Muy económico pero también muy lento (puede ser necesario más de un año para eliminar completamente los cloruros) es hacer baños demasiado prolongados que pueden llevar a la solubilización del cobre todavía intacto por formaciones de complejos. Sustituyendo el sesquicarbonato con el carbonato de sodio (5% en agua) se ralentizan posteriormente los tiempos de reacción, pero previene la reacción con el cobre eliminando la formación de manchas verdes azuladas de carbonatos. La reacción general para estos dos compuestos alcalinos es la siguiente:  

                                                             Cu2 (OH)3Cl + 4CO32- à 2Cu(CO3) 22- + 3OH- + Cl-  

    El verdadero tratamiento clave de la conservación de los bronces, es con el benzotriazolo  (BTA), tanto como tratamiento por si solo o después de la estabilización. Todavía, el BTA no elimina el cloruro de cobre, pero forma unos complejos insolubles que actúan como barrera entre este compuesto y la humedad atmosférica, obstaculizando la corrosión cíclica. Uno de los procesos de limpieza más comúnmente usados con el BTA consiste en estos pasos:
    -      Limpieza y eliminación de polvo y manchas incoherentes con el carboncillo/bastoncillos en fibra de vidrio;
    -      Limpieza con una mezcla 1:1 de acetonas y toluenos para eliminar eventuales estratos oleosos y manchas;
    -      El objeto desengrasado se mete en una solución alcohólica o hidroalcohólica de BTA;
    -      El objeto inmerso en la solución se pone al vacío para que no se forme ninguna burbuja.

    N.B.
     Atención no usar presiones demasiado fuertes, ya que el punto de ebullición de líquidos bajo presión baja y el líquido podría hervir incluso a temperatura ambiente. 
    Si se usa una solución diluida (aproximadamente 1% en peso) la inmersión debe prolongarse durante más de un día, además puede acortarse el tiempo de inmersión aumentando la concentración (hasta al 3% en peso). En este último caso, mejor usar soluciones puramente alcohólicas, que permiten una mayor penetración. La reacción puede ser así sintetizada:  

                                                                 Cu2 (OH)3Cl +6HBTA 
    à 2Cu(BTA)2 . 2(HBTA) + Cl- + 3H2O + H+
      

    HBTA es la forma protonada del normal Benzotriazolo (BTA).
    Después del tratamiento, el objeto se moja con etanol puro para quitar cualquier residuo de BTA, hasta alcanzar un pH neutro, y secarse rápidamente. La operación se puede repetir hasta la total desaparición del fenómeno de deterioro. Ya que el BTA no elimina el cloruro de cobre, en objetos que contienen mucho cloruro es necesario hacer antes de este tratamiento una limpieza con los tratamientos alcalinos arriba descritos. La aplicación de los protectores (poliméricos como Incral 44 y ceras microcristalinas como Reswax WH, o mejor todavía la doble aplicación), completa los pasos garantizando la estabilidad del manufacturado durante bastante tiempo.
    Una importante nota debe hacerse sobre la toxicidad del benzotriazolo, cancerigeno y sospechoso mutágeno, para lo que se hace necesario el uso de guantes, máscaras con oportunos filtros e implantes para aspirar los vapores tóxicos.  



    BIBLIOGRAFIA

    • Hamilton, D. L. (1999). Methods of conserving archaeological material from underwater sites. Retrieved March 17, 2008, from http://nautarch.tamu.edu/class/anth605/File0.htm.
    • Lalli Carlo, l'impatto ambientale sulle opere d'arte esposte all'aperto: cause e problemi di degrado. In Monumenti in Bronzo esposti all'aperto, pp 59-68. Nardini, 2004.
    • MacLeod, Ian Donald, Conservation of corroded copper alloys: a comparison of new and traditional methods for removing chloride ions, Studies in Conservation, Volume 32, pp 25-40, 1987.
    • Madsen, H. Brinch, A preliminary note on the use of benzotriazole for stabilizing bronze objects, Studies in Conservation, Volume 12, pp 163-167, 1967.
    • Marabelli, Maurizio. Conservazione e Restauro dei Metalli d'Arte. Roma: Bardi
  • 20.1 FORMACIÓN E INFORMACIÓN - BODAS DE PLATA

    Bodas de plata  

    Quien haya empezado a trabajar en el sector de la restauración en los años 70 (¡o incluso antes!), se acordará bien de las dificultades para encontrar materiales, con las necesidades de adaptarse a herramientas y productos nacidos para satisfacer otros sectores, otras realidades y exigencias.
    Después apareció, a finales de 1984 C.T.S, firma individual fundada por el Ingeniero Renzo Dal Monte, con la misión de ayudar al restaurador en la elección de los materiales y de las herramientas más idóneas para las exigencias específicas. Desde el inicio de la actividad, C.T.S. siempre ha prevalecido el aprovechamiento de los recursos propios en el desarrollo tanto organizativo como comercial, creando en el tiempo una red propia comercial constituida por las filiales y representantes, en Italia y en el extranjero, transformándose también a nivel de sociedad, antes en C.T.S. S.a.s. de Dal Monte Ing. Renzo y finalmente en el actual C.T.S. S.r.l. bajo la guía del Administrador único geom. Mauro Danese. Desde hace casi diez años se ha creado la oficina técnica – científica, dirigida por el Dr. Leonardo Borgioli, convirtiéndose en un punto de referencia en el sector, con la organización de encuentros técnicos y a través del “Boletín CTS", que estáis leyendo desde hace ya diez años.
    El tiempo ha volado, y ¡aquí estamos en el 2009! CTS quiere festejar estas “bodas de plata” con el mundo de la restauración, y aquí presentamos dos eventos que nos permiten evidenciar con fuerza el logro conseguido. 
    Aquí está el Catalogo 2009: un tomo repleto, ¡o incluso dos!
    De hecho la ampliación internacional de la empresa ha creído necesaria la realización de un catálogo italiano-inglés-francés-alemán (particularmente debido a la recién creada CTS Suiza), y de un segundo español-portugués-rumano, con la adicción del inglés como lengua universal.
    La estructura permanece sustancialmente invariable respecto al catálogo precedente, pero nuevas herramientas han sustituido cualquier “antigüedad”.
    El segundo evento que nos da la oportunidad de festejar la celebración del 25° es la primera edición del Salón del Arte y de la restauración que tendrá lugar dentro de pocos días en Florencia.
    Y ¿que mejor manera de festejar que con el encuentro técnico, que es el método que en estos años ha constituido un verdadero puente entre las diferentes profesionalidades?
    No una, sino cuatro ocasiones de encuentro, a partir de las dos relaciones que abren el Jueves 29 de Octubre el Salón: la de Ana Laborde, descripción del importante proyecto de restauración de la Catedral de Pamplona, con el título “Un ejemplo de interdisciplinariedad en la restauración del patrimonio arquitectónico: la Catedral de Pamplona “.
    La segunda, recogida por el propio responsable de la Oficina Técnica CTS, Leonardo Borgioli, tratará sobre el tema de la consolidación temporánea en los cuadros sobre tela, con el “Uso del ciclododecano sobre obras policromadas”. En las informaciones teóricas se afianzarán en las prácticas (desarrolladas en estos últimos años de dos restauradoras, Enrica Boschetti y Arianna Splendore), en una sesión pomeridiana estrecha. Una vez más la finalidad del encuentro es la de permitir a los restauradores que acudan, obtener bases sólidas de partida, para confrontar las experiencias propias con otros colegas expertos en el sector, y poder volver al propio laboratorio con algo para actuar, prácticamente.  
    El siguiente día, Viernes 30, otra vez los cuadros pintados en tela en el centro de los reflectores, con el encuentro, “La mesa a baja presión y su correcto uso en las intervenciones de restauración de los cuadros”, que permitirá comprender más profundamente una herramienta siempre actual y nunca bastante conocida. La relación está a cargo de una de las expertas en el sector, Giovanna Scicolone.  

    Finalmente el Sábado 31 concluiremos con “Las nanotecnologias para la conservación del patrimonio cultural”, donde Luigi Dei (Consorcio CSGI - Universidad de Florencia), describirá el nacimiento del sistema, sus implicaciones desde el punto de vista químico – físico, los límites y las ventajas. Fabrizio Lacopini, restaurador de pinturas murales, que ha colaborado en la parte aplicativa del estudio, irá a ilustrar junto a Elisa Grenier una serie de aplicaciones sobre casos reales, con demostración práctica delante a los asistentes.
     Esta combinación, entre un “conservation scientist” y un restaurador, es un esquema que buscamos replicar cuando sea posible, y es el resultado de un análisis conducido por nosotros en base a la satisfacción de encuentros pasadas. Una vez más la experiencia de  CTS consolidada en años de trabajo en el campo.  

    No podemos olvidar los encuentros organizados en colaboración con otras sociedades amigas: Isolcell tendrá a Roberto Buda como relator sobre casos prácticos de desinfección anóxica, Lambda ilustrará con los restaurador milaneses Rabbolini y Anzani los sorprendentes efectos de la limpieza combinada con el laser-gel de Agar (ver el artículo dedicado a AgarArt de este Boletín CTS), y para concluir R&C Lab describirá los más recientes estudios sobre la duración de los biócidos aplicados sobre varios monumentos (con la implicación directa de la Oficina Técnica de CTS).
    Concluimos con una calurosa invitación para intervenir, visitando nuestro stand y participando con todo CTS en estos eventos.  

  • 20.2 NUEVOS PRODUCTOS - AGARART: EL AGUA MENOS LÍQUIDA

    AgarArt: el agua menos líquida

    Imagínate poder controlar un cierto volumen de agua, depositarlo en una superficie, y mantenerlo allí el tiempo que quieras, regulando incluso la penetración a través de la misma superficie..... y ¡además obteniendo la separación de la suciedad y su migración hacia la masa del agua!
    ¿Un sueño de un restaurador con stress? O quizás, ¿considerado la implicación en la historia de algunas algas, una promesa de un charlatán televisivo? Se trata sin embargo de la posibilidad ofrecida por los geles rígidos obtenibles con el Agar-Agar, un hidrocoloide natural con propiedades espesantes, constituido por una mezcla de sustancias, principalmente Agarosio y Agaropectina, y extracto de algunas especies de algas rojas.
    Hemos hablado de la migración de la suciedad: esta es una de las propiedades más interesantes de los geles de Agar: de hecho, parece que el agua tenga dos niveles de movilidad: la más cercana a las cadenas polisacáridos y unida fuertemente, y combina con la estructura en verja que da “rigidez” al gel, mientras que la mayor parte del agua puede moverse libremente dentro de estas estructuras, y después solubilizar la suciedad hidrosoluble con la que está en contacto. No está del todo claro el mecanismo de migración de la suciedad solubilizada, pero es un dato el hecho de que los tiempos más largos de contacto permitan una mayor migración en el gel, y por tanto un mayor efecto de limpieza. Ahora el material está disponible en todas las filiales C.T.S. con el nombre AGARART. La preparación del gel es simple: el polvo de AGARART se añade a la solución acuosa a espesar, el porcentaje puede variar entre el 0,5 y el  5% (a determinar en base a la metodología de aplicación), y se lleva a ebullición durante  6 minutos, sin parar de agitarlo. Después se deja enfriar y se obtiene el gel, que puede ser posteriormente hecho líquido calentándolo La solución acuosa puede contener quelantes como citrato o EDTA, o tensioactivos no iónicos.  

    La unidad base del Agarosio es el disacárido Agarobiosio (ver figura), formado por anillos de 1,3-β-D-Galactopiranosio unidos por anillos de  3,6-anhidro-α-L-Galactopiranosio. 
       
        
    Característica fundamental de Agar-Agar es la de dar geles termorreversibles. Dando calor al gel las cadenas pasan en una conformación “pelota casual”, y se forma una solución fluida, que puede colarse.
    Con el enfriamiento las cadenas se ordenan, disponiéndose en hélices y formando así unos tubos en los cuales las moléculas de agua se retienen fuertemente; la parte final de estos tubos permanece sin embargo desordenada. Estos terminales se unen a los terminales de cadenas vecinas, formando unas estructuras responsables del característico gel rígido, y dentro de las cuales las moléculas de agua pueden moverse.
    Esta fracción de agua “móvil” puede ser expulsada por el gel ejerciendo una presión mecánica. Rehidratando el gel rígido, por ejemplo con una simple inmersión en agua, se reobtiene la forma inicial del gel, propiedad que se llama de sinéresis. Estos se han llevado a examen desde los años 60, pero solo en los últimos años se han llevado a cabo estudios más profundos de sus característicos y su potencialidad en la limpieza.
    El gel rígido de AGARART puede apoyarse en las superficies a tratar, o bien aplicarlo fluido con pincel y dejarlo gelificar sobre las superficies. Recordamos que el proceso de gelificación/licuefacción puede invertirse indefinidamente calentando y enfriando, y es por esto que se habla de gel termo reversible.  

    Recientísimos estudios sobre las condiciones de aplicación de los que el de Agar han sido presentados en el Congreso IGIIC, mantenidos hace pocos días en Nápoles. En particular, el texto de Rabbolini y Anzani (ACONERRE snc.), ilustra las diversas posibilidades de aplicación del método y la intervención sobre un yeso (“la Bella Pallanza”), y sobre un busto de mármol de mujer, ambas obras de Paolo Troubetzkoy.
     En estos dos casos la solución de Agar todavía caliente, líquida, se distribuye en las superficies con un pincel y se deja enfriar. De esta forma, el gel que se forma sigue perfectamente las irregularidades de la superficie, y después se elimina mecánicamente elevándolo delicadamente. Son fundamentales para el control del nivel de limpieza los siguientes parámetros:
                                                          - la temperatura de la solución en el momento de la aplicación;
                                                          - la densidad de la solución (como se ha dicho arriba, entre el 0,5 y el 5%);
                                                          - el espesar del gel aplicado;
                                                          - el tiempo de contacto.

     Justamente Rabbolini y Anzani han tenido el pasado mayo, junto a la sede CTS de Altavilla Vicentina, un encuentro técnico que ha visto una excepcional participación, e ilustrarán en el inminente Salón de la Restauración de Florencia un proyecto de intervención con Stefania De Zanche, sobre la asociación de las limpiezas láser y de los geles rígidos. La cita es el jueves 29 de octubre.  

    Finalmente los geles de AGARART retienen fuertemente el agua y pueden ser usados también para la aportación controlada de humedad. El agua de hecho baña la interfaz entre la superficie y el gel rígido, penetrando lentamente y de modo limitado en la estructura porosa del material, hecho de particular importancia para sustratos porosos y sensibles al agua, como pinturas en tela, mesa, madera policromada, dorados, yesos.....  
    Las posibilidades ofrecidas por AGARART son realmente interesantes, y no dudamos que en los próximos años tendrán una aplicación diversa sobre los más variados soportes. Como siempre esperamos vuestras objeciones, sugerencias y comparaciones.  

    PRODUCTO:

    AGARART  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/225-agarart


    Bibliografía:

    1.    E. Campani, A. Casoli, P. Cremonesi, I. Saccani, E. Signorini. L’uso di Agarosio e Agar per la preparazione di “Gel Rigidi” – Use of Agarose and Agar for preparing “Rigid Gels”, Traduccion de Diane KunzelmanQuaderni del Cesmar7, n.4, Il Prato, Padua 2007.
    2.    M. Anzani, M. Berzioli, M. Cagna, E. Campani, A. Casoli, P. Cremonesi, M. Fratelli, A. Rabbolini - D. Riggiardi. Gel rigidi di Agar per il trattamento di pulitura di manufatti in gesso - Use of Rigid Agar Gels for Cleaning Plaster Objects, Quaderni del Cesmar7, n.6, Il Prato, Padua 2008.
    3.    M. Anzani, A. Rabbolini; “Il RESTAURO DEL MATERIALE LAPIDEO CON I GEL DI AGAR AGAR: el yeso “La bella Pallanza” y el mármol “Busto di donna”de Paolo Troubetzkoy”. VII Congresso Nazionale IGIIC – Lo Stato dell’Arte – Napoles, 8-10 Octubre 2009

  • 20.3 MÁS INFORMACIÓN - EL COBRE Y SUS ALEACIONES

    El Cobre y sus aleaciones

    Basta hojear un libro que hable de la restauración de los metales para encontrar cualquier artículo sobre el bronce, donde el cobre solo se menciona en relación a esta unión. En este artículo queremos resaltar algunas características del “noble” cobre y de su facilidad de unirse con muchos metales, no solo con el estaño.  

    El cobre pertenece a los grupos de los metales nobles, como el oro y la plata. El adjetivo “noble”, se refiere a estos metales son poco propensos a reaccionar con el ambiente que los rodea (se encuentran en la naturaleza en el estado elementario con elevada pureza), a su conductibilidad eléctrica y térmica, a la facilidad de trabajo, ya que son dúctiles y maleables. El cobre, en este terceto, es aquel con características inferiores por lo que se refiere a la resistencia a la corrosión, que permanece de todas formas, más elevada respecto a metales como el hierro, el estaño, el plomo, etc. Esta característica, única a la facilidad de extracción y a la posibilidad de reciclaje, lo hace todavía uno de los metales de mayor uso en la industria.
    Los objetos de cobre están entre los más antiguos encontrados justos por la posibilidad de encontrar este metal en pepitas inmediatamente trabajables. El uso del metal se remite al siglo IX a.C. para objetos de uso cotidiano, ornamental y pequeñas armas. Las propiedades mecánicas del cobre puro, como la resistencia a tracción y la dureza, no son elevadas, y deben ser incrementadas notablemente mediante elaboraciones plásticas a frío como la impresión, el laminado y el trefilado. En el periodo histórico que ve el nacimiento de una primera forma de metalurgia (edad del cobre) las técnicas de trabajo eran limitadas por los escasos conocimientos en materia y el cobre a menudo se juntaba con la piedra, único material trabajado anteriormente (neolítico).
    Las limitaciones de uso de este metal, como se ha comentado, hacen que los encuentros arqueológicos significativos de objetos exclusivamente de cobre sean raros. Además, muchos manufacturados se han hecho con la fusión del estaño, a partir del periodo protohistórico que toma el nombre de la primera unión de cobre intencionadamente creada por el hombre: el bronce (edad del bronce). Todavía hoy las uniones de cobre están entre las más importantes a nivel comercial y se pueden subdividir en tres clases:
    -  Bronce: con esto término se identifican principalmente las uniones cobre-estaño, usadas de finales del siglo V a.C. en las estatuas pero también para producir armas (cañones) y campanas. EL bronce así dicho, “de fundición”, o bien el que se encuentra en las obras, tiene un porcentual de estaño variable entre el 4 al 10%. Hoy existen bronces con aluminio (cobre-aluminio llamados también cubrealuminios), bronces silicios (cobre-silicio), bronces al berilo (cobre-berilo) y bronces que siempre contienen estaño, pero con adicción de fósforo (bronces fosforados). Los bronces modernos se usan en muchísimos campos (naval, aéreo, en sustitución de los aceros endurecidos, etc.) mientras el bronce de fundición usado para las estatuas modernas conserva sustancialmente la misma composición química.
    -  Latones: unión de cobre-zinc. Según el tanto por ciento de los dos componentes el color varía del amarillo rojizo al dorado. El latón se encuentra todavía en objetos de imitación del oro (vajillas, manillas, acabados de instrumentos musicales, etc.) incluso en chapados en oro y bisutería. Se pueden definir latones incluso las uniones terciarias cobre-zinc-estaño usadas en la bisutería y en la relojería, como por ejemplo el “princisbecco”, una unión así llamada por el nombre del relojero inglés, Christopher Pinchbeck (1670-1732), de color similar al oro.
    -  Alpaca: la alpaca propiamente dicha, es una unión cobre-níquel-zinc inventada por China con el nombre “plata alemana” o “alpaca”. Toma el nombre comercial de Alpaca una específica unión terciaria cobre-níquel-zinc, muy similar a la plata y difundida en los primeros treinta años del 1800 en adelante. Hoy las alpacas se usan en objetos económicos de imitación de plata, a veces con placas (silver plated), partes de mecanismos de relojes, bisutería, etc. El cobre níquel y el monel, sin embargo son uniones binarias cobre-níquel que a veces se clasifican como “alpacas”, usadas por su elevada resistencia a la corrosión incluso en ambientes marinos para partes de mecanismos, condensadores, etc. Un campo en el cual estas uniones binarias y terciarias son muy usadas es la fabricación de monedas: nuestras monedas de 1 y 2 Euros son un ejemplo.    

    La gran propensión del cobre al entrar en unión con otros elementos metálicos y no (manganeso, hierro, cobalto, silicio, etc.) hace que existan innumerables uniones altamente específicas para determinados fines industriales. En el ámbito de los Bienes Culturales, las dos uniones más interesantes son el bronce y el latón, a los cuales nos referiremos en futuros artículos. Pero ahora queremos prestar atención exclusivamente sobre el cobre que es el principal elemento de unión (varía del 70% al 96%) y sobre el mecanismo con el que procede hacia la formación del esmalte. El cobre se oxida por soluciones oxidantes y fuertemente alcalinas, mientras se pasiva en soluciones neutras o blancamente alcalinas. El primer estadio de la corrosión lleva a la formación de compuestos de cobre al estado de oxidación +1. La unión puede suceder en ausencia de humedad (corrosión en seco), o bien como fenómeno electroquímico, en presencia de agua. El segundo fenómeno es el más común y lleva a la formación de dos principales productos:
    -  Cuprite: Cu2O, oxido de cobre de color que va del rojo intenso al amarillo dorado. El producto más difundido de corrosión del cobre y de sus ramas parece ser el primer estadio de oxidación hacia la formación de carbonatos básicos y sulfatos. A veces se llama oxiduelo de cobre y se encuentra en compuestos intermetálicos en el cobre nativo.
    -  Nantokite: CuCl, cloruro de cobre de color amarillo pálido de aspecto ceroso. En presencia de humedad y oxígeno puede transformarse en cuprite y paratakamite con formación de eflorescencias superficiales y disgregaciones progresivas del esmalte.  

    Los compuestos de cobre se oxidan posteriormente, incluso por simple exposición al aire, en los compuestos de cobre más estables. En los esmaltes se encuentran sobre todo tres clases de compuestos de cobre:   
    -  Sulfatos: los más difundidos sobre todo en áreas urbanas, en las que están presentes lluvias ácidas a causa de la ya tristemente conocida reacción:  
                                                                                                  2 SO2 + O2 --> 2 SO3
                                                                                          SO3 + H2O --> H2SO4 (acido sulfúrico)  

    El principal producto de reacción es la brochantita (Cu4(SO4)(OH)6), que estropea la cubierta de techos en cobre y monumentos, acoplada a las antlerite (Cu3(SO4)(OH)4). La transformación de estos óxidos en sulfatos solubles lleva a una corrosión progresiva y constante.

    -  Carbonatos: malaquita (Cu2(OH)2CO3) y azurita (Cu3(OH2)CO3), incluso estos muy difundidos y entre los óxidos más dañinos a nivel estético. La malaquita forma a veces un estado liso y compacto, de color verde oscuro sobre la superficie mientras la azurita, en cristales azul intenso, es bastante más rara. Para mayores informaciones sobre la química de estos óxidos, usados incluso como pigmentos, os recomendamos nuestro artículo del Boletín 13.3 Más información – «NEL BLU DIPINTO DI BLU». Siendo de cualquier manera estable, producen un daño principalmente estético para la pérdida de lectura de la obra.
    -  Cloruros: la clase de óxidos más dañina a causa de la elevada solubilidad y la notable conductibilidad iónica (recordamos que los esmaltes de pasivación, por tanto estables, no deben presentar estas dos características como ya se ha señalado en el artículo sobre el hierro o 15.3 Más información – Las edades del hierro). Los principales son Ia atacamita (Cu2(OH)3Cl) y su alótropo paratacamita, junto a la ya citada nantokite. Se encuentran sobre todo en ambientes marinos, pero dada la amplia difusión de los cloruros en el ambiente, se puede decir que están prácticamente omnipresentes.  

    En particulares situaciones ambientales se encuentran también otros compuestos de corrosión como fosfatos, nitratos, etc., de la que se volverá a hablar en futuros artículos, también en relación a la composición química de una particular unión que puede influenciar, incluso de manera sustancial, la morfología y la composición de los esmaltes.            

  • 19.2 MÁS INFORMACIÓN - EL TEMPLUM A PRUEBA DEL TIEMPO

    El Templum a prueba del tiempo

    Después de diez años desde su nacimiento hemos considerado oportuno efectuar unos controles sobre las primeras obras en la que se usó el Templum Stucco, el mortero epoxídico utilizado en reconstrucciones de elementos de piedra.  

    El Templum Stucco resulta mejor que los tradicionales estucados a cal (diferentemente aditivados), cuando hay situaciones de stress mecánico o ambiental.  

    Dado el origen “toscano” del producto no podía faltar la tipología Verde di Prato, un tipo de mármol, (serpentino), muy utilizado en combinación con otro mármol de la zona, el más famoso Blanco Carrara.
    El contraste entre el verde oscuro y el blanco se ha utilizado para realizar las cromias que subrayan las arquitecturas de numerosas iglesias y palacios toscanos, entre los cuales destacamos el Duomo de Pistoia y el de Prato, con las respectivas campanas, en Florencia el  Duomo con el Battistero, Santa Croce e San Miniato, la Collegiata en Empoli.
      

    Al contrario que el mármol carrarino, de textura fina y compacta, el mármol pratese presenta una estructura estratificada, que lo hace más frágil y menos resistente mecánicamente. La consecuencia es que podamos observar una degradación diferenciada, con pérdida de estos elementos de mármol Verde di Prato, sobre la que se ha intervenido tradicionalmente procediendo a su sustitución pero, la clausura de las cuevas ha llevado, sin embargo, a la interrupción de esta práctica, o bien al uso de mármoles “extranjeros” como el Verde Alpi, de tonalidades muy diferentes

    Pavimentacion de la Cappella di S.Giacomo, Catedral de Santa Maria del Fiore – Florencia (año 2001) Las cromías del mosaico son en mármol Blanco Carrara, Rojo Amonitico y Verde di Prato. Estas últimas mostraban la degradación mayor, y se han reconstruido por el personal de la Opera del Duomo con Templum Stucco Verde di Prato. (Ver Fig. 1)

    Un problema de degradación completamente diferente pero sin embargo unido a otra tipología de piedras muy utilizadas, las areniscas, es la pérdida del modelado. Éstas perdidas las sufren particularmente aquellos elementos finamente trabajados que están expuestos a la intemperie y al desgaste de la lluvia. El fenómeno, unido a las microlesiones causadas por la propia elaboración, se ha acelerado en el último siglo por efecto de la contaminación, sobre todo por el anhídrido sulfuroso.
    Además de la pérdida de modelado que sufren las areniscas están también a las fisuras de las huellas, dado que son frecuentemente usadas como elementos para pavimentaciones.
    Dado que el color de la arenisca nueva es muy diferente a la envejecida, por los fenómenos de oxidación del componente ferroso contenido, la sustitución de los elementos dañados supone también el problema de efectuar limpiezas para integrar el color, además de suponer un problema “ético” por una progresiva pérdida de la originalidad del mismo objeto.
    Los ejemplos de abajo se refieren justamente a las dos situaciones arriba descritas, resueltas con el uso de  Templum Stucco.

    Escalera de un tramo de la Certosa de Florencia (año 1998). La escalera de piedra serena se usaba cotidianamente por los frailes, y su forma característica la hacía peligrosa, particularmente cuando la lluvia hacía resbaladizos los escalones. En vez de proceder a la sustitución, y después a la completa pérdida de la escalera original, se decidió reconstruir la parte perdida con Templum Stucco Arenisca Gris. Se ha tratado, por tanto, de una intervención simple, de bajo coste, y que ha dejado íntegro el material original. La reintegracion puede eliminarse con disolventes apropiados. (Ver Fig. 2).

    Tabernacolo de Via de Palchetti en Florencia (año 2001) Realizado con una arenisca amarilla que se desmigaja con facilidad, colocado sobre el ángulo que forma la Via de Palchetti y la Via de la Vigna Nuova, estaba expuesto a la lluvia y al viento. El modelado del lado izquierdo del tabernáculo lo estaba casi completamente perdido, mientras que el del lado derecho, más resguardado, estaba en buenas condiciones. La reconstrucción se hizo con Templum Stucco Arenisca Amarilla. (Ver Fig. 3).

    PRODUCTO:

    TEMPLUM ESTUCO® (PRODUCTO BICOMPONENTE)
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/204-templum-estuco-producto-bicomponente



    Conclusiones  

    El Templum Stucco se comporta bien con el paso de los años, no solo en los casos aquí presentados, sino también en muchas otras situaciones sometidas a examen, sin presentar variaciones cromáticas o pérdida de cohesión. Los estucados y las reconstrucciones permanecen perfectamente adheridas al material de piedra original, sin formación de fisuras. El material de piedra adyacente a la reconstrucción no aparece degradado de forma diferenciada, hecho sin embargo usual en las reconstrucciones con cemento o morteros bastardos. Las reconstrucciones sujetas a stress mecánico (escaleras, pavimentaciones), aparecen perfectamente integradas, y no se evidencia que se hagan migajas o laminaciones. Es del todo imposible efectuar una previsión de duración, aunque 10 años sin sufrir alteraciones es ya un buen resultado, y por esto CTS continuará promoviendo estas reconstrucciones. Más allá de las necesarias pruebas de envejecimiento acelerado en cámara climática, que ya efectuamos y valoramos con atención (como evidencian en otros números del Boletín CTS), sabemos bien que solo el dato experimental aparecido in situ podrá decirnos como cada material se comportará a prueba del tiempo.

  • 19.3 MÁS INFORMACIÓN - PLATA “RESPLANDECIENTE”

    Plata “resplandeciente”

    El término Plata deriva del latín argentum y del griego αργύριον, que significa “resplandeciente, blanco". La plata y sus compuestos son conocidos y usados desde los tiempos más antiguos en diferentes campos. En época moderna, pueden citarse particulares usos como la producción de baterías zinc-cadmio de larga duración, unida a elementos odontológicos, como antibacteriano (por ejemplo en la famosa marca de cepillos de dientes a “iones de plata activos”) y, en su forma elementar, como aditivo alimentario (E 174) para el revestimiento metalizado de la almendra garrapiñada y dulces. Todavía, su amplio uso, desde la época romana a nuestros días, permanece el manufacturado de objetos ornamentales (pendientes, collares, anillos, etc.) pero también en otros utensilios como cuberterías. Desempeña además un papel muy importante en el sistema monetario: la producción de monedas de plata aparece en el 700 a.C., tanto que en muchos idiomas la palabra “plata” y “dinero” coinciden (por ejemplo la palabra “argent” en la lengua francesa).
    La plata ha sido desde siempre considerable del segundo metal precioso después del oro, degradado en tiempos modernos solo con el platino. La producción de espejos de alta reflectancia desde el 800 hasta nuestros días ve como protagonista siempre a este metal. Esta característica se une a la conductibilidad eléctrica y térmica, mayor que la del cobre que todavía se usa normalmente para las conexiones eléctricas por su menor coste y menor sensibilidad a la oxidación en ambientes externos. 
    La plata se encuentra a menudo en estado natural en combinación con oro, estaño, cobre y platino. Es estable en solución acuosa en cualquier pH a menos que no estén presentes agentes oxidantes o sustancias complejas, así como la falta de agentes como alógenos, ozono, amoniacos, y sobre todo, sulfuros, lo hace estable incluso en atmósferas secas o húmedas, ya que la plata no aparece sensiblemente atacada por el oxígeno tanto en ambientes secos como húmedos. Los principales responsables de la mancha negra (tarnishing) que a menudo aparece en objetos de plata son el sulfuro de hidrógeno (H2S) en ambientes marinos (producto metabólico de las bacterias sulfo-reductoras) y el anhídrido sulfuroso (SO2). La reacción de oxidación más común de la plata es la que lleva a la formación del sulfuro de plata negro:  

                                                                    2Ag + H2S → Ag2S + H2
      

    Si la pureza de la plata es elevada, esta se corroerá fácilmente incluso en contacto con alogenuros (por ejemplo cloro); si sin embargo se encuentra unido al cobre, será este último el que se funda por ánodo sacrifical y a corroerse preferencialmente. Todavía, las manchas encontradas en objetos de plata son casi todas pasivantes y se eliminan principalmente por motivos estéticos, para encontrar particulares como trabajos a bulino u otras decoraciones sutiles. En particular en la numismática es importante que la superficie esté bien legible para poder ser estudiada y colocada en un contexto histórico.  A veces, las manchas se eliminan durante el proceso de decloruración del cobre en unión con platas arqueológicas en ambiente marino.
        

    Es difícil generalizar en mérito a los sistemas de limpieza y estabilización de la plata, ya que raramente es puro. Vemos algunas de las más comunes uniones de interés histórico –artístico:  

    Uniones plata-cobre
    : se trata de las uniones más difundidas. Se distinguen entre ellas:
      
    ·      plata “pura” y antigua. Raramente encontrado en objetos modernos, se usaba sin embargo en la orfebrería antigua. Contiene trazas de cobre variable entre el 1% y el  4 %, junto a varias impurezas derivadas del mineral de extracción. El cobre se añadía para aumentar la dureza de la plata, demasiado débil y maleable para ser usada pura. El porcentaje de cobre puede llegar a tenores del 10% al 40%  para objetos de manejo.
    ·      sterling silver” o Argento 925. Contiene al menos el 92,5% de plata y el  7,5% de otros elementos, entre ellos el principal elemento es el cobre. Es la unión más común para la orfebrería y la joyería moderna.
    ·      coin silver” o plata numismática. Contiene el 10% de cobre y es entre las uniones la más común para la realización de monedas en plata.  

    Uniones plata-oro
    : se denominan “electro” y se encuentran también de forma natural como mineral. Plata y oro se mezclan en todos los porcentajes, todavía la composición más común, encontrada en muchos objetos por ejemplo de época romana, contiene aproximadamente el 10% de plata y el 90% de oro. En el transcurso de los siglos la composición podía variar desde el 5% al 40% en plata, esta última usada en la producción de cuberterías valiosas, ya que se creía que poseía el poder de eliminar venenos de la comida que estaba en contacto con ellas. Hoy el oro se mezcla con plata y cobre para obtener varias coloraciones, más otros minerales como el níquel y rodio para obtener una mayor dureza. El común oro blanco 750 contiene el 25% de plata, níquel o paladio, revestido de rodio para dar mayor candor. El revestimiento con el tiempo desaparece descubriendo la unión con un amarillo claro, que muchos creen una degradación del metal.
      

    Una posterior importante distinción se hace entre las platas arqueológicas y las históricas (litúrgicas, domesticas, etc.). Las primeras han sufrido en el curso de los siglos profundas corrosiones que influyen a la parte del cobre presente y no podrán nunca volver a la lucidez original. A veces, la corrosión del cobre puede eliminarse a fondo, provocando la fragilidad del manufacturado con posibles formaciones de grupos. Además puede verificarse el fenómeno de la recristalización con precipitación de una fase secundaria con granos de plata grandes que provocan tensiones en el metal.
    La limpieza mecánica de la plata es una operación peligrosa, ya que es un metal “tierno” y se hace solo si no es posible intervenir con otros medios o para quitar manchas muy espesas. Se pueden usar abrasivos sutiles y cepillos en fibra de vidrio, observando bajo microscopio el procedimiento. A veces, la limpieza mecánica se hace sobre objetos arqueológicos como tratamiento preliminar a la acción química para quitar parte de los espesores presentes. En general, la acción química da mejores resultados y es menos invasiva si se realiza correctamente. Abrimos un paréntesis sobre métodos caseros de limpieza de la plata. Un primer método consiste en preparar una mezcla con bicarbonato de sodio, agua y/o alcohol etílico, a veces con la adicción de ácido cítrico en solución (contenido en zumo de limón). Este “método de la abuela” une la acción débilmente abrasiva del carbonato a aquella más compleja del citrato que se forma por reacción. No es del todo desaconsejado para platas modernas, no demasiado frágiles y bastante espesas, pero hay que evitarlas sobre platas en lámina sutil (silver plate, hojas de plata, etc.) y arqueológicas.
    En tiendas se encuentran bastantes polish químicos para la plata que se subdividen en pastas abrasivas (usadas en joyerías) y los verdaderos y propios polish. Las pastas a menudo contienen carbonato o bicarbonato de sodio como abrasivo, o bien abrasivos más duros como el aluminio, piedra, bórax, sílices de varios tipos, etc.
    Los polish, además de abrasivos, contienen agentes decapantes tipo los sulfuros e inhibidores antimanchas. Tanto las pastas como los  polish se usan en la restauración, si bien es necesario poner atención en el producto que se elige, sobre todo controlando el pH, la fuerza abrasiva y la tipología de sustancias presentes, ya que pueden ser muy peligrosas para la obra y para el operario (¡algunos contienen nada menos que cianuro!). A veces, son productos que hacen que vaya más deprisa el trabajo del restaurador y en el caso de los polish químicos, pueden usarse para la manutención del objeto. 
    Trasladando estos métodos, se pueden emular los métodos clásicos para la limpieza. Una acción detergente preliminar puede realizarse con una solución al 2% de Tween 20, tensioactivo no iónico, seguida de la acción de un complejo como el EDTA tetrasódico al 5-10% para manchas bastante espesas y bien adheridas, y con sal de Rochelle al 5-10% sobre manchas menos robustas. Esto puede aplicarse por papetas o por inmersión. Otros reagentes para acción de reducción son el hidróxido de sodio y el sodio ditonito. Se pueden encontrar algunas fórmulas que prevén el uso de una solución de 40 gr. de hidróxido de sodio y 60 gr. de sodio ditonito en agua desmineralizada. Los productos de corrosión se reducen a plata metálica, que puede ser enlucido. Si bien, en algunos casos la reconversión de las manchas puede ser deseable, tenemos que subrayar que es un proceso peligroso para el objeto que se debe manejar con cuidado. Una vez conseguida la limpieza, es preferible enjuagar con acetona y alcohol etílico para aumentar la velocidad de evaporación del agua.
    Para la protección de los manufacturados recurrir a los productos específicos (polish inhibidores), que todavía garantizan una duración limitada de algunos meses sobre el objeto no aislado y dejado en un ambiente no protegido (ausente de sulfuros y con UR <40%).
    Aunque para las platas no es una práctica de rutina, todavía un protector acrílico como el Incral 44 aplicado sobre la superficie puede ayudar eficazmente a ralentizar la aparición de la mancha negra, mientras que el benzotriazolo tiene acción inhibidora y compleja incluso en la plata.    

    PRODUCTO:

    TWEEN 20
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/333-tween-20

    EDTA SAL TETRASÓDICA
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/318-edta-sal-tetrasodica

    INCRAL 44
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/189-incral-44

  • 18.1 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - PLM ¡DESDE HACE VEINTE AÑOS BAJO EXAMEN!

    PML: !DESDE HACE VEINTE AÑOS BAJO EXAMEN!

    Uno de los materiales “históricos” propuestos por C.T.S. en el sector de la restauración arquitectónica es el mortero PLM, en sus diversas formulas para frescos, estucos, muros, y mosaicos.
    Realizados con materiales rigurosamente controlados para garantizar la calidad, representan para los restauradores de todo el mundo los morteros para inyección por antonomasia.  

    Queremos recordar solo dos de los más importantes restaurados que han visto el uso de los morteros PLM en estos últimos años: dos ciclos de pinturas murales del siglo catorce como las de la Castellana  de Vergy en Palazzo Davanzati, en Florencia (al lado, foto de Daniele Rossi), y las del Oratorio de  San Stefano en Lentate sul Severo (MI) [1].
    Pero no podemos olvidar citar el uso del  PLM incluso en pinturas murales modernas, como las llevadas a cabo durante las obras-escuela del Opificio de las Pietre Dure en el “país pintado” de Arcumeggia (VA).
      

    Los puntos de fuerza que han contribuido a la implantación de los PLM son:
    -       La alta fluidez que se obtiene con una reducida cantidad de agua (80%, pero resulta inyectable incluso con el 60%), inferior respecto a la necesaria para poder inyectar cómodamente morteros a base de cales hidráulicas o con cales aéreas y puzzolana;
    -       La ausencia de sales solubles, incluso en confrontación con otros productos presentes en el mercado.  

    El primer estudio en profundidad sobre la línea PLM surge en 1993, por obra de la Universidad de los Estudios de Trento [2]; hoy estamos orgullosos de llevar bajo reflectores los resultados de otra investigación, llevada a cabo por el Center for Conservation of Monuments and Sites de Losanna (Suiza) [3].
    Preliminarmente a la intervención de consolidación de las superficies externas de la Catedral de Losanna, en arenisca de Aquitania, ha sido llevado a cabo un estudio comparativo sobre varios morteros de inyección.
    Han sido puestas en confrontación 6 topologías: dos a base de pegamento silicio (Funcosil y Syton), dos a base de cales aéreas mezcladas con varios inertes, y dos conocidos morteros de restauración presentes en el mercado, Ledan TC1 Plus y PLM-M. Se han valorado en un primer screening muchos parámetros fundamentales, como la viscosidad, la inyectabilidad, el tiempo de toma, el retiro, la adhesiónTodos los morteros mostraban una baja viscosidad asociada a una buena inyectabilidad. Como era lógico esperarse por un silicato de etilo, el Funcosil reaccionaba lentamente permitiendo aplicaciones sucesivas, a estratos, mientras los morteros a base de cal aérea exhibían en superficie tiempos de toma más reducidos, con obstrucción de los conductos de ingreso.
    La mezcla cal/puzzolana/microsferas de vidrio se ha abandonado después de resultados negativos mostrados, tanto valorando el retiro como la capacidad adhesiva.   En la tabla se describen los valores de los parámetros más significativos. Para el cuadro completo (incluidas las medidas sobre morteros no estacionadas) dirigirse al artículo  [3]. Para algunos valores se ha confrontado con la piedra arenisca degradada después de consolidarse con el silicato de etilo (ver imagen).

    Otros parámetros resultaban positivos para todos los productos, como la porosidad (entre el 35 y el 46%), que es siempre superior respecto a la de la piedra consolidada con Wacker OH (19%). Algunas sales medidas en el PLM y en Ledan (nitratos, fosfatos, cloruros, fluoruros) están en el orden de las decenas de μg/g, para ambos morteros, y por tanto no son influyentes, mientras los sulfatos están presentes en cantidades considerables en Ledan (5879 μg/g son aprox. 6 mg/g, o sea el 0,6%), y resultan ausentes en el PLM-M (solo 30 μg/g, correspondientes al 0,003%).  

    Al lado de esta investigación de Rousset y sus colaboradores también se cita las pruebas llevadas a cabo por Maria Rosa Lanfranchi y Sara Penoni, presentadas en el Convenio “Scienza e Beni Culturali” de 2005 [4]. En esta comparación, desde el punto de vista operativo, se han confrontado además de PLM-A y Ledan SM02, otras maltas características un poco diferentes, una acrílica y una a expansión. Consideramos fundamentales estas valoraciones periódicas efectuadas por las instituciones, ya que permiten a los restauradores valorar estos resultados y decidir sobre los materiales a usar.
    No obstante han pasado 20 años desde la puesta a punto de PLM (sucedida en el curso de la restauración del Pantheon), se confirma una constante atención tanto en el mundo científico como en el de la restauración hacia estos morteros de alta fluidez, como testimonian tanto en la reciente intervención en el Congreso “Filling the Void”, celebrado en Londres y organizado  por ICON, The Institute of Conservation, Stone & Wall Paintings Group, como en el estudio en curso en Getty Conservation Institute, que ha insertado PLM-I entre los 7 morteros de inyección a examen.  

    PRODUCTO:

    MORTEROS Y LIGANTES
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/148-morteros-y-ligantes


    Bibliografía
      

    1. Mientras la restauración de la Castellana de Vergy ha sido llevado a cabo por Daniele Rossi en 2006, en Lentate ha llevado  el Studio Zanolini, en 2007.
    2. Giovanni Carturan, Gian Domenico Sorarù, Fabiano Vulcan. Relazione tecnica sulle malte PLM. Technical report, Università Degli Studi di Trento, Dipartimento di Ingegneria dei Materiali (1993)
    3. Bénédicte Rousset, Stéfania Gentile, Julian James, Barbara Pozzi "Injection grouts for molasse sandstone preliminary assessment”, consultabile sul sito della Conservation Science Consulting alla pagina http://www.conservation-science.ch/5-0-publications.html
    4. Sara Penoni, Maria Rosa Lanfranchi “Osservazioni su alcune malte da iniezione per la riadesione degli intonaci nelle pitture murali” Atti del Convegno “Scienza e Beni Culturali”, Bressanone (2005)
  • 18.2 NUEVOS PRODUCTOS - ESPONJA DE CONTACTO

    Esponja de Contacto 

    Una vez aplicado un protector hidrorepelente sobre una superficie de piedra es oportuno preguntarse: ¿ha funcionado?, ¿ha alcanzado un nivel aceptable o se debe repetir el tratamiento? Podemos finalmente preguntarnos si un tratamiento efectuado en años anteriores ha perdido ya la eficacia, o bien, más allá de la valoración visual, imparte todavía una protección aceptable.
    El método oficial actualmente en uso (Absorción de agua a baja presión, NorMal 44/93, llamado tubo Karsten o “método de la pipeta”), presenta algunas dificultades operativas (adherencia a las superficies, tratamiento de los datos,....), que requiere pedir la intervención de técnicos especializados. El CNR-ICVBC ha desarrollado una metodología, llamada “esponja de contacto”, es un método simple y rápido para valorar la eficacia de un tratamiento hidrorepelente, basado en la diferencia de peso de una esponja bañada, antes y después de ponerse en contacto con la superficie en examen. El agua transferida desde la esponja a la superficie (ver figura 1. Alone bañado dejado desde la esponja sobre un bloque de piedra después de la prueba. ) da el valor de la absorción de agua 

    La absorción puede ser influenciada, aunque en menor medida, por la presencia de humedad en el material de prueba, que a su vez depende de las condiciones termo-higrométricas del ambiente en el que se haya expuesto. Por este motivo, si queremos valorar la eficiencia de un tratamiento protector mediante pruebas “antes-después” se deberían efectuar las medidas en las mismas condiciones ambientales. Mejor todavía se debería dejar una porción de la superficie no tratada, y efectuar las medidas contemporáneamente a las del área tratada con hidrorepelente, desvinculándose de las variaciones ambientales (la comparación, en este caso. no vendría hecha del hecho “antes-después”, sino de “tratado-no tratado” en las mismas condiciones ambientales).  

    Para efectuar la medida es necesaria una balanza con precisión de décimas de gramo en el caso de materiales poco absorbentes (ej. CL 201J) o, con precisión del centésima de gramo (ej. AV 412) o del milésima de gramo (ej. PA 413) en el caso de absorciones reducidas.
     La fiabilidad de los resultados depende de la precisión de la balanza utilizada.  

    C.T.S. ha insertado en su catálogo un kit que contiene: 3 muestras de contacto en policarbonato,  3 esponjas de contacto, 3 jeringuillas de plástico de 10cc., 3 agujas estranguladas diam. 0,9 mm,   3 saquitos de polietileno.


    METODOLOGIA DE PRUEBA  

    Si se dispone de una balanza en la obra el procedimiento es muy simple:

    1.    Se impregna bien la esponja de contacto con agua desmineralizada hasta que se hinche completamente, se enjuaga cuidadosamente, se seca con papel absorbente hasta dejarla completamente húmeda, y después se pone en la pieza de policarbonato.
    2.    Con la jeringuilla se añaden 6-7 ml de agua desmineralizada a la esponja. La cantidad de agua a añadir debe de ser tal que, después de una prueba preliminar, una vez puesta la esponja de contacto en la zona a examinar, el agua no gotee.
    3.    Se cierra la pieza de policarbonato con su tapa, y se pesa. Se obtiene Pi (peso inicial).
    4.    Se quita la tapa y se pone la pieza con la esponja de contacto en la superficie de piedra, en la zona que sea más plana, manteniéndola apretada hasta tocar el borde de la pieza con la superficie (máxima carga), por un tiempo establecido (de 1 a 5 minutos en función de las condiciones del material), como se muestra en la figura.
    5.    Se vuelve a cerrar la pieza después con su tapa y se vuelve a pesar. Se obtiene Pf (peso final).    

    (Ver figura 2 – Determinación de la capacidad de absorción de agua en la zona de examen aplicando la esponja de contacto a la máxima carga por un tiempo prefijado).        

    Si en la obra no se dispone de una balanza
     el procedimiento es ligeramente diferente, debiendo transferir al laboratorio las piezas dentro de los saquitos sellados (Figura de al lado).
      
    Al término de las pesadas se efectúa un cálculo de la cantidad de agua absorbida (Wa), a través de la siguiente fórmula.  
                                                       Wa (g/cm2min) = (Pi - Pf)/23.76 t

    ·      t es el tiempo de contacto, expresados en minutos,
    ·      Pi el peso inicial, Pf el peso final, en gramos,
    ·      23.76 cm2 la superficie de contacto de la esponja.  

    Por cada medida es posible recoger solo un dato, pero se aconseja efectuar más medidas (al menos 3), y calcular después un valor medio. Este valor medio se calcula después en relación a la prueba, además de la cantidad de agua añadida a la esponjilla (ml), el tiempo de contacto (min),  los valores de temperatura  (°C) y humedad relativa (RH) y ambiental (donde es posible).

    b_18-2_1.png

    b_18-2_2.png

    PRODUCTO:

    ESPONJA DE CONTACTO - KIT
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/872-esponja-de-contacto-kit



    Bibliografía
    P. Tiano, C. Pardini, 2004, Valutazione in situ dei trattamenti protettivi per il materiale lapideo, proposta di una nuova semplice metodologia, ARKOS 5, 30–36. De la cual se han tratado las imágenes descritas en este artículo.

    A. Calia, M. Lettieri, G. Quarta, M. Laurenzi Tabasso, A.M. Mecchi, 2004, Documentation and assessment of the most important conservation treatments carried out on Lecce stone monuments in the last two decades, in “Proceedings of the 10th International Congress Deterioration and conservation of stone”, edited by D. Kwiatkowski, R. Löfvendahl, Stockholm, ICOMOS, 431–438.

    M. Pamplona, M.J. Melo, L. Aires-Barros, 2008, Assessment of the long term behaviour of stone consolidants – a proposed methodology, in “Proceeding of the International Symposium Stone consolidation in cultural heritage. Research and practice”, edited by J. Delgado Rodrigues and J. Mimoso, Lisbon, LNEC, 349-357

  • 18.3 MÁS INFORMACIÓN - OBRAS EN HIERRO: CONVERSIÓN Y PROTECCIÓN – PARTE II

    En un artículo precedente del Boletín (17.3  Lo "complejo" del hierro) se ha hablado de los sistemas de limpieza para manufacturados en hierro. En este número hablaremos sin embargo, de la conversión y protección del hierro, procedimientos extremadamente importantes para el mantenimiento de la obra a lo largo del tiempo.
    Un convertidor es un producto que transforma los óxidos inestables de hierro (el conocido óxido) en compuestos termodinámicamente más estables. En el mercado existen muchos convertidores que contienen taninos y ácido fosfórico en solución acuosa o hidroalcohólica. Todavía, alguno de estos productos contienen también resinas, por ejemplo acrílicas, que forman un film superficial. El film es rígido y tiende a fracturarse; el agua puede entrar en el núcleo y desencadenar fenómenos de corrosión por debajo de ese film sin que esto se note en la superficie. Es importante, por tanto, elegir productos que no contengan resinas o sustancias filmógenas (por ejemplo Fertan). 
    El convertidor puede incluso preparase en el laboratorio por el restaurador si se prefiere controlar la cantidad de reagentes presentes, partiendo de los ácidos tannico y fosfórico, con mezclas en solución hidroalcohólica. Una solución única de agua desmineralizada (es preferible cuando se crean mezclas “reactivas”) no permitirían a los reagentes penetrar suficientemente, por ello está bien añadir alcoholes como el etílico, el isopropílico o el Solvanol que favorezcan una mayor difusión o penetración. La cantidad de reagentes puede variar desde un 3% a un 5% en peso de ácido tannico y eventualmente hasta el 35% en peso de acido fosforico. Tanto si se usa un convertidor comercial, como un convertidor “hecho por el restaurador”, bañar la superficie con agua desmineralizada y/o alcohol antes de aplicar los convertidores puede favorecer la penetración. Es esencial haber quitado las sales solubles antes de este tratamiento para evitar que haya estratos y que estos permanezcan en la superficie (eflorescencias a menudo rosas y delicuescentes), obstaculizando entre otras cosas la acción del convertidor (Ver imagen 1).

    El ácido fosfórico hace la superficie más oscura, todavía es indispensable para manufacturados en el exterior, ya que los fosfatos son insolubles y más estables. Para manufacturados musealizados, sin embargo, puede ser suficiente un convertidor a base de tanninos, hidrosolubles pero que modifican mucho menos el color de la superficie. Después del uso de un convertidor es por tanto necesario aplicar un protector adecuado.  

    Estabilizar un manufacturado, todavía, puede entenderse como un refuerzo más o menos estructural del objeto, operación que puede prever la consolidación y/o la readhesión de las partes. Sobre todo, es bueno clarificar el significado de los términos de la cohesión y de la adhesión:  
    -       
    Cohesiónfuerza de atracción reciproca entre átomos o moléculas de las que depende el estado de agregación de los cuerpos sólidos, líquidos y gaseosos. Cuando la fuerza de cohesión falta, los materiales sólidos se convierten en pulverulentos. El tratamiento que permite la recuperación, parcial o total, de las fuerzas se llama consolidación (por medio de consolidantes). El uso de soluciones poliméricas (resinas) de baja viscosidad, permite un mayor grado de penetración en los poros del objeto. En el caso de que los polímeros se disuelvan en disolvente (por ejemplo acrílicos) es aconsejable el uso de disolventes poco volátiles, los cuales promueven la penetración de las macromoléculas. Todavía, el grado de penetración depende también de la estructura química de los polímeros, de la grandeza de los poros, de las características mismas del material a consolidar, etc. y son por tanto necesarias pruebas preliminares. El vaciado, sobre todo en el caso de manufacturados arqueológicos, puede ser de gran ayuda, si bien, se usa con una cierta discreción sobre manufacturados muy frágiles. 
     
    -       Adhesiónfuerza de atracción ejercitada entre las moléculas de dos cuerpos puestos en contacto entre ellos. Cuando la fuerza de adhesión entre dos superficies falta, el manufacturado se encuentra roto en escamas, en piezas de varias medidas y formas... Los tratamientos que permiten la recuperación, parcial o total, de esas fuerzas de adhesión se llaman tratamientos de readhesión (por medio de adhesivos). Una buena fuerza adhesiva se obtiene a través de las resinas epoxidicas (aconsejadas para grandes superficies), o compuestos acrílicos (para fragmentos pequeños) entre otros muchos compuestos.  

    Las resinas epoxídicas y resinas de poliéster a menudo se usan tanto para consolidar como para tratamientos de readhesión. Todavía, las resinas de poliéster contienen estireno y se consideran muy tóxicas. Resinas epoxidicas como la Epo 150 o la Epo 155 (la cual tiene una particular característica de ser flexible) son bastante fluidas y no dejan cloruros o productos dañinos para el hierro. Tanto los poliesteres como las resinas epoxidicas son polímeros “estructurales” pero difícilmente reversibles por medio de disolventes. 
    En algunos casos, podría ser necesario introducir una armadura o unas espigas de refuerzo, las cuales deben ser de materiales electro químicamente compatibles (no debe formar celdas galvánicas).    

    El paso final, extremadamente importante para la conservación de la pieza, es la protección. Para manufacturados en ambientes externos se pueden usar también los coatings a base de resinas epoxidicas o, en algunos casos, poliuretanos cargados, que todavía alteran de manera evidente el aspecto superficial. Existen en el mercado barnices apropiados para dar una buena protección al objeto de hierro situado en el exterior, con la ventaja de no modificar el color superficial y de ser difícilmente reversibles con métodos no mecánicos como disolventes orgánicos. 
     

    Los protectores que responden a las exigencias de la conservación en cuanto a la eliminación y no alteración de la cromía de los manufacturados en hierro de interés histórico artístico son:
      
    -       Acrílicos: por ejemplo Incral 44 y Paraloid B72.
    -       Ceras: por ejemplo Reswax WH.  

    Para los polímeros es importante valorar la temperatura de transición vitrea (Tg): si es baja, el film podría capturar el polvo, vehículo de corrosión sobre las obras en hierro. El conocido Paraloid B72 es el miembro más famoso de una familia de resinas acrílicas. Todos los Paraloid son resinas termoplásticas, solubles en cetonas, hidrocarburos aromáticos y clorurados.  

    Las principales diferencias son:  
    -       Dureza Tukon: cuanto más alta es la resistencia Tukon, mayor es la resistencia de la protección a la abrasión
    -       Temperatura de transición vítrea (Tg): es una temperatura definida, en la que las macromoléculas del polímero empiezan a moverse. A nivel macroscópico no se notan particulares diferencias (no se aplasta, no se deforma, etc.) pero el polvo puede permanecer  “encerrado” por el movimiento de la cadena química (ver imagen 2).  

    A veces, las resinas más duras dan una protección dura pero frágil, pero con un mayor efecto protector y una Tg alta; están por tanto indicadas para la protección de manufacturados externos. Para los metales en exterior, se obtienen buenos resultados con el Paraloid B44 u otros barnices similares como, por ejemplo, el Incral 44 (ej. Incralac 44, con la misma composición química). Este tipo de productos tienen de hecho una Tg elevada (60°C), indispensable para resistir al calentamiento que sufren los metales al sol, pero la dureza Tukon no es demasiado elevada por lo que permite al barniz ser más flexibles y seguir la dilatación del metal.   

    También por lo que concierne a las ceras, usadas como protección final por encima de los estratos de acrílico para conferir opacidad y protección a la permeabilidad de los gases, es necesario valorar la “dureza”. En este caso, no se hablará de dureza Tukon (incluso las ceras más duras pueden rayarse con facilidad) ni de Tg; Hay que considerar el valor de la temperatura de fusión (Tf) para valorar la dureza: cuanto más alta es la Tf menos maleable y mas dura resultará. A diferencia de un polímero, cerca de la Tf una cera se convierte más pastosa y se licua.  

                                         Tipo di Cera             Componente de Base                      Tf °C
                                          COSMOLLOID 80     Cera Microcristalina                          80 - 85

                                          RESWAX WH            Mezcla de ceras naturales                
    103 - 105
                                                                            microcristalinas y polietilenicas 
     

                                          Cera Virgen                
    Cera natural                                      30 - 45
                                          de Abeja  
    Comparación de las características de algunas ceras del mercado.  
    La cera de abeja no va bien para metales al exterior, pero incluso en piezas que se encuentren en interior puede dar problemas debido a la baja Tf (captura el polvo a temperatura ambiente). La Cosmolloid 80 (Tf ca. 80°C) y la Reswax WH (Tf ca. 103°C) son aconsejables para objetos de museo, mientras en ambientes externos solo Reswax WH garantiza una buena protección de los objetos de metal. Importante: solo el tratamiento con resinas acrílicas permite hacer la superficie hidrorepelente, pero permeable al gas como el oxígeno. La cera sin embargo, oportunamente aplicada, obstaculiza eficazmente la penetración de los gases. Recordando que el principal mecanismo de corrosión del hierro necesita la presencia tanto de agua como de gas (oxigeno), se hace necesaria la aplicación tanto de barniz acrílico (antes) como de la cera (después). Por estudios de ICR se ha probado que la unión Incral 44/Reswax WH es la más eficaz para la protección de obras metálicas en exteriores (Articulo sobre los actos del Simposio Ancient & Historic Metals organizado por  J. Paul Getty Museum and the Getty Conservation Institute  en  noviembre  1991.  

    PRODUCTO:

    RESINAS SINTÉTICAS ACRÍLICAS
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/41-resinas-sinteticas-acrilicas

    PROTECTORES - HIDROFUGANTES
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/147-protectores-hidrofugantes


    Bibliografia
      
    1.    Marabelli, Maurizio. Conservazione e Restauro dei Metalli d'Arte. Roma: Bardi Editore, 2007.
    2.     Leoni, Massimo. Elementi di Metallurgia Applicata al Restauro delle Opere d'Arte. Firenze: Opus Libri, n.d.      
    3.     Maurizio Marabelli “The Monument of Marcus Aurelius: Research and Conservation” pp. 1-19 in Ancient & Historic Metals – Conservation and scientific research, atti del Simposio organizzato da the J. Paul Getty Museum e the Getty Museum Institute, Novembre 1991.

  • 17.1 NUEVOS PRODUCTOS - MICRO EMULSIONES ACRÍLICAS

    Micro emulsiones acrílicas

    Una de las nuevas fronteras de la química es la de la miniaturización de las partículas y de los agregados moleculares, que toma el nombre de la nanotecnología.
    Ya hemos introducido el argumento hablando de Nanorestore® (ver  Boletín nº 14.2 – Nuevos Productos - El nano y el micro), y desde ese artículo elaboramos la siguiente tabla que nos ayuda a entrar en el mundo de los prefijos liliputienses.

    Un milímetro es un milésimo de metro (10-3 m), mientras  un millonésimo de metro (10-6 m), el micrómetro, es llamado micrón. Dividiendo todavía por 1000 llegamos a un miliardesimo de metro (10-9 m), obteniendo el nanometro (nm).

    Metro

    m

    1

    Milímetro

    mm

    10-3 m (milésimo)

    Micrómetro (micrón)

    μ

    10-6 m (millonésimo)

    Nanometro

    nm

    10-9 m (millardesimo)

    Picometro

    pm

    10-12 m (millonésimo de millonésimo)


    Materiales de uso frecuente en la restauración, como los látex acrílicos, se asocian a las palabras emulsión, microemulsión y dispersión, términos que se usan a veces como sinónimos y que generan un poco de confusión. Es por tanto, necesario esclarecer los términos que se usan “científicamente” o por “tradición comercial”. Una emulsión “normal” se define [1] como una dispersión de dos líquidos no mezclables entre ellos, uno de los cuales forma unas gotitas (fase dispersa), mientras que el otro representa la fase continua (fase dispersora). El todo se realiza gracias a la presencia de oportunos tensioativos. Dado que una de las dos fases es siempre el agua, se pueden dar dos casos:

    • Emulsiones O/W (Oil/Water) es la más común donde la fase continua, dispersora, es el agua, y la dispersa es un aceite o más genéricamente un líquido orgánico no mezclable en agua (hidrocarburos aromáticos o clorurados, esencia de trementina...). Un ejemplo que vemos a diario es la leche.
    • Emulsiones “inversas” W/O (Water/Oil), donde gotitas de agua se dispersan en la fase orgánica. En la vida cotidiana tenemos muchos ejemplos de emulsiones inversas, y una de ellas, la mayonesa, la preparamos nosotros mismos, usando la lecitina del huevo como tensioactivo.

    Un hecho muy importante es que con el paso del tiempo las emulsiones tienden a separarse (en determinadas condiciones incluso rápidamente), en las dos fases. Se dice que las emulsiones son termodinámicamente inestables, o sea que su situación de mínima energía es la de la separación de fase, y que después se forman por acción mecánica (agitación), pero que inexorablemente volverán a ser agua y aceite, ¡separados!. Las gotitas de fase dispersa pueden tener dimensiones que van de 5 a 10 micrón, y el aspecto luminoso indica una dispersión de la luz (light scattering), debida a la interferencia de estas gotitas con la radiación luminosa. Una verdadera micro emulsión sin embargo no se separa: es termodinámicamente estable. En la teoría metiendo los componentes (normalmente 4) en el mismo contenedor, y en las justas proporciones, la microemulsión se formaría por si misma!!! Naturalmente cuestiones cinéticas hacen que esto ocurra muy lentamente, y así... con una rápida sacudida la micro emulsión está lista!!! En este caso las partículas se reducen a menos de 0,05 micrón (o sea menos de 50 nanometros); con estas dimensiones no existe el fenómeno del scattering, y así, la micro emulsión aparece perfectamente transparente, además de mostrar una insólita  baja viscosidad.Téngase presente que en el campo de la restauración usamos el término emulsión de modo impropio, refiriéndose a las dispersiones de polímeros (o sea de los sólidos), en agua, los llamados “látex” acrílicos o vinílicos. Estas dispersiones, cuyas dimensiones van de 150 a 400 nanometros (diámetro de las partículas), dan scattering de la luz y después aparecen luminosas, y con el tiempo se separan.

    1. En la tabla de abajo se describen algunos ejemplos de dimensiones de materiales usados en la restauración.

     

    Nombre comercial

    Dimensiones de las partículas (nm)

    Resinas acrílicas con peso molecular alrededor a 100.000 u.m.a en dispersión acuosa (“látex acrílicos”)

    Plextol B500

    Acril 33

    100-1000

    Microemulsiones acrílicas

    Acril ME

    50

    Elastómero fluorurado con peso molecular alrededor a 300.000 u.m.a en microemulsion acuosa

    Akeogard ME

    20

    Elastómero fluorurado con peso molecular alrededor a 400.000 u.m.a en solución disolvente

    Fluoline HY

    10

    Polímero en disolvente

     

    1-10


    Esta breve introducción es necesaria para no generar confusión sobre el nuevo producto C.T.S., ACRIL ME, una dispersión acrílica muy fina, que tiene partículas de media de un diámetro 50 nm.
    Comercialmente esta clase que se diferencia de las clásicas “emulsiones” acrílicas por su finura se denomina “micro emulsión acrílica”, y también nosotros usaremos para ACRIL ME este término es un poco inapropiado. Han aparecido ya en el mercado microemulsiones acrílicas propuestas para la consolidación de materiales varios, pero permanecen abiertas algunas cuestiones fundamentales: ¿cuanto penetran? ¿son estables en el tiempo? ¿que efectos tienen la irradiación solar?
    Hemos por tanto, sometido la microemulsión ACRIL ME a un envejecimiento acelerado, junto a otros productos que han demostrado su estabilidad, como Silo 112, el Fluoline PE y la Regal Varnish, y os mostramos los resultados, presentados en el último convenio de IGIIC de Spoleto [2].

    Del espectro IR del producto “fresco” y después más progresivamente expuesto a irradiación con lámpara de Xenón durante 3000 horas resulta una excepcional estabilidad, confirmada por la mínima variación colorimétrica (ver imagen).

    Un segundo resultado es que el mecanismo de degradación, aunque mínimo, va en la dirección inversa a la del Paraloid, que como es conocido sufre escisión de las cadenas, con consiguiente disminución del peso molecular y de la Tg. En este caso si tiene una progresiva reticulación, con ligero aumento de la Tg: esto se asocia a una reducción de la solubilidad (como se describe en la tabla de abajo), hecho aceptable para un consolidante.

    Producto

    Fracción soluble (%) en acetonas después de irradiación UV

     

    238 h

    497 h

    982 h

    1580 h

    2034 h

    3000 h

     ACRIL ME

    100

    42

    28

    27

    28

    12



    Es por tanto oportuno, en el caso que se desee obtener la máxima reversibilidad, no usar como protector/fijativo ACRIL ME, pero si un producto que mantenga la máxima solubilidad en el tiempo, como el Fluoline HY
    Otro punto a subrayar es que las dimensiones así reducidas de las partículas comportan una viscosidad notablemente más baja, (para ACRIL ME es inferior a los 500 mPa.s, respecto a valores superiores a 1000 para las emulsiones normales),  requisito para una penetración óptima en una matriz porosa. Podemos por tanto, usar ACRIL ME todas las veces que queramos efectuar una ligera consolidación o fijación de las superficies de materiales de piedra, revoques, ladrillos, obteniendo una mayor penetración respecto a los clásicos Acril 33, Primal, Plextol B500.
     Se aconseja también el añadir una pequeña cantidad de alcohol etílico para mejorar la penetración.
    Finalmente, un interesante estudio [3] ha tratado de relacionar las dimensiones de las partículas con la profundidad de penetración en un revoque, comparando 3 dispersiones acrílicas con las dimensiones de las partículas de 150-200 nm, 100 nm y 35 nm. Según los autores “es evidente que para mantener en dispersión sistemas de dimensiones cada vez más pequeñas se necesita de un tensoactivo. Factor que podría tener influencia no siempre fácilmente previsible sobre la distribución, y si sobre el comportamiento de los productos una vez que han sido aplicados en soportes reales.” Medidas de porosidad muestran que el producto con partículas de 100 nm tiene mejor penetración en el estrato externo del mortero (0-0,5 cm), pero no penetra por debajo de 0,5 cm. El producto con partículas más grandes se acumulaba si embargo en la superficie. Es, sin embargo, importante aclarar que “los primeros indicios que aparecieron no parecían indicar que posteriores reducciones de las partículas, con el paso a productos con mezclas de alrededor de 35 nm, llevarían a una mejora en la penetración del producto aplicado”. Los autores imputan este hecho justo a los aditivos.    

    PRODUCTO:

    ACRIL ME
    https://shop-espana.ctseurope.com/47-acril-me 

    FLUOLINE HY - PROTECTOR REAGREGANTE
    https://shop-espana.ctseurope.com/187-fluoline-hy-protector-reagregante


    Bibliografía:
    [1] De Gennes P.G.; Taupin C.; «Microemulsions and the flexibility of Oil/Water interfaces», J.Phis.Chem (1982), 86, 2294-2304.
    [2] Borgioli L., Camaiti M., Rosi L.;“Comportamento all’irraggiamento UV di nuovi formulati polimerici per il restauro”, Actos del Congresso “Lo stato dell’arte 6”, Spoleto, 2-4 Octubre 2008. Nota: en el trabajo ACRIL ME está identificado por el término genérico “Microemulsion acrílica” (MA).
    [3] Biscontin G.; Driussi G.; Mazzeri R.; Nicoletti R.; Zendri E.; “Sviluppo di polimeri acrilici in dispersione acquosa per il consolidamento e la riaggregazione superficiale di pitture murali” Actos del Convenio de Bressanone (2005). 

  • 17.2 NUEVOS PRODUCTOS - HACIA UN NUEVO NEW DES

    Hacia un nuevo New Des

    También el 2008 ha estado caracterizado por una intensa actividad de estudio de los laboratorios CTS.

    No solo se han llevado a cabo test de envejecimiento acelerado de varios polímeros, en colaboración con el CNR-ICVBC (ver el artículo “Micro emulsiones acrílicas”, y el precedente,  “El renacimiento del perfluoropolieter”), pero se ha prestado una especial atención (como es tradición), a los efectos de nuevas moléculas de efecto biocida. Nos hemos propuesto valorar un principio activo que pudiese sustituir válidamente al benzalconio cloruro, ya conocido como New Des y probado desde hace tiempo [1], moviéndonos siempre en el ámbito de la gran familia de las sales de amonio cuaternario, sustancias de fuerte efecto bactericida, basado sobre la acción destructora de las paredes celulares de microorganismos. La estructura común tiene cuatro grupos de diversa naturaleza (dos son pequeños metiles) unidos alrededor de nitrógeno, que asume la carga positiva. El contra ion es casi siempre un anión cloruro (ver figura 1).     

    En base a la naturaleza de las cadenas se han producido diferentes, aunque de características similares: el más famoso, representado en la figura, donde una cadena se representa por un grupo fenil-, toma el nombre de benzalconio cloruro, pero existen otros como el cetalconio, el estearalconio, el miristalconio...

    Todos los componentes de la familia de las sales de amonio cuaternarias presentan propiedades similares, como la baja toxicidad y una marcada acción tensioactiva. Estas dos características los hacen muy interesantes para las aplicaciones en las obras de restauración, donde a una acción biocida se asocia a menudo una operación de limpieza de la superficie. Una de las formulaciones clásicas es la de la puesta en marcha por el Instituto Central de Restauración, denominada AB57, donde la sal de amonio cuaternario se absorbe fuertemente por la superficie de los materiales con los que entran en contacto. Esta propiedad es muy útil en algunas aplicaciones, ya que sin enjuagar o enjuagando poco, permanece una parte de la sal de amonio cuaternario que protege durante semanas el manufacturado y elimina los desechos biológicos.  

    Entre los diferentes productos alternativos nos ha parecido interesante una sal de amonio cuaternario que no tuviese en su fórmula el grupo benzilico, sino dos cadenas alquilitas de diez átomos de carbono, el llamado didecil-dimetil amonio cloruro, representado en la figura de abajo
     (ver figura 2).

    Ha sido llevado a cabo un experimento confrontándolo con dos conocidos productos a base de benzalconio cloruro, como el Preventol RI80 y el clásico New Des.

    Las pruebas se han efectuado junto a los laboratorios de microbiología de R&C Lab. Como podemos ver en la tabla se han probado dos bacterias (Pseudomonas Aeruginosa y Bacillus Subtilis), dos hongos (Aspergillus niger y Mucor), un lievito (Saccaromyces cerevisiaea), y finalmente un alga (Selenastrum(ver figura 3).

    Como podemos observar es necesario, para los tres principios activos, trabajar en concentraciones de al menos  el 1% de principio activo (el 0,5% no dan de hecho resultados aceptables). Es además inútil forzar demasiado las concentraciones: véanse de hecho idénticos resultados obtenidos con el Preventol RI80 al 4% y al 8%. Otro hecho interesante es la diferente eficacia de los principios activos según el microorganismo probado: la diferencia mayor se encuentra en al bacteria Pseudomonas Aeruginosa: con los productos a base de benzalconio la inhibición es mínima, mientras para el didecil-dimetil-amonio el efecto es superior ya al 1%, y se convierte además óptimo al 2,5% (ver figura 4).  

    En la foto: la muestra de piedras que contiene Pseudomonas Aeruginosa con didecil-dimetil amonio cloruro al 1, 2,5 y 5% de principio activo. Evidente es el efecto inhibidor.  
    También para el hongo Aspergillus Niger y para el lievito aparece un efecto mejor, aunque no es espectacular, con el didecil-dimetil-amonio, parece poseer un espectro de acción más amplio respecto al benzalconio.
    Además datos escritos [2] nos reportan una particular eficacia del didecil-dimetil-amonio sobre un hongo como el Stachybotrys chartarum, ya a una concentración del 1%.  

    Frente a estos resultados esperanzadores se propone una nueva formulación, New Des 50, diferente a la del clásico New Des, tanto por el tipo como por la cantidad de principio activo contenido, que pasa del 10 al 50%, resultando así incluso más conveniente económicamente.
      

    Como utilizar el New Des 50

    En la tabla podemos ver como la máxima eficacia se obtiene llevando el principio activo al 5%: en las situaciones problemáticas se aconseja diluir 1 litro de producto con 9 litros de agua desmineralizada. Téngase presente que en muchos casos se obtienen buenos resultados incluso con diluciones mayores, hasta 1:50. En presencia de manchas biológicas a menudo es aconsejable aumentar la concentración y efectuar una segunda aplicación después de haber eliminado el estrato más externo. Por el carácter “cationico” es incompatible con sustancias “aniónicas” como jabón, alcoholes etc.; y, sin embargo, compatible con detergentes cationicos o no iónicos y en parte con sales detergentes como carbonato de sodio, fosfato trisódico, etc... que además, en pequeñas dosis, alcalinizan el ambiente incrementando así el efecto.  
    Gracias a su estabilidad a las altas temperaturas, se aconseja el uso en soluciones calientes y también con dispersadores de vapor de agua, como la Limpiadora a Vapor MINOR 164. El New Des 50 disminuye notablemente la tensión superficial del agua en la que se disuelve, efecto coayudado por la presencia del 20% de alcohol isopropilico. Esto hace que se comporte como un emulsionante, dispersor y bañante, distribuyéndose sobre las superficies sobre las que se aplica y penetrando profundamente en los depósitos infectados que se crean en los puntos más escondidos.

    A la izquierda de la muestra de cultivo en ausencia de tratamiento, a la derecha los aloni de inhibición provocados por las tres concentraciones de New Des 50, 
    (ver figura 5).
    En conclusión tenemos a disposición un nuevo principio activo, que permitirá ampliar la acción sobre los microorganismos, mientras los apasionados del benzalconio no se dispersan: permanece siempre bajo forma de Preventol RI80!  

    b_17-2_1.png b_17-2_2.png

    PRODUCTO:

    NEW DES 50
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/325-new-des-50


    Bibliografía

    [1] Borgioli L., Pressi G., Secondin S., 
    “Valutazione dell’efficacia di prodotti biocidi” Proyecto Restauración n°26, (Marzo 2003).
    [2] J.A. Micales-Glaeser, J.D. Lloyd, T.L. Woods; “Efficacy of Didecyl Dimethyl Ammonium Chloride (DDAC), Disodium Octaborate Tetrahydrate (DOT), and Chlorothalonil (CTL) against Common Mold Fungi” 35th Annual Meeting IRG/WP, Ljubljana, Slovenia, 6-10 June 2004.

  • 17.3 MÁS INFORMACIÓN - LO “COMPLEJO” DEL HIERRO (PARTE I)

    Lo “complejo” del hierro (Parte I)

    En un artículo precedente a este boletín (15.3  Más Información – Las edades del hierro) se han tratado problemáticas físico-químicas y los motivos de degradación del hierro, y ahora tendremos en consideración los productos para la restauración de este problemático metal.
    Sobre todo, es necesario comprender como actuar en presencia de estratos óxidos comúnmente dichos “óxido”. El óxido no es un compuesto estable, la presencia de óxidos en superficie forma una barrera más o menos eficaz a la permeabilidad del gas y el agua; es necesario valorar la eliminación, sobre todo en caso de óxidos bastante compactos y si han sido sometidos o no a rápidos tratamientos de inhibición/protección.  

     La restauración de un manufacturado en hierro sigue tres pasos fundamentales:
    -        Limpieza: eliminación del polvo, de viejos protectores y productos de corrosión, etc.
    -        Estabilización: baños de inhibición, conversión de los estratos de óxido, consolidación, refuerzo estructural, etc.
    -        Protección final: cubiertas o barnices (estratos protectores).
    Si procede se pueden usar estucos para reintegrar la falta en el manufacturado. En esta primera parte se hablará de los sistemas de limpieza, reservando para otra ocasión las intervenciones de estabilización, protección final y reintegración.  

    El primer paso en la limpieza es valorar la presencia de sales solubles (sobretodo los cloruros y nitratos) y proceder a su eliminación. La presencia de sales en solución se puede evaluar por medio de un conductivimetro, analizando las aguas de lavado (usar agua desmineralizada). La media de la conductibilidad iónica de la solución es un índice que nos indica la presencia de especies iónicas en solución, por tanto de sales solubles. La unidad de medida es el Siemens sobre cm, que se convierte por comodidad a ppm (partes por millón) de carbonato de calcio. Un ejemplo:
      

                                                        1μS/cm = 0,5 ppm CaCO3 = 0,5 mg/l
      

    La medida depende de la temperatura y de la concentración de iones disueltos en manera lineal (cuanto más alto sea el valor de respuesta más alta será la concentración de sales), teniendo en cuenta que el agua destilada/desmineralizada (desionizada) tiene valores por debajo de 5 μS/cm. Antes de medir la conductibilidad de la solución es de todas formas útil hacer una medida de referencia (conductibilidad y temperatura) sobre el agua desmineralizada usada para la operación. Además, está bien comprender los parámetros instrumentales:
      ·    Escala/Fondo Escala: índice de medida mínimo y máximo de un instrumento.
      
    ·    Resolución: valor mínimo bajo el cual el instrumento no consigue revelar valores.
      
    ·    Precisión: error porcentual calculado sobre el fondo de escala.

    La limpieza de las sales puede realizarse con agua simple, pero se aconseja añadir un pequeño porcentaje de hidróxido de sodio (NaOH alrededor al 2% en peso).
    Para objetos provenientes de museos, antes de efectuar baños de inhibición y limpieza con reagentes arriba indicados, podría ser necesaria una acción de desengrase. La desalación puede llevarse a cabo con métodos electroquímicos.  

    Para la eliminación de los óxidos, los tres tipos de limpieza más comunes son:  

    Mecánica: se puede obtener con herramientas como vibroincisores, microescalpelos, micromotes, los cuales consiguen quitar los estratos de óxido mediante un movimiento de rozamiento (escalpelo), de vibración, rotación, etc... de un utensilio. Conceptualmente, sustituyen instrumentos manuales como bisturí, escalpelos, etc... eficaces pero que necesitan más tiempo y fatiga por parte del operador. Las susodichas herramientas pueden ser neumáticas (el movimiento sucede por insuflación de aire por medio de un compresor), eléctricas, o más complejas, como los aparatos a ultrasonidos cuyo movimiento sucede gracias a ondas electromagnéticas. Variando las características de los utensilios (puntas) como dureza, forma, material, etc... se pueden obtener diferentes grados (niveles) de limpieza.
    Un particular tipo de limpieza mecánica es la abrasiva con microaspirado. Existen abrasivos más o menos duros, con varias granulometrías (mesh o micrón) y forma de granos; todavía el parámetro más importante a verificar y controlar es la presión de salida del abrasivo. Contrariamente a lo que comúnmente se piensa, no siempre con un abrasivo “suave” (ej. CaCO3) se tiene una limpieza delicada. La presión es por definición la fuerza por la unidad de superficie. En simples palabras, es la violencia del impacto entre el abrasivo y la superficie. Pensemos en la hidrolimpieza: el agua es un líquido (por tanto, no se puede medir la dureza física como un material sólido) pero la alta presión de salida del flujo, la hace un potente abrasivo, en grado de dañar irreversiblemente una superficie si se usa de manera indiscriminada. Sin embargo, un abrasivo muy “duro” (oxido de aluminio, garnet, etc.) permite efectuar una microlimpieza controlada y a baja presión. La limpieza mecánica está sobre todo adecuada en el caso de que los estratos a quitar sean muy duros y espesos, o bien si el objeto a restaurar es heterogéneo (por ejemplo armaduras de cuero y hierro), eligiendo el método mecánico mas adecuado.
    Química: con complejos como EDTA bisódico o tetrasódico (ficha EDTA en la página siguiente). En el caso de que se quieran preservar particulares muy pequeños (incisiones, injertos, etc.) la limpieza química puede dar resultados mejores. Por limpieza química se puede entender también el “desengrase de objetos” (por ejemplo armas) recubiertas de parafinas, ceras u otros protectores cerosos/aceitosos. Un disolvente que puede prestarse a tal limpieza es el Citrosolv, que consigue quitar rápidamente los estratos no deseados sin dañar la superficie o desencadenar la corrosión.
    Electroquímica: ¡no hacer en manufacturados frágiles ya que es invasiva! De hecho, la limpieza electroquímica se basa en el principio del “stripping” (literalmente, desgarro) debido al hidrógeno (gas) que se produce por electrólisis del agua en que se introduce el manufacturado. La reacción es bastante violenta y el gas penetra no solo en la obra sino en los huecos y fisuras en las que el agua consigue entrar. Puede ser una metodología a valorar en el caso de objetos robustos, sin particulares pequeños en relevancia y/o encastrados, insertos, etc.                

    EDTA
     Acido EtilenDiamminTetracetico salificado con 2, 3, 4 cationes de sodio. La eficacia del complejo depende del pH. Para el hierro el EDTA bisodico, con pH blandamente acido, es más rápido. Para la cal es mejor el tetrasodico, con pH básico. Si es necesario lavar complejos de hierro o cobre sobre un muro mejor usar el bisodico aunque sea ácido, porque secuestra antes el hierro y cobre y después ataca la cal. (ver el articulo “Un viejo óxido”). A través  de la salificación (unión de un acido y de una base hasta obtener la sal correspondiente) del acido EtilenDiamminTetrAcetico con hidróxido de sodio, se obtiene el EDTA Tetrasodico (ver figura nº1).

    Efecto quelante
     Justo como entre las patas de un cangrejo, los iones positivos del metal se capturan de las “quelas” del EDTA. En la figura de al lado se ve el mecanismo con el que el EDTA Tetrasodico captura el  ion positivo de un genérico metal denominado M. Los átomos de oxigeno (O) y nitrógeno (N) tienen la capacidad de atraer fuertemente los iones positivos. Muchos complejos (aminas, ácidos policarboxisilicios, etc.) deben su propia eficacia a la presencia de estas dos especias (ver figura nº2).        
     
     

    PRODUCTO:

    EDTA SAL BISÓDICA
    https://shop-espana.ctseurope.com/319-edta-sal-bisodica

    EDTA SAL TETRASÓDICA
    https://shop-espana.ctseurope.com/318-edta-sal-tetrasodica


    Bibliografía:

    [1] Maravedí, Mauricio. Conservación y Restauración de los Metales de Arte. Roma: Barda Editare, 2007.

  • 16.1 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - LA SOLUCIÓN EN EL INTERCAMBIO (AMBERLITE IR 120 H)

    La solución en el intercambio (Amberlite IR 120 H)  

    Un recientísimo articulo publicado por la revista Applied Physics [1] describe el profundo estudio que ha sido realizado por un equipo de investigadores del CNR-Instituto para el Estudio de los Materiales Nanoestructurales de Palermo y Roma y por la Universidad de los Estudios de Catania, sobre los efectos de algunos productos usados en la eliminación de las incrustaciones calcáreas de manufacturados cerámicos.

    Los objetos sometidos a examen representaban una amplia tipología de cerámicas arqueológicas provenientes de varios lugares italianos, desde las campanas cerámicas del siglo IV-I  a.C., a vasos romanos en Tierra sellada (siglo I a.C. – siglo IV d.C.), hasta las cerámicas medievales de Caltagirone del siglo XII-XVII.
    La tipología de las diferentes superficies cubría las varias casuísticas, desde las campanas vidriadas negras, a las rosas romanas, hasta las proto mayólicas a base de plomo.    

    La primera parte del estudio, dirigido a determinar la composición de las incrustaciones, ha denotado que en la multiforme casuística, todas las incrustaciones son reconducibles a la calcita (CaCO- carbonato de cal), que se deposita en las irregularidades de las superficies que se forman después de un primer proceso de erosión. Se observa también una reducida presencia de cuarzo (SiO2), y raramente se encuentran otros componentes como sulfato de calcio, óxidos de hierro y manganeso.
     La conclusión es que todas las incrustaciones pueden eliminarse operando sobre el carbonato de cal. Una vez excluida la posibilidad de intervenir con agentes químicos (ácidos, o bien complejos como EDTA), que puedan penetrar por debajo de la incrustación, y por tanto atacar tanto la superficie decorada como la estructura cerámica, permanece la opción de las resinas de intercambio iónico de tipo  cationico,  como  el Amberlite IR 120 H.  

    Esta es una resina cationica fuerte, que actúa en el cambio bloqueando los cationes (en nuestro caso Ca2+) y dejando hidrogeniones H+:
        

                                                [Resina -SO3-  H+]   +  Cat+    
    →     [Resina -SO3-  Cat+]  +    H+


    La Resina
     Amberlite
     IR 120 H se entiende como un copolímero estirene/DVB (divinilbenzeno), en cuya estructura se inyectan los grupos de intercambio verdaderos y propios, -SO3-
    El ion H+ actúa después con el carbonato: se forma entonces un acido inestable, el acido carbónico, que se dirige hacia los abajo indicados productos de reacción, el agua y anhídrido carbónico, que evaporan:  


                                                   CO32-  + 2H+     →     [H2CO3]  →     H2O + CO2  



    La reacción resulta así en su totalidad neutra, sin acidez “libre”. Como es conocido el funcionamiento de las resinas de intercambio iónico está unido a la presencia de agua que hace de “vehículo” de los iones: cuando la resina se seca, el transporte se interrumpe. Por esto todas las pruebas se han realizado en ambientes cerrados, con el 100% de humedad relativa, de forma que excluye variables como el ambiente externo, la ventilación, etc…. Además, dado que la temperatura está directamente unida al movimiento de las partículas, se han efectuado medidas a 20, 30, 40, 50 y 60 °C, variando además también los tiempos de contacto, desde 12 a 72 horas.
    Los resultados dan al restaurador indicaciones muy útiles, resumidas en la tabla inferior, que permiten optimizar los procedimientos sin pérdidas de tiempo y evitando recurrir a pruebas empíricas  

    Temperatura.- 
    La óptima es 30°C, y es totalmente inútil calentar posteriormente.
    Tiempo de contacto*.- En el caso específico son óptimas las  24 horas, y a tiempos superiores los resultados no varían.
    Humedad.- RH = 100%. La compresa pierde eficacia una vez que se seca. 
     

    * En el caso de las incrustaciones más sutiles, o añadiendo barniz mate, los tiempos de contacto son mucho más breves. En particular sobre materiales que puedan ser agredidos por el fenómeno de intercambio, como pinturas murales, materiales de piedra, es necesario valorar los efectos con tiempos breves, incluso de pocos minutos.  

    Queremos hacer presente que operativamente el mantenimiento de la humedad necesaria puede ser obtenida con la adicción de un soporte hidrófilo (pulpa de celulosa, sepiolita) mezclándolo con la resina, pero no olvidemos que las resinas actúan sobre todo con el primer estrato que está en contacto con el soporte. El remanente espesor del estrato de resina funciona solo de soporte para el agua. 
    “Utilizar las resinas con varios soportes significa enterrar un porcentaje importante de partes activas de la resina de la interfaz con la superficie a tratar, y por tanto disminuir la eficacia de intercambio. La presencia constante de agua puede garantizarse con otra prueba, o sea, extendiendo un primer sutil estrato de Amberlite IR 120 H, y sobre el estrato de resina de intercambio un segundo estrato de pulpa de celulosa y agua destilada. Este procedimiento permite además un notable ahorro si se está obrando en grandes superficies. En casos extremos (altas temperaturas, fuerte ventilación), puede ser necesaria la aplicación de una película de polietileno o de aluminio. 
     

    Finalmente se han dirigido análisis SEM-EDS de dos diferentes decoraciones, una de color rojo coral de un fragmento de Tierra sellada, y el otro de una vidriera de plomo de una cerámica de Caltagirone del siglo XII. Antes y después de la eliminación de las incrustaciones no se tienen variaciones en las composiciones de las decoraciones, por tanto el método de limpieza es absolutamente respetuoso con las zonas más delicadas y preciosas de los objetos, materiales que están sujetos a sufrir riesgos con las limpiezas mecánicas. De hecho, la confrontación con objetos limpiados mecánicamente ha demostrado qué cantidades significativas de depósitos de carbonato permanecen en las zonas menos accesibles, sobre todo si los fragmentos están en malas condiciones de conservación. Una vez más la investigación científica esclarece algunos parámetros que permanecerían fruto de una intuición u obtenibles solo después de una larga serie de pruebas en obras.        

    Para saber más
      
    [1] Casaletto M.P., Ingo G.M., Riccucci C., De Caro T., Bultrini G., Fragalà I., Leoni M. “Chemical cleaning of encrustations on archaeological ceramic artefacts found in different Italian sites” Applied Physics A 92, 35-42 (2008)

  • 16.3 MÁS INFORMACIÓN - ¿VERDE? DIFÍCIL

    Introducción  
    La sensibilidad del ojo humano no es igual para todos los componentes de la luz. De hecho, a veces es difícil distinguir entre dos tonalidades de rojo o azul similares entre ellos; para el verde, sin embargo, normalmente nuestro ojo distingue a la perfección incluso mínimos matices. En sus variadas tonalidades, el verde es probablemente el color más difundido de la tierra. A menudo su presencia es secundaria o “de fondo” incluso para no darnos cuenta de su presencia, no como pasa con un objeto rojo, amarillo o azul intenso. Esta difusión del verde en la naturaleza lo ha convertido siempre en uno de los colores indispensables en la paleta de cualquier artista, el cual todavía no siempre lograba dar el matiz de verde esperado.
     
     ¿Verde? Difícil

    La larga y compleja historia de los verdes empieza en tiempos bastante remotos, con el uso de las tierras verdes, pigmentos naturales que contienen principalmente dos minerales: Celadonita y Glaucomita (ver 10.3  Más información – Las tierras naturales). Estos verdes eran muy resistentes y adecuados a cualquier técnica, a diferencia de los estratos vegetales (hierba rutaprugnolaverde vejiga, etc.) que podían usarse solo para miniaturas, acuarelas y velados, y que presentaban escasa resistencia a la luz. Aún, las tierras tienen una tonalidad apagada, plana, opaca y de poder poco cubriente.

    Otro verde conocido desde la antigüedad, pero también pálido y transparente, es la Malachite (carbonato básico de cobre), con la posterior problemática de ser un mineral, raro y precioso (Figura 1). Solo en el siglo XVII se intentó reproducir en laboratorio el llamado “verdetierra del refinador”, que a veces era de un bonito azul (azulado artificial) y otras veces un verde sucio (varios compuestos del cobre), otras veces un verde todavía más claro (malachite artificial). 

    Un bonito verde lozano y brillante era casi imposible de obtener, al menos en frescos. A menudo, la tierra usada como fondo se velaba con colores transparentes como el “mítico” resinado de cobre (Figura 2) y el verde cobre (acetato de cobre, uno de los primeros pigmentos sintéticos) especialmente en cuadros a témpera y a óleo. El efecto es un verde esmeralda oscuro pero dotado de un cierto brillo, dado por la refracción de la luz a través de los estratos de pigmento transparente. Poniendo una tierra amarilla o la hoja de oro como fondo en el lugar de la tierra verde, se obtenían verdes claros y con tendencia al amarillo. Otra fórmula consistía en la mezcla de pigmentos amarillos y azules, como el Amarillento (amarillo de plomo y estaño) y el Azulado. Se obtenía un verde más azulado y oscuro, llano y no lo suficientemente brillante. Además, el Azulado era un mineral preciado que de mala gana venía mezclado con colores menos nobles y después se destinaba a realizar azules verdaderos y propios. 

    A menudo, sin embargo, se prefería usar otro mineral denominado Crisocola, literalmente “aglutinante del oro” usado para mezclar piezas en joyería, de color similar a la Malachite con las mismas problemáticas. Incluso el llamado Verde Cal, obtenido de la presumible mezcla de una sal de cobre con cal, potasio y sales de amonio, no daba los resultados esperados, ya que el cobre tiene una tendencia a dar verdes intensos, pero con ciertos tonos siempre azulados, profundos y “fríos”. Muchos compuestos hoy vendidos bajo el nombre de Verde Cal no tienen nada que ver con el antiguo; se trata de particulares fragmentos verdes, a menudo compuestos por colorantes orgánicos y/o inorgánicos (compuestos de zinc, cobalto, cromo) sobre una base inorgánica blanca (sulfatos o carbonatos de bario, cal, etc.) eventualmente añadiendo dióxido de titanio para aumentar el poder cubriente. El porcentual de los diferentes agentes colorantes hace asumir al compuesto final tonalidades más o menos tendentes al azul. El resultado de esta dificultad para encontrar verdes artísticamente apetecibles, es la escasa difusión de este color en las obras medievales y el renacimiento tardío. Los fondos naturales aparecen a menudo muy oscuros, olivados, o bien azulados. También en los “nuevos” encontrados en el siglo XVIII, el cobre era siempre la base para obtener verdes arsenicales: Verde de Scheele, Verde Mineral, Verde Verones, Verde de Schweinfurt, Verde Real, etc.

    En el siglo XIX estos verdes, usados industrialmente para colorear las tapicerías económicas, causaron la muerte de varios niños. De hecho, si se exponen a la humedad, los verdes arsenicales soltaban un gas letal conocido como arsina (triiduro de arsénico). La leyenda dice que el mismo Napoleón fue víctima de estos en su celda del exilio en Santa Elena, tapizadas de un bonito verde esmeralda. Hoy en el mercado se encuentran todavía pigmentos verdes con los nombres históricos (especialmente el Verde Esmeralda), sin embargo ya no contienen arsénico.

    Un verdadero cambio en la composición de los verdes artísticos se produce en el siglo XIX, con la creación de verde a base de cobalto y de cromo: Verde Cobalto (que cubre mucho, azulado, intenso), Verde Esmeralda (que cubre poco, brillante pero no azulado), Verde Oxido de Cromo (que cubre mucho, opaco, olivado). Hoy, cromo y cobalto son todavía los componentes base de los pigmentos verdes en el mercado.  Un paréntesis debe de abrirse sobre las ftalocianine, compuestos orgánicos que varían del azul al verde: a menudo se encuentran como “tonalidades” en los pigmentos modernos o además como componentes base. Como se ha descrito en un número precedente de este boletín (13.3 Más información – «NEL BLU DIPINTO DI BLU»), se han compuesto orgánicos macro cíclicos, bastante resistentes a la luz. Sin embargo, está bien probar los pigmentos que contienen compuestos orgánicos como este para el uso en la cal, ya que un pH elevado podría causar la rotura de las macromoléculas de colorante provocando la pérdida del color. Para tener una idea de la tonalidad máxima y el poder cubriente de los pigmentos verdes CTS, se puede seguir la siguiente tabla (Figura 3).

    PRODUCTOS:

    PIGMENTOS PUROS CTS PARA ARTISTAS
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/437-pigmentos-puros-cts-para-artistas


    BIBLIOGRAFIA
    1.    Ball Philip, Colore una biografia, BUR saggi , febbraio 2004; 
    2.    Doerner Max, The Materials of the Artist and Their Use in Painting, Harvest Books, 1949; 
    3.    Matteini Mauro, Moles Arcangelo, La chimica nel restauro. I materiali dellarte pittorica, Nardini, 1991; 
    4.    Feller L. Robert, Artists´ Pigments - A Handbook of their History and Characteristics Vol. 1 Cambridge University Press, 1986; 
    5.    Roy Ashok, Artists´ Pigments - A Handbook of their History and Characteristics Vol. 2, Oxford University Press, 1997; 
    6.    West FitzHug Elisabeth, Artists´ Pigments - A Handbook of their History and Characteristics Vol. 3, National Gallery of Art, 19
  • 15.1 NUEVOS PRODUCTOS - EL RENACIMIENTO DEL FLÚOR POLIETILENO

    El renacimiento del flúor polietileno  

    La presentación de los dos productos basados en los elastómeros fluorurados, ha sido solo la primera etapa de un viaje en el mundo de la química del flúor. Ahora pasamos a las posibilidades que ofrecen una segunda clase de polímeros fluorurados, el flúor de polietilenos.
      

    Apareció en el mercado con el nombre Fomblin, nunca resultaron completamente satisfactorios bajo el perfil prestacional, unido principalmente a un lento pero gradual efecto de migración de las moléculas dentro de la estructura porosa, que dejaban, de hecho, la superficie no protegida.  

    El producto que proponemos, denominado Fluoline PE, posee sin embargo unos grupos terminales fosfato, que se pegan al material de piedra dando así la unión necesaria; no se trata por tanto de un fluorpolietireno normal, sino de un fluorpolietireno  funcionarizado.

    A diferencia de lo que se proponía en el pasado (con el nombre de Akeogard P), Fluoline PE es un concentrado emulsionado en solo agua desmineralizada. Este hace que no se tengan  ni problemas de inflamabilidad, ni problemas para la salud del usuario, dado que Fluoline PE no presenta valores intrínsecos de toxicidad y por tanto se propone como un producto utilizable en obras o en laboratorio con absoluta seguridad.
    El concentrado debe diluirse con más agua desmineralizada, o con alcohol isopropílico, siempre que se considere necesario no usar el vehículo acuoso (presencia de sales o de otras sustancias hidrosolubles presentes dentro de la obra/pieza...).  

    Este producto ha sido expuesto a envejecimiento acelerado en los laboratorios de CNR-ICVBC de Florencia, en el ámbito de un estudio comparado con otros productos como el ya citado eastomero fluorurado Fluoline HY, el Paraloid B-72, el siloxano Silo 112, un producto a base ciclo alifática (Regal Varnish), una microemulsion acrílica y un polímero hidrosoluble como el Aquazol. Los resultados completos de este estudio comparativo se presentarán en octubre en el convenio anual del Grupo Italiano del IIC, que tendrá lugar en  Spoleto.

    El espectro FTIR que describimos muestra como el envejecimiento deja sustancialmente inalterada la molécula, dado que no aparecen nuevos picos relativos, por ejemplo, a grupos oxigenados característicos de la forma de actuar de una oxidación (se encuentra solo una variación de intensidad) (ver imagen).  
    Al mismo tiempo que la ausencia de nuevos grupos funcionarizados está el mantenimiento del color, medido sobre pruebas de mármol blanco de carrara.
    Se han hecho dos aplicaciones con diversas cantidades de PE. La primera, en exceso, que nos ha permitido leer eventuales variaciones con el envejecimiento, y ha dado un ΔE* de 10,86, claramente perceptible al ojo humano.
    Esta cantidad, 120 g/m2, no debe nunca aplicarse en casos reales. La segunda prueba sin embargo ha empleado un cuantitativo ideal para la situación real de un mármol, o sea 12 g/m2, y el 
    ΔE* ha sido de 1,64, variación absolutamente imperceptible al ojo humano.
    Al realizar el envejecimiento la prueba de mármol tratado no ha dado lugar a variaciones del ΔE* inicial, incluso probando en la situación de aplicación excesiva. Otro resultado importante es la absoluta ausencia de reticulación, siempre en línea con la estabilidad del producto.
    Verificada la estabilidad, la pregunta que podemos ahora hacer es: “¿Por qué usar un floureter?”
    Resumimos por tanto, las ventajas de esta clase de polímeros
      

    Propiedades

    Consecuencia operativa

    Elevada estabilidad química de la unión C-F, que estabiliza incluso las uniones vecinas C- C

    Inercia a los agentes químicos, a la luz y al calor, duración en el tiempo mayor respeto a la de los acrílicos, vinílicos, silosanos.

    Bajísima energía superficial

    No bañabilidad ni por parte del agua ni por parte de los hidrocarburos y aceites minerales (efecto hidro-oleorepelente), y por tanto efecto antimancha

    Hidrorepelencia superior para los grupos CF3 respeto a los grupos CH3

    Menor cantidad de producto necesario para una protección óptima

    Transparencia a las radiaciones luminosas

    Reducido riesgo de foto oxidación



    Como todos los materiales, también los flúores éteres como Fluoline PE tienen precisas características y presentan unos límites aplicativos, que vamos a resumir.
      

    Propiedades

    Consecuencia operativa

    Las moléculas presentan bajísima Tg, y permanecen “líquidas”

    Si se aplica un exceso de producto puede verificarse el fenómeno de adhesión del polvo

    En las moléculas se han insertado grupos terminales fosfato que permiten el agarre a la superficie

    Después de algunas horas el producto resulta difícilmente eliminable (utilizar rápidamente después de la aplicación alcohol isopropílico o Mosstanol para reducir eventuales acumulaciones sobre la superficie) 

    PRODUCTO:

    FLUOLINE HY - PROTECTOR REAGREGANTE
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/187-fluoline-hy-protector-reagregante 

  • 15.2 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - APAGAR LOS “FUEGOS LENTOS”

    Apagar los “fuegos lentos” (2° parte - La desacificación en masa)
     
    Volvemos a retomar el tema introducido en el Boletín n°10.1 CTS "La desacidificación (1ª parte)", donde se presentaron las problemáticas relativas a la formación de acidez en el papel y en los soportes textiles, incluidas las telas de los cuadros.
    Sustancialmente la deacificación se produce al introducir un material alcalino como un hidróxido de magnesio o de calcio: operación relativamente sencilla, cuando se trata, por ejemplo, de un lavado acuoso de un folio, pero que se complica enormemente si el tratamiento se debe realizar en masa.
    Un libro no desunido no podrá ser inmerso en una solución acuosa, por una serie de problemas, sobre todo el secado.
    Aunque el principio activo se disuelve en disolvente, el problema se une a la eliminación del disolvente mismo, por no hablar de su acción sobre tintas, materiales de las cubiertas.... En cualquier caso se trata de una intervención extremadamente delicada, que prevé una fase de preselección de los objetos a tratar. De hecho ninguno de los sistemas puestos a punto permite el tratamiento indiferenciado de todas las tipologías de volúmenes que pueden estar presentes en cualquier biblioteca. Pueden estar presentes, además de las múltiples variedades de papel y de tintas, materiales como pergamino, pigmentos aplicados con varias técnicas, plásticos, tejidos, insertos metálicos y todo lo que la fantasía de un encuadernador haya podido maquinar. Una vez que un experto restaurador haya eliminado todos los objetos que podrían dañarse, algunos sistemas de deacificación necesiten un pretratamiento de los volúmenes. La fase final consiste en un secado, que puede realizarse en condiciones controladas, como el vaciado a baja temperatura (“Vacuum Freeze Drying”)[1].  

    La historia
    Los estudios más importantes sobre los tratamientos de masa se han desarrollado en Estados Unidos en los años ’80-‘90, y la Library of Congress ha sido la promotora de profundizar en investigaciones y confrontaciones entre los métodos. Varias empresas han propuesto tratamientos explotando productos alcalinos, como diversos vehículos. Los primeros estudios no fueron prometedores: recordamos que un primer examen comparativo en 1990 [2], conducido por la propia Library of Congress, se confrontaron tres procesos: Wei’To, DEZ y FMC (ver tabla), valorando varios parámetros, que vamos a ver para que nos ayuden a comprender la complejidad del problema.
    El pH óptimo que se debe conseguir al terminar el tratamiento de desacificación se fijó entre 6.8 y 10.4: por debajo de 6.8 se considera la deacificación no lograda, mientras que por encima de 10.4 se entra en un rango considerado peligroso (riesgo de hidrólisis alcalina).
    Los tres sistemas fueron rechazados por varios motivos: aunque con todos el pH se elevaba por encima de 7.5, el sistema FMC no daba uniformidad de tratamiento, es decir, una parte de las páginas permanecía ácida, mientras que con los tres sistemas las  reservas alcalinas (cuyo target había sido fijado a 300 meq/Kg), eran insuficientes y mal distribuidas.
    Aunque no se producían variaciones del color ni pérdida de las propiedades mecánicas al final de los tratamientos (requisitos fundamentales solicitados), los libros estaban excesivamente secos, hecho que llevaba a un ligero encrespamiento de las páginas. Los tratamientos además fueron valorados por un grupo de examinadores para individualizar los olores residuales: al final de los test, algunos examinadores notaron dolor de cabeza e irritación de garganta. No se pudo comprobar sin embargo, al cual de los tres procesos era imputable dicho efecto.

    Casi contemporáneamente 7 métodos de deacificación en masa (los primeros 7 de la tabla), que comprendían también los tres citados arriba, se llevaron a estudio comparado, esta vez por el instituto belga IRPA (Institut Royal du Patrimoine Artistique), y los resultados, publicados en la revista Restaurator da Anne Liénardy en 1994 [3], vieron prevalecer los sistemas DEZ y Bookkeeper, retenidos superiores al Wei T’o, al Archival Aids y al FMC. Sin embargo, rechazaron los sistemas BPA y Vienes.
     Desgraciadamente, justo en los años inmediatamente sucesivos a la prohibición de los CFC (debido al problema del agujero del ozono), obligó a varias empresas, que usaban estos disolventes como vehículo, a volver a reconsiderar sus procesos, modificando los principios activos, vehículos y metodología de aplicación. Además en 1994 Akzo Nobel se retiró del mercado juzgándolo antieconómico: el proceso DEZ, interesante en cuanto que se basaba en un gas (dietilzinco), presentaba problemas colaterales, entre los cuales la fotosensibilidad del Zn(OH)2 que constituía la reserva alcalina, y la explosividad del mismo gas (una instalación explotó en 1985).

    Estos cambios frustraron las meritorias comparaciones de la Library of Congress y de IRPA.  

    Cuadro resumen de los sistemas de deacificación en masa
      

    Nombre

    Productor – Ente

    Principio activo/disolvente/periodo

    DEZ

    Akzo and Library of Congress y
    Harvard University

    Dietilzinco en etano
    Primeros estudios en 1978. Cesado en 1994.

    FMC

    FMC Corporation (USA)

    Mg butossitriglicolato en CFC primero, en heptano después. Primeros estudios en los años 80.

    Wei T’o

    Wei T’o Associates – Union
    Carbide – Public Archives of Canada

     

    Metosis Mg metil carbonato (MMMC) en
    triclorotrifluoroetano, metanol Fundada en 1972. Primera instalación en 1981.

    Archival Aids

    Bibliothéque Nationale de France

    Metosis etosis Mg carbonato y Etossi Mg carbonato. Desde 1987.

    BPA

    Fiber Preservation

    Amoniaco + mono- di- y tri-etanolammine

    “Viennese System”

    Henkel – Osterreichische Nationalbibliothek (A)

     

    Ca(OH)2 + metilcelulosa en agua y después  Vacuum Freeze Drying

    Bookkeeper

     

     

    Koppers, desde 1987 Preservation Technologies,
    Inc. (USA), y desde 2002 también Archimascon
    (Holanda)

    MgO en perfluooalcanos.
    Primeros estudios en 1980, patentado en 1985.

    Papersave

     

    Nitrochemie Wimmis (Wimmis,Svizzera) y Zentrum für Bucherhaltung (Leipzig, Germania)

    Alcoxido de Mg y Ti primero en triclorotrifluoroetano y después en esametildisilosano (HMDO)

    CSC Booksaver

     

    Conservación de Sustratos Celulósicos (E)
    Preservation Academy Leipzig (D)

    Propilato y carbonato de magnesio en
    propanol y eptafluoropentano (HFC 227)

    Neschen

    Neschen AG (D) Bicarbonato de magnesio en agua

     

    Libertec

    Libertec Bibliothekendienst (D) MgO e CaCO3 en flujo de aire    

     



    La situación hoy  

    La desaparición de DEZ y otros hechos unidos a la calidad del los procesos, han reducido sustancialmente a cuatro los sistemas de desacificación en masa actualmente en uso:
    Wei T’o_ Basa su acción en el metoxi magnesio metil carbonato, y es el más viejo sistema de deacificación, siendo “activo” con una instalación desde 1981.
    Bookkeeper_ Es el sistema adoptado por muchas bibliotecas de USA, Canada, Holanda y Japón. Explota la reacción del óxido de magnesio, que con la humedad forma el hidróxido. EL exceso se transforma después lentamente, por acción del CO2 del aire, en carbonato de Magnesio, que constituye la reserva alcalina.
    CSC Booksaver_ También en este caso se usa una sal de magnesio. El sistema se adoptó en España y Alemania.
    Papersave_ Más conocido en literatura como “Battelle Process” estando desarrollado en Alemania como  Battelle Ingenieurtechnik y por la Biblioteca Nacional Alemana, nace conceptualmente en 1987, mientras la construcción de la primera instalación es de 1994.  

    Podemos concluir que hoy son varios los procesos válidos y refinados que están disponibles para las bibliotecas que quieran efectuar deacificaciones en masa.    

    Bibliografía
    1. Guiducci Bonanni C., Sassetti M.; “Presidi e tecnologie di intervento di massa sul materiale cartaceo: un sogno o una possibilità?” Kermes Anno IX, 27, Septiembre-Diciembre 1996.
    2. McCrady E.”Tre metodi di deacidificazione messi a confronto” The Abbey Newsletter, 15 (1991) 8, 121-124, traducido por Rossana Rotili en CAB Newsletter n°1 de Julio-Agosto 1992.
    3. 
    Liénardy A.; “Evaluation of seven mass deacidification treatments” Restaurator 15 (1994), 1-25
    4. Banik G., Doering T., Kolbe G.; “Quality control of mass deacidification of library and archival holdings“ 14th Triennial Meeting, L’Aia (2005).
    5. Aunque fechado el texto de la Comisión Europea para la conservación y el Accesso (European Commission on Preservation and Access, ECPA) muy rico de informaciones y del título Mass Deacidification, An update of Possibilities and Limitations (ECPA-report; 02) de H.J. Porck, está accesible en: http://www.knaw.nl/ecpa/PUBL/PORCK.HTM

  • 15.3 MÁS INFORMACIÓN - LAS EDADES DEL HIERRO

    Las edades del hierro
        
    En el desarrollo de las civilizaciones, los metales han tenido un papel de importancia primaria. En particular la tecnología del hierro ha permitido un notable paso adelante para la producción de objetos de gran duración y resistencia como abrillantador de espadas y armaduras, pero también de cañones, herramientas agrícolas, utensilios, etc. Todavía hoy el hierro y sus ramas son materiales metálicos de muy amplio uso.

    Desde los tiempos más remotos hasta nuestros días, se asocia al hierro la característica de ser casi indestructible y por esto se adaptó para proteger el cuerpo humano en las batallas bélicas: desde las armaduras de los templarios forjadas en fuego en alguna arcaica fragua hasta la fantástica armadura de Iron Man, héroe de los tebeos que muchos de vosotros habréis visto en el cine. Pero, el hierro y sus ramas son algo más que indestructibles: basta el simple contacto con el ambiente externo para hacer cambiar el color gris a rojo oscuro.
    Pero ¿por qué el hierro se oxida?

    El primer motivo es que la naturaleza tiende al ahorro energético!, los óxidos de hierro, verdaderas y propias especies minerales, tienen menor energía que el metal puro y son por tanto estables. Basta pensar en el proceso inverso: para extraer un metal del propio mineral es necesario suministrar energía, en forma de calor. La oxidación de un metal es un proceso espontáneo, al contrario que su extracción, por ello en naturaleza el hierro se encuentra casi exclusivamente en sus minerales.

    El segundo motivo es la sensibilidad del hierro tanto al oxígeno como al agua. El principal proceso de degradación que lleva a la formación del óxido sucede preferentemente en presencia de humedad, con procesos electroquímicos similares a los que hacen funcionar una pila. Recordamos que en una reacción de óxido-reducción, el elemento que se oxida pierde electrones mientras que el elemento que se reduce los adquiere. En electroquímica, el elemento que se oxida se llama ánodo, mientras que el que se reduce se llama cátodo.
    El hierro es un metal de transición y tiene características típicas de estos elementos [1]:
    ·        Tiene más estados de oxidación: Fe2+ (ion ferroso) y Fe3+ (ion férrico) son más comunes.
    ·        Forma compuestos coloreados: rojos y amarillos sobre todo, pero también verdes y negros.
    ·        Forma complejos: capacidad que se aprovecha por ejemplo para la limpieza con agentes complejantes como EDTA. La corrosión del hierro en presencia de agua y oxígeno sucede de esta forma [2]:  



    2 Fe(s)                               
    →       2 Fe2+ + 4 e            ANODO (elemento que se oxida)
    O2(g) + 2 H2O(l) + 4 e          →        4 OH-                    CATODO (elemento que se reduce)
    -------------------------------------------------------------
    2 Fe(s) + O2(g) + 2 H2O(l)             2 Fe2+ + 4 OH-        REACCIÓN COMPLEJA                                          

    Donde (s) (g) y (l) están para el estado sólido, gas y líquido.

    La reacción es espontánea y se procede en un único sentido, indicado por la flecha (→). Puede precipitar el hidróxido ferroso Fe(OH)2(s) o, en presencia de oxígeno, oxidándose posteriormente:
    O bien, por la presencia de oxígeno, se pueden formar hidróxidos férricos (Fe2O3*H2O, que se puede escribir también FeO(OH) o Fe(OH)3), que a su vez sufren alteraciones.  


    1)3Fe(OH)2(s) + ½O2(g)→ Fe3O4*H2O(s) + 2H2O(l)   

    MAGNETITA HIDRATA VERDE

    2)Fe3O4*H2O(s) →  Fe3O4(s) + H2O(g)

    MAGNETITA ANIDRA, NEGRA

    3)2Fe(OH)2(s) + O2(g) → 2FeO(OH)(s)

        MARRÓN

    HIDRÓXIDOS FÉRRICOS, ROJO           


    La degradación del hierro consiste en una estratificación de óxidos, generalmente magnetita hidrata verde (1), magnetita anidra negra (2) y, solo externamente, los hidróxidos férricos (3) comúnmente llamados óxidos. Los hidróxidos férricos son principalmente dos, con fórmula química igual a aquella descrita, pero con estructuras mineralógicas diversas correspondientes a los minerales goethite (generalmente amarilla, que encontramos también en las tierras amarillas naturales) y lepidocrocite (generalmente roja, presente también ella en las tierras naturales amarillas y marrones pero en cantidad menor). El resultado de esta mezcla es un bonito color anaranjado del óxido.

    Desde el punto de vista químico, el óxido ataca de la misma forma tanto al hierro batido o dulce (con escaso contenido de carbono) que sus ramas (acero y arrabio). Los productos químicos a usar son por tanto siempre los mismos incluso para ramas diferentes. Lo que cambia sustancialmente es la forma en la que se presenta la degradación (morfología) y la metodología y la sucesión de las intervenciones a seguir.  


    El óxido no es estable porque los hidróxidos férricos promueven la posterior degradación del metal sano, por tanto se estabiliza con convertidores apropiados. Además, si están presentes sales solubles como cloruros y nitratos, la reacción de corrosión que lleva a la degradación de la obra/pieza puede acelerar hasta diez veces respecto al ambiente externo y cinco veces respecto al ambiente subterráneo [3]. El ambiente en que la obra se conserva es el principal responsable de las especies presentes, como se esquematiza en la siguiente tabla.  

     

    Acetatos

    Carbonatos

    Cloruros

    Hidróxidos

    Nitratos

    Fosfatos

    Sulfatos

    Sulfuros

    Marino

    -

    I

    S

    I

    S

    -

    S/PS

    I

    Subterráneo

    -

    I

    S

    I

    S

    I

    S/PS

    I

    Interno

    S

    I

    -

    I

    -

    -

    S/PS

    -

    Externo

    S

    I

    S

    I

    S

    -

    S/PS

    -

    S = Soluble; I = Insoluble; PS = Poco Soluble.  
     
     
    La agresividad del ambiente en los límites del manufacturado en hierro idealmente sigue este esquema:    (ver imagen nº1)


              
    Aún, son muchos factores que concurren en las reacciones químicas de oxidación (temperatura, pH, presencia de agentes reductores y/o de otros metales a contacto, composición misma del manufacturado, etc.) por ello los esquemas aquí presentados deben de ser leídos como una simplificación de procesos naturales más complejos. Describo como ejemplo una curiosa excepción: el pilastro de Delhi [4], una imponente columna en hierro batido que no obstante sus 1600 años pasados en el cambiante clima de India se conserva casi del todo íntegra. La explicación científica de este “milagro” es debido a la formación en superficie de una rara pátina de pasivación, formada por catálisis entre los comunes hidróxidos de hierro y el fósforo, contenido en cantidad superior a la norma, en el manufacturado mismo. Todavía la ciencia no ha sacado a esta obra incorruptible las valencias esotéricas unidas a la inscripción en sánscrito, grabada en honor a Vishnu, que todavía hoy se lee a la perfección: (Ver imagen nº2).



    Una seña se pone precisa en el significado de cuatro términos a menudo usadas en el campo de los metales: pátina de pasivacion, inhibidor, convertidor y protector.
    Pátina de pasivación: estrato superficial que inhibe o ralentiza la corrosión del metal soportante. Las características principales son el compacto y no la conductibilidad iónica. En pocas palabras, los óxidos formados deben de ser unos semiconductores, en grado de conducir electrones, pero no otras especies iónicas.
    Inhibidor: termino genérico, a menudo referido a sustancias en grado de reaccionar con los agentes químicos antes de que ataquen el metal. En su significado más amplio, compuesto o pátina que impiden al metal soportante reaccionar con el ambiente externo. Un clásico ejemplo es el benzotriazolo (BTA).
    Convertidor: compuesto, o mezcla de compuestos, que reacciona con un óxido para convertirlo en una especie más estable. Los óxidos convertidos no son pátinas de pasivación, sino pátinas que gozan de una cierta estabilidad química - física. Por ejemplo, los convertidores de óxido a base de tanino y ácido fosfórico (como el Fertan) convierten los óxidos hidratos de Hierro en tannati y fosfatos, estables pero no bastante compactos y ausentes de conductibilidad iónica para poder ser definidos pasivantes.
    Protector: cualquier método apto para proteger el metal de la oxidación. En el significado más amplio de la palabra, también la pátina de pasivacion puede ser entendida como protectora. En general, identifica un compuesto en grado de proteger el metal de los agentes atmosféricos, como un polímero o una cera (por ejemplo Incral 44 y Reswax WH). Indispensable después de haber usado un convertidor para conferir hidrorepelencia y ralentizar la permeación de los gases.

    Este breve escursus sobre la química del hierro sigue al artículo salido del Boletín CTS 8.2  Más información - Un viejo óxido, en el que se habla también de los complejos, y en el 14.3  Más información – Vamos con pies de plomo, que resume la química del plomo, y sus degradaciones y los posibles tratamientos. En un futuro los apasionados lectores “metaleros”, encontrarán en los boletines nuevos argumentos de su interés. ¡Navegar para creer!  

    PRODUCTOS:

    PROTECTORES
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/147-protectores



    Bibliografía
      

    1. Silvestroni, P. (1996). Fondamenti di Chimica. CEA.       
    2. Pedeferri, P, B Mazza, and D Senigallia. Corrosione e Protezione dei Materiali Metallici. Milano: Clup, 1974.      
    3. Hamilton, D. L. (1999). Methods of conserving archaeological material from underwater sites. Retrieved March 17, 2008, from http://nautarch.tamu.edu/class/anth605/File0.htm
    4. Balasubramaniam, R. "The corrosión Resistant Delhi Iron Pillar."   1998. 5 June 2008 http://www.iitk.ac.in/infocell/Archive/dirnov1/iron_pillar.html>.   

  • 14.1 AL PRINCIPIO FUE EL AGUA DE CAL

    Al principio fue el agua de cal. 

    Si hoy al pensar en la fijación o en la consolidación de superficies pétreas o de pinturas murales se nos viene inmediatamente a la cabeza varias clases de productos, desde los inorgánicos como el hidróxido de bario, el amonio carbonato, el silicato de etilo, o los polímeros, estos últimos subdivididos en varias familias. Existen también productos usados en tiempos relativamente recientes y hoy casi abandonados, como los fluosiliconados o el “waterglass” del siglo XVIII, es decir silicato de sodio y potasio.

    Pero si damos marcha atrás un siglo o poco más encontraremos un solo protagonista de la consolidación: el agua de cal, es decir, una solución acuosa saturada de hidróxido de calcio, Ca(OH)2. No debemos confundir esta solución, limpia y estable, con la leche de cal, que es una dispersión lechosa del mismo hidróxido de calcio, que tiende por un lado a separar, y, si se aplica sobre las superficies, a depositar una pasta blanca de carbonato de calcio. La reacción es siempre la misma carbonatación:

                                                                                      Ca(OH)+ CO2 → CaCO3 + H2O


    Y justamente sobre ésta se basa la fuerza del método: depositar el mismo material que constituye el ligante de las piedras carbonáticas y de los morteros históricos, en analogía a la acción del silicato sobre las piedras de tipo silicio. Por tanto es totalmente compatible.
     Desgraciadamente el método tiene un límite intrínseco e insuperable: la baja solubilidad del hidróxido de calcio (1,7 g/l a 20°C, pero se reduce drásticamente en presencia de sulfatos, haciendo casi inaplicable el producto sobre superficies sulfatadas). Esto hace que al depositar una cantidad mínima de consolidante sean necesarias muchísimas aplicaciones. Intentar utilizar materiales similares, pero con solubilidad más alta se realiza mediante el método del bario (que tiene una solubilidad 35 veces superior, 60 g/l a 20°C), que presenta sin embargo el problema de la toxicidad para el operador y un pH mucho más alto. La llegada de otros tipos de consolidantes ha reducido el uso del agua de cal a pocos y esporádicos casos, pero el interés sobre el argumento está indudablemente vivo todavía, como demuestran algunas intervenciones en el Convenio de Bressanone del 2007 con el titulo “La consolidación de los aparatos arquitectónicos y decorativos” [1].

    La reevaluación del método se debe por un lado a las negativas comparaciones de errados usos de los polímeros, y por otro a la investigación de métodos compatibles según los principios de la “bioarquitectura”.
    Sobre la eficacia de este tipo de tratamiento se ha discutido mucho, también por la ausencia de estudios científicos que demuestren los efectos reales, y una tentativa de determinar la penetración marcando el consolidante con el isótopo 45Ca demostró una profundidad máxima de penetración de 2 mm.
     Hace algunos años un interesante estudio conducido por un grupo danés [2] ha rebatido los puntos críticos:

               1. La necesidad de efectuar repetidas aplicaciones (más de 40) para obtener un efecto registrable. 
               2.
     La enorme cantidad de agua aportada a las albañilerías (más de 25 l/m2).
               3.  La necesidad de efectuar las aplicaciones sin dejar secar las superficies, por tanto efectuando las aplicaciones, mojado sobre mojado lo más posible.

    Estas conclusiones evidencian las problemáticas que hacen posible el método del agua de cal solo en algunos casos:
       ·       La mayor parte de las albañilerías no soportan tanta cantidad de agua: las sales pueden ser movilizadas, y si hay elementos metálicos pueden activarse mecanismos de corrosión, fenómenos de crecida de microorganismos pueden aparecer en las zonas cercanas (no sobre el área tratada a causa del elevado pH).
    ·       El sistema necesita largos tiempos de aplicación por parte de personal cualificado, y es por tanto muy costoso (a menos que no se valore el coste cero del tiempo del restaurador, cosa que a veces ocurre).

    Estos dos puntos pueden ser en parte superados con el uso de la cal nanofásica en dispersión alcohólica, que es el argumento del otro artículo. Con este sistema, denominado Nanorestore®, no solo se trabaja en ausencia de agua y con el alcohol isopropílico, que tiene también función bactericida, pero el número de aplicaciones se reduce drásticamente.
      

    Nota: como preparar el agua de cal. El agua de cal no se compra (es al 99,83% agua!), pero se prepara añadiendo a un litro de agua desmineralizada aproximadamente 50 gramos de “grassello de cal”, es decir un fuerte exceso de Ca(OH)2. Después de agitar vigorosamente se deja decantar la solución, para obtener una solución limpia con un cuerpo de fondo. Durante todo el procedimiento el contenedor debe permanecer sellado, para evitar que se verifique la carbonatación del hidróxido.
        

    PRODUCTO:

    NANORESTORE® - CONSOLIDANTE A BASE DE NANOCALES
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/175-nanorestore-consolidante-a-base-de-nanocales

       

    Biografía:

    1. Fontanini A., Ghezzi V., Rancilio D., Sala L., Scala B., “Ancora sull’acqua di calce: il restauro della Cappella Cavalcabò nella chiesa di S.Agostino in Cremona a dieci anni dall’intervento” XXIII Convegno Scienza e Beni Culturali, Bressanone (2007), 497-507
    2. Brajer I., Kalsbeek N.; “Limewater absorpion and calcite crystal formation on a limewater-impregnated secco wall painting” Studies in Conservation 44 (1999) 145-146.
  • 14.2 NUEVOS PRODUCTOS - EL NANO Y EL MICRO

    El Nano y el Micro (Una cuestión de dimensiones)

    Una de las fronteras de la química es la producción de materiales nanoestructurados, o bien la realización de añadidos de varias formas (esferas, tubos, hojas,....) cuyas dimensiones están por debajo del micrón, y se miden en nanometros.  Téngase en cuenta que una molécula “grande” como una proteína, constituida por un centenar de átomos, mide algunas decenas de nanometros. Las nanotecnologias, término acuñado en 1975, permiten realizar materiales con propiedades particulares, usados en muchos sectores como el farmacéutico o el de los semiconductores [1]. En el mercado existen ya polvos de dimensiones nanométricas: se habla de óxido de titanio nanométrico, o de nanosilicio....  

    Una brevísima seña a los nombres y a los sufijos: un milímetro es un milésimo de metro (10-3 m), mientras un milésimo de milímetro, el micrómetro, llamado coloquialmente micrón, es una millonésima de metro (10-6 m). Dividendo todavía por 1000 llegamos a una milmillonésima de metro (10-9 m), obteniendo el manómetro.

    Metro

    m

    1

    Milímetro

    mm

    10-3 m (milésimo)

    micrómetro (micrón)

    μ

    10-6 m (millonésimo)

    Nanometro

    nm

    10-9 m (milmillonésima)

    Picometro

    pm

    10-12 m (milmillonésima de millonésima)

     

    Como hemos visto en el artículo precedente (14.1 Al principio fue el agua de cal.) uno de los problemas en la aplicación del hidróxido de calcio, el consolidante compatible por excelencia para morteros y piedras calcáreas, es el de su baja solubilidad.
    El mundo de la restauración puede hoy disfrutar de un desarrollo de las nanotecnologías: la posibilidad de obtener el hidróxido de calcio de dimensiones nanométricas, está sobre todo disuelto pero no en agua sino en alcohol isopropílico, dispersión puesta a punto gracias a años de investigación [2-5] conducida por el Consorcio para el desarrollo de Sistemas a Gran Interfase (CSGI) de la Universidad de Florencia, y denominado Nanorestore®.

    El alcohol garantiza una óptima penetración en los materiales porosos (gracias a su baja tensión superficial) por succión capilar: penetrando en la matriz porosa transporta detrás de si las partículas nano-estructuradas que van a situarse en los estratos micrométricos: inmediatamente por debajo de la superficie, entre algunos centenares de micrón. Sucesivamente, por acción del anhídrido carbónico de la atmósfera, se producirá la carbonatación de la nanocal, con la consecuente formación de un  network de micro-cristales de calcita, y el restablecimiento de las propiedades mecánicas, cuya pérdida había hecho al soporte pulverulento, con micro-separaciones de película pictórica o de piedra. Las partículas tienen morfología plano-hexagonal y dimensiones medianamente inferiores a 100 nm (aproximadamente un décimo de las dimensiones del grassello comercial).

    Las partículas tienden a llenar las cavidades mayores y los espacios intergranulares, sin obstruir los poros originales. Estos se revisten, y disminuyen de dimensión, ralentizando la absorción de agua. La penetración medida a través SEM (microscopio de barrido) sobre superficies de piedra va desde 20 micrón del calcáreo compacto, a los 100 del travertino, con formación de un estrato superficial uniforme, llegando a más de  200 micrón para las areniscas y a los 2000 para el poroso “carparo leccese” (piedra del sur de Italia tipo toba) , con un estrato no uniforme [6,7].
    Nanorestore® contiene 5 g/L de hidróxido de calcio en alcohol isopropílico, y para uso sobre frescos se diluye normalmente para evitar efectos de veladura blanca. En el caso de piedras de matriz carbonática puede no ser indispensable ser diluido. La dilución se decidirá en relación a la capacidad absorbente de la superficie a tratar.

    El disolvente a añadir para diluir es el alcohol isopropílico  CTS, tal cual o también mezclado con agua desmineralizada hasta un contenido máximo de agua similar al 50 % en volumen. El uso de cantidades más o menos relevantes de agua depende de las condiciones de humedad de la albañilería y del ambiente: cuanto más bajas sean mayor cantidad de agua puede añadirse y viceversa. La aplicación se efectúa hasta el rechazo mediante pincel, con protección de las superficies con papel japonés, o mediante nebulización o pulverización sin papel japonés, repitiendo las aplicaciones después de que se seque completamente. Los efectos apreciables de consolidación se obtienen normalmente después de un número de aplicaciones que está obviamente unido a la concentración seleccionada: cuanto más se diluye la dispersión, mayor es el número de aplicaciones necesarias. Va desde 1-2 aplicaciones para la más concentrada a 10-12 para la más diluida, pero a veces puede ser suficiente también un número inferior de aplicaciones. Terminada la última aplicación es necesario esperar 5-7 días antes de las pruebas de limpieza y verificación de las propiedades mecánicas (adhesión/cohesión) de la superficie.  

    Casos de estudio
      

    1_Frescos de la Capilla del Alcalde del museo del Bargello en Florencia [6]
    Los frescos de la escuela Giottesca del siglo XIV, encalados a finales del año 1500, habían sido restaurados más veces, y la presencia de material orgánico envejecido dentro hacía que tanto la aplicación de soluciones acuosas, como las de hidróxido de bario, e incluso las de solo agua, provocasen la migración hacia la superficie, formando manchas amarillentas. Se trataba por tanto de consolidar y volver a dar legibilidad a las superficies muy secas. La aplicación directa de la nanocal provocaba emblanquecimientos. La excesiva concentración no constituía por tanto un factor de mayor consolidación, sino un impedimento a la penetración. Dado que el material orgánico envejecido ocluía la porosidad era necesario pretratar con disolvente. Pruebas sucesivas han permitido identificar como mejor tratamiento el siguiente:
    1. Pretratamiento con alcohol isopropilico sobre la superficie protegida con papel japonés. 
    2. Dos aplicaciones de nanocal 0,0043 M (moles/litro) con 10% de agua, dejando pasar de 24 horas.
    Al término de la consolidación se han efectuado medidas de color.  

    2_Pinturas murales medievales (siglos XIII y XIV) en la cripta de San Zeno en Verona [7]
    Elaboradas al fresco, a la cal y en seco, las pinturas mostraban una fuerte degradación, como pérdida de cohesión de los pigmentos y estrato blanquecino sobre las superficies.
    Descartadas las resinas acrílicas y floururadas, además del silicato de etilo, por problemas de alteraciones del cromatismo de las pinturas, y a riesgo de la pérdida de permeabilidad, se decidió usar consolidantes inorgánicos.
    Las pruebas de confrontación entre nanodispersiones y microdispersiones (obtenidas dispersando finamente en alcohol, a través de un baño a ultrasonidos, del grasello de cal) en similares concentraciones se realizó la intervención de restauración a altas concentraciones (0,067 moles/litro) ambas dispersiones dan emblanquecimiento, pero las áreas tratadas con nanocal se limpian con más facilidad. Estos resultados han orientado las aplicaciones hacia disoluciones mayores, que representan el camino correcto cuando la absorción de las superficies es reducida. Esto ha sido confirmado por estudios sucesivos [10].
    La aplicación in situ ha demostrado un mejor comportamiento de las nanodispersiones, que han sido después extensamente aplicadas para la readhesión de las separaciones en concentración 0,022 M (moles/litro), siempre precedidas de imbibición con alcohol isopropílico y una pequeña cantidad de agua para favorecer la carbonatación. La microdispersion sin embargo se ha usado, más diluida, para volver a cohesionar los pigmentos.      

    3_Pinturas maya de Calakmul (siglos III-VI), México 
    [11]
    Las pinturas a cal, tratadas a partir de 1969 con Paraloid B-72, presentaban separaciones y pulverización de los pigmentos. La elevada humedad ambiental había evidenciado las problemáticas que aparecen por los fijativos poliméricos, como la recristalización de las sales por debajo de la superficie. Además de que el nivel de degradación era tal que no permitía la aplicación de sistemas acuosos. Una doble aplicación de nanocal a pincel, intercalada por la aplicación de una papeta de pulpa de celulosa con agua desmineralizada, ha permitido obtener un satisfactorio nivel de consolidación.  

    Podemos concluir que con Nanorestore® es posible obtener un efecto de recohesión utilizable tanto en fase de pre-consolidación, como después de la limpieza, y en el momento de la consolidación verdadera y propia, sin introducir materiales extraños a la naturaleza química original de la obra. Los efectos han sido valorados en confrontación con los sistemas más utilizados como la caseína o las dispersiones acuosas de resinas acrílicas. En presencia de tratamientos anteriores es necesario “abrir la porosidad” con una preaplicación de alcohol isopropilico, y valorar con pruebas dirigidas tanto los tiempos de contacto como las disoluciones del producto.  

    PRODUCTO:

    NANORESTORE® - CONSOLIDANTE A BASE DE NANOCALES
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/175-nanorestore-consolidante-a-base-de-nanocales



    Bibliografía
    1.      Fernandez F.; “Nanotecnologie e nanomateriali: una rivoluzione trasversale” Progetto Restauro 35 (2005) 24-28
    2.      Giorgi, Dei, Baglioni; “A new method for consolidating wall paintings based on dispersions of lime in alcohol” Studies in Conservation 45 (2000) 154-161
    3.      Ambrosi, Dei, Giorgi, Neto, Baglioni; “Colloidal particles of Ca(OH)2: properties and application to restoration of frescoes", Langmuir 17 (2001) 4251-4255
    4.      Ambrosi, Dei, Giorgi, Neto, Baglioni; “Stable dispersions of Ca(OH)2 in aliphatic alcohols: properties and application in cultural heritage conservation” Progr.Colloid Polymer Sciens 118 (2001) 68-72
    5.      Giorgi, Dei, Ceccato, Schettino, Baglioni; "Nanotechnologies for conservation of Cultural Heritage", Langmuir 18 (2002) 8198 - 8203
    6.      Daniele, Franzoni, Quaresima, Sandrolini, Taglieri; “Risultati preliminari di trattamenti conservativi a base di nanocalce su arenarie emiliane”, Atti del Convegno di Bressanone (2007), 367-374
    7.      Daniele, Quaresima, Taglieri; “Il contributo della microscopia elettronica nella valutazione delle modificazioni superficiali indotte mediante trattamenti con la nanocalce su litotipi di interesse storico-artistico” Atti del V Congresso Nazionale IGIIC, Cremona (2007) 299-305
    8.      Dei, Radicati, Salvadori “Sperimentazione di un consolidante a base di idrossido di calcio nanofasico sugli affreschi della cappella del podestà al museo del Bargello a Firenze aspetti chimico fisici e prove di colore” Atti del Convegno di Bressanone (2005) 293-302
    9.      Dei, Salvadori, Arlango, Pietropoli, Scardellato; “Gli affreschi del XIII e XIV secolo nella cripta di San Zeno a Verona: la sperimentazione della nanocalce dispersa in alcool isopropilico durante l’intervento conservativo” Atti del Convegno di Bressanone (2005) 99-108
    10.   Dei, Bandini, Felici, Lanfranchi, Lanterna, Macherelli, Salvadori; “Preconsolidation of pictorial layers in frescoes: the high performance of CSGI’s method based on nanolime evaluated by OPD team in Agnolo Daddi’s Leggenda della vera Croce paintings, Santa Croce, Florence”, Atti del Convegno di Bressanone (2007), 217-223
    11.   Baglioni P., Carrasco Vargas R., Chelazzi D., Colòn Gonzalez M, Desprat A., Giorgi R.; “The Maya site of Calakmul: in situ preservation of wall paintings and limestone using nanotechnology” IIC Congress, Monaco (2006) 162-169   

  • 14.3 MÁS INFORMACIÓN - VAMOS CON PIES DE PLOMO

    Vamos con pies de plomo
    Aunque no existe una “edad del plomo”, la presencia de este metal acompaña la historia del hombre desde tiempos más antiguos, probablemente por su característica de fundir en temperaturas bajas (facilidad de trabajo).
    En las obras de arte está presente en casi todos los sectores: en la preparación de pigmentos (minio, blanco de plomo, litargirio, massicot, amarillo de plomo y otros), en la fabricación de las cristaleras y de la grisalla, en la numismática, en la producción de bronces, en las cubiertas de muchas cúpulas, etc.
    Además existen partes de estatuas enteramente de plomo, por ejemplo en obras de jardín estilo inglés o bien en algunos hallazgos arqueológicos muy antiguos [1,2]. Es por tanto esencial, para un trabajador de la restauración conocer al máximo las características de este metal y de sus componentes.

    El plomo metálico en naturaleza en prácticamente inexistente, ya que se contamina fácilmente por los ácidos orgánicos débiles. La reacción de corrosión de la superficie sucede muy velozmente, sobre todo en presencia de ácidos orgánicos y/o humedad para formar pátinas diferentes según la tipología del ambiente a la que está expuesta la obra como se muestra en la tabla de abajo (donde a un mayor número de símbolos + corresponde una mayor frecuencia de apariciones).  

     

    Ambiente interno

    Ambiente externo

    Ambiente marino

    Amb. subterráneo

    Acetatos

    +

    +

     

     

    Sulfatos

    +

    +

    +++

    +

    Carbonatos

    +++++

    ++

    +++++

    ++++

    Cloruros

    +

     

    +++++

    +

    Hidróxidos

    +++++

    +

    +++

    +++++

    Clorados

    +

     

     

     

    Sulfuros

     

     

    +

    +

    Formiatos

    +

     

     

     

    Óxidos anhidros

    +++

    +

    +++

    +++

    Fosfatos

     

     

     ++



    La pátina más frecuentemente encontrada sobre la superficie de obras/piezas de plomo, en cualquier ambiente, es la blanquecina formada por carbonados e hidróxidos. En práctica las sales de plomo formadas reaccionan con el anhídrido carbónico presente en la atmósfera y se forma una pátina blanquecina de hidrocerusita, cuya reacción de formación es la misma utilizada para formar el blanco de plomo 
    (ver boletín «12.3 Blanco: una cuestión de fondo»).
    Otros compuestos a menudo presentes en superficie son los sulfatos y óxidos anhidros, que se forman con el mismo proceso de los carbonados, por la presencia de anhídridos sulfurosos y/o agentes oxidantes [3].

    La presencia de estas pátinas no debe considerarse deletéreas, ya que son todos compuestos escasamente solubles, componentes de un estrato compacto y adherente que previene la posterior degradación del metal. En pocas palabras, son pátinas de pasivación.
    Otra característica importante del plomo, desde el punto de vista físico-químico, es la escasa tendencia del plomo a formar uniones con metales como el cobre. El plomo se usaba para la fabricación de los bronces, especialmente en época romana, para abatir los costes de producción y por su característica de “baja fundición”: se necesitaba menos calor para llevar a fusión la aleación. La completa no mezclabilidad del plomo en matrices ricas de cobre, lleva a la formación de una microestructura “globular” con fenómenos de segregación. En práctica, en la masa metálica formada por la aleación cobre-estaño, están presentes granos de plomo sueltos, con consecuencias importantes tanto para la resistencia mecánica como para la tipología de corrosión.

    Los fenómenos de corrosión más frecuentemente encontrados en obras/piezas que contienen plomo son la corrosión intergranular, el pitting y la corrosión selectiva. La corrosión intergranular es la más común en los manufacturados con aleaciones dendríticas, mientras que el pitting se presenta en ambientes con formación de condensación. Ejemplo típico, las cubiertas de bajotechos, con corrosión preferentemente en la parte inferior. La corrosión selectiva, por tanto, es típica de bronces y  latones donde el plomo está presente. En un futuro artículo se hablará del bronce y del particular fenómeno conocido como “gusanos del plomo”.

    Las intervenciones de restauración en obras/piezas en plomo deben de ser siempre valorados con extrema cautela dada la alta toxicidad de este elemento. En los procedimientos mecánicos es indispensable tomar las debidas precauciones para no ingerir los polvos del plomo y eliminar las aguas de lavado en los contenedores de desechos tóxicos y contaminantes.

    El primer tipo de limpieza posible es la mecánica. Es necesario tener bien presente que muy a menudo las pátinas de óxido superficial tienen una dureza mucho mayor del metal mismo y la eliminación mecánica puede rayar la superficie del metal. Para la limpieza química, el agente secuestrante más usado en el EDTA o uno que use sales, oportunamente condensado o ayudado de gasas de algodón, pulpa de celulosa o papel japonés. Para este fin, el EDTA bisódico, ligeramente ácido (pH 5.5), puede ser la mejor elección ya que se forman complejos solubles y, en el caso de carbonatos, se promueve la descomposición química de la pátina. Sobre pátinas particularmente resistentes, como las de los óxidos anhidros, puede ser útil un baño con amonio acetato.
    Esta operación es particularmente delicada porque se eliminan todos los compuestos presentes. 
    Si la pátina es muy sutil, se pueden usar las resinas de intercambio iónico, de tipo cationico (Amberlite IR 120 H), que hacen más complejo el plomo, o aniónico (Amberlite 4400 OH), con presencia de sulfatos. Muy importante, para evitar que se desencadenen nuevos fenómenos de corrosión, lavar bien con agua desmineralizada (aproximadamente pH 6,3).

    La limpieza láser Nd: YAG (longitud de onda 1064 nm) ha sido usada en algunos manufacturados para eliminar barnices y productos de corrosión, especialmente en ambiente arqueológico. La eficacia del tratamiento está siempre unida a la tipología del material a eliminar y a la absorción de la radiación, por ello es siempre indispensable hacer una sabia estimación. La modalidad preferida, vista la baja temperatura de fusión del plomo, es la de Q-switch (impulso muy breve, del orden de los 10 ns) y baja energía para evitar cualquier tipo de calentamiento superficial. Para facilitar la eliminación de las pátinas se puede nebulizar en superficie del agua desmineralizada [4,5].  
    Por lo que se refiere a los procesos de limpieza a través de reducción, se han experimentado métodos al plasma, pero sobretodo se ha verificado eficaz el tratamiento electrolítico en solución o por contacto con pluma electrolítica (similar a la pluma para la depilación definitiva) [6].  
    Por lo que se refiere a la consolidación y/o reconstrucción, las resinas son las mismas usadas para otros metales: Paraloid B72 u otros acrílicos, epoxídicos con o sin refuerzo de fibra de vidrio, resinas poliéster como el Ara Metal. En la elección del consolidante es necesario tener presente la sensibilidad del metal a los ácidos orgánicos, por tanto los productos usados deben de estar exentos. Además, no debe producir estos ácidos en su degradación, como sucede en las resinas vinílicas [7]. Otro factor importantísimo a valorar es el otro coeficiente de dilatación del plomo: resinas demasiado duras pueden dar lugar a grietas y fisuras, también considerables, en manufacturados de alto contenido de plomo. Una solución puede darse por resinas resistentes pero flexibles, tipo Epo 155 (producto bicomponente).

    La protección de objetos de plomo y uniones sigue los mismos principios de la consolidación: son adecuados los materiales comúnmente usados para otros metales a excepción de las resinas vinílicas (ej. PVA).  En el caso de cubiertas de techos, la elección cae a menudo sobre productos que pueden conferir al soporte una buena hidro-repelencia, como las ceras microcristalinas (ej. ResWax WH). Para objetos musealizados, la cubierta-barrera es necesaria para proteger la superficie metálica de los contaminantes ácidos presentes en la atmósfera. De un modo particular, los ácidos producidos por la degradación de las emicelulosas de las partes de madera [8].

    En la fase de consolidación y/o protección, puede ser tomado en consideración también el uso de inhibidores como en Benzotriazolo, cuya función sobre el plomo parece ser similar a la del cobre, con formación de un complejo polimérico cristalino BTA-plomo sobre la superficie. El uso de Incral 44 (conteniendo BTA) y cera Reswax, sería por tanto un tratamiento aconsejable para este tipo de obras, sobre todo si se tienen al exterior.  

    PRODUCTO:

    EDTA SAL BISÓDICA
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/319-edta-sal-bisodica

    PARALOID® B 72
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/53-paraloid-b-72


    Bibliografía:
      
    1.      Lead (n.d.). Retrieved March 17, 2008, from MFA Cameo (http://cameo.mfa.org/ - search materials: lead).       
    2.      Urban, F., & Costa, V.  (2005). Lead and its alloys: metallurgy, deterioration and conservation. Reviews in Conservation6, 48-62. 
    3.      Restauro leghe metalliche (n.d.). Retrieved March 17, 2008, from  http://www.restaurobeniculturali.it/leghemetalliche.htm        
    4.      Naylor, A.  (2000). Conservation of the eighteenth century lead statue af George II and the role of láser cleaning. Journal of Cultural Heritage1, s145-s149.
    5.      Pini, R., Siano, S., Salimbeni, R., & Pasquinucci, M.  (2000). Tests af láser cleaning an archaeological metal artefacts. Journal of Cultural Heritage1, s129-s137.   
    6.      Hamilton, D. L. (1999). File 14: lead, tin and lead alloys. In Methods of conserving archaeological material from underwater sites. Retrieved March 17, 2008, from  http://nautarch.tamu.edu/class/anth605/File14.htm
    7.      Down, J. L., MacDonald, M. A., TÈtreault, J., & Williams, S. R.  (1996). Adhesive testing at the Canadian Conservation Institute ñ an evaluation of selected poly(vinylacetate) and acrylic adhesives. Studies in Conservation41(1), 19-44.    
    8.      Berndt, H.  (1990). Measuring the rate af atmospheric corrosión in microclimates. JAIC online29(2), 207-220. Retrieved March 17, 2008, from  http://aic.stanford.edu/jaic/articles/jaic29-02-008_indx.html     

  • 13.3 MÁS INFORMACIÓN - «NEL BLU DIPINTO DI BLU»

    «NEL BLU DIPINTO DI BLU»

    Exactamente como en la famosa canción de Domenico Modugno, a menudo se pueden observar repintes con integración o completa sustitución de azules valiosos u otros materiales utilizados en la antigüedad y, en desuso hoy en día. La industria química tuvo interés en la creación de nuevos azules principalmente por motivos económicos; los nuevos azules, más al alcance de los bolsillos (a menudo casi vacíos) de los artistas, nacen por casualidad o por voluntad, pero siempre tienen que estar a la altura del que se considera el rey de los azules: el lapislázuli.  

    Sin duda, el azul es uno de los colores más significativos en la historia del arte y en la historia de los seres humanos. Azules son el cielo, el mar, el infinito, en pocas palabras es el color de lo divino. Los Egipcios asociaron este color al dios Amón y el primer pigmento azul artificial del que se tiene conocimiento es el llamado Azul Egipcio o Frita Egipcia. Es un compuesto policristalino, principalmente un tetrasilicato de calcio y cobre llamado cuprorivaita (CaCuSi4O10). Es un cristal, obtenido por cochura de cobre,  natrón (carbonatos y bicarbonatos de sodio) y arena.
      

    El pigmento se extendió también en Occidente por todo el Imperio Romano, hasta su caída, y después su difusión fue reduciéndose, aunque la fabricación de este pigmento continuara también en los siglos siguientes. Vitruvio lo citó ya en el siglo I a.C. después de observar su preparación en la fábrica de cristal de Pozzuoli; el pigmento, llamado Coeruleum (Ceruleo) y también Azul Herculano, se formaba por “efecto del vehemente calor” en horno a partir de pequeñas bolitas de cobre (virutas o pigmento tipo malaquita), natrón y arena, molidos y humedecidos. El natrón tiene un bajo punto de fusión y hace que la sílice presente en la arena funda a 900° C en lugar de a 1710° C. El rápido declive del color también se debió a algunas incomprensiones en la transmisión de la receta, que llevaron a la formación de un compuesto verde (frita verde) en lugar de azul: en los tiempos de Vitruvio la arena utilizada era principalmente la del río Volturno, rica en calcita, mientras que en los siglos siguientes se empleó arena procedente de otros lugares que, al no tener bastante calcio, no podía llevar a la formación de cuprorivaita y por ende del azul egipcio. Hoy este pigmento ya no se fabrica y los varios azules comercializados (Egipcio, Herculano, de Pozzuoli, etc.) a menudo son derivados orgánicos que nada tienen que ver con el original desde el punto de vista químico. 
     

    En Occidente, de la Edad Media en adelante, el azul fue por excelencia el color del atuendo de la Virgen, un color “frío” que invita a la meditación y simboliza la eternidad, en oposición al rojo, color de la sangre, la vida y las pasiones humanas. Desde el punto de vista etimológico, la palabra “azul” procede del árabe al-lazward o del persa lajward: uno de los pigmentos más importantes de la historia del arte -desde la Edad Media hasta la fecha- es precisamente la Azurita (carbonato básico de cobre) junto con el lapislázuli o el Ultramar (literalmente ultra maris, ya que llegaba de Afganistán, más allá del mar). Ambos pigmentos se obtenían moliendo los minerales y se utilizaban en todas las técnicas, incluido el fresco. La azurita se podía encontrar fácilmente en Europa, mientras que el lapislázuli procedía necesariamente de Oriente, lo que explica su elevado coste final. Especialmente en la Edad Media, si el cliente que encargaba una obra deseaba hacer gala de sus riquezas o aumentar el valor a la misma, especificaba en el contrato la utilización del valioso pigmento, así como su cantidad; en efecto, el tono de la azurita puede volverse similar al lapislázuli, moliéndola gruesa, y por ello se utilizaba en sustitución o como fondo sobre el que se extendía un fino velo de ultramar. Sin embargo, la composición química es totalmente diferente y el comportamiento químico de los dos minerales no es comparable; existe un método sencillo para distinguir los dos polvos: al calentarse la azurita se vuelve negra porque se forma CuO  por efecto de la descarbonatación, mientras que el lapislázuli no sufre cambios. Además, por su matiz verdoso no era adecuado para los mantos de la Virgen, para los que se prefería el lapislázuli, más “frío” e idóneo para representar el concepto de trascendencia ultraterrenal.
     A pesar de su coste, por su pH elevado, el lapislázuli era el único pigmento azul utilizable en la técnica al fresco: el índigo (un colorante orgánico, que también puede emplearse como pigmento) se volvía negro, mientras que la azurita viraba al verde y tenía que aplicarse en seco. A menudo la azurita se encuentra junto con otro carbonato de cobre, la malaquita, de color verde. Sin embargo, la malaquita se asocia a la azurita no solo en la naturaleza: uno de los principales puntos débiles del pigmento azul es que se convierte en malaquita, que puede reemplazarlo como pseudomorfo, es decir mineral que no tiene su propia forma cristalina externa, sino la de otra especie de la que se ha formado o que ha reemplazado.
    Con la difusión de la técnica de pintura al óleo, el lapislázuli se utilizó cada vez menos por ser transparente en este aglutinante, hasta el punto de que se mezclaba con albayalde (ver boletín «12.3 Blanco: una cuestión de fondo»), para conseguir una capa uniforme y cubriente. El “declive” de este noble pigmento azul, del Renacimiento en adelante, impulsó la búsqueda de nuevos productos que pudieran utilizarse con éxito en la técnica al óleo y que, al mismo tiempo, fueran baratos y con tonos comparable al del valioso lapislázuli.  

    El primer pigmento moderno -el azul de Prusia- fue descubierto por azar entre 1704 y 1705 por un fabricante alemán llamado Diesbach: al intentar fabricar una laca roja de cochinilla para la que necesitaba sulfato de hierro y potasa, compró un lote de potasa contaminada con grasa animal. La laca obtenida era muy clara, así que intentó espesarla y obtuvo un compuesto primero morado y luego azul oscuro. Así nació un pigmento azul con una composición química muy compleja (ferrocianuro férrico) con un alto poder cubriente, pero con una granulometría tan fina que se puede utilizar como tinta. A pesar del contenido de cianuro, se utiliza también como colorante para alimentos y en cosmética, ya que la cantidad letal de este compuesto es baja. Más recientemente se ha prohibido su utilización cuando estuviera prevista la toma de esta sustancia, aunque se siga empleando ampliamente como agente colorante.  La mayor virtud del azul de Prusia son su elevado poder cubriente y su bajo coste, pero es poco estable tanto con los álcalis como con los ácidos. Por lo tanto, había que buscar azules más resistentes y sin tonos verdosos.
     La solución se encontró en los pigmentos que contienen cobalto. Aunque el Azul de esmalte (un vidrio de cobalto utilizado como pigmento) se conociera desde la Edad Media, los pigmentos azul cobalto se sintetizaron muchos siglos después. En la naturaleza el cobalto se encuentra en la esmaltita que, al exponerse al aire, forma la llamada ”flor de cobalto”, un cristal fibroso que los mineros conocen bien porque los compuestos del arsénico contenido en el mineral son altamente tóxicos y corrosivos. El mineral era común en las minas de plata de Sajonia; en alemán esta sustancia dañina se llamaba kobelt, un nombre que se atribuía a los nomos y duendes que infestaban las minas y atormentaban a los mineros. El químico sueco Brandt logró aislar el principio colorante del azul de esmalte en la primera mitad del siglo XVIII. En 1777 Gahn y Wenzel fabricaron el aluminato de cobalto durante sus investigaciones sobre los compuestos de cobalto; el descubrimiento del azul cobalto como pigmento se atribuye a Louis Jacques Thénard en 1802 y se empezó a comercializar un año después. Este bonito azul oscuro, saturado y frío, tuvo mucho éxito por su estabilidad y su alto poder cubriente, hasta reemplazar tanto al azul de esmalte como al azul de Prusia. El azul cobalto es un excelente pigmento para todas las técnicas, sobre todo por su resistencia a la luz. Tiene un efecto catalizador en el secado del aceite, como el plomo (ver boletín «12.3 Blanco: una cuestión de fondo»), pero puede volver frágil la película que puede cuartearse. El azul cobalto es sensible al amarilleo del aceite, como todos los colores de tonos fríos, pero otorga una tonalidad más homogénea que el ultramar artificial en las películas gruesas. Si no se mezcla con mucho blanco, puede parecer casi negro.

    Otro pigmento que contiene cobalto, el Azul cerúleo, se fabricó con un proceso desarrollado en Alemania en 1805 por Andreas Höpfner, aunque no se vendió como pigmento artístico hasta 1860, con el nombre de Caeruleum. Es un estanato de cobalto obtenido mezclando cloruro de cobalto con estanato de potasio. La mezcla luego se lava, se mezcla con sílice y sulfato de calcio y por último se calienta. El compuesto obtenido se muele hasta conseguir un polvo fino. Tiene excelente resistencia a 
    la luz y estabilidad química, ya que no se resiente de la acción de ácidos y bases, pero es caro y sirve de secante en la pintura al óleo, produciendo a veces capas pictóricas frágiles, que se cuartean fácilmente.

    A pesar de los azules “alternativos” presentes en el mercado, el Ultramar siempre se ha considerado el mejor azul que nunca existió. En el siglo XIX el lapislázuli era especialmente caro -y sigue siéndolo-, pero insustituible por su tono frío, lleno, que tiende al morado, como por su estabilidad químico-física. 
    El descubrimiento del ultramar artificial es uno de los mejor documentados del siglo XIX, probablemente porque fue encargado a los químicos y no fue fruto de una investigación independiente, ni de una afortunada coincidencia.  El inicio del desarrollo del ultramar artificial es conocido desde los tiempos de Goethe (entorno a 1787). La Societé d’Encouragement pour l’Industrie Nationale fue la primera en encontrar un método para fabricar el pigmento en laboratorio. En 1824 ofreció un premio de seiscientos francos a quien lograra producir una variedad sintética del lapislázuli que no costara más de trescientos francos por kilo. Todas las propuestas que se presentaron en los cuatro años siguientes estaban relacionadas con pigmentos que contenían cobalto y el azul de Prusia. El 4 de febrero de 1828 el premio fue otorgado a Jean Baptiste Guimet, que propuso un método de fabricación que había desarrollado en secreto en 1826. El precio propuesto fue de cuatrocientos francos por libra (aproximadamente medio kilo). En París, en esa época el lapislázuli costaba entre tres y cinco mil francos por libra. Subiendo la temperatura del horno, del ultramar artificial se podía obtener un pigmento que se conoce como Violeta de ultramar: es un lila claro, poco cubriente, pero resistente a los agentes atmosféricos y químicos, exactamente como el valioso pigmento azul del que procede. 
     

    Hoy en día, todavía es posible encontrar en el mercado el azul de Prusia, varios azules cobalto (óxidos, aluminatos, estanatos) y el ultramar artificial, aunque a menudo se vendan con nombres históricos pigmentos azules que contienen ftalocianinas. Estos compuestos orgánicos macrocíclicos con una estructura de anillo heterogéneo (átomos de nitrógeno y carbono alternados) pueden quelar cationes de metales como el cobre para obtener distintos matices de azul y verde.

    Ejemplo de ftalocianina azul (ver imagen).  

    Son compuestos bastante estables a la luz y los agentes químicos y, sin embargo, requieren bases inorgánicas para poder utilizarse como pigmento.  

    PRODUCTO:

    PIGMENTOS PUROS CTS PARA ARTISTAS
    Link: https://shop-espana.ctseurope.com/437-pigmentos-puros-cts-para-artistas


    BIBLIOGRAFÍA

    1.   Ball Philip, Colore una biografia, BUR saggi , febbraio 2004. 
    2.   Doerner Max, The Materials of the Artist and Their Use in Painting, Harvest Books, 1949.
    3.   Matteini Mauro, Moles Arcangelo, La chimica nel restauro. I materiali dell´arte pittorica, Nardini, 1991.
    4.   Feller L. Robert, Artists’ Pigments – A Handbook of their History and Characteristics Vol. 1 Cambridge University Press, 1986. 
    5.   Roy Ashok, Artists’ Pigments – A Handbook of their History and Characteristics Vol. 2, Oxford University Press, 1997.
    6.   West FitzHug Elisabeth, Artists’ Pigments – A Handbook of their History and Characteristics Vol. 3, National Gallery of Art, 1997.

  • 12.3 MÁS INFORMACIÓN - BLANCO: UNA CUESTIÓN DE FONDO

    Blanco: una cuestión de fondo

    El blanco es quizás el color más importante en el arte. Utilizado para dar fondo a las capas pictóricas, para crear tonos, por ejemplo, carnaciones, o bien para dar un toque de brillo y volumen a fondos que de lo contrario resultarían apagados y uniformes. 
    La respuesta se encontró en un compuesto hasta entonces utilizado como antiinflamatorio: el blanco de zinc. 

    El blanco de titanio es un pigmento cubriente, disponible desde 1950. Aunque el componente básico - dióxido de titanio TiO2 - exista en la naturaleza en las tres formas minerales de igual composición química y diferente estructura cristalina (anatasio, rutilo y la rara brookita), ninguno de estos minerales se utilizó nunca como pigmento. En cambio, se prepararon artificialmente dióxidos de titanio tanto en la forma cristalina del anatasio como la del rutilo, aunque solo de éste se tengan resultados ciertos. Sin embargo, con el blanco de titanio se identifican también los compuestos del titanio como los titanatos de zinc, bario, potasio o ftalatos, silicatos y litopones de titanio. Tiene un elevado poder cubriente (muy mate) gracias a su índice de refracción muy alto. Estas características fueron decisivas para su lanzamiento en el mercado en sustitución de los blancos utilizados hasta entonces, poco cubrientes, tóxicos o demasiado caros. 
    Hasta el siglo XVIII solo existían tres tipos de blanco: el blanco de cal, el blanco de yeso y el albayalde.
    El primer pigmento blanco del que se tiene noticia es el blanco de cal. Está integrado en su mayoría por carbonato cálcico y abunda en la naturaleza. Su composición cambia mucho según las impurezas que contiene, así como el color, por lo que es posible tener un blanco que tiende al amarillo, rosa o gris, más o menos cubriente. La necesidad de fabricar una variedad artificial de este pigmento que fuera más blanca se debe a la pintura al fresco. En efecto, para los enlucidos se conseguía cal viva con la cochura de piedras carbonatadas: después se apagaba con agua y se dejaba curar. Para la variedad más pura y blanca (una cal apagada fina), Cennini utilizó la denominación “blanco de San Juan” y lo indica como blanco ideal para crear carnaciones, junto con la sinopia (un ocre rojo especial):

    “Rojo es un color que se llama bermellón claro, y no tengo noticias de que este color se utilice en otros lugares fuera de Florencia; es perfecto para encarnar, es decir para hacer carnaciones de figuras en paredes y trabajar al fresco. Este color se hace con la mejor sinopia que se pueda encontrar, y más clara; se muele y se mezcla con el blanco de San Juan, que así se llama en Florencia; este blanco está hecho con cal bien blanca y bien limpia”.

    El blanco de cal se utilizaba también para temple y acuarela, pero no para el óleo: en efecto, por su bajo índice de refracción tiene un escaso poder cubriente. Lo mismo vale para el blanco de yeso, empleado en el pasado sobre todo para imprimaciones, preparaciones, temples y acuarelas transparentes y en pinturas murales para velar, pero raramente en frescos o pinturas al óleo. Hoy en día estos blancos se utilizan raramente como pigmentos, pero todavía se encuentran en la fórmula de colores y barnices como áridos, espesantes, bases para lacas, etc.

    El albayalde o blanco de plomo es un blanco de color cálido que, a diferencia de los demás pigmentos blancos, tiene un excelente poder cubriente y un alto índice de refracción por lo que es apto para el uso en todas las técnicas pictóricas, pero presenta la importante desventaja de ser muy tóxico.
    Probablemente es el blanco más importante de la historia y también el más común en obras antiguas: se podía encontrar en la paleta de los artistas más importantes de la época romana, medieval y renacentista. Además, fue el único pigmento blanco útil en la pintura al óleo hasta el siglo XIX, tanto por su poder cubriente como por su propiedad de acelerar el proceso de secado del aceite formando películas elásticas y resistentes. A veces se mezclaba con el blanco de cal o blanco de yeso para volverlo mate y obtener películas más cubrientes en las técnicas al temple o acuarela. En cambio, como imprimación para pinturas al óleo fue utilizado por pintores nórdicos, sobre todo holandeses, como Rubens y Vermeer. 
    El blanco de plomo está compuesto por carbonato básico de plomo 2 PbCO3*Pb(OH)2. Aunque en la naturaleza exista un mineral de composición análoga llamado hidrocerusita, el albayalde siempre se fabricó artificialmente, siendo uno de los primeros pigmentos de síntesis, junto con el cardenillo del que se hablará en el número dedicado a los pigmentos verdes. Existen recetas de Teofrasto, Plinio y Vitruvio para conseguir este pigmento del plomo metálico exponiéndolo a vapores de vinagre. Habitualmente los reactivos se colocaban en un ambiente cerrado en presencia de estiércol que aceleraba el proceso de formación del albayalde al mantener elevada la temperatura y servía también para la producción de anhídrido carbónico que, combinado con el agua presente en la atmósfera, suministraba ácido carbónico; el metal se corroía, convirtiéndose primero en acetato de plomo, por acción del ácido acético presente en el vinagre, y posteriormente en carbonato por acción del ácido carbónico:

                          Pb + 2CH3COOH → Pb(CH3COO)2 + 2H+
                          Pb(CH3COO)2 + H2O*CO2 (ácido carbónico) → PbCO3 + 2 CH3COOH

    La presencia de agua llevaba a la posterior formación del compuesto hidrato.
    Durante la primera fase de la revolución industrial surgió el problema de la toxicidad del plomo y sus compuestos, que al interactuar con el sistema nervioso de los seres humanos podía producir graves enfermedades como el saturnismo. Las afectadas por este problema fueron sobre todo las empresas que fabricaban barnices y tintes e impulsaron la investigación buscando alternativas. Se puede decir que la industria química se desarrolló también gracias a la necesidad de encontrar nuevos pigmentos: importantes empresas químicas como Ciba-Geigy, DuPont, BASF empezaron su actividad buscando nuevas fórmulas para barnices y tintes.

    El blanco de zinc está compuesto por óxido de zinc ZnO, conocido desde la antigüedad como subproducto de la fabricación del bronce con el método llamado “cementación”. Antiguamente el óxido de zinc se llamaba lana philosophica; Discórides describió la fabricación del óxido de zinc en la que la cadmia (término latín para calamina), es decir un mineral de zinc, se mezclaba con carbón y se calentaba en un fogón conectado con otra “cámara de depósito” donde se fabricaba el óxido de zinc en forma de hisopos lanuginosos, de los que probablemente se deriva el nombre. En esa época se utilizaba en medicina como antiinflamatorio, con el nombre de aceite de calamina. El cadmio, elemento descubierto a principios del siglo XIX, toma su nombre precisamente de la calamina o cadmia, en la que se encuentra como impureza. En cambio, el óxido de zinc existe en la naturaleza en el mineral zincita, que sin embargo no se puede utilizar como pigmento por las muchas impurezas que le confieren un color rojizo, probablemente por la presencia de manganeso y hierro. 
    Los primeros en comercializar a gran escala el blanco de zinc fueron Windsor & Newton en 1834 con el nombre de blanco chino, de formulación muy densa, específica para acuarela. En efecto, este pigmento era menos cubriente que el albayalde (bajo índice de refracción) y por ello apto para veladuras o medios acuosos (tempera, acuarela, acrílico, etc.). En pinturas al óleo creaba películas que tendían a agrietarse fácilmente, por lo que los artistas siguieron utilizando el albayalde, a pesar de su consabida toxicidad, a veces añadiéndole el blanco de zinc, con resultados no siempre satisfactorios. La necesidad de encontrar un compuesto que no fuera atóxico, pero con un buen poder cubriente, impulsó de nuevo a la industria química a la investigación. 
    En arte se puede utilizar con cualquier técnica, incluida la fabricación de tintas, aunque en pinturas al óleo se formen películas que tienden a no secar bien; para limitar esta característica, se puede mezclar con cantidades adecuadas de blanco de zinc. El dióxido de titanio tiene muchos usos: como relleno, revestimiento, colorante y opacificante para cerámica y vidrio o blanqueante para gomas, ceras y plásticos. 

    PRODUCTO:

    PIGMENTOS PUROS CTS PARA ARTISTAS
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/437-pigmentos-puros-cts-para-artistas



    BIBLIOGRAFÍA:
    1. Ball Philip, Colore una biografia, BUR saggi, febbraio 2004;
    2. Doerner Max, The Materials of the Artist and Their Use in Painting, Harvest Books, 1949;
    3. Matteini Mauro, Moles Arcangelo, La chimica nel restauro. I materiali dell´arte pittorica, Nardini, 1991;
    4. Feller L. Robert, Artists’ Pigments – A Handbook of their History and Characteristics Vol. 1 Cambridge University Press, 1986; 
    5. Roy Ashok, Artists’ Pigments – A Handbook of their History and Characteristics Vol. 2, Oxford University Press, 1997;
    6. West FitzHug Elisabeth, Artists’ Pigments – A Handbook of their History and Characteristics Vol. 3, National Gallery of Art, 1997.

  • 10.1 QUÍMICA E INVESTIGACIÓN - LA DESACIDIFICACIÓN (1ª PARTE)

    La desacidificación (1ª parte)

    Desde hace un siglo la acidez natural que se forma en el papel preocupa a los encargados de las bibliotecas de todo el mundo. Por consiguiente, no sorprende que uno de los temas más debatidos en relación con la restauración del papel sea precisamente la desacidificación y es interesante observar la evolución de los métodos de tratamiento a lo largo de los años.
    Una amplísima literatura cubre casi todos los aspectos de esta operación: el cambio de color, la reducción de la resistencia mecánica al final de los tratamientos, la cantidad necesaria de reserva alcalina, los residuos de coformulantes, hasta el impacto ambiental y la seguridad.
    Para hacerse una idea de la importancia del problema existe incluso una revista dedicada al mismo -“Alkaline Paper Advocate”- y en 1990 George Bush padre firmó una ley que establecía la obligatoriedad de la utilización de papel alcalino para todos los documentos y las publicaciones de interés permanente en Estados Unidos. Debido a la complejidad del tema, hemos decidido emprender este “viaje” dividiéndolo en cuatro etapas:

    1.         Origen del problema y consecuencias en los materiales
    2.         Métodos de desacidificación masiva
    3.         Métodos de desacidificación en hojas individuales (operación más propiamente de restauración)
    4.         Desacidificación de lienzos (práctica cada vez más utilizada para preservar los lienzos originales)  

    Las causas
    La celulosa, como todos los materiales, se deteriora con el tiempo, al oxidarse por acción del oxígeno en la atmósfera e hidrolizarse en presencia de agua. Sin embargo, la celulosa es un material extremadamente estable. Entonces, ¿qué provoca el rápido deterioro del papel hecho con celulosa? ¿De dónde proceden las sustancias ácidas que sabemos tan perjudiciales? En realidad, el natural proceso de acidificación del papel es imputable no tanto al intrínseco deterioro de la celulosa, sino al de las sustancias añadidas en los procesos de fabricación; podemos relacionar la acidez básicamente con tres fuentes:
    a)        En primer lugar los materiales introducidos en el momento de la fabricación (alumbre, colofonia, resinas de la pasta de papel..., así como los metales disueltos en el agua).
    b)        Acidez producida por escisión oxidativa de las cadenas de celulosa, sobre todo de la lignina, uno de los componentes de la pasta de papel utilizada en los últimos dos siglos para fabricar casi todo el papel en circulación.
    c)         Gases (NOx y SO2) procedentes del exterior.  
    No se va a examinar aquí la acidez, debido a materiales que pueden estar en contacto con el papel por las razones más diversas (incluso por restauraciones irresponsables), como colas, medium pictórico, cartones y recipientes de madera, tintas.  

    Conviene recordar que el fenómeno del deterioro del papel es un problema moderno: en efecto, si el punto c) está estrechamente relacionado con la reciente contaminación de las áreas urbanas e industriales, los puntos a) y b), mucho más relevantes, se han vuelto dramáticos desde que el papel se dejó de fabricar con algodón (trapos) para pasar a utilizar la madera, mucho más barata y accesible. La pasta de papel, de calidad inferior bajo varios puntos de vista, se “mejoró” con la introducción de aditivos como el alumbre y la colofonia, que causan su rápido deterioro. Por consiguiente, no hay que sorprenderse si un manuscrito del siglo XVII presenta un papel todavía blanco y resistente, mientras que las hojas de una novela impresa hace 60 años corren el riesgo de romperse tan solo al pasar las páginas que además están totalmente amarillentas. Este problema es aún más evidente para el papel de los periódicos, de la peor calidad, rica en pasta de papel: muchas colecciones de periódicos del siglo pasado, que ya no se pueden consultar por su fragilidad, están a riesgo de desaparecer si no se actúa.
     
     

    El mecanismo
    En un medio ácido, determinadas reacciones, como la hidrólisis, proceden más rápidamente: se trata de un efecto de catalización de la reacción por parte de los ácidos. La escisión de las cadenas de celulosa es precisamente una de estas reacciones, y por ello al bajar el pH (es decir, al aumentar la concentración de iones H+, aparece la acidez), el proceso sufre una aceleración.
    Además, hay que tener en cuenta que las hemicelulosas (la otra forma de celulosa limitada en el papel) son aún más fácilmente hidrolizables. Como se muestra en la figura, el ataque se produce en el enlace 1-4-beta-glucosídico (el puente de oxígeno entre los dos átomos de carbono indicados con 1 y 4), en el paso (a). El protón H+ se enlaza con el oxígeno y la carga se traslada al carbono 1 (b). El enlace entre oxígeno y carbono 1 se rompe y una molécula de agua procedente del exterior se fija en el carbono 1, con carga positiva (c). Por último, un protón se separa de la molécula de agua, vuelve al medio y continúa la escisión (d). El resultado es la ruptura con el consumo de una molécula de agua y la formación de dos –OH (uno en el carbono 1 y otro en el carbono 4) (ver imagen).

    Los efectos
    El efecto primario es la ruptura de la cadena polimérica: cuando las cadenas sufren una fragmentación progresiva, la consecuencia a gran escalera es la fragilización de las fibras y por ende de las hojas.  
    Como efecto secundario (¡y dramáticamente evidente!), también se produce un progresivo incremento de la oxidación que conlleva el oxígeno atmosférico, condicionada por el entorno ácido y en sinergia con la hidrólisis. El efecto de la oxidación es el amarilleo.
     Estas reacciones también pueden llevar a la ruptura del anillo, con la formación de grupos denominados ácidos carboxílicos, que aumentan aún más la acidez continuando, e incluso acelerando, el círculo vicioso. Cabe destacar que también una alcalinidad excesiva puede catalizar las reacciones de escisión y oxidación, como se puede observar fácilmente haciendo envejecer juntos un papel neutro, uno acidificado con ácido acético y uno alcalinizado con sosa (pH = 14). Esta es la razón por la cual cuando se alcaliniza un papel no se pueden utilizar todas las bases, sino que hay que trabajar en un rango exacto de pH (entre 7 y 10).  

    Los remedios
    La acidez se combate introduciendo sustancias alcalinas, en cantidad tal que parte de las mismas neutralicen la acidez ya presente, y la parte en exceso se quede depositada para neutralizar la acidez que se va a formar, creando así una reserva alcalina. Esta reserva alcalina se puede medir y un nivel aceptable es de 300 mEq/Kg. Esta operación puede reducir por tres la velocidad de deterioro. Por ello el papel permanente para conservación lleva no solo la indicación “pH neutro”, sino también “contiene reserva alcalina”.  

    Gracias a la enorme masa de libros en juego (solo la Biblioteca del Congreso de EEUU tiene unos 17 millones de volúmenes), han sido numerosos los estudios, tanto europeos como estadounidenses, realizados para dar con un remedio.  

    La investigación ha seguido principalmente dos vías:
    ·           Sistemas para el tratamiento de hojas individuales, normalmente de gran valor, que prevén la actuación de personal especializado, y que se incluyen en un proceso de restauración propiamente dicho; se trata así de una fase que se añade a otras difíciles de ejecutar por un profano (limpieza, consolidación, reintegración de faltas....).
    ·           Sistemas para el tratamiento de libros, incluso de escaso valor comercial, que se dejan encuadernados, se tratan masivamente y se recolocan en las estanterías, todo ello sin que actúe un restaurador, sino solo personal con formación en las operaciones de rutina. En todo caso, al restaurador se le reserva el papel de seleccionador de los libros a tratar masivamente, puesto que no todos los materiales son compatibles con este tratamiento.  

    Ya que esta segunda vía de investigación es la que ha impulsado la primera, aunque se haya ido realmente aplicando solo en tiempos recientes, en el próximo número del Boletín CTS evaluaremos los métodos masivos y posteriormente presentaremos un análisis de los tratamientos para hojas individuales.
      

    Para más información

    Copedè H. “La carta e il suo degrado” Nardini Editore, Firenze, 2003.
    Banik. G et al. “Nuove  metodologie nel restauro del materiale cartaceo” Il Prato, Padova, 2003.  

  • 10.3 MÁS INFORMACIÓN - TIERRAS NATURALES
    Tierras naturales

    Las tierras son pigmentos preparados moliendo minerales con hierro. Normalmente contienen una mezcla de óxidos de hierro y otros materiales como arcilla, cal, sílice, óxido de manganeso (pirolusita) y otros minerales. Los colores varían del amarillo al rojo o del marrón al negro dependiendo de la cantidad y calidad de impurezas. Un porcentaje de pirolusita, por ejemplo, confiere a las tierras unos tonos oscuros como en el caso de las sombras, mientras que la preponderancia de hematita (Fe2O3) produce un tono rojo ladrillo. Las tierras verdes tienen una composición y derivación similar a la de las demás, pero su contenido de hierro(II), de tono verde botella, y de cal hace variar el color entre el verde oscuro apagado y el verde claro que tiende al gris.

    En el arte las tierras rojas y amarillas se han utilizado desde la prehistoria y las mencionaron con términos diferentes desde Vitruvio, Plinio, pasando por el monje Theophilus hasta Cennino Cennini. Entre los primeros hallazgos de estos pigmentos se puede recordar la cueva de Nioux en los Pirineos (Paleolítico Superior), donde un artista primitivo trazó la figura de un animal silvestre con tierra mezclada con feldespato potásico, para lograr una mejor adhesión a la roca desnuda.
    Las tierras son pigmentos extremadamente estables, especialmente las que tienen pocas impurezas, y son insolubles en álcalis y parcialmente solubles en ácidos, liberando la arcilla como cuerpo de soporte. La efervescencia que se produce en ácido se debe a la presencia de carbonatos.  

    Tierras Amarillas 

    En el Renacimiento tardío y Barroco los ocres amarillos (o tierras amarillas) se utilizaron mucho en las pinturas al óleo por su tono dorado que contrastaba bien con los marrones oscuros (como las sombras que se describen más adelante) y los negros; el estilo del período apostaba por el contraste claroscuro con efecto “escenográfico” y dramático, donde la figura se resaltaba con la luz “dorada” que rasgaba el fondo tenebroso. Piénsese en un cuadro de Caravaggio o Rembrandt para comprender la potencialidad de esta combinación de tierras doradas y oscuras. Los ocres son compuestos más o menos impuros, que también contienen sustancias orgánicas como betún y sustancias húmicas. A menudo estas impurezas son las que le dan un tono vivo al pigmento. Si se calcinan, las tierras amarillas pierden agua y se obtienen las tierras rojas (u ocres rojos). Los ocres amarillos y claros utilizados en la pintura al óleo requieren como media del 15-35% al 60% de aglutinante. El color de las tierras amarillas se debe a la presencia de hidróxido de hierro(III) (Fe(OH)3), mineralógicamente conocido como goethita, asociado a minerales arcillosos. El contenido de este compuesto varía entre el 15-20% y el 60-70%; esta composición variable posibilita la existencia de numerosos ocres amarillos, de tonos más o menos dorados y, a diferencia de las tierras de Siena, a veces tienen un matiz verdoso.  

    Tierras Rojas 
    Los ocres pardos o rojos son quizás los pigmentos más utilizados en el arte. Gracias a la abundancia de hematita, estos pigmentos están por doquier. Una famosa tierra roja, ampliamente utilizada en la Edad Media y el Renacimiento, fue la sinopia que tomó su nombre de la antigua ciudad de Sinop en el Mar Negro. Su utilización fue tan extendida que sirvió para denominar uno de los pasos del fresco, es decir la fase en que el artista trazaba precisamente con esta tierra el dibujo preparatorio sobre el cual luego se aplicaba el enlucido. Las tierras rojas se encuentran a menudo en las regiones volcánicas como producto de descomposición. Los ocres pardos o rojos requieren como media un 40% de aceite. El color de las tierras rojas (ocres rojos) es atribuibles esencialmente a la presencia de hematita, sesquióxido de hierro(III) (Fe2O3), normalmente asociado a minerales del grupo de las arcillas y en parte a compuestos silicatados amorfos. Las tierras rojas también se pueden obtener por cochura de tierras amarillas a una temperatura de 200-300°C.  

    Tierras de Siena 
    Estas tierras, procedentes de Siena (Toscana), se encuentran en estado natural también en la provincia de Roma y en Alemania, y ya eran conocidas por Egipcios y Romanos. Fueron uno de los pigmentos más de moda en el Renacimiento florentino. Las tierras de Siena son especiales tipos de ocre, que contienen hasta el 50-60% de goethita o hematita y hasta el 1% de un mineral oscuro, compuesto por dióxido de manganeso (MnO2), llamado pirolusita. También contienen ácido silícico. Estas tierras requieren muchísimo aceite (aproximadamente el 180% para la variedad tostada y más del 200% para la variedad natural) y por lo tanto se desaconsejan en masas oleosas, porque tienden a formar películas esponjosas. Las características químico-físicas son similares a los ocres amarillos y rojos, pero secan más rápidamente por la presencia de manganeso y carecen de matices verdosos.  

    Tierras Verdes  
    Las tierras verdes son especiales y mucho menos extendidas que las tierras amarillas y rojas. La composición de las tierras verdes (la verdeterra de Cennini) varía mucho según su origen y procedencia: las especies mineralógicas que determinan el color de estas tierras son principalmente silicatos hidratos de hierro(II), magnesio y álcalis. También contienen ácido silícico. Requieren aproximadamente el 100% de aceite, pero secan normalmente. El mineral glauconita ((K,Na)(Fe(III),Al,Mg)2(Se,Al)4O10(OH)2), por ejemplo, es el principal factor colorante de las tierras verdes de Niza y Nicosia, con un tono ligeramente más azulado que las tierras verdes comunes, cuyo color se debe a silicatos ferromagnesianos (principalmente celadonita, K(Mg,Fe(II))(Fe(III),Al)[Si4O10](OH)2) en general presentes en productos que derivan de la alteración de rocas volcánicas (tierras verdes de Brentonico y de la zona de Verona), con tonos más aceitunados.  

    Sombras 
     
    Estos pigmentos se introdujeron en Europa hacia finales del siglo XV. Durante mucho tiempo la palabra “Sombra” utilizada para estas tierras se consideró incorrectamente una derivación de “Umbría”, región de la que podían proceder. En realidad, la palabra “Sombra” indica la utilización de estos pigmentos como fondo muy oscuro y los sombreados en los cuadros barrocos (como ya se ha dicho para las tierras amarillas). La isla de Chipre fue la principal fuente de este pigmento (también como tierra de Turquía) y la mejor calidad se denomina precisamente Sombra Chipre, con un alto contenido de dióxido de manganeso (alrededor del 16%). Normalmente las sombras contienen hasta el 15% de dióxido de manganeso y es justamente este mineral el que confiere el color marrón muy oscuro. Las sombras secan mucho más rápidamente cuanto más manganeso contienen. Requieren al menos un 80% de aceite y se han utilizado en todas las técnicas pictóricas. Muchas sombras pueden tener un matiz verdoso, como los ocres amarillos naturales. Si se calcinan adquieren matices pardos rojizos (sombras tostadas) con las mismas características químico-físicas de las tierras naturales.   Por último, se pueden recordar las tierras artificiales, los llamados “colores de Marte”. Marte era el nombre de una marca de pigmentos fabricados artificialmente en el siglo XVIII, con una composición similar a las tierras naturales, desde siempre consideradas colores “marcianos” porque contienen hierro, el metal asociado desde la antigüedad al planeta rojo. Hoy en día todavía se pueden encontrar en el mercado tierras artificiales denominadas rojo de Marte, amarillo de Marte, violeta de Marte, pardo de Marte y negro de Marte. La composición química básica es análoga a la de los compuestos naturales, pero las tierras naturales son preferibles porque contienen impurezas que a menudo proporcionan viveza y plenitud al color.

    ESTABILIDAD DE LOS COMPUESTOS
     
       
    b_10-3_1.png
                                                                       ●●●● excelente            ●●● bueno                ●● regular                 ● escaso 


    Fe(OH)3 = hidróxido de hierro (III) 
    MnO2 = dióxido de manganeso
    Al2O3 = sesquióxido de aluminio
    Fe2O3 = sesquióxido de hierro
    CaCO3 = carbonato cálcico
    PRODUCTO:

    Nota: al ser productos naturales, todas las tierras pueden contener impurezas de algún tipo.
  • 8.2 MÁS INFORMACIÓN - AQUÍ UN VIEJO CONOCIDO: EL ÓXIDO

    Un viejo conocido: el óxido

    Una grapa de hierro, una reja sin mantenimiento, un perno introducido en una restauración anterior: ahí está la mancha de óxido que se extiende lentamente en una base de mármol o en el interior de la porosidad del almohadillado de arenisca… Poco a poco los compuestos ferrosos se combinan íntimamente con los cristales de carbonato cálcico, la sílice y el problema parece casi irresoluble… ¡y quizás realmente lo sea! Vamos por orden: ¿qué es exactamente el óxido?
    Podemos definirlo como una mezcla de óxidos hidratados y carbonatos de hierro derivados de la oxidación del hierro metálico, en presencia de humedad, según la reacción:  

                                Fe + 3/2 O2 + H2
    → 2FeO(OH)

                                2Fe + 3/2 O2 + H2O → Fe2O3.(H2O)  

    Hay que recordar que el hierro puede oxidarse en dos estados de oxidación: Fe2+ y Fe3+; sin embargo, predomina el Fe3+, especialmente en un medio alcalino en el que se forma el hidróxido Fe(OH)3 con el característico color naranja-pardo, al que por brevedad se hará referencia en adelante, recordando que también existe una gran variedad de productos derivados de transformaciones posteriores, como la hematites roja (Fe2O3) o la magnetita negra (Fe3O4).

    Son varios los productos utilizados para eliminar el óxido, pero todos son quelantes (enlace folleto quelantes).
    Es conocida la acción quelante del ión fluoruro en el medio ácido y el clásico remedio para eliminar las manchas de óxido de los tejidos es precisamente una solución de ácido fluorhídrico. Sin embargo, es imposible utilizarla en un soporte pétreo, especialmente si está carbonatado, puesto que por la acidez muy fuerte de este reactivo al final de la operación quedaría muy poco soporte…..
     Por esta misma razón no es oportuno utilizar el ácido cítrico, sino sus sales (de sodio o amonio), trabajando con pH neutro o alcalino. Sin embargo, el citrato de sodio podría crear problemas en presencia de fuertes sulfataciones de la piedra, formando el sulfato de sodio, y por lo tanto es mejor utilizar el citrato de amonio (el constituyente de la Saliva Sintética CTS, que se obtiene simplemente añadiendo amoniaco al ácido cítrico). Con el citrato de amonio con exceso de amoniaco (para trabajar con seguridad con pH>9) se forman unos complejos hierro-amonio-citrato de color rojo-pardo, solubles en agua, mezclándose fácilmente en el agua de lavado. Entre los quelantes más eficaces con el ión Fe3+ está el conocido EDTA, con una constante de complejación muy alta. El problema principal a la hora de utilizar este quelante es su afinidad también con el ión Ca2+: este quelante puede ser extremadamente agresivo con el mármol, ya que se une al calcio y cede H+, con un efecto global de liberación de acidez y posterior disolución del aglutinante carbonatado. Esta vez la medición del pH puede ser engañosa: el EDTA disódico tiene pH 4,5 y podría  parecer más agresivo que el tetrasódico, con pH 11. Sin embargo, puesto que el pH óptimo de complejación del calcio es 10, es preferible utilizar el disódico. Unos problemas similares a los del EDTA se pueden observar con otros quelantes como el tartrato.
    Está claro que el EDTA tetrasódico puede utilizarse en todos los casos en que la complejación del calcio no sea un problema (madera, cuero, tejidos, etc.).  

    En caso de superficies carbonatadas, es mejor aprovechar la fuerte afinidad del hierro con el oxígeno, utilizando fosfatos de vario tipo. Hace tiempo que en el campo de la restauración se propuso la utilización del sodio hexametafosfato, con el que se obtienen buenos resultados con la aplicación repetida de compresas. En efecto, en este caso la acción con el carbonato cálcico es mucho más débil y el pH de la solución es neutro (6,7).
      

    Como apuntado al principio, para las rocas calizas los óxidos metálicos procedentes de fuentes externas pueden haber intervenido en los procesos de solubilización/recristalización activos en presencia de agua (de lluvia o por humedad ascendente o infiltración). En este caso la “mancha” ya está incorporada en los cristales de calcita y su eliminación puede ser imposible sin “pelar” la superficie: no cabe más que aceptar el daño estético, contentándose con reducirlo. Por último, tampoco hay que olvidar que si el monumento seguirá expuesto al exterior, habrá que eliminar el origen del problema (por ejemplo, aislando la parte metálica con sistemas de protección tipo Incral 44/Cera Reswax), así como reducir la posibilidad de agresión de la piedra por las posibles soluciones salinas (con hidrófugos de distinto tipo a los que se dedicará un número del Boletín CTS).  

    Tampoco hay que olvidar el problema similar que presenta la oxidación de las aleaciones de cobre y que afecta a estatuas de bronce, cubiertas y canalones de cobre, etc. En este caso se producen las típicas manchas verdes, originadas por una gran variedad de productos de corrosión del cobre, como atacamita y paratacamita [oxicloruros Cu2(OH)3Cl], carbonatos básicos como malaquita (verde) y azurita. Como recordaba M. Laurenzi Tabasso en un escrito reciente sobre las bases de monumentos de bronce, el tipo de estas manchas depende tanto del entorno como de la composición del bronce que las origina, y el problema es básicamente estético al no haberse observado fenómenos de mayor degradación en las zonas “coloreadas”. Para la eliminación de las manchas se han propuesto varias mezclas quelantes aplicables con compresa, como la de carbonato de amonio (10%) y sodio hexametafosfato (10%), que sin embargo puede utilizarse solo si ya se ha retirado el objeto que ha causado la mancha; de lo contrario, el amonio pone de nuevo en marcha la solubilización del cobre.
    También parece dar buenos resultados una mezcla de oxalato de amonio (5%) y carbonato de amonio (15%), pero en este caso debe evaluarse el efecto de deposición del oxalato de calcio en la superficie.  

    PRODUCTO:

    EDTA SAL BISÓDICA  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/319-edta-sal-bisodica

    EDTA SAL TETRASÓDICA  
    Link:https://shop-espana.ctseurope.com/318-edta-sal-tetrasodica


    Bibliografía:
    ·      Laurenzi Tabasso M. “La conservazione dei basamenti dei monumenti bronzei” in Monumenti in bronzo all’aperto, Firenze, Nardini Ed., 107-112
    ·      Matero F.G.; Tagle A.A.; “Cleaning, iron stain removal, and surface repair of architectural marble and crystalline limestone: the Metropolitan Club”; Journal of American Inst. for Conservation, 34 (1995), 49-68.
    ·      Thorn A.; “Treatment of heavily iron stained limestone and marble”; ICOM 14th Triennial Meeting, The Hague, 888-894.

Close